Pov Nadie:

Ya ha pasado casi una semana desde que Camila, Ally, Selena, Tori, Trina, Dinah y Lucy fueron rescatadas de la Manada Cabello y llevadas a la Manada Jauregui, ha sido un proceso de total adaptación para las Omegas, especialmente los primeros tres días, desde que despertaron todas no salieron de sus habitaciones individuales a menos que fueran para ir todas a la habitación compartida, aún no habían salido del piso donde se encontraban sus habitaciones, aún no se acostumbraban del todo a la presencia de las Alfas cuando estaban a solas con ellas, cuando estaban en grupo, con las demás Omegas que se encargaban de cuidar de ellas (Con quienes habían formado una rápida y sólida amistad); Cristopher (El cual también se había convertido en un amigo para ellas), la Matriarca de la familia Jauregui (Quien poco a poco se estaba convirtiendo en una figura materna para ellas), Kara y Alex (A las cuales sentían que las habían conocido desde siempre a pesar de solo haberlo hecho por unos pocos días, se sentían muy reconfortadas por sus presencias o tan siquiera sus aromas. Aún no sabían sobre el vínculo pero ya eran cercanas a las hermanas Danvers) o con Sofia.

Con los días se habían acostumbrado un poco a la presencia y aroma de de Taylor cuando Sofia estaba con ellas, en lo que llevaban en la Manada, Taylor había ido a la habitación compartida o la habitación donde estuvieran solo unas dos veces, puesto que ella quería que su Mate pasara tiempo con su hermana y amigas a solas y lo más cómodamente posible, no quería que pensaran que Sofia no podía hacer algo o ir a algún lado sin que ella estuviera ahí, además de que no quería incomodar a las Omegas mientras se acostumbraban a estar en una nueva Manada. Lauren, Keana, Demi, Jade, Cat, Normani y Vero si habían ido un poco más a ver a sus Mates puesto que aún tenían que quitar el dolor que pudieran sentir para que la recuperación fuera más rápida, pero habían intentado minimizar lo más posible el tener que ir a las habitaciones de las Omegas para no incomodarlas más de lo necesario, respetando el espacio de estas cuando iban, solo tomando una de sus manos para tomar su dolor, pero solo después de pedir el consentimiento de las recién llegadas a la Manada, una vez que se aseguraron de que ya no necesitaban absorber más el dolor de sus Mates dejaron de ir a las habitaciones para darles espacio, cosa que alegró a las antiguas miembros de la Manada Cabello, pero no tanto como esperaban y querían.

Apenas habían pasado tres días desde la última vez que las Alfas habían ido a verlas y todas y cada una se habían sorprendido esperando a que las otras entrasen por la puerta, y cuando no paso se sintieron algo decepcionadas, cosa que las sorprendió y confundió a partes iguales, se sorprendieron a sí mismas viendo por las ventanas de sus habitaciones para poder ver a las Alfas si estaban cerca de allí. La mayoría de las veces cuando las veían por las ventanas, las Alfas estaban cuidando, jugando o enseñando a los cachorros de la Manada, otras estaban ayudando a los diversos trabajadores que estaban allí, y las otras veces solo estaban pasando el rato entre ellas, con sus Betas, Lena y Maggie, Sofia y los Jauregui o con otros miembros de la Manada (Aunque cuando las Alfas estaban en compañía de Omegas, tanto femeninos como masculinos, no les agradaba mucho, y aquello las confundía mucho).

Por otro lado en lo que respecta al plan de salvar a Harry y a su hijo, que estaban haciendo Shawn, Cristopher, las chicas y Sofia, habían avanzado en la investigación pero no tanto como hubieran querido, gracias al hermano de Shawn (Bastian), habían descubierto que el Alfa que había comprado a Harry no había ido a la Manada Cabello con él desde el intento de escape, solo aparecía el Alfa. Camila y las demás les contaron a Sofia, Cristopher, Clara, Kara y Alex (Quienes luego le hicieron llegar la información a los demás) que luego de aquel día los habían castigado a todos, y gracias a lo que ya Sofia les había contado anteriormente sobre su tiempo en la Manada Cabello, ya sabían qué tipo de castigos habían tenido (Latigazos, golpes, días sin comida o agua, violaciones sin descanso por los Alfas que las habían comprado, sumándole los maltratos que estos les querían dar a sus Omegas por haber intentado escapar y quién sabe qué más cosas), las chicas también les contaron que durante los días que tuvieron de castigos (Diez en total, equivalente a los que se intentaron escapar, contando incluso al pequeño Nate, aunque gracias a la Diosa Luna no habían lastimado de ninguna manera al bebé) habían separado a Harry de su pequeño, apenas dejando que lo viera para alimentarlo o cuando estaba completamente desconsolado y Sinuhe no lo podía calmar.

Esos diez días fueron un completo infierno para las chicas y Harry, especialmente para este último por haber sido separado de aquella manera de su cachorro, pero a pesar de todo eso todos estaban felices de que al menos Sofia había podido escapar, aunque después de que el Alfa no regresó para recriminarle a Alejandro por la fuga de su "nuevo juguete" como la había llamado, estuvieron temerosos de que no hubiera funcionado el plan y que el hombre hubiera capturado a la adolescente, pero tampoco había ido a regodearse por tener a la menor del grupo, por lo que mantuvieron la esperanza de que si había podido alejarse a tiempo. Luego de que los días de castigo terminaran, aquel hombre que había comprado a Harry se lo llevó de la Manada Cabello a la suya propia y desde entonces no habían sabido nada más de su mejor amigo y del pequeño Nate, cosa que asusto mucho a las chicas que se quedaron allí, desde ese entonces Alejandro aumento la seguridad en la Manada para impedir que otros Omegas se atrevieran a escapar, muchos, si no es que todos habían estado esperanzados de que si lo lograban las chicas y Harry, también podrían hacerlo ellos, pero cuando no fue así las esperanzas quedaron por el subsuelo, además de que todos quedaron atemorizados por todo lo que tuvieron que pasar, si así habían castigado incluso a la hija del Líder de la Manada, qué quedaría para los demás, ciertamente no dudarían en matarlo para que los demás aprendieran que no podrían liberarse por más que quisieran.

Ahora con el pleno conocimiento de que Harry no había sido llevado a la Manada Cabello, ni siquiera cuando su Alfa iba de vez en cuando, comenzaron a sopesar lo que harían para ir al territorio de aquel hombre, averiguar cada detalle para hacer una extracción rápida, segura y cautelosa, puesto que no querían arriesgar a ninguno de los dos, tenían que hacer un plan infalible, porque sólo tendrían una oportunidad y la tendrían que aprovechar al máximo, no se podían permitir fallar, aun no les habían comentado sobre el plan a las antiguas miembros de la Manada Cabello, porque no querían darles falsas esperanzas por si Harry no estaba en esa Manada, sería muy doloroso, por lo que acordaron que luego de hacer una investigación en aquella Manada y si el Omega si estaba allí, les dirían sobre el plan, pero no antes.

Bastian le informó a Shawn que las cosas en el territorio Cabello estaban algo tensas porque Alejandro había permitido que las Alfas se llevaran a las Omegas más importantes de la Manada, y sus anteriores Alfas estaban furiosos por aquello, le contó que tan pronto como salieron del territorio, Austin fue el primero en querer ir tras ellos para recuperar a Camila, pero fue detenido por el mismo Alejandro para que no cometiera una estupidez que posiblemente les pudiera costar la vida a todos, si bien este y los demás aceptaron no hacer nada, le recriminaron el haberles quitado a sus Omegas, casi saltando sobre él mientras discutían aquello, pero este les dijo que podrán tener otras y que era mejor tener a las Alfas en su lado bueno porque si no los mandarían a la tumba a todos junto con sus Manadas, cosa que los aterrorizó a todos ya que sabían por las historias de lo que eran capaces las Mujeres Alfas, y que quienes estaban aliados a sus Manadas no dudarían en entrar en guerra por ellas. Si bien estaban furiosos porque les hubieran quitado a sus Omegas, preferían seguir viviendo, pero el Alfa menor le advirtió a su hermano que no se confiara porque había visto la mirada de Austin, Troy, Robbie, Jarryd, Ryder, Luis y Abel en cuanto las Alfas se fueron y luego cuando la reunión con Alejandro terminó, el menor de los Mendes tenía la certeza de que ellos no se quedarían de brazos cruzados y harían algo para recuperar a las chicas que les "pertenecían". Bastian dijo que les informaría si llegaba a pasar alguna otra cosa en la Manada.

Actualmente eran las nueve en punto de la mañana de un lunes, ya hace horas que la Manada Jauregui había comenzado con su día, los puestos de los comerciantes estaban siendo visitados por los compradores al igual que las propias tiendas que habían, los agricultores habían ido al campo al alba, aquellos niños que estaban en edad estaban en sus clases en las instituciones que tenia la Manada, y aquellos que aún eran muy pequeños o no tenían clases si no hasta la tarde ese día, estaban pasando el día con sus familias o siendo cuidados por miembros de la Manada que estaban designados para ello. El día estaba soleado, un poco cálido pero no al extremo, todos estaban atendiendo sus obligaciones o simplemente pasando el rato, el ambiente en la Manada Jauregui era tan diferente al ambiente de los Cabello, muchísimo más diferente, todos convivían en armonía, eran respetuosos entre sí, se ayudaban sin problemas y todos se trataban como iguales unos a otros, no importaba en qué parte de la jerarquía estaban, no solamente los Omegas eran los que se encargaban principalmente en el cuidado de los más pequeños, no caminaban con la cabeza gacha ni eran cautelosos cuando algún Alfa se les acercaba o les hablaba, en realidad era todo lo opuesto.

Todo aquello lo habían estado observando Selena y las demás desde las ventanas de sus habitaciones o desde la habitación compartida, aun se les hacía muy raro y en cambio esperaban el momento en que toda esta fantasía se rompiera, aún se despertaban en las noches pensando en que solo estaban soñando y que aún seguían en su Manada junto a esos desgraciados y asquerosos hombres, pero cuando volteaban a ver sus mesitas de noche y veían los peluches que les habían regalado Demi y las demás aquel día en que habían despertado, les recordaba que realmente ya no estaban en aquel lugar que había sido su hogar desde que nacieron, que estaban lejos de sus abusadores y en cambio estaban en con Sofia en un mejor lugar. Aunque quisieran negarlo, los peluches que les habían regalado la hermana y amigas de la pareja de Sofia, habían sido de gran ayuda cuando tenían pesadillas, puesto que tenían impregnados los aromas de las Alfas junto con algunas feromonas tranquilizantes residuales, realmente eran reconfortantes para ellas aquellos lindos peluches, el gesto que tuvieron las Alfas con ellas con esos pequeños amigos las han ayudado a reafirmar las palabras de la menor de los Cabello sobre que ellas realmente eran buenas y confiables, y ciertamente así era, ellas en cada visita no era más que amables y respetuosas, siempre guardando distancia y no imponían su presencia, y cuando las veían ayudar a otros en la Manada, cuidando, jugando o enseñándoles cosas a los niños, veían que tenían un gran corazón y buen corazón, pero a pesar de todas esas cosas buenas, las antiguas miembros de la Manada Cabello seguían esperando lo peor, después de todo era lo que habían visto desde niñas y a lo que estaban acostumbradas, por lo que siempre estaban alertas y eran cautelosas cuando otros que no fueran de la misma jerarquía que ellas estaban cerca, especialmente si pertenecían a la jerarquía superior, como una vez les habían dicho "Espera lo mejor, prepárate para lo peor y acepta lo que venga", pero lastimosamente ellas siempre esperaban lo peor, se preparaban para ello y tenían que aceptarlo por mas que no quisieran.

En aquel momento como se había convertido en su rutina, Camila, Ally, Dinah, Selena, Lucy, Trina y Tori estaban en el balcón que había en la habitación compartida, apoyadas en la barandilla mientras miraban a las diversas personas pasar o trabajar tranquilamente, ya llevaban unos minutos allí disfrutando de los cálidos rayos del sol y hablando tranquilamente entre ellas. De un momento a otro vieron a Sofia salir de la mansión, cuando Camila fue a llamarla se detuvo en seco cuando vio a una gran Loba de pelaje castaño claro, todas se asustaron y temieron que le fuera a hacer daño a la menor, pero entonces escucharon a la Cabello menor hablar.

Sofia: "¿Encontraste a los pequeños rebeldes?" preguntó con tono suave pero serio a la vez, colocando sus manos en sus caderas mientras miraba a la Loba a los ojos, sin la más mínima gota de miedo en su rostro o postura, cosa que sorprendió mucho al grupo, porque ciertamente ellas estaban algo asustadas, pero parecía que conocía a aquella Loba así que se tranquilizaron un poco pero aun estaban alertas.

Fue entonces cuando vieron a la Loba asentir un poco, luego bajó un poco su gran cabeza dejando ver así a un cachorro de pelaje gris en su lomo, el pequeño caminó sobre la gran Loba, acercándose a una de sus orejas y mordiéndola sin más preámbulos, todas las chicas del grupo contuvieron sus respiraciones ante aquello, esperando que la Loba arremetiera contra el cachorro pero en cambio bajó un poco su cabeza hacia el suelo después de unos pocos minutos y se sacudió un poco, logrando así que el pequeño soltara su oreja y cayera con cuidado en el suelo justo frente a sus grandes patas, luego de entre estas apareció otro cachorro de pelaje castaño, ambos llegaban más o menos a la mitad del largo de las patas de la Loba, cuando el cachorro castaño se acercó al de pelaje gris, ambos se pusieron a "pelear" pero cuando la Loba soltó un pequeño pero autoritario gruñido se detuvieron y cuando notaron la presencia de Sofia delante de ellos en aquella postura, se sentaron rápidamente en el suelo, bajando sus cabezas y sus orejas.

Sofia: "Sé que tienen mucha energía extra a causa del cambio y tienen que gastarla, pero no pueden ir por ahí solos, saben que es peligroso, jovencitos. Han preocupado a sus padres y a la Manada, espero que sepan que están en serios problemas" habló con tono suave pero severo a la vez, golpeteando su pie derecho en el suelo mientras miraba a ambos cachorros, los cuales seguían con sus cabezas gachas y sus colas entre sus patas, luego ambos comenzaron a temblar ligeramente después de que la Loba los hiciera mirarla por unos segundos, y después donde antes habían dos cachorros de Lobo ahora había un niño y una niña de unos diez o doce años aproximadamente.

¿?, ¿?: "Lo sentimos mucho, Luna Sofia. No lo volveremos a hacer" dijeron ambos al unísono con sus vocecitas llenas de culpa, arrepentimiento y vergüenza, esta vez sí levantaron sus cabezas para mirar a Sofia, ambos haciendo pucheros y mirándola con aquellos ojitos arrepentidos, realmente era muy tierno pero Sofia no se inmutó y mantuvo su semblante serio, mirándolos con una de sus cejas alzadas.

Sofia: "No quiero volver a enterarme que se fueron solos al bosque, si sienten que no pueden con tanta energía hablen con alguien mayor ¿Entendido?" habló apacible pero aún con algo de severidad, señalando a cada niño y entrecerrando un poco sus ojos, recibiendo un pequeño asentimiento de parte de ambos, una vez conforme la Omega les ayudó a levantarse del suelo.

En cuanto se pusieron de pie la Loba los empujó ligeramente con su hocico, ellos se giraron hacia la gran bestia y bajaron sus cabezas con respeto mientras asentían cada pocos segundos, al parecer les estaba diciendo algo telepáticamente, unos pocos minutos después los niños dieron una pequeña reverencia ante Sofia y la Loba y se despidieron, encaminando se hacía una mujer Omega y un hombre Beta que estaban a unos cuantos metros lejos de donde estaban la Omega menor y la Loba, la pareja los abrazó con fuerza y la madre al parecer se puso a llorar un poco, luego los regañaron mientras se alejaban del lugar, pero no había nada de violencia en el regaño, ni verbal ni físico, solo los estaban riñendo. El grupo de las Omegas regresó sus miradas a dónde estaba Sofia junto a la Loba y vieron como la chica acariciaba la cabeza de la Loba por un rato, luego le dio un beso con cariño en la frente, segundos después la Loba comenzó a temblar un poco y luego regresó a su forma humana, revelando que era Taylor todo el tiempo, ahora todas entendieron por qué Sofia había estado tan tranquila cuando la Loba se le acercó, vieron como las menores de la familia Jauregui y la Cabello se besaban con ternura y amor, la primera colocó sus manos en la cintura de esta última, y la acercó con suavidad a ella, mientras que la Cabello rodeaba su cuello con sus brazos, se besaron un poco más y luego se separaron un poco, juntando sus frentes mientras sonreían tontamente aún con sus ojos cerrados.

El grupo se alejó del balcón y entraron nuevamente a la habitación compartida para darles privacidad a las menores, una vez estuvieron todas en la habitación se acomodaron en las camas de Tori, Camila, Selena y Ally luego de que las juntaran, se sentaron tranquilamente en las camas y se pusieron a hablar entre ellas en tono algo bajo como ya era costumbre para ellas, puesto que en la Manada Cabello no tenían mucha privacidad por lo que si querían hablar de algo que no querían que oídos externos escucharán debían hablar muy bajo o hacerlo en lenguaje de señas, porque si eran atrapadas hablando mal de "sus" Alfas (Lo cual era el mayor tema de conversación entre ellas, especialmente luego de que alguna o todas fueran abusadas, puesto que querían desahogarse un poco) eran castigadas, por lo que preferían hacer el menor ruido posible para que eso no pasara, estaban acostumbradas a que incluso por el mínimo error o la mínima cosa que no le gustara a los Alfas eran castigadas, es algo a lo que han estado acostumbras desde pequeñas, solo que cuando fueron compradas por Ryder, Austin, Abel, Troy, Robbie, Luis y Jarryd empeoró en gran medida, pero supieron cómo y qué hacer para evitar ser castigadas. Hasta ahora podían ver que las cosas en esta Manada eran muy distintas a su antigua Manada, pero el cambio de una a otra era muy reciente y después de todo era muy difícil desaprender todo lo que les habían inculcado desde el nacimiento, les tomaría tiempo pero todas esperaban y rezaban porque pudieran dejar todas esas cosas atrás y tomar por fin el control de sus vidas, hacer cosas que les gustaban a ellas y no a otros, tomar sus propias decisiones sin temer a que las castigaran por tan siquiera pensar por sí mismas, simplemente querían ser felices y como les había dicho Sofia "Si yo pude hacerlo, ustedes también podrán".

Trina: "Realmente se ve a kilómetros que Taylor y Sofia se aman y tienen una buena relación" dijo con tono suave y alegre, manteniendo un volumen bajo mientras miraba a sus mejores amigas y hermana con una pequeña sonrisa en sus labios, la cual fue devuelta por todas junto con un pequeño asentimiento. Habían tenido sus dudas con respecto a la relación de las dos menores de ambos grupos, pero con los días habían visto y aceptado que Taylor realmente amaba a Sofia.

Lucy: "¿Creen que alguna vez podamos tener algo así? ¿Alguien que nos ame en vez de lastimarnos?" preguntó con clara tristeza y dolor en su voz, apoyando su barbilla en su rodilla izquierda, mordiendo el interior de su mejilla cuando sus ojos se pusieron cristalinos por las lágrimas que intentaba no derramar.

Dinah: "Ya no estamos con ellos, y aquí no tienen ningún poder sobre nosotras, ni siquiera Alejandro" habló rápidamente, colocando una de sus manos en la espalda de la Vives, acariciándola con suavidad para consolarla, mirando a cada una de sus amigas mientras intentaba sonar convencida y tranquila, aunque ella misma tenía algunas dudas sobre que los Alfas se fueran a quedar de brazos cruzados.

Selena: "Pero ¿Por cuánto tiempo será así? Saben que ellos toman lo que quieren cuando, donde y como lo quieren" preguntó aquello con tono algo brusco pero en sus ojos se veía el temor de que en algún momento ellos vendrían por ellas y las harían regresar a la Manada Cabello, luego siguió hablando con tono derrotado y desanimado, soltando un suspiro de resignación mientras se abrazaba las rodillas con los brazos y luego apoyaba su cabeza en sus rodillas, estremeciéndose visiblemente después de haber dicho aquello.

Ally: "Se supone que las Alfas son mucho más poderosas que ellos. No creo que se atrevan a hacer algo sabiendo eso" dijo con su típico tono suave y tranquilizador, intentando ser positiva y hacer que sus mejores amigas lo fueran, para que todas mantuvieran la esperanza de que estando allí no serían lastimadas por los que fueron "sus" Alfas y que estarían a salvo. Tenían que confiar en las palabras de Sofia sobre las Alfas las protegerían de ellos y de quienes intentaran hacerles daño.

Camila: "¿Cuando algo los ha detenido de hacer lo que les apetezca?" preguntó con amargura, sus ojos llenos de lágrimas de dolor y rabia, su labio inferior temblando un poco mientras intentaba contener el llanto, levantándose de su cama con enojo y acercándose luego a una de las ventanas, apoyando sus manos en el alféizar y apretándolo con fuerza, recordando con amargura y dolor todas las veces que Austin la tomo por la fuerza donde y cuando quiso, importándole un comino si estaban a solas o no.

Camila sabía que Austin algo intentaría hacer para recuperarla y así como él, los demás también lo harían, pero quería mantener algo de esperanza de que las dejarían tranquilas, pero eso sería pedir mucho, por lo que ponía fe en que las Alfas las mantendrían a salvo, y que estarían seguras en la Manada Jauregui.

Tori: "Puede que no intenten algo tan pronto pero no significa que más adelante no lo vayan a hacer...Después de todo <Si no eres mía, no serás de nadie más>" dijo aquello primero con derrota, por más optimistas que intentaran y quisieran ser, debían ser realistas, ellas los conocían más que cualquier otra persona, sabían de lo que eran capaces por conseguir lo que querían, y si ya fue suyo mucho más. Hizo una pausa de unos pocos segundos y luego murmuró aquello último con una voz vacía, mirando a un punto fijo en la pared pero sin ver realmente, como si estuviera en un trance.

Había recitado aquellas palabras que Ryder le gruñía al odio durante cada violación o castigo para que nunca las olvidara y siempre las tuviera bien en claro, dichas como si fueran un mantra una y otra vez en cada doloroso y vulnerable momento en el que estaba a merced del chico. Palabras que sabía perfectamente que los otros Alfas también les habían dicho a sus mejores amigas, y la reacción de todas ante las palabras dichas fue instantánea, todas se estremecieron visiblemente y se encogieron en sus lugares, queriendo hacerse lo más pequeñas posible, a ese punto habían llegado a afectarles esas palabras, estaban fuertemente metidas en su psique. De repente la puerta de la habitación compartida se abrió, tomando al grupo de Omegas por sorpresa y asustándolas al instante, el primer instinto que tuvieron fue alejarse lo más posible de la puerta, queriendo poner la mayor distancia entre el o los intrusos y ellas, pero luego les llegó el aroma de Kara, Alex y Sofia, las cuales se habían quedado paradas en la puerta, mirando al grupo con preocupación por cómo habían reaccionado cuando abrieron la puerta, entonces las tres recién llegadas notaron que todas las demás chicas estaban soltando las feromonas asustadas, lo cual las preocupo aun mas, no sabían lo que había pasado para que estuvieran así, pero tenían que hacer algo para calmarlas porque parecía que iban a tener un ataque de pánico.

De forma lenta y cuidadosa Kara se acercó a Tori, Selena y Ally; Alex se acercó a Dinah, Trina y Lucy, mientras Sofia se acercaba a Camila, las hermanas Danvers comenzaron a soltar feromonas relajantes mientras tarareaban suavemente una canción de cuna, se sentaron en las camas y les hicieron señas a sus protegidas para que se acercaran a ellas, cosa que hicieron luego de aproximadamente un minuto, apoyaron sus cabezas en el regazo de las Danvers, las cuales acariciaron el cabello de cada una, mientras que Sofia colocaba sus manos en las mejillas de su hermana y le daba un beso en la frente con cariño, para después abrazarla con fuerza, luego de unos pocos minutos la llevo hacía las camas dónde estaban las demás, cuando estuvieron junto a las demás chicas, Kara acercó una de sus manos a la cabeza de la Cabello mayor y le acaricio el pelo de la misma manera que a las demás, luego le hizo señas para que también recostara su cabeza en su regazo y cuando lo hizo, la menor de las Danvers siguió tarareando suavemente, liberando más feromonas y cubriendo a las menores con su aroma; Alex hizo lo mismo con sus protegidas, diciéndole a Sofia por medio de su vínculo que estaba orgullosa de ella por haber ayudado a Camila.

Kara: "Chicas ¿Qué fue lo que pasó?" preguntó con tono suave y maternal, varios minutos después de que las chicas se recostaran en su regazo y en el de su hermana, después de que el llanto de todas cesara, sin dejar de acariciar el cabello o la mejilla de cada una, esperando pacientemente a que alguna respondiera su pregunta.

Lucy: "N-No...No queremos v-volver a la M-Manada Cabello" respondió con su voz temblorosa, llena de sentimientos de miedo, dolor y tristeza, estremeciéndose visiblemente mientras volvía a sollozar, enterrando su rostro en el muslo de Alex, la cual le acarició los hombros y parte de su espalda mientras tarareaba suavemente para calmarla.

Alex: "Eso no pasará, chicas. Ustedes están a salvo aquí, todos en la Manada las protegerán, especialmente Vero y las demás, al igual que nosotras" dijo rápidamente con tono seguro y suave, mirando a su hermana por unos segundos, la cual la miro con preocupación por la respuesta de Lucy, y luego asintiendo cuando ella hablo, completamente de acuerdo con ella.

El vínculo que tenían con las chicas más jóvenes era fuerte aunque solo llevaran unos pocos días de haberlas conocido, ellas serían capaces de cualquier cosa por ellas, no dudarían en matar por ellas al igual que sus Mates por sus propias protegidas, y sabían perfectamente que el grupo de las jóvenes Alfas llevarían el mismísimo infierno al mundo por sus Mates, sabían lo que podría pasar si alguien intenta llevarse a las Omegas menores, tal acción no sería fácil, tendrían que pasar por todo el territorio, los exploradores, rastreadores y cazadores, centinelas que estaban por todos lados, los guardias que vigilaban la entrada y los alrededores, sumándole a todos los habitantes de la Manada, los Betas de las chicas, Clara, Mike, Chris, Taylor, Sofia, ellas mismas junto con Lena y Maggie, y quedan las Alfas, por lo que apenas y pusieran un pie en el territorio ya estarían acabados.

Por todo eso Kara y Alex no estaban preocupadas porque intentaran secuestrar a las chicas para regresarlas a la Manda Cabello, sabían y no dudaban de que estarían más que protegidas allí, ellas y todos lo sabían, pero tendrían que asegurarlo y demostrárselo a las Omegas menores, sería otro tema que tendrían que abarcar pero lo harían, tanto ellas como todos los demás, solo querían que las chicas se sintieran cómodas en la Manada, tuvieran una mejor vida de la que tuvieron en la Manada Cabello, que aprendieran sobre sus lados Lobunos, que vieran que los Omegas eran igual de importantes que las otras dos jerarquías, y que con el tiempo pudieran saber del vínculo que tenían con las Alfas más jóvenes, para que también tuvieran eso, que sintieran lo que ellas sentían por Maggie y Lena, al igual que Sofia por Taylor, después de todo el vínculo de Alma Gemela no tenía comparación con ninguna otra cosa, era lo más fuerte que existía en su mundo, y las chicas merecían ser tratadas como lo más bello y preciado del mundo, en vez de seguir siendo tratadas como basura.

Sofia: "Chicas, confíen en nosotras, en las Alfas y en la Manada. Les juro que no permitiremos que las lleven de regreso y si por alguna razón llega a pasar, el infierno caerá sobre Alejandro y cada uno de los que lo apoyen" habló con seriedad, sentándose en la cama mientras hablaba, frunciendo su ceño un poco al pensar en que su hermana y amigas regresaran a esa porquería de Manada, si Taylor tan solo unos segundos después de conocerla mató a aquel hombre que la había comprado, Lauren y las demás harían pasar a Austin y los demás Alfas por el infierno mismo.

Si no lo hicieron cuando fueron a la Manada Cabello fue principalmente porque su hermana y amigas estaban allí, y porque tenían que apegarse al plan, pero si no hubiera sido así, la Manada de su donante de esperma habría caído ese mismo día, ya no quedaría rastro de esa Mamada más que los niños, Omegas y aquellos que no eran como Alejandro y los que lo apoyaban, ella sabía que quizás no habían muchos pero los habían, pero tenían que seguir los ideales que les imponían a menos que quisieran ser asesinados, era cuestión de tiempo para que llevaran a cabo el plan de exterminar a todos aquellos que tuvieran los ideales de Alejandro y hubiesen lastimado a algún Omega, solo estaban esperando el momento adecuado, pero cuando llegara la sangre correría por las calles y los ríos.