Dicen que cuando estas destinado a conocer a alguien no hay poder alguno que pueda impedirlo...

Eso siempre me pareció algo tan absurdo, jamás tuvo la menor importancia para mí...

Hasta que él entró a mi vida

Siempre había tratado de huir de mis problemas, intentando escapar de la realidad, mi realidad, me ausentaba de vez en cuando de casa solo para poder "desahogarme" en cualquier esquina o sitio barato de la ciudad.

Nunca pensé que algo así pudiera pasarme, creía que ese tipo de cosas buenas no le pasarían a alguien como yo.

Aún recuerdo su mirada...

Parecía perdido...

Al verlo sentado en la barandilla de ese puente, nunca me detuve a pensar en lo que pudiera estar pasando en su vida... Solo quería seguir mi camino y dejarlo atrás; pero al pasar cerca de él una fuerza mayor oprimió mi pecho haciéndome detener en seco: Estaba llorando.

Poco a poco y sin darme cuenta mis pasos me dirigían hacia aquel joven, lo más extraño de todo: no hacía el menor esfuerzo por detenerme. Al llegar, consideré que lo más prudente sería mantener mi distancia sentándome a unos metros de él, en la misma posición en la que él se encontraba sentado. El viento despeinaba mi cabello y formaba olas en el agua que se encontraba debajo de nosotros...

Could you find a way to let me down slowly?

A little sympathy I hope you can show me

Comencé a tararear la primera canción que se me vino a la mente balanceando mis pies hacia atrás y adelante mientras pensaba de qué manera saldría de esa situación... Es más, ni siquiera supe cómo me metí en todo eso. Lo único que sabía era que ahondaría lo necesario hasta saber lo que le pasaba a ese hombre o dejaría de llamarme Stephanny Marie Dossom...

❤

If you wanna go then I'll be so lonely

If you're leaving baby let me down slowly...

El chico entonces levanta la mirada en mi dirección, cruzándola con la mía... Es la mirada de un niño pequeño que se encuentra perdido... mi cuerpo se estremece, puede que por el frío tan característico de esta época del año, tomo una gran bocanada de aire antes de animarme a decirle algo

—Hola— es todo lo que sale de mis labios. El chico solo ladea la cabeza, como si no entendiera mis palabras —¿Vas a saltar?— pregunto mirando hacia adelante, rompiendo el contacto visual con el moreno. No hay respuesta de su parte, así que continúo —: Pienso que no deberías, la distancia entre aquí arriba y allí abajo es mucha ¿no te parece?— Noto como él mira al agua, pensativo, para luego mirarme nuevamente —Además, en esta época del año el agua debe de estar helada...— con mucho cuidado bajo de la barandilla y doy pasos lentos hacia él, parece pensativo —ven— le tiendo mi mano, ofreciéndole ayuda para bajar, me mira y juro que parecen ser los segundos más largos de mi vida hasta que al fin acepta y baja con cuidado...

Su mano esta fría, todo su cuerpo tiembla, sudor y lágrimas recorren su rostro... Sus ojos oscuros están fijos en mí, pero no hay brillo en ellos; pero aun así, a pesar de la cercanía entre nosotros, después de tanto tiempo, no siento la necesidad de huir cuando hay alguien cerca de mí...

Me siento... tranquila.

—Soy Stephanny Dossom— me presento luego de soltar su mano —tu eres...?— intento que diga algo, el inclina su cabeza a manera de respuesta

—Steven...— responde aun con la cabeza gacha

—Mmm... Tienes un lindo nombre— no quise insistir en su apellido, pensé que sería un abuso de mi parte, así que decido dejarle un poco de espacio... Pero no puedo dejarlo ir así, sin más, necesito respuestas —¿Tienes hambre? Hay un lugar por aquí cerca... ven, no aceptaré un no como respuesta— tomo su mano nuevamente y él se deja arrastrar hasta un pequeño café que habían abierto hace poco.

Había pocas personas en el lugar, escogimos una de las mesas del fondo y luego de unos segundos llegó una chica rubia a tomar nuestra orden. Steven solo miraba sus manos

—Oye, puedes pedir lo que quieras. Yo pagaré.

—Ehh? No. No puedo permitir que hagas eso

—¿Ah sí? ¿Y por qué no? Después de todo fui yo la que te trajo aquí— el chico se queda en silencio, está claro que llevo cierta ventaja en esta situación —Ya sé: Hoy pagaré yo, y para la próxima pagas tú ¿De acuerdo?— "¿pero qué coño estás haciendo?" me reprende la pequeña voz en mi cabeza. ¿De verdad quiero que esta "cita" (o lo que sea) vuelva a repetirse? Steven me mira con cara de "¿te has vuelto loca?" pero luego de un rato lo veo asentir tímidamente —Muy bien

Eso espero

Luego de ordenar me tomé el atrevimiento de ir más allá. En el fondo yo si quería saber más de él... El porqué de su decisión.

—Oye, cuéntame de ti— digo, intentando sonar lo más casual posible mientras juego con la pajilla de mi milkshake de chocolate

—No hay nada que contar linda, mi vida es...— hace una pausa, como queriendo encontrar la palabra correcta —Simple, aburrida... Mejor hablemos de ti

—Bueno, ya sabes mi nombre, tengo 18 años... y soy bastante asocial, así que el hecho de estar aquí compartiendo en público contigo es una novedad— sonrío y él corresponde con una sonrisita tímida

—¡Eso es! Justo así... espera un segundo...— indico y el pobre ladea la cabeza confundido —¡No te muevas!— tomo mi celular rápidamente para buscar la cámara —Ahora sonríe

—¿Pero qué haces?— su sonrisa se hace mayor mientras niega divertido

—tienes una sonrisa preciosa. No puedo perder la oportunidad de fotografiarte— hablo con sinceridad para luego seguir con mi trabajo. Por momentos dudo si lo que hago está bien; pero al verlo reír, y ver como intenta ocultar su rostro con su sweater, todas mis dudas desaparecen por completo.

—¡No! ¿Pero qué haces?— las pocas personas que se encuentran en el local comienzan a mirarnos de manera extraña, pero no me importa —Basta

—Es que no puedo evitarlo— bajo mi celular para poder detallar su rostro: nariz redonda; sus ojos color esmeralda se encuentran enrojecidos a causa de lo ocurrido anteriormente, pero su mirada es intensa. Su cabello negro brillante está desordenado, posiblemente por el viento que hace fuera; sus labios presentan un ligero tono rosa, en su labio inferior tiene un pequeño corte y un piercing del lado derecho. El moreno pasa su lengua por sus labios y por alguna extraña razón no puedo dejar de observarlos. Mi mirada vuelve a centrarse en sus ojos y siento que puedo perderme en ellos...

—Emm... disculpen chicos, pero algunos clientes están comenzando a quejarse...— la chica rubia de hace un rato parece apenada por habernos interrumpido, pero tiene razón

Aunque mi segundo nombre es "drama" y me gustaría hacerle honor a eso

—¿Qué? ¿Acaso les molesta ver a un par de adolecentes platicar agradablemente? Vaya que hay gente aburrida— ruedo los ojos, la chica se ruboriza. Tomo mis cosas levantándome de mi lugar (no sin antes dejar paga la cuenta con un poco de propina para la joven, junto con una nota) —Vamos Steven, tal vez en el parque si podamos reír a gusto.— nuevamente tomo al moreno del brazo y lo arrastro conmigo por varias calles hasta llegar al parque, ahí el chico se decide a hablar con más libertad, lo cual me alegra mucho:

—Oye, vi que dejaste una nota en la mesa...

—Ah sí, era para la chica; le dije que no se preocupara por lo que dije; si bien, todo lo que dije es cierto, también es cierto que soy dramática por naturaleza— digo guiñándole un ojo a mi acompañante quien de nuevo sonríe como respuesta. Ambos tomamos asiento debajo de un gran árbol a contemplar cómo los últimos rayos del sol tiñen de un sublime color dorado el paisaje; no dudo en sacar mi celular y tomar un par de fotos. Poco a poco el paisaje comienza a tomar un maravilloso tono rosa; Todos esos colores hacen de la vista algo impresionante. Sonrío inconscientemente, siempre me ha gustado fotografiar paisajes y animales, pero esto es algo tan hermoso... Algunas aves vuelan de regreso a sus nidos, logro capturar el momento exacto en el que pasan sobre mi cabeza...

—Tierra llamando a Stephanny... ¿Hola? ¿Stephanny?

—¿Si?— apenas atino a decir cuando el joven logra captar mi atención pasando su mano frente a mi rostro

—Estabas como ida... Llevo diez minutos intentando llamar tu atención— dice entre risas. Lo positivo de todo esto es que ya le sale natural esto de hablar por su cuenta, y que he obtenido buenas fotografías.

Esperen un segundo...

—¿Dijiste diez minutos? Hemos perdido mucho tiempo— Steven parece confundido ante mis palabras... su expresión me parece demasiado tierna, parece un osito...

¿Pero qué estás pensando Stephanny?

—¿Mucho tiempo? ¿De qué hablas?

—Es de noche ¿Adónde quieres ir? Tal vez... ¡Ya Sé! ¡Sígueme!— mi mente se ilumina de pronto. Steven me mira con carita de "ahora si se ha vuelto loca" —¡VAMOS!— tomo su mano animándolo a seguirme... Caminamos calle arriba hasta que al fin divisamos el lugar...

—Henos aquí...