El de ojos azules ese (Peter Quill)

Prólogo: Peter y tu habían terminado, y se siente celoso después de verte con Bucky.

clarisa018
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Tony había hecho una gran fiesta en el campus de los Vengadores donde también los Guardianes fueron invitados, por lo que todos asistieron.

Peter y tu hacía cosa de un par de semanas que habían decidido que lo mejor sería romper, o al menos él lo decidió así mientras discutían por algo que ya ni siquiera podía recordar.

Sin embargo la verdad es que se arrepentía muchísimo por todo lo que te dijo aquella vez y de haber terminado, pero como ninguno de los dos se hablaba no podía acercarse a ti. Tampoco es que supiera cómo hacerlo.

En la fiesta conociste a Bucky con quien te la pasaste casi toda la noche bailando, riendo y bebiendo ya que ambos tenían buena tolerancia al alcohol gracias al serum y por el planeta del que venías.

Mientras que Quill te observaba desde lejos molesto y con los celos sintiéndolos correr por cada vena de su cuerpo y deseando poder ser el soldado, o eliminarlo.

Más tarde ya cuando la fiesta había terminado, o más bien cuando todos estaban ebrios, volviste a la nave donde se quedarían.

Fuiste a la cocina donde estaban todas las luces apagadas para ir a por algo de comer, y las encendiste sin darte cuenta de que Peter estaba ahí sentado en uno de los taburetes en la isla.

–Veo que disfrutaste BASTANTE la fiesta.–Dijo con molestia llevando su cerveza a su boca.

–¡Mierda Peter!–Exclamaste al dar un salto, instintivamente tomando un cuchillo de la encimera.–Mierda... me asustaste.–Dijiste llevando una mano a tu corazón y dejando el cuchillo donde estaba.

–¿Tal vez esperabas a que fuera otra persona? No lo sé, ¿el soldado guapo ese quizás?–Dijo cruzándose de brazos y apoyando la espalda atrás.

–¿Disculpa? ¿Qué se supone que significa eso?–Le preguntaste volteándote hacia él de brazos cruzados.

–Ay por favor T/N, no finjas que no sabes. Te la pasaste toda la noche con "don ojos azules que te hipnotizan y mi super brazo robotico también" bebiendo, bailando y riendo.–Rodó los ojos con molestia.

–¿Es enserio? ¿Me estás haciendo una escena de celos?–Le preguntaste alzando ambas cejas.

–¿Yo celoso? Claro, como si tuviera algo que enviarle a ese tipo.–Trató de soltar una risita, pero salió más como algo celoso y desviando la mirada de ti.

–Oh Peter por favor no me vengas con tus tontas escenas de celos ahora, fuiste tú quien rompió conmigo y tengo todo el derecho de pasar tiempo con quien yo quiera.–Le dijiste molesta sacando de la despensa un bocadillo.

–¡Pero no quería hacerlo! ¡¿Okey?! ¡Me equivoqué! ¡Metí la pata y arruiné todo!–Exclamó apoyando ambas manos en la encimera.–No quería romper contigo, jamás quise eso. Estaba enojado, y ya ni siquiera sé por qué estábamos discutiendo, solo se me salió.

Solo quería hacerta daño y me pasé de la raya.–Dijo más calmado con expresión afligida, apoyando los brazos en la mesa y bajando la vista.–Te amo demasiado como para hacer una cosa así, y-y verte con ese... con ese cretino... no sé. Supongo que no hay vuelta atrás para nosotros.

Peter ni siquiera se limitó a contener sus lágrimas y dejó que cayeran a la superficie del mesón con libertad llorando en silencio, mientras tú soltaste un pequeño suspiro viéndole afligida.

Dejaste el paquete de bocadillos en la mesa y caminaste hacia él para abrazarlo por el costado e inmediatamente Peter se volteó y hundió su rostro en tu pecho envolviendo sus brazos en tu cintura, soltando un pequeño sollozo.

–Perdóname T/N... no quería... no quería que nada de esto pasara. La verdad es que no soy nada sin ti, no me gusta estar sin ti.–Sollozó abrazándote con fuerza mientras tu acariciabas su cabello.

–A veces puedes ser un tremendo idiota, Peter Jason Quill.–Le dijiste con una pequeña sonrisa alejándote de él para verle a la cara acariciando sus mejillas con ternura.–Pero eres mi idiota. Y si que a veces eres una molestia.

Peter rió ligeramente y besó tus manos antes de volver a abrazarte soltando un suspiro aliviado.

–¿Entonces me perdonas?

–Claro que si, ridículo. A mi tampoco me gusta estar sin ti. Además, Rocket dijo que más vale que volviéramos antes de que tuviéramos que irnos otra vez o nos iba a lanzar a los dos fuera de la nave.–Le dijiste provocando que riera ligeramente.–Y no te preocupes por Bucky, solo descubrimos que tenemos muchas cosas en común, es todo.

–Aún así no me agrada.–Murmuró con su rostro hundido entre tus pechos.

Rodaste los ojos con una pequeña risita y dejaste un beso en su cabeza sin dejar de acariciar y jugar con su cabello.

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