Hyunjin quería ponerle un punto final a todo, porque ya no soportaba estar tanto tiempo llorando, sus ojos dolían y estaban hinchados.

Hoy era viernes, el supuesto día de películas junto a su novio y ahora que lo pensaba, era la única vez que Jeongin venía a verlo para estar con él. La sonrisa de Hyunjin apareció casi al instante en su rostro, quizás sí preparaba muchas cosas cursis, así logre que Innie deje de pensar en Chan.

Mandó un lindo mensaje a Jeongin diciendo: ¡Innie! Hoy es noche de películas, te espero a las nueve de la tarde en mi casa, ¡Te amo!”

Recibió sólo un visto como respuesta, pero eso bastó para Hyunjin, y cómo un rayo empezó a preparar todo.

Se dio un baño y se vistió casual, pero lindo, investigó sobre películas que sabía que a Jeongin le podían encantar, escogió algunas y en casi un chasquido ya las tenía en su mano en formato dvd.

Limpió su apartamento y compró palomitas que se hicieran en microondas. Eran las ocho, por lo cual decidió descansar un poco y se recostó en el sofá, esperando que aquella noche fuera fantástica.

¡Beep, beep!

El sonido del tiembre lo hizo saltar y corrió rápidamente hacia el baño para peinar su cabello, ya que parecía un león.

El timbre sonaba y sonaba, por lo cual se apresuró para ir hacia la puerta. Abrió la misma con una hermosa sonrisa que mostraba sus rosadas encías, mientras que decía felizmente “¡Innie!”

Estaba por abrazar a su novio, pero de la nada se detuvo al ver bien detrás de su novio. Los lindos ojos de Hyunjin se llenaron de lágrimas.

Se suponía que aquel día era para estar en parejas y solos...
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