Primer trimestre: sorpresa
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Valkyon.
La primera ecografía de su bebé, habían seguido las instrucciones que la enfermera les había dicho cuando llenaron la hoja con sus datos, mientras su mirada dorada se pasaba por toda la pequeña sala de espera, el decorado, las mujeres con barrigas de diferentes tamaños, le hacia sonreír de manera inconsciente de imaginar que dentro de un par de meses Elanor estaría en la misma situación, ambos ya habían acordado crear un pequeño álbum de fotos para su bebé y entre ellas poner una foto de como el pequeño crecía mes a mes.
Elanor por su parte suspiraba cada tanto mientras movía las piernas inquietas, no por los nervios, sino por las ganas de orinar que tenía y no podía usar el sanitario hasta después del ultrasonido.
- ¿Nerviosa?
-Un poco, pero más que otra cosa quiero usar el baño, tu ¿Estas nervioso?
-Tal vez, solo un poco, bueno tenemos que plantearnos posibilidades.
-Señores Charbonneau.- desde la puerta del consultorio salió una enfermera para indicar que su turno había llegado.
Al entrar y recibir pequeñas instrucciones por parte de la doctora, Elanor se recostó en la camilla descubriendo su vientre, el gel frio no hizo más que incrementar sus ganas de usar el sanitario.
-Veamos. - dijo la doctora. - aquí están, ven esas pequeñas manchas blancas.
-Son dos manchitas. - dijo Erika con una gran sonrisa mirando por pausas iguales el monitor y a su esposo.
-Felicidades, serán padres de gemelos.
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Ezarel.
Conocían el procedimiento, no por nada ambos trabajaban en un hospital, sacar cita y seguir todos los protocolos como gente normal, no era un problema, el problema era... que Dalia no tenía ganas siquiera de usar el sanitario.
-Recomiendo que siga con su rutina hasta que le den ganas. - Ewelein paso una toallita de papel para limpiar el gel del vientre de Dalia. - ¿Segura tomaste la cantidad recomendada de agua?
-Tenia pensarlo hacerlo, pero como no quería tener a Ezarel en suspenso tome mucho jugo de naranja.
-Bueno, tal vez ya no falte mucho, camina un poco y regresa cuando ya no aguantes.
Media hora más tarde y después de bajar y subir y bajar escaleras mientras hacia sus labores, la hora por fin había llegado, para suerte de Dalia su esposo no estaba ocupado y podía estar a su lado para el momento. Ewelein aplico el gel nuevamente sobre el vientre de Dalia, aunque ninguno de los dos podía ver la imagen de la pantalla claramente.
-Vaya esto es interesante ¿Listos para la sorpresa? – ambos se miraron sin comprender, aunque la sonrisa de Ewelein le hizo sentir un ligero escalofrió.
-Ay dios...- susurro Dalia mientras observaba mejor la pantalla. - ay dios, ay dios ay dios...
- Eso...eso...eso es...¡Es verdad¡
-Sip, serán gemelos.
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Nevra.
Roxan no podía evitar estar inquieta en su lugar, sabía que, si se levantaba y daba un par de pasos, terminaría por ocurrir un accidente vergonzoso para ella y estar sentada era aún peor, soltando un pequeño chillido se hizo a un lado un poco para dejar que su frente quedara pegada en el hombro de su esposo.
-Todavía faltan cuatro personas antes que nosotros. - dijo Nevra fijándose en las cuatro mujeres sentadas aun lado de su esposa.
-Ya no aguanto. - murmuro con cierto dolor en la voz.
-Te dije que poner los audios de cascadas en el camino no sería buena idea.
-Pero no fue mi culpa salir tarde, quiero ir al baño, por dios que ya se apuren. – Nevra soltó un suspiro mientras tomaba una de las revistas de la pequeña mesa.
- ¿De verdad la pipi del recién nacido ayuda para el paño? – En respuesta Roxan simplemente le mordió el brazo. - ¡OYE!
-Cállate eso no me está ayudando. - respondió con enfado.
Por desgracia para Roxan los siguientes minutos fueron una tortura, pues como también había algunos bebes en el lugar a alguien se le ocurrió la brillante idea de reproducir "El chorrito" para Nevra los siguientes tres minutos tuvo que desviar la mirada para no tener que reírse de Roxan y su sufrimiento por no poder usar el sanitario... casi una hora después solo estaba a un par de minutos de terminar su calvario.
-Jamás había tenía una vista tan clara. - dijo el doctor. - ven esta pequeña bolita blanca, ese es su bebé, será solo uno por lo que se puede apreciar.
-Creo que fue todo, ahora corre antes de que tengas un accidente. - Roxan lo fulmino con la mirada.
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Leiftan.
Las instrucciones que les dieron para antes del ultrasonido eran simples, Erika tenía que beber un poco más de un litro de agua, esperas hasta que las ganas de usar el sanitario fueran demasiadas que no pudiera aguantar y pasar al consultorio.
Habían consultado por varios sitios en internet las formas más rápidas para adelantar la sensación de querer usar el baño, desde diuréticos naturales, hasta cosas un poco más íntimas que terminarían en algo completamente diferente. Por suerte el jugo de naranja con zanahoria no había tardado en hacer efecto rápido.
-Esta pequeña manchita en forma de frijol es el bebé. - informo la doctora, Leiftan apretó la mano la de su esposa ligeramente mientras recibía la impresión de la primera foto del bebé.
-Es un frijolito, que bonito. - dijo Erika mirando la foto nuevamente.
-En unas semanas tendrá forma de camarón. - bromeo Leiftan.
-Y cuando menos lo pensemos tendremos un bebé en los brazos.
Leiftan sonrió ampliamente antes de ayudar a su esposa a ponerse de pie, bueno lo siguiente fue una recomendación del medicó en cuanto a sus cuidados en el primer trimestre y darles la opción para dentro de unos meses tomar los cursos prenatales.
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Lance.
Miraba cada tanto la hora en su reloj, hecho la cabeza hacia atrás dándose pequeños golpes contra la pared blanca con franjas de colores, bien pudo contar que en las últimas tres horas quince bebés habían entrado y salido de pediatría. Habían llegado desde las nueve de la mañana para su cita y ya era casi medio día; estaba seguro de que si a la encargada de recepción se le ocurría poner por décimo novena vez "El patito juan" o "El pollito pio" para entrenar a los infantes ocurrirían dos cosas, o se lanzaba por una ventana o terminaría con un caso extremo de estrés. Sabía que si no se iba de ese lugar era porque no quería perderse la primera vista de su hijo.
Damaris por su parte se entretenía totalmente tranquila ojeando las revistas de la mesita, caminando por ratos de un lado a otro en la pequeña sala de espera o reproduciendo audios en su móvil con el sonido de la lluvia o cascadas que le ayudaran a aumentar su necesidad por ir al sanitario. Aunque descartó por completo los audios que en lugar de ayudar comenzaban a estresarla.
-¿Todavía no?- pregunto, Damaris cerro la revista de moda para bebes de hace cuatro años para negar lentamente.
-Toma más agua. - sugirió, Damaris negó - ¿Por qué?
-Dijeron que solo un litro.
-Ya tenemos tres horas aquí mujer.
-Discúlpame por ser rara, seguiremos aquí hasta que me den ganas.
-Ya me aprendí la letra de patito juan, te voy a torturar.
-Lo bueno es que dormirás en la bañera con Skala.
Casi cuatro horas después por fin la tortura de Lance estaba llegando a su fin, Damaris estaba recostada en la camilla con el medico pasando el aparato por su vientre y mirando la pantalla para enfocar la imagen, él solo veía manchas negras y blancas, pero una destacaba más en aquella vista.
-Felicidades, este es su bebé.
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Mathieu.
La noticia del embarazo la había tomado bien, y el acompañar a Clio a su primer ultrasonido lo también, pero, realmente no estaba preparado para la noticia que les habían dado; tras llegar a casa y que Clio se sentara en el sofá mientras miraba la foto del ultrasonido seguía sin creerlo, hicieron más de dos veces el chequeo incluso el doctor los mando a otro consultorio solo para despejar las dudas de Mathieu sobre que el aparato se había descompuesto y mostraba el resultado de otra persona.
El medico dijo que era normal que padres primerizos reaccionaran de esa manera, aunque para Clio era una mezcla de emoción, asombro y diversión, lo último era más por Mathieu que por otra cosa.
-¡Ya lo tengo!- exclamo de pronto haciendo que Clio centrara la atención en él.- mañana mismo vamos a otro hospital.
-El resultado será el mismo.
-No, no puede ser el mismo, tu familia viene de hijos únicos, lo mismo conmigo, ese hospital tiene sus máquinas estropeadas.
-Es eso o tu "equipo" es de campeonato. - respondió entre risas, aunque fue un comentario que pudo hacerle inflar el pecho con orgullo, no fue así.
-De verdad Clio , aquí tenemos espacio para uno, o máximo dos, pero ¡Tres! ¿Qué pasa si alguno es una niña? Tendremos que tener otra habitación.
-O pueden ser tres niños o tres niñas, Mathieu, ya veremos cómo solucionar esto, alégrate ya no tendremos que preocuparnos por si el bebé querrá después un hermanito, vienen tres de un solo golpe, y si te preocupa la habitación, podemos usar el estudio, al final solo lo tenemos de bodega.
-¿Cómo fue que terminamos con trillizos?
-Pues...pudo ser por el ambiente en la fiesta de Nevra, creo que por esas fechas quedamos.
-¡Exijo prueba de paternidad!
Unos minutos después...
-¡Clio ! ¡Clio, ábreme! Era broma, amor, lo siento...¡Ya está lloviendo!
Notas finales:
Segundo capitulo y ahora sabemos la cantidad de peques que tendrá cada familia, la idea de los ultrasonidos y cosas que pueden pasar durante la espera fueron varias ideas que me dieron entre amigas y familiares. Y por alguna rara razón no puedo tomarme enserio a Mathieu con Clio xD y sobre todo ¿Qué tipo de fiesta habrá realizado Nevra? Me estoy plantando hacer algo para cada una de las rutas (solo para meter intriga, no será la primera vez que se nombre sobre esa fiesta)
Espero que les gustara este capítulo.
Dudas, preguntas, aclaraciones lo que sea todo es bienvenido.
Hasta la próxima actualización.
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