[«Los hilos representan el paso del tiempo mismo. Se acomodan y toman forma, se enredan y se tuercen; a veces se enredan, se rompen y se vuelven a conectar, eso es una unión, eso es el tiempo.»

—Your name]

Él no quería que terminara su día en la escuela, pero su jornada escolar llegó a su fin, realmente no quería despedirse de Jimin, con quien había compartido roces "accidentales" de sus manos y miradas discretas durante todo el día.

Tal vez Yoongi esperaba un poquito más después de aquella salida al parque, pero no podía dar algo por hecho cuando ninguno había dicho nada, era obvio que ambos esperaban más del otro y es que tanto Jimin como Yoongi eran un tanto tímidos, pero ¿a dónde los llevaría su "pena"?

En cuanto llegó a su casa su madre lo recibió.

—Que bueno que llegas Yoon, ya casi está la comida — Su madre le sonrió y notó al instante la expresión en el rostro de su hijo. —¿Pasa algo amor?

Él no se dio cuenta de que había pasado todo el camino pensando en el asunto con Jimin, estaba tan inmerso en sus pensamientos que no sabía que responderle a su madre.

—Estoy bien, solo algo cansado. — Sonrió. —Iré a mi habitación.

Odiaba mentir y odiaba no tener el valor suficiente para decirle a su madre qué era lo que en realidad estaba pensando. Tenía que arreglarlo, si de verdad quería tener una relación con su donsaeng tenía que hacerlo, poner en claro su situación, no esconder nada a nadie.

Una vez en ella, se acostó, tenía que pensar en muchas cosas, desde cómo pedirle a Jimin ser su novio hasta cómo decirle a sus padres acerca de su gusto por Park.

Tenía miedo, miedo a que sus padres no lo aceptasen y lo terminarán rechazando o incluso odiándolo por el simple hecho de que le gustaban los chicos, no sabía cómo fue en el pasado, pero no quería tener el odio de ninguno de sus familiares, sabía que Jin le había dicho tiempo atrás que ellos nunca los odiarían, pero ¿qué tan cierto era eso? ¿qué tan seguro podía estar de ello? No había tenido una conversación con sus padres acerca de ese tema, no sabía su postura acerca de ello así que, ¿cómo saberlo?

⏳

La noche en la casa Min llegó, Yoongi había pasado la mayoría de su tarde realizando tareas de diversas materias, pero eso no era su mayor problema, en sí la escuela no era representaba un problema y ni él sabía por qué. A veces deseaba ser un chico normal, tener preocupaciones que alguien de su edad tenía (novias, fiestas, amigos, etc) pero no, ahí se encontraba él, debatiendo mentalmente acerca del tema de la homosexualidad, acerca de su pasado y de su accidente, estaba más que claro que él no era un chico normal.

—Yoon, la cena está servida. — Jin fue hasta la habitación de su hermano para avisar, pero lo notó un tanto agobiado. —¿Pasa algo?

—Muchas cosas Jin — Al instante el mayor presupuso que tenía alguna relación con Park Jimin.

—¿Pasó algo con Jimin ah? — Preguntó con todo el tacto posible.

El menor negó con la cabeza, en sí no tenía una relación directa con el pelirrosa.

—Yo quiero que sea mi novio. — Admitió con un ligero tono carmín en sus mejillas.

—Pídeselo, no creo que se vaya a negar. — El mayor sonrió, pero su hermano seguía inmutable.

—Quiero decirle a mamá y papá de esto, creo que si quiero algo con Jimin no debo ocultarlo de nadie. — Le miró.

Jin sintió una punzada en su pecho, en parte había felicidad porque su hermano estaba siendo valiente, pero había mucha tristeza por ese mismo, no podía creer que mientras su hermano estaba dispuesto a mostrarse tal cual era frente a sus padres él siguiera de cobarde.

—Yoon — Fue hasta su cama y se sentó frente a él. —Yo sé lo que sientes por Jimin, pero ¿no crees que aún es algo prematuro?

Su hermano negó con la cabeza.

—Yo quiero a Jimin, de verdad me gusta, no pienso mentirle a él ni a nuestros padres. — Su tono era seguro y destilaba honestidad pura, Jin sabía que iba en serio.

—Si es así, entonces te apoyo. — Seokjin tomó la mano de su mejor y la apretó contra se corazón. —Nunca te voy a dejar solo, recuérdalo ¿sí?

Yoongi asintió, sabía que podía contar con su hermano para lo que fuera.

Ambos bajaron hasta el comedor de su casa, su padre estaba sentado y su madre sirviendo el resto de la cena, ambos tomaron asiento y se dispusieron a comenzar su merienda.

La plática entre los cuatro era muy amena, hablaban acerca de la escuela, sobre amigos y tal vez hasta próximas salidas por parte de sus padres, pues cada diciembre era su aniversario de matrimonio, por lo que un viaje se avecinaba. Pero una vez acabando de cenar, Yoongi sintió nervios, era su momento no podía desaprovecharlo, apretó la mano de Jin dedicándole una mirada de pánico.

—H–Hay algo que quiero hablar con ustedes. — Dijo Yoongi, en tono bajo y tembloroso.

Los padres de ambos lo voltearon a ver, esperando a que continuara.

—¿Sucede algo malo Yoon? — Cuando su madre miró el agarre de las manos de sus hijos supuso que no podía ser algo bueno.

—A Jin y a mí... — La respiración del menor de los Min se volvió pesada, tenía mucho miedo del rechazo de sus padres, él los amaba y le dolería en lo más profundo del alma si estos le llegaban a odiar. —Yo... — Una inseguridad lo invadió, Yoongi se volvió a su hermano, él le asintió indicando que prosiguiera, apretó más su mano en señal de que estaba con él. —Me gustan los hombres.

Wonho estaba sorprendido pues nunca esperó eso, pero sabía muy en el interior que eso realmente no significaba un problema, lo había entendido después del accidente de Yoongi.

—A mí también me gustan — Confesó Jin. —De hecho, Nam y yo tenemos una relación desde hace bastante tiempo.

Tanto para Jin como para Yoongi fue como quitarse un peso de encima, eran sus padres después de todo, no querían mentiras entre ellos.

—¿Y? — Dijo Wonho —¿Eso es un problema? — Los hermanos se miraron completamente sorprendidos. —Yo los amo igual, independientemente de sus preferencias, lo único que quiero es que estén bien. — Les sonrió. —Son mis hijos y los voy a amar tal cual son.

La verdad era que los señores Min se sentían un tanto responsables por el accidente de su hijo menor, anteriormente no eran homofóbicos o algo parecido, pero no lo veían muy bien, cuando pasó lo de Yoongi todo eso dejó de importar, el constante temor de perderlo hizo que se volvieran más compresivos y sus tabús se fueran, amaban a sus hijos y solo querían su felicidad y bienestar.

Cuando el padre de ambos dijo eso, Jin y Yoongi pudieron jurar que sintieron un peso menos sobre sus hombros, ahora solo faltaba su madre.

—Antes que nada, quiero que sepan que los amo — Comenzó mirando a ambos con dulzura. —Si les gustan o no los chicos eso es algo de ustedes solamente, si es esa la manera en la que son está bien por mí. — Les sonrió. —Aunque estoy preocupada por ustedes.

Yoongi frunció el ceño, ¿preocupada por qué?

—¿Por qué mamá? — Seokjin le dirigió la mirada.

—No toda la gente es tan comprensiva como nosotros, no todos entienden que el amor es algo normal, y me preocupa que alguien pueda lastimarlos. — Tomó a sus hijos en las manos. —No importa lo que la gente diga de ustedes, sino el efecto que puede tener.

Los hermanos le sonrieron a su madre.

—Mamá, no tienes nada de qué preocuparte, nosotros sabremos como defendernos — En realidad a Seokjin no le interesaba lo que las personas pensaban de él, lo que de verdad le importaba era su hermano.

—Yo quiero protegerlos, soy su madre después de todo, así que prometo que me informaré acerca del tema. — Miró a su marido. —Ambos lo haremos.

Yoongi no supo en qué momento comenzó a llorar, toda duda e inseguridad se había disipado, ahora se sentía en paz.

—¿Por qué lloras Yoon? — Su padre sonó verdaderamente preocupado.

—Yo–Yo pensé que nos odiarían. — Confesó.

Los padres estaban boquiabiertos.

—Nunca podríamos, jamás — Su madre se levantó de su asiento, yendo hacia sus hijos y los abrazó. —No vuelvan a pensar eso.

Las lágrimas de Min menor eran una punzada para el pecho de su madre, odiaba tanto ver llorar a uno de sus hijos. Después su padre se unió al abrazo.

—Los amamos, nunca lo olviden.

Yoongi agradeció mentalmente, había tenido miedo por la reacción de sus padres, pero ya no, al contrario, agradeció por tener a esas personas en su vida, gente que respetara lo que era, y estaba bien, sabía que estaba haciendo lo correcto.

⏳

—¡Jinnie! — Un grito se escuchó en cuanto el pelinegro cayó. —Jinnie, ¿estás bien?

Yoongi se acercó a su hermano en cuanto vio que se caería de la bicicleta que montaba con anterioridad. Arrojó el libro que tenía entre las manos para irlo a ayudar.

—Estoy bien Yoonie, solo raspé un poco mi rodilla. — Sonrió el mayor. El menor se sintió mejor y fue por su libro. Seokjin observó como tomaba ese objeto con sumo cuidado. —¿Qué es eso Yoonie?

Su hermanito soltó una pequeña risita y fue hasta su hyung.

—Es un libro que encontré cerca del pozo. — El mayor se sorprendió, ¿qué hacia su hermano ahí?

—Yoon devuélvelo, no es tuyo. — Insistió.

—Si es mío, el señor del espejo me lo dio. — Con eso último Seokjin despertó, tenía una ligera capa de sudor cubriendo su frente.

Esos recuerdos de su infancia a veces lo atormentaban y ni siquiera sabía por qué. Se suponía que era Yoongi quien debía recordar, no él.

¿O sí?

Wow, 10K, la verdad no sé como agradecer por todo su apoyo, si les soy honesta nunca creí que uno de mis fics llegaría tan lejos y menos en su emisión 🙊 pero muchas gracias 💜 en verdad no saben cuánto se los agradezco 😢 Así que para celebrar les traigo un cap

Mare lxs ama mucho 💙💜 y, de nuevo muchas gracias UuU, nos leemos el sábado 🌚

Mare †