3. Dream about a stranger
Jadeo | SUHO
Publicado previamente en Autumn Fever de AeriSquad.
Jun Myeon llevaba una semana entera con insomnio. Además de cansado y soñoliento, estaba consternado pues, a pesar de que procuraba mucho su salud y siempre buscaba mantener una vida sana, no entendía por qué no podía conciliar el sueño.
Antes de que su insomnio se presentara, Jun Myeon comenzó a tener un sueño recurrente. Él se encontraba recostado en una cama a mitad del bosque; solo y desorientado, se incorporaba con la intención de saber dónde se hallaba. No obstante, cuando se ponía de pie y daba un par de pasos, el sueño se cortaba y él despertaba.
Con el pasar de las noches, a esta escena se le sumaron algunos otros sucesos. Por ejemplo, Jun Myeon comenzaba a caminar en el bosque, internándose en la maleza: a veces deambulaba un largo rato entre los altos pinos, pisando la hojarasca seca y preguntándose el motivo de su presencia en el bosque.
Justo cuando empezó el insomnio, en su sueño, Jun Myeon divisaba una mancha negra que flotaba entre los árboles. Al principio él creyó que se trataba de un animal, pero después reconoció que tenía una forma humana femenina. Ella tenía un cuerpo pequeño cubierto por una túnica blanca, su cabello negro como el ébano adornaba con gracia su espalda. Desde el punto de vista de Jun Myeon, ella era hermosa. Nunca había visto su rostro y difícilmente podía apreciar su figura, pero él estaba seguro de su belleza y el misterio alrededor de su persona. A Jun Myeon no le perturbaba soñar incontables veces con ella, pero no poder saber su identidad lo inquietaba.
En sus últimos sueños, él la seguía. Ella era rápida y ágil, Jun Myeon le seguía el paso con dificultad. Después de un largo tramo y de internarse en la profundidad del bosque llegaba a un claro. No había árboles ni arbustos, sólo hierba corta que llegaba a la planta de los pies... y ella de espaldas a mitad del lugar. Él la contemplaba desde lejos, esperando a que se volviera o que hiciera algo. Ella nunca se movía. Pronto el sueño se interrumpía y Jun Myeon despertaba.
La última noche que soñó con ella, Jun Myeon decidió que debía acercarse y descubrir su identidad. Con seguridad, hizo sus pasos hasta la chica misteriosa. Justo cuando estuvo a dos metros lo escuchó. Tenue e insistentemente, un jadeo inundó sus oídos. No sabía si venía de él mismo o de ella. No podía descifrar si era de cansancio o de excitación, sólo estaba seguro de que ese sonido no era humano.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top