Prólogo: Llevas a Loki a conocer a tus mellizos, sin embargo a tu hijo no le agrada para nada pero el dios sabe cómo convencerlo.

AndreaBoniche
Advertencia: Aquí la rayis tiene una hija y un hijo (mellizos) de seis años.
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Loki y tu llevaban saliendo a citas desde hace bastante tiempo, e incluso ya habían iniciado una relación formalmente, sin embargo aún no había conocido a tus hijos, lo cual te hacía mucha ilusión que hiciera para que pudiera conocer cada parte de tu vida.

Esa noche el dios iría a cenar a tu casa donde por fin conocería a tus dos pequeños de los que tanto le hablabas.

Finalmente llegó la hora, y Loki subió los pequeños escalones hasta tu puerta y golpeó un par de veces llevando tres ramos pequeños de flores con tres en cada uno.

Unos segundos después abriste tu y Loki sonrió al verte.

–Mi reina te ves preciosa.–Dijo acercándose a ti dejando una mano en tu cintura y la otra sujetando las flores.

–Tú también te ves muy guapo.–Respondiste sonriendo y besando sus labios con ternura antes de recibir el ramo que te trajo.–Ven, pasa. Ya tengo casi lista la cena.

Loki entró mientras tu cerrabas la puerta, y dio un pequeño salto al oír un sonido de sorpresa que al darse vuelta se dio cuenta de que provenía de una niña.

–¡Tú eres Loki! ¡El que intentó gobernar Nueva York!–Exclamó ella emocionada mientras el dios te dio una mirada preocupado, y tú solo le guiñaste un ojo quedándote junto a ellos.–¡Ahora eres parte de los Vengadores! ¡Soy tu mayor fan! ¡¿Me puedes firmar mi dibujo?!

–Ah... c-claro, s-si tu quieres. Pero primero toma, te traje esto.–Le dijo con una sonrisa agachándose para entregarle un ramo.

–¡No puede ser! ¡Mamá mira!–Exclamó dando pequeños saltos mostrándote el obsequio.–¡Gracias, gracias, gracias!

La niña lo abrazó y Loki rio levantando la vista hacia ti con un brillo en sus ojos.

–¡Me llamo N/T/Ha!–Le dijo extendiéndole su pequeña mano.
(Nombre de Tú Hija)

–Es un gusto conocerte, N/T/Ha.–Dijo con una sonrisa tomando su mano.

–Y él...–Dijiste acercándote a la escalera donde tu hijo veía a Loki molesto y de brazos cruzados.–Él es N/T/Ho, es un poco más reservado.
(Nombre de Tú Hijo)

–Es un gusto conocerte también, N/T/Ho.–Le dijo Loki con una sonrisa entregándole el último ramo y extendiendo su mano para saludarlo.

–¿Por qué estás aquí?–Le preguntó molesto sin aceptar nada y viéndole con el ceño fruncido.

–N/T/Ho, ya hablamos de esto. Ya les dije que quería que conocieran a Loki porque estamos juntos y él es muy importante para mi.–Le dijiste posicionándote junto al dios.

–No pasa nada reina mi—. Te iba diciendo dejando su brazo alrededor de tu cintura, pero tu hijo se acercó y alejó a Loki de ti.

–No le digas así.–Se quejó provocando que rodaras los ojos.

–¡Oye! ¡No seas grosero! ¡Él es un dios! ¡Ten más respeto!–Le regañó su hermana que aún no dejaba sus flores, y el niño solo le sacó la lengua.

–Perdón por eso.–Le dijiste a Loki tomando el otro ramo de flores de sus manos.

–No te preocupes.–Te dijo con una sonrisa.

–N/T/Ha ven a poner tus flores en agua.–Le dijiste caminando a la cocina.–¡Ponte cómodo! ¡La cena ya va a estar lista!

–¡Okey!–Respondió Loki viendo que hubieras desaparecido en la cocina, y luego se agachó a la altura de tu hijo.–Mira, yo sé que quieres proteger a tu mamá pero te prometo que nunca podría atreverme a hacerle daño.

–Aún así no me agradas.–Le dijo el niño de brazos cruzados.

Loki se le quedó viendo unos segundos mientras pensaba, hasta que una sonrisa maliciosa muy típica suya se abrió paso en su rostro.

–¿Qué quieres que te compre?–Le preguntó viéndole a la cara.

–¿Cómo así?–Preguntó de vuelta tu hijo algo más interesado.

–Dime qué quieres y yo te lo compro, con la condición de que me des una oportunidad para agradarte.

–¿Puede ser lo que yo quiera?

–Lo que tu quieras.–Dijo Loki con la sonrisa creciendo aún más.

Tu hijo se le quedó viendo unos momentos antes de sonreír.

–Quiero un Terreneitor y una muñeca para que lo conduzca.–Le dijo viéndole con un supuesto "desinterés" que no podía simular.

–Hecho, te lo traigo la próxima semana. ¿Entonces tenemos un trato?–Le dijo extendiendo su mano hacia el niño.

–Trató hecho, fue un placer hacer negocios con usted, Señor Loki.–Dijo el niño estrechando su mano antes de irse mientras tu llegabas.

–¿Y ahora en qué andan ustedes dos?–Le preguntaste con una sonrisita de brazos cruzados mientras Loki se ponía de pie.

–Mmm... nada, ya sabes, son solo cosas de nosotros. Y déjame decirte que tengo la sensación de que ahora le agrado mucho más que antes.–Te dijo con una sonrisa y guiñándote un ojo dejando sus manos en tus caderas.

–¿Qué le prometiste, Loki Laufeyson?

–La próxima semana podrás verlo.–Te dijo haciéndote reír y acercándose para besarte con ternura.