Capítulo 13✔️
Sus labios se sentían suaves y con un toque a menta, así que supuse que se cepillo después de bañarse. Tardó unos segundos en entender que estaba pasando, pero cuando lo aceptó, él disfrutó y se apoderó de la situación. Demostrándome cuando tiempo había estado esperando ésta acción.
Duramos unos minutos besándonos, pero el oxígeno y la realidad nos llamaban. Nos separamos unos centímetros y cuando vi sus ojos supe mi error. En sus ojos relucía la esperanza.
Esperanza que yo no le podía dar.
— Jace, yo lo siento. No debí— digo a la par que me alejo. Pero unos brazos me retienen y me abrazan desde la espalda.
— Amira, princesa mía, gobernante de mi vida, sé tus sentimientos hacia mí y hacia él. Sólo te pido una oportunidad para enamorarte, para hacerte olvidar a ese sujeto que sólo te traerá sufrimiento— me pide susurrando cada palabra en mi oído con el mayor de los cariños.
— Él... Yo... Entiéndeme estoy enamorada de él. Lo que hice no debí— digo con los ojos llorosos— Debo alejarme de ti. Sólo te hago daño...
— No digas eso— me interrumpe— Lo que haga o deje de hacer es decisión mía. Amira, quiero construir un futuro contigo. Te conozco desde niños y desde ese instante supe que quería estar en tu vida. Pero tristemente tengo que aceptar que tú no quieres lo mismo que yo, y que obligarte hará exactamente lo que no quiero.
— ¿Y eso sería?— pregunto más calmada.
— Arrojarte a los brazos de ese idiota. Y eso es algo que no lo permitiré. Sí el destino te quiere con él, lo aceptaré. Pero no daré motivos para su unión. Ésa será mi manera de demostrarte mi amor por ti.
— Yo lo siento tanto— digo al voltearme y hundirme en un profundo y cálido abrazo.
Ya en mi cuarto pude pensar con mayor claridad. Jace, tenía muchas pero muchas cosas a su favor, es más, yo diría que sólo hay una cosa en su contra. Y es mi enamoramiento con Liam.
Casi nada, amiga
En cambio Liam, tenía muchas pero muchas cosas negativas, sólo había una parte buena de él y era que no había mencionado a nadie mi enfermedad.
Ni siquiera a su casi hermano
¿Pero qué significará?
¿Seré sólo una distracción hasta que venga la siguiente chica de turno?
O
¿Podrá haber algo más?
———
La mañana del martes fue más tranquila. Mis padres nos llevaron al instituto, no sin antes sermonear por decimoquinta vez a Jace sobre el exceso de alcohol y a mí por permitir que pasara eso.
— Baba, Um, prometo que eso no volverá a pasar— digo al bajar de la camioneta de papá.
— Espera— dice mi mamá— Recuerda que tienes chequeo médico después de clases.
— Sí Um. Ya sabía— me despido y arrastro a Jace al instituto.
Si había algo que odiaba eran esos chequeos en donde me repetían la larga lista de NO que debía tener para mantenerme viva. Ya en mi casillero, reviso si mi atuendo sigue viéndose bien. Una braga de jeans negro, con una camisa blanca con la portada de mi libro favorito de Wattpad: Ángel De La Muerte; llevaba unos tenis blancos, además de una coleta alta. Al ver mi imagen en el espejo que guardo, lo siento llegar.
Liam tenía la facilidad de hacerse notar cuándo aparecía. Todos se quedaban callados, interrumpían sus charlas y caminatas sólo para dejar pasar al chico malo del instituto. Las chicas lo miraban con adoración y los chicos con admiración. Aunque habían unos que lo veía con odio.
Por el espejo pude observar su aspecto sin ser tan obvia. Una camisa oscura ajustada a su figura, con la imagen de un ángel caído.
Muy apropiado
Además de un jeans oscuro que se ajustaba a su cuerpo dejando ver su fisionomía por completo y unos botines negros. En fin, el era como la oscuridad y yo como un eclipse.
— Buenos días, Acosadora— dice coqueto con ese aire de arrogancia que enloquece.
— Liam. ¿Qué tal estás?— pregunto casual.
¿En serio le respondiste así?
Qué patética
— Vaya, ya te acostumbraste a mi presencia. Creo que debería hacer algo para cambiarlo.
No desaparezcas
No desaparezcas
No desaparezcas
— Quizás si me acerco así, podré deslumbrarte como antes— dice mientras me acorrala en mi casillero delante de todo el instituto— O quizás... Si te hago ésto— dice mientras sujeta mi mentón y mira con decisión mis labios.
Decir que mi corazón estaba a punto de sufrir un colapso, sería un eufemismo. La emoción que sentía se podía palpar. Esperé su beso, y no pude evitar pensar en cómo compararlo con el beso de Jace.
Pero el beso nunca llegó. Pues Leo y Jace, separaron de golpe a mi víctima, interrumpiendo un momento tan mágico y peligroso para mí.
— Ey niño lindo, con ella no jugarás— dice muy serio Leo, nunca lo había visto o escuchado así— Mejor aléjate de ella.
— Nadie te quiere aquí— le secunda Jace, mientras se posiciona frente a mí.
Y por millonésima vez mis amigos intervienen en mi vida, como si fuera la suya.
— Chicos están haciendo el ridículo— les digo lo más seria posible— Los tres— aclaro para evitar preferencias— No sé ustedes que planean hacer, pero yo iré a clases.
Me dispongo a recoger mis libros cuando Liam se sacude a Leo y se adelanta a Jace, me tiende un papel en la mano y se despide riendo cínico.
— ¿Qué es eso Amira?— pregunta Will preocupado, y ni idea de cuando llegó.
— No sé y no me importa— digo lanzándolo en el casillero— Leo, ya vamos tarde.
Las primeras clases fueron realmente tediosas, no sé de qué me sirve saber cuándo fue la Revolución Francesa, si ni siquiera sé si llegaré a fin de año.
Antes de dirigirnos al comedor me separo de mis amigos y me voy a mi casillero a dejar mis cosas y darme un retoque sencillo. Al abrirlo veo al fondo la nota de papel arrugada que me dio Liam al iniciar el día. Me sorprendió verla pues me había olvidado de ella, así que sin esperar más la abrí para ver qué decía. Y lo escrito allí hizo que mi corazón latiera más rápido de lo sano.
"Nos vemos a la salida, te tengo una sorpresa. Y no acepto un no por respuesta. Te espero al fondo del estacionamiento.
Atte: Tu víctima XO"
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top