Taehyung esperó que otros padres salieran del aula antes de entrar, buscando con la mirada a su bebé, sonrió al contemplarle guardar sus cosas apresurado.

Observó a su pelirrojo amigo y se acercó aprovechando que estaba desocupado.

—Hey, Jimin-sshi —saludo con una sonrisa.

—Taehyung-ah —pronunció el omega, reflejando su sonrisa.

—¿Y? ¿Cómo estuvo mi conejito hoy? —preguntó.

—Uhm, el único problema destacable es que lo atrapé comiendo galletas en medio de la clase —observó divertido.

—Ay, cómo si nosotros no lo hubiéramos hecho en la universidad —replicó divertido, riendo junto a su amigo.

—Sí, pero la diferencia es que no nos atrapaban y hoy pille al pequeño Beom-gyu tres veces —destacó arqueando una ceja.

—Mi pequeño monstruo come galletas, a quién habrá salido sino a Kookie —rió—. Ese hombre siempre tiene que estar comiendo algo.

—Papi —exclamó el cachorro cuando finalmente terminó de guardar sus cosas.

Cuando su hijo estuvo a su lado, el omega lo tomó entre sus brazos.

—¿Tío Minnie te atrapó comiendo en medio de las clases, Beom-gyu? —interrogó contemplando divertido los rastros de galletas en el rostro del infante.

—Es que... Tenía mucha hambre —se excusó con un pequeño puchero, haciéndole ojitos de Bambi a su padre.

Jimin rió alegremente al contemplar como su amigo caía rendido ante los encantos de su propio hijo.

—Aigoo, pero mira esta hermosa carita —exclamó el peliazul, llenando de besos sonoros las mejillas de su pequeño.

Las infantiles carcajadas no tardaron en llenar la sala, junto a los pedidos del infante para que su padre se detuviera.

Cuando finalmente Taehyung dejó el rostro de su hijo, este sonrió y besó la mejilla de su padre antes de rodear su cuello con sus pequeños brazos, apoyando su cabeza en estos.

—La próxima vez trata de aguantar hasta el receso conejito, o tío Jimin te quitará tus galletas —advirtió finalmente el padre.

Ante aquellas palabras, el infante alzó su cabeza contemplando al pelirrojo omega en busca de confirmación.

—Así es —asintió Jimin—. La próxima vez te quitaré tus galletas y me las llevaré a mi casa.

—No, no lo haré más —prometió el cachorro, sacándole una silenciosa risa a ambos adultos.

—¿Y? ¿Cómo estás para esta noche el gran bailarín estrella? —pregunto Taehyung contemplando con interés a su amigo—. ¿Nervioso?

—Un poco —asintió comenzando a guardar sus cosas—. Pero una vez esté en el escenario, lo olvidaré todo.

—Si así estás tú no quiero ni imaginar cómo está la pequeña Sana —comentó el contrario.

—Ayer en el último ensayo la vi bien —recordó colocándose su mochila sobre un hombro.

—Ustedes dos lo harán bien, brillarán allá arriba —anunció seguro, saliendo del aula junto a su amigo—. Por cierto, luego de tu presentación todos quedamos en salir a celebrar —informó cerrándole un ojo, haciendo un sonido con su lengua mientras alzaba su mano fingiendo llevar un basó a su boca.

—Uhm, no creo que con Hyung podamos acompañarlo hasta muy tarde, mañana saldremos de viaje a primera hora a Japón —recordó.

—¿Japón? —preguntó alzando una ceja en sorpresa—. Todavía ni se casan y ya están teniendo la luna de miel —se burló.

—Tonto —rió el pelirrojo—. Yoongi tiene una reunión importante y me invitó para conocer Japón.

—¿Puedo ir yo también? —preguntó Beom-gyu.

—Algún día le diremos a papá que nos lleve —respondió Taehyung emocionando a su hijo con su respuesta—. Ir aunque sea un par de horas y divertirse con amigos no les hará mal —comentó volviendo al tema.

—Le preguntaré a Yoonie —respondió siguiendo a su amigo al auto de Jungkook—. Pero ¿si van todos donde van a dejar los pequeños? —preguntó curioso.

—Tío Hyuk y tía Nara se ofrecieron, y luego también los padres de Kookie —respondió quitándole la mochila a su hijo antes de sentarlo en su silla especial para niños dentro del auto.

—Algo me dice que realmente van a aprovechar su noche libre, todos —rió mientras se subía en el asiento de copiloto.

—Qué comes que adivinar —rió el otro omega mientras se subía detrás del volante.

—Solo espero que todos se cuiden si no quieren sorpresitas en el camino —indicó divertido, dándole una pequeña miradita su un distraído cachorro.

—Hey, me he estado cuidando desde mi conejito, muchas gracias —respondió alegre.

—Papi, ¿podemos escuchar música de Pororo? —pregunto el cachorro en los asientos traseros.

—Claro bebé —respondió encendiendo la radio y conectando su teléfono a un volumen moderado.

—Yo invité a Jaebum y su pareja pero aún no me dan respuestas acerca de si irán o no —comentó el pelirrojo.

—Bueno, con el horario de Jinyoung no me sorprende, menos si hace poco volvieron de vacaciones —respondió Taehyung—. ¿Te dejo donde Yoongi hyung o en el departamento?

—En el restaurante de Namjoon —respondió—. Quedé en almorzar con Yoonie ahí.

—No hay problema —respondió girando a la izquierda.

—Cierto, ¿este fin de semana puedes cuidar de Shuga, Chim, TaTa y Koya? —pidió—. Les dejaré alimento, pero estaría bien si les das una vuelta y lo sacas a pasear, no quiero que hagan un desastre en el departamento.

—Claro, hace tiempo que no veo a tus mascotas —aceptó sonriente, recordando aquellos tiempos en el que su amigo llevaba a Chim y Shuga a todos lados.

—Si, ahora Shuga y Chim disfrutan pasar más tiempo en casa y a sus hijos no les interesa tanto seguirme a todos lados como a Shuga —sonrió con cariño.

—Bueno, en ese tiempo Shuga era bastante protector contigo, pero ahora alguien más tiene ese papel ¿no? —pronunció dándole una corta mirada.

Asintiendo, Jimin se quitó el cinturón de seguridad cuando se detuvieron frente al restaurante.

—Gracias por traerme —pronunció tomando su mochila—. Adiós Beom-gyu, te veo después TaeTae —se despidió mientras se bajaba del auto.

Agitando su mano, Jimin contempló como el auto de su amigo volvía a internarse en el tránsito.

"Yoonie, ya estoy aquí" avisó observando a su alrededor para verificar si estaba el auto de su pareja.

"Voy en camino, cachorro" respondió.

"Entonces pediré nuestra mesa y almuerzo, ¿algo en específico?" pregunto mientras se internaba en el restaurante.

"Cualquier cosa que pidas"

Con esas palabras, Jimin se detuvo en la entrada, sonriéndole al hombre detrás del escritorio.

—Señor Min —pronunció levantándose de su silla al reconocerlo—. Su mesa esta lista en el mismo lugar de siempre —informó.

—Está bien, gracias. ¿Puede avisarle a mi hermano que estoy aquí? —pidió.

—Por supuesto —asintió—. ¿Gusta que guarde su mochila?

—Gracias —musitó entregándosela—. Ah, y no es necesario que me lleven la carta, solo dile a mi hermano que nos sorprenda —pidió antes de alejarse.

Subiendo a la azotea, el omega sonrió al contemplar la mayoría de las mesas ocupadas mientras se dirigía a la propia.

Y, aunque Hyuk manejaba bien el restaurante, Jimin no podía dejar de notar la diferencia cuando estaba su hermano presente.

Con el tío Hyuk era en su mayoría sofisticado y todo hombre de negocios, pero desde que el restaurante había sido dejado en manos completamente de Namjoon y Jin, este se había vuelto más hogareño, un restaurante familiar.

—¿Desea algo de tomar, señor? —pregunto la joven camarera.

—Solo agua por ahora, por favor —pidió.

Sonriéndole a la chica, Jimin sacó su teléfono celular y revisó sus redes sociales mientras esperaba tanto a su pareja como al almuerzo.

Antes de que las puertas del ascensor se abrieran, el omega volvió a guardar su celular y contempló en aquella dirección mientras tomaba un sorbo de agua.

Yoongi sonrió cuando contempló a su pareja esperándole en su lugar habitual y rápidamente se acercó.

Inclinándose sobre su cachorro, lo besó dulcemente antes de sentarse frente a su pareja.

—Siento la demora, el tránsito estaba horrible cerca de la empresa —se explicó.

—Está bien —sonrió el pelirrojo—. Ya deben de estar por subir nuestro almuerzo, le pedí a Namjoon que escogiera por nosotros.

—Genial, podré molestarlo si no me gusta.

—Sabes que eso nunca pasará —rió el menor, contagiando a su pareja—. ¿Cómo está tu dolor de cabeza?

—Se me pasó esta mañana —prometió—. No te preocupes tanto, cachorro.

—Últimamente te ha dolido constantemente, más de lo común —observó frunciendo ligeramente el ceño—. ¿Has estado usando tus lentes para leer?

El alfa torció sus labios.

—Yoongi...

—Está bien, los uso cuando me acuerdo... O mejor dicho mi secretaria me recuerda —confesó.

Jimin suspiró recargando su codo izquierdo en la mesa para luego apoyar su rostro contra su mano.

—Si sabes que tus dolores de cabeza pueden ser por tu vista, ¿no?

—Prefiero pensar que es por la presión del trabajo —se encogió de hombros.

—Bueno, así como te gusta llevarme con el doctor Ji por la más mínima cosa, yo quiero y voy a llevarte a ti luego de que volvamos de Japón —anuncio enderezándose cuando la camarera se detuvo a su lado con un carrito.

—El Chef Kim pide perdón por no poder atenderles personalmente —expresó la mujer, sirviendo con maestría los platos.

—Está bien, debe de estar ocupado —respondió Yoongi.

Cuando la joven se retiró luego de haber servido, Jimin volvió al tema.

—Así que quiero que me hagas una hora para la próxima semana —advirtió.

—Está bien amor, se lo pediré a Chae-young —sonrió comenzando a comer junto a su pareja.

—Y hablando de ella, ¿cómo está ella y la pequeña? —preguntó curioso.

—Ambas están bien, tiene un vientre enorme —comentó con una pequeña sonrisa—. Aunque estoy algo preocupado, pronto le darán su licencia por maternidad y tal vez no vuelva.

—Oh, la echaré de menos —pronunció—. ¿Qué vas a hacer sin un secretario, Hyung?

—Estamos buscando su reemplazo, pero ninguno me convence —arrugó su nariz.

Los pocos que habían pasado a la entrevista no llegaban a sus estándares o pensaban que era correcto coquetearle.

El omega frunció suavemente el ceño y dejó de comer.

—Yoonie, no te estoy obligando ni nada, pero... ¿Podrías ver el currículum de Jae? —pidió.

—¿Jaebum? —preguntó e inclinó levemente su cabeza, pensativo—. Ahora que recuerdo, ¿por qué lo vi trabajando como camarero?

—La empresa en la cual trabajaba necesitaba hacer un corte de personal y decidieron dejar a los que llevaban más tiempo trabajando —respondió.

—Dile que envíe su currículum a mi correo, no prometo nada, pero le consideraré para la entrevista —dijo tomando un sorbo de su gaseosa—. Por cierto, nuestro vuelo es mañana a las ocho.

—A las ocho, un sábado —repitió arrugando otra vez su nariz—. No sé si podré levantarme tan temprano —rió bajo.

—Podrás dormir en el vuelo también —prometió con cariño.

—Ah, los chicos también quieren salir a celebrar después de la presentación —recordó el omega—. Le dije a Tae que si íbamos, solo sería por un par de horas.

—Está bien —asintió—. ¿Estás nervioso?

—Solo un poco —confesó terminando de comer junto a su pareja—. Pero se me pasará una vez que esté en el escenario, por mientras iré al departamento.

—Recuerda que Momo dijo nada de ensayos hasta la presentación —indicó.

—Lo sé —asintió—. Me distraeré adelantando algo de trabajo para el lunes, así no tendré que trabajar nuestro fin de semana.

—Puede que sea un viaje de negocios, pero solo tengo una reunión el sábado cerca de las cuatro, por lo que podremos salir a recorrer —prometió dejando su mano sobre la de su pareja.

—Me encanta la idea de conocer un lugar nuevo contigo —expresó sonriendo dulcemente.

—Y a mí —sonrió—. La pasaremos bien —movió sus cejas, logrando que su omega estallara en carcajadas algo avergonzado, sabiendo a qué se refería explícitamente su alfa.

—No iremos a otro país a encerrarnos en una habitación de hotel —indicó divertido, con un leve rubor en sus adorables mejillas.

—Claro que no, para eso está la noche —respondió suspicaz, compartiendo una sonrisa cómplice con su pareja.

—Promesas, promesas —exclamó sonriente.

—Ya verás que no son solo promesas, bebé —prometió enviándole al menor un destello de calor junto a lo que tenía pensado hacerle.

Jimin atrapó su labio inferior entre sus dientes.

—Lo esperaré con ansias —respondió y aclaró su garganta.

—Y yo —sonrió de una forma que estremeció al omega de anticipación.

Dios, el viaje a Japón realmente se oía prometedor ahora para Jimin.

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Hola mis copitos!!

Espero que hayan tenido un lindo fin de semana <3

Hum... Me gustaría hablarles de algo pero no me ha pasado nada interesante en realidad jsjsjsjsj 

Bueno, nos vemos <3 se me cuidan un montón, un besote y un abrazote <3