Geno se encontraba en el hospital, su hijo se estaba desarrollando muy bien, pero aun dependía de la incubadora, hablo con el personal médico durante un rato, también debía pasar a su chequeo médico, todo estaba bien, su único malestar era emocional, aun no podía creer lo que había pasado con su hermano e Ink, viendo hacia atrás puede percatarse que Error siempre dio señales de sentirse muy incómodo con Ink, pero nunca imaginó que esto se debía a que el mayor abusara de él, si tan solo se hubiera dado cuenta antes, si tan solo no hubiera sido tan ciego en ese entonces, ahora debía pensar seriamente lo que hablaría con Error.

Mientras caminaba por los pasillos del hospital, pudo ver una silueta muy familiar pasar a gran velocidad, rápidamente lo siguió, sabía muy bien a donde se dirigía y se sentía avergonzado por no haber ido antes. Finalmente llego a un área del hospital que hacía que su cuerpo se retorciera, el área de Oncología.

Geno: ¡Blue!

Blueberry: ¿Eh? Oh… hola…

Geno: ¿Vienes a ver a Bluescreen?

Blueberry: Si… El médico me llamo esta mañana para decirme que no está muy bien. Discúlpame pero no tengo tiempo para charlar, lo siento, tengo que irme.

Geno: D-de acuerdo… yo solo...

Dust: Ni te molestes, ha estado así todo la mañana.

Geno: ¡Wow! Perdón… no te vi.

Dust: Estuve justo detrás de ti todo el tiempo.

Geno: Ya veo… ¿No iras con él?

Dust: Solo le estorbaría, le he dicho que yo me encargare y que no haga demasiado jaleo por su embarazo, pero me enojo conmigo y me mando al diablo.

Geno: ¿Mi sobrino está muy mal?

Dust: Tuvo una recaída ayer.

Geno: ¡No tenía ni idea! ¿Error lo sabe?

Dust: No los sé… Supongo que no.

Geno: Lo voy a llamar para que venga a ver a su hijo.

Dust: No es mala idea. Hay cosas que me gustaría discutir con él.

Geno: ¿Es algo malo?

Dust: Tu solo llámalo.

Geno: . . .

Dust veía como Geno se alejaba un poco para hablar por teléfono, lo más seguro era que llamara a Reaper para que se ocupara de todo, pero Dust sabía muy bien que su pareja quería precisamente evitar eso, ya desde hace un tiempo habían hablado y Dust había decidido adoptar al hijo de su esposo y para ello debía primero hacer que Error renunciara a sus derechos sobre su hijo. Dust sabía que Error prefería mantenerse totalmente aislado del pequeño, pero esto no porque no lo quisiera, todo lo contrario, era para no dañarlo, prefiriendo siempre observarlo a la distancia, pero siempre atento. En una ocasión Dust le menciono la posibilidad de adoptar a Bluescreen, a lo que Error respondió de forma cortante con un rotundo “No”.

La verdad, Dust quería ir a otro hospital, había escuchado por varios conocidos de un tratamiento alternativo que prometía ser la cura definitiva, habia demostrado su eficacia en canceres menos agresivos y si bien aún nadie manifestaba curarse por completo, al menos aliviaba el dolor e impedía el avance de la enfermedad. Esto era sin ninguna mala intención, sinceramente Dust creía que eso podría ayudar a su hijastro, ya que encontrar un donante apto se había vuelto como buscar una aguja en un pajar, los monstruos esqueleto no eran tan abundantes y el cuerpo del pequeño rechazaría a cualquier otro donante que no sea de su misma especie.

Blueberry seguía con los médicos que trataban a su hijo, el pequeño ya se encontraba un poco mejor, pero una persistente fiebre amenazaba con complicar aún más su delicada situación, Blue se sentía tan impotente al ver a su hijo en esa situación, de saber que esto pasaría, hubiera preferido no tenerlo, a veces se sentía tan avergonzado de sí mismo por ese pensamiento, pero el niño sufría demasiado, a su corta edad, no conocía lo que era un día sin dolor.

Geno se apresuró a llamar a Reaper, la verdad estaba muy preocupado por la salud de su sobrino, el pequeño significaba mucho para él, no solo por ser un miembro de su familia, sino también porque sabía perfectamente lo que era luchar contra esa enfermedad.

Raper: Hola amor ¿Todo bien?

Geno: Reaper, tienes que venir al hospital ya mismo.

Reaper: Espera ¿Paso algo con Goth?

Geno: No, nuestro hijo está bien. Se trata de Bluescreen.

Reaper. ¿Qué? Nadia me informo de nada.

Geno: Ven por favor y avísale a Error.

Reaper: Llegaré en unos minutos.

Geno: Rápido.

Reaper no tardo nada en salir de su estudio e ir directamente al cuarto de Error, el cual al escuchar que algo le sucedia a su hijo se apresuró a salir corriendo de la casa, Reaper tuvo que alcanzarlo en el auto para que llegué más rápido. Mientras el chofer conducía rozando el límite de velocidad, Reaper llamaba a sus hombres encargados de mantenerlo informado sobre la salud del pequeño, en verdad estaba muy molesto por no haber sido informado antes.

Reaper: ¡¿Qué diablos les pasa?! ¡¿Por qué no me informaron?!

Guardog: Lo sentimos señor. Es solo que no quisimos importunarlo debido-

Reaper: ¡Esa no es excusa! *Finalizando la llamada* ¡Malditos incompetentes! *Viendo hacía Error*. . . *Colocando su mano sobre el hombro de Error* Tranquilo, de seguro estará bien.

Error se encontraba con la cabeza agachada, su cuerpo no dejaba de temblar, desde que escucho que su hijo se encontraba mal no había dejado de tener un mal presentimiento, había estado tan concentrado en el asunto de Ink y Reaper que había ingnorado por completo a su pequeño.

Después de un viaje perturbadoramente largo, llegaron al hospital, rápidamente se reunieron con Geno, Error quizo ir con Blue, pero Dust se acercó a él primero para hablar, no era idiota, sabía muy bien que no era momento para hablar sobre la posibilidad de adoptar al pequeño, pero creía que estaban exagerando demasiado, Bluescreen solo tenía fiebre, su estado ya era un poco mejor, así que quería hablarle del tratamiento alternativo, pero antes de que siquiera pudiera decir algo, Blue salió de la zona donde se encontraba su hijo. Todos lo miraron desconcertados, al parecer no habían buenas noticias.

Ante la mirada de Dust, Error corrió hacía Blue y lo abrazo fuertemente, el contrario entre lágrimas correspondió inmediatamente, agarrándose con fuerza a la chaqueta del que antes fue su pareja. Dust no podía negar que eso le molestaba, pero entendía que ahora más que nunca se necesitaban mutuamente.

Error y Blue ingresaron al área donde estaba su hijo, cada uno se acomodó a cada lado del pequeño y tomaron sus manitas con mucha delicadeza, era la primera vez en mucho tiempo que Error se atrevía a tocar a su pequeño.

Fue ahí, rodeado de sus padres y sintiendo todo su amor, que ese pequeño niño cerró sus ojos y por primera vez dejo de sentir dolor.

El dolor es la prueba de que estamos vivos.