Dos botellas de vodka (Yelena Belova)

Prólogo: Yelena y tu van a una misión juntas a pesar de que se odian, y una noche mientras beben algunos sentimientos ocultos salen a la luz.

eternalflamewarrior3
Ani090608
○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○

Yelena y tu se odiaban, eso era obvio para quien fuera que las viera por tan solo 5 segundos. Sin embargo tuvieron que ir a una misión juntas de todas formas.

Mientras estaban en la misión, resultaste herida por lo que Yelena te tuvo que ayudar a salir de donde estaban, y de vuelta en el hotel tuvo que ayudarte a curar tus heridas.

Mientras te ayudaba a limpiar y curar tus heridas, ambas empezaron a hablar de su pasado y compartir cosas las cuales se dieron cuenta que tenían en común.

Cuando estuviste lista, Yelena salió a comprar algo para comer mientras tu te dabas una ducha.

–¡Ya volví!–Dijo entrando en la habitación para encontrarte sentada en la cama usando tu teléfono y con el cabello aún húmedo, una camiseta manga corta y unos shorts deportivos.–Perdón la tardanza, traje pizza y una botella de vodka para cada una. Te va a ayudar a olvidar el dolor y esperemos que a aliviarlo.

–Y yo que pensé que me habías abandonado aquí y habías vuelto sola.–Le dijiste con una pequeña sonrisa recibiendo la botella para abrirla mientras la rubia se estiraba de lado frente a ti a los pies de la cama dejando la caja de pizza en medio de ambas.

–¡Ja! Hubiese sido genial ya ir de vuelta pero Nat me hubiese matado si dejaba a su mejor amiga aquí.–Te dijo tirando la tapa de la botella a otro lado antes de beber.

–Si, es muy probable.–Reíste tomando un trozo de pizza para morderlo.

–¿Cómo te sientes?–Te preguntó sacando un trozo de pizza y tratando de comer el queso que quedó colgando de la punta.

–Vaya, nunca pensé que te irías a preocupar tanto por mi.–Respondiste con una sonrisita juguetona bebiendo de la botella.

–Ay ya no empieces.–Rodó los ojos riendo ligeramente.

–¿Entonces compañeras?–Preguntaste acercándote tu botella hacia ella.

–Compañeras.–Confirmó chocando su botella con la tuya antes de beber ambas.

(.....)

Un rato después las dos ya se habían acabado la pizza y quedaba menos de la mitad de sus botellas. Ambas tenían buena resistencia al alcohol pero con el cansancio más el trago, ya estaban algo mareadas y prácticamente se reían por cualquier cosa.

–¿Por qué empezamos a odiarnos? Ni siquiera recuerdo que hayas hecho algo para molestarme.–Dijo de pronto Yelena con una risita algo mareada.

–No lo sé... ni siquiera recuerdo muy bien el día que nos conocimos.–Le dijiste negando con la cabeza dejando la caja de pizza en la otra cama.

–Yo si...–Dijo se forma más seria captando tu atención.–Natasha enserio quería que conociera a su mejor amiga. Ese día acababas de volver de una misión y estabas en tu traje, un poco golpeada y sucia de pies a cabeza pero recuerdo que pensé que aún así te veías hermosa.

–¿Enserio?–Le preguntaste con una pequeña sonrisita sin soltar la botella entre tus manos.

Yelena no sabía si era un minuto de confianza o el alcohol en su sistema, aunque estaba casi 100% segura que era la segunda opción, sin embargo era ahora o nunca de decirte lo que tenía en mente.

–Si... T/N... yo no te odio, nunca lo hice, solo que no sabía cómo actuar cuando estabas cerca. Me hacías, y aún me haces sentir cosas que nunca antes las había sentido, y al principio eso me asustaba, y aún lo hace, entonces fingir odiarte era mucho más fácil, y además así también me ahorraba el rechazo.–Te confesó bebiendo lo último de su botella antes de dejarla en el suelo junto a su cama.

–Yo tampoco te odio, solo... creí que yo no te agradaba entonces en lugar de intentar acercarme solo te trataba como tu me tratabas a mi, porque así también era más fácil intentar olvidar mis sentimientos por ti.–Le dijiste con una sonrisa dejando tu botella a un lado mientras ella te veía ligeramente boquiabierta y sentada frente a ti, antes de que te acercaras hacia ella.–Además... eres la hermana menor de mi mejor amiga, supongo que es como si estuvieras prohibida o algo así.

–Ay T/N no digas esas bobadas, no porque sea la hermana de Natasha significa que no podemos ser algo.

–¿Entonces quieres que seamos algo?–Le preguntaste con una pequeña sonrisita acercando tu rostro al suyo y pasando tu nariz por la suya, viendo hacia sus labios.

–Podemos intentarlo, ¿no crees? Y seguir haciéndoles creer a los demás que nos odiamos, sería divertido.–Te dijo con una sonrisa dejando su mano en tú pierna.

Una vez las palabras dejaron sus labios, te acercaste y la besaste llevando ambas de tus manos a sus mejillas y ella dejó las suyas una en tu muñeca y la otra en tu cadera, pasando sus piernas sobre las tuyas para acercarse más.

Después de unos momentos ambas se alejaron quedando a centímetros de la otra con grandes sonrisas en sus rostros.

–Deberíamos haber salido a beber hace mucho tiempo, compañera.–Te dijo viéndote con una sonrisa haciéndote reír, antes de volver a acercarse y besarte nuevamente.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top