Prólogo: Tony te lleva con Bruce para que te revise cuando te desmayas en sus brazos, y ambos se llevan una sorpresa con tu diagnóstico.

Zamely_Barrios
Advertencia: Embarazo.
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–Buen día, Señor Stark. Me da gusto verlo nuevamente.–Le saludó FRIDAY apenas abrió la puerta de la casa donde vivía contigo.

–Lo mismo digo, aunque no te pueda ver. Ahora. ¿Dónde está mi radiante esposa? La extrañé como no te imaginas y tengo ganas de—A la vez que hablaba, iba acercándose para subir las escaleras, cuando la inteligencia artificial le interrumpió.

–Hay algo que debe saber, Señor Stark. La Señora Stark no se ha estado sintiendo bien últimamente. Según mis registros, sus síntomas comenzaron exactamente cinco días después de su partida. Ha estado vomitando y se encuentra decaída. Sugiero llevarla a un doctor lo antes posible. Se rehusó a escuchar mis sugerencias cuando se lo dije.

–¡Gracias FRIDAY!–Le gritó Tony mientras corría a la habitación que compartían.

Una vez llegó, no te vio en el cuarto, pero te escuchó vomitar en el baño.

Entró y te vio arrodillada ante el inodoro, así que se acercó y tomó tu cabello para sacarlo del camino, mientras acariciaba tu espalda.

–¿Tony?–Dijiste con voz ronca, volteando un poco la cabeza para verlo con expresión cansada.

–Hola bonita... ¿cómo te sientes?

–De maravill—Otra ola de náusea arrasó contigo, y tuviste que voltear hacia el inodoro nuevamente.

–Ya... ya... tranquila...–Susurró sin moverse de donde estaba.

Una vez botaste todo lo que tenías en el estómago, tiraste de la cadena y cerraste la tapa. Te quedaste sentada en el suelo con la espalda apoyada en la pared, mientras Tony mojaba una toalla y te daba un vaso con agua.

–Gracias...–Le dijiste con una sonrisa, mientras limpiaba tu boca y donde te habías manchado, para luego entregarte el vaso con agua y tomaras un poco.

–No tienes que agradecerme nada, linda. Sabes que haría cualquier cosa por ti. Es por eso que hoy mismo vamos a ir a ver a la Doctora Cho.–Te dijo acariciando tus piernas, sentado frente a ti.

–Bien...–Soltaste un suspiro, dejando el vaso junto a ti.–Ésta definitivamente no es la forma en la que quería resivirte... lo siento tanto...–Le dijiste débilmente, con lágrimas amenazando por salir.

–No te disculpes, bonita...todo está bien. Solo quiero llevarte a que te revise un doctor para asegurarme de que no pasa nada malo, ¿si?

–Sí, si... ya mejor vamos.–Le dijiste a la vez que comenzabas a levantarte.

Tony te ayudó, pero al dar el primer paso, caíste desmayada en sus brazos.

Ambos cayeron al suelo. Tony quedó sentado, sosteniendo tu cuerpo mientras comenzaba a asustarse y desesperarse.

–¡¿T/N?!

–Sus signos vitales se encuentran algo débiles, pero nada mortal. Sugiero llevarla a un—

–¡LLAMA A BANNER Y A CHO Y DILES QUE ESTÉN LISTOS PARA CUANDO LLEGUEMOS!–Le dijo asustado, tomándote en sus brazos para acercarse a la ventana de su habitación y ponerse su traje. Partiendo rumbo directo a la Torre.

(.....)

–Bruce. Por última vez. Necesito que me digas qué mierda le pasa a mi esposa, ya se me está acabando la paciencia.–Le dijo con los dientes apretados, pero a la vez con algo de temor mientras esperaban fuera de tu habitación donde Cho te estaba terminando de acomodar.

–Lo sé, Tony. Sé que estás tenso y tienes miedo, pero esto es algo que debo hablar con ambos. ¿Okey? Relájate que no es nada grave.–Le explicó con suavidad.

–Muy bien, ya pueden pasar. T/N está estable y todo está bien con ella.–Les dijo la Doctora Cho con una sonrisa.

Tony ni si quiero se esperó para darle las gracias, y pasó por su lado para entrar rápidamente a verte, con Bruce siguiéndole detrás mientras la otra se iba.

–Ay bonita me tenías preocupado...–Soltó el aire que estaba aguantando, para sentarse junto a ti en la cama y abrazarte con fuerza, pero a la vez cuidadoso de no dañarte.

–Lo sé... perdón... pero te prometo que ya estoy bien.–Le aseguraste con una sonrisa, tomando su rostro en ambas manos para dejarle un tierno beso en los labios.

–Bueno, ahora que ambos están juntos, puedo darles tu diagnóstico.–Habló Bruce desde donde estaba parado junto a tu cama.

–Al fin... ya mejor dilo antes de que envejezca.–Rodó los ojos Tony, sin moverse de donde estaba y con tu mano en la suya.

–T/N, Tony... felicidades. Van a ser padres.–Soltó la noticia de una sola vez.

Al oírlo, los ojos casi se les salen del rostro ante la noticia que acababa de darles.

–¿N-nosotros... T-t/n e-está... ay ya me fui...–Balbuceó, antes de caer desmayado al suelo.

–¡Tony!–Te fuiste a levantar de la camilla, pero Bruce te detuvo.

–No, no, tranquila. Yo me encargo.–Te aseguró con una sonrisa, tomando el vaso de agua en la mesita de noche, para luego acercarse a Tony y echársela en la cara.

Se sentó de golpe, respirando agitado y viendo a su alrededor.

–¿Estás bien, amigo?–Le preguntó Bruce, mientras le ayudaba a levantarse para volver a sentarse a tu lado.

–¿D-de verdad T/N está embarazada?–Preguntó sin responder a lo que Bruce le había dicho primero.

–Así es. Felicidades. Los mareos y constantes sentimientos de náuseas era producto de eso, los primeros síntomas. Es algo bastante común, pero aún así, deben de tener cuidado.–Les explicó, para luego acercarse a la puerta.–Ah, y por cierto, tienes tres semanas. Nos vemos.–Se despidió y cerró la puerta tras él.

Ambos de quedaron en silencio por un par de segundos, mientras jugabas nerviosa con la mano de Tony en las tuyas. Los dos pensando en lo que harían.

–¿T-tony?–Preguntaste insegura, viendo como permanecía inmóvil en su lugar.–¿E-estás enojado?

Tony levantó el rostro y se giró en tu dirección. Una gran sonrisa dibujada en su cara, y lágrimas de felicidad corriendo por sus mejillas.

–¿Cómo podría estarlo? ¡Vamos a ser padres!–Medio susurró, medio gritó emocionado, acercándose para abrazarte a la vez que tú también empezabas a llorar de felicidad.

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Los primeros meses se pasaron muy rápido, según Tony. Aunque le emocionaba porque por fin podría saber sí sería niño o niña su bebé.

–¿Tienen algún nombre en mente?–Les preguntó la Doctora Cho mientras movía el aparato en tu vientre, viendo hacia la pantalla frente a ella.

–Aún no, pero ya pronto. Queremos que sea especial.–Le explicaste con una sonrisa, tomada de la mano de Tony mientras él observaba la pantalla.

–Muy bien aquí está... oh... oh vaya...–Sonó algo sorprendida, asustándolos a ambos.

–¿Qué? ¿Qué pasa?–Preguntó Tony, la sonrisa borrándose de su rostro.

–¿Hay algo malo con el bebé?

–No, están completamente sanos.–Les dijo con una sonrisa, sin despegar la vista de la pantalla.

–¿E-están? ¿A qué se refiere con... "están"?–Preguntó aún más confundido Tony, mientras lágrimas de felicidad se formaban en tus ojos.

–Felicidades a ambos, van a tener mellizos. Una niña y un niño.–Anunció con una gran sonrisa, por fin viéndoles a la cara.

–Ay no puede ser...–Dijo Tony, sintiendo como sus piernas de pronto ya no podían con su peso, pero ésta vez fue más rápido y se sentó en el taburete junto a la camilla.

–¡Van a ser mellizos!–Exclamaste feliz viendo a Tony.

–¡¡¡VAMOS A TENER UNA NIÑA Y UN NIÑO!!!–Gritó lleno de felicidad, acercándose para darte probablemente el beso más apasionado de toda tu vida.

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Bienvenidas al nuevo libro de Oneshots!!!

Espero lo disfruten muchísimo igual que el anterior 😎❤️✌🏻