Prólogo: No sabías que Kate es la siguiente Hawkeye hasta que te salva una noche.

Miiriiam91
aestaabuerida
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Kate no te había contado que ahora era ella la siguiente Hawkeye, ni que mucho menos que había entrenado con Clint porque pensaba que de alguna u otra forma te mantendría alejada del peligro.

Una noche ibas caminando de vuelta a casa cuando un tipo te arrastró hasta un callejón.

–Dame todo el dinero que tengas y si gritas te mato aquí mismo.–Te amenazó apuntando su navaja hacia ti.

Tu respiración comenzó a acelerarse y tus manos empezaron a temblar, mientras que ni si quiera podías formar una sola palabra por el miedo.

–¡¿Qué esperas?! ¡No tengo toda la noche!–Te dio un pequeño empujón e inmediatamente comenzaste a buscar en tu bolsa con manos temblorosas, pero por accidente la dejaste caer.

–¡Oye! ¡Tú! ¿Por qué mejor no te metes con alguien de tu tamaño?–Dijo la chica al inicio del callejón con un arco en mano apuntándole y un perro a su lado.–Siempre quise decir eso.–Le susurró a su amigo peludo.

–¿Y se supone que tú eres alguien de mi tamaño?–Le preguntó el tipo con una risa burlona.

El perro comenzó a ladrar corriendo hacia él y la chica soltó la flecha que abrió una red e impactó contra el tipo, provocando que cayera al suelo, y tu dieras un salto mientras que el perro se sentó arriba del hombre.

–¡Ayuda! ¡Saquenme de—. Ni si quiera pudo continuar cuando la chica puso un papel del suelo en su boca, y el perro se sentó en su cara.

–¿Estás bien?–Te preguntó acercándose a ti para ayudarte a guardar tus cosas al tener la manos tan temblorosas.

–S-si... si, yo—. Levantaste la vista para encontrarte con la de la chica que llevaba una pañoleta morada cubriendo de su nariz hacia abajo dejando sus ojos fuera, provocando que fruncieras el ceño.–¿Te conozco de algún lado?

–¿Qué? ¿A mi? ¡No! No, no lo creo, nop, jamás. Estoy segura de que te recordaría.–Rió nerviosa guardando tus cosas más rápido mientras tu seguías observándola.

El perro se acercó a ti y se te abalanzó lamiendo tu cuello provocando que la pañoleta que le cubría el hocico se cayera, y tuvieras un vista perfecta a qué perro era.

–¿Lucky...? ¡¿Kate?!

–¿Quién es Kate? Claramente no soy yo, así que ya mejor me voy para que te vayas con esa tal Kat—. Comenzó a hablar rápidamente saliendo del callejón, pero corriste detrás de ella y tomaste su mano.

–¡¿Tú eres la nueva Hawkeye?!–Le preguntaste medio gritando medio susurrando, con su mano aún en la tuya para no dejarla ir.–¡¿Por qué no me lo dijiste?!

–¡Porque quería protegerte!–Te dijo bajando su pañoleta y viéndote algo afligida y nerviosa.

–¡¿Protegerme de qué?!

–¡Bueno no lo sé! ¡Clint protege a su familia de una forma parecida y pensé que yo también podría protegert—

–¡¿Conoces a Clint Barton?!

–Ay dios esto no nos va a llevar nada...–Se quejó pasando una mano por su rostro mientras Lucky estaba sentado junto a ustedes.–Eso no importa, ¿estás bien? ¿Ese tipo te hizo algo?

–Si... estoy bien, tranquila, no pasó nada.–Le aseguraste aún asimilando lo que acababa de ocurrir.–Pero necesito una verdadera explicación sobre todo esto.

–Okey, si, está bien... supongo que tienes razón... ¿te parece si ordenamos pizza?

–Me parece justo, pero tú pagas.–Le dijiste mientras comenzaban a caminar tomadas de las manos hacia su departamento mientras Lucky las seguía.