Prólogo: Tú papá Tony no sabe que estás saliendo con Kate, y prefieres que así sea.

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Advertencia: La rayis es hija de Tony.
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Kate y tu mantenían su relación en secreto ya que no sabías cómo se lo iría a tomar Tony, además de que estabas constantemente en el ojo público al igual que los Vengadores y no querías iniciar rumores o que hablaran cosas de ustedes en los medios.

Aquel día habías estado atendiendo varias reuniones de Tony mientras él estaba en una misión, por lo que fuiste a la Torre aprovechando que estabas cerca, y también para ver a Kate.

Cuando tomaste el elevador y bajaste en el área común, viste a Nat preparándose un té/café.

–¡Hey! Tiempo sin verte por aquí, ¿tu papá te tiene haciéndote cargo de sus desastres?–Te preguntó con una sonrisa dándole un sorbo a su taza.

–Ay no me hagas empezar, su agenda está ocupada por toda la semana y recién voy empezando. Dudo que pueda dormir más de dos horas en estos días.–Te quejaste dejando una carpeta con las llaves de tu auto en el mesón de la cocina yendo a sacar una taza.

–Toma, yo me puedo hacer otro, necesitas esto más que yo.–Te dijo con una risita entregándote su taza y sacando un plato para poner donuts que sacó del refrigerador en él.–Tú novia está en su habitación por cierto, para que al menos puedas verla cinco minutos.

–Gracias, eres la mejor.–Reíste dejando la carpeta bajo tu brazo y las llaves en el bolsillo de tu pantalón dejando un beso en la mejilla de la rusa antes de tomar la taza y el plato.

–Lo sé, y más le vale a Tony dejarte tiempo libre porque Wanda y yo queremos que nos acompañes de compras.–Te dijo mientras te alejabas.

Subiste unas escaleras y llegaste al pasillo de las habitaciones donde caminaste hasta la puerta de Kate que estaba abierta.

La chica estaba en su cama viendo su teléfono con Lucky entre sus piernas durmiendo cómodamente.

–¿Hay espacio para una más?–Le preguntaste entrando en la habitación y cerrando tras de ti.

–¡T/N!–Exclamó Kate con una sonrisa tirando su teléfono y haciendo que Lucky despertara.

Corrió hacia ti donde saltó y se te abrazó enrollando sus piernas en tu cintura y sus brazos en tu cuello.

–También me alegra verte.–Reíste dejando un beso en su mejilla caminando hacia su escritorio para dejar tu taza, el plato y la carpeta antes de abrazarla.

–Justo estaba pensando en llamarte para preguntarte si acabaste con las reuniones de hoy.–Dijo antes de ponerse de pie en el suelo quitando la pequeña mochila de tu espalda para dejarla a un lado.

–Por desgracia no, tengo que volver en una hora a Industrias Stark para ayudar a Pepper, luego tengo otra reunión, y más tarde una cena importante con—. No alcanzaste a terminar de hablar cuando Kate tomó tu rostro con ambas manos y besó tus labios haciéndote que prácticamente te derritieras ahí mismo.

–Desconectate del mundo, ahora mismo necesitas descansar, más tarde te haces cargo de todo eso pero ahora pasa tiempo conmigo, ¿si? Digo... aprovechando que no está tu papá.–Te dijo con una sonrisa haciendo que te sentaras en su cama y dejó la taza en su mesita de noche junto con el plato.

–Me parece bien.–Reíste mientras ella se recostaba a tu lado y tu te acercabas para abrazarla dejando tu rostro escondido en su pecho, y Lucky se acercó para dormir entre las dos.

Kate comenzó a jugar con tu cabello mientras cerrabas los ojos, y poco a poco comenzaste a quedarte dormida junto a ella.

–Señorita Stark, el Señor Stark se aproxima a la habitación.–Les avisó Friday como siempre lo hacía cuando Tony estaba cerca.

–¿Cómo que—. Iba diciendo Kate confundida, mientras tú te sentabas rápidamente en la cama y tomabas la taza junto con el plato y comenzabas a comer.

En ese momento llamaron a la puerta, y Kate fue a abrir donde Tony se asomó con una sonrisa.

–¡Aquí estás! Te estaba buscando, resulta ser que terminé la misión antes pero necesito que me ayudes en el taller ahora. Hola Kate.–Dijo viéndote antes de voltearse hacia la chica.–¿Por qué tenían la puerta cerrada?

–Tony no seas chismoso, estaban poniéndose al día nada más.–Le regañó Nat desde atrás suyo donde iba camino a su habitación.

–¿Enserio necesitas que te ayude ahora?–Le preguntaste mientras Kate veía la escena.

–Sip, así que mueve tu trasero y ven conmigo.–Dijo comenzando a caminar.

Rodaste los ojos y tomaste todas tus cosas antes de acercarte a Kate para besar sus labios con ternura ni bien viste que Tony se había ido.

–Ve a mi departamento, voy a estar ahí a más tardar a las diez.–Le dijiste con una sonrisa guiñándole un ojo antes de salir.

Kate soltó una pequeña risita y cerró la puerta antes de voltearse hacia Lucky que la observaba moviendo su cola.

–Vamos a pasar la noche con T/N hoy.–Le dijo con una gran sonrisa acercándose para acariciarle.