Al principio de los tiempos, uno de los ángeles de mayor confianza de Dios, Lucifer, inicia una guerra contra su amo. Se suponía que el hombre tenía una vida simple, sin conciencia del entorno, sin sentido de las emociones o control de sus propias vidas. Sin embargo, Lucifer no estaba de acuerdo con esto y quería que el hombre tuviera el control de su propio destino. Ley y caos, dos caras de una misma moneda. La pregunta ahora es en quién estarás.

— Un laberinto sin salida — Guía para detectives Capítulo 3 cláusula 2. —

— El nuevo hombre al mando. Me muero por ver quién a dejado en su lugar, y todo este tiempo fue un niño. —

— No se atreva a mencionar su nombre. —

— No hay necesidad de ponerse a la defensiva Anton. Me iré ahora. —

— Yo no lo sé. —

El doctor chasquea los dedos y un grupo de soldados entra a la habitación y le tiran a Zalgo.

— ¿De verdad crees que esos “disparos” podrán? — Zalgo se saca la bala del hombro y la inspecciona. — ¿Agua bendita? Sabes que esto no funciona conmigo, ¿verdad? —

— Voy a patearte en un segundo. —

El hombro hacía Zalgo comienza a arder y la carne comienza a descomponerse y no muestra ninguna reacción.

— ¿Doctor fue? —

Zalgo se teletransporta al Doctor y comienza a asfixiarlo.

— Solo porque me liberaste. No te mataré a ti ni a tus amigos. La raza humana estará bajo mío. Lo siento, sigo olvidándome de esto. —

— ¡Sarah, despierta! —

— ¿dónde estamos?.... —

— La realidad, esa prisión nuestra ya no es un problema. Todavía tenemos trabajo que hacer. —

Sarah mira hacia (T/N).

— ¿Y ellos?.... —

— No he pensado en eso....Bueno, en el estado en su interior sería más fácil matarlos ahora, pero me siento agradecido. —

— Entonces, ¿son libres de irse? —

— Por ahora. _

Zalgo mira directamente a (T/N) y mira directamente a su alma.

— Extraño, eres la única persona que no parece tener nada que ver con esto. Te ves fuera de lugar con ellos. Recibo algún tipo de vibra de ti. No sé qué es, así que creo que es mejor que te quedes quieto. Sarah, tenemos que encontrarnos con alguien. Vamonos, ¿de acuerdo? — Zalgo agarra la mano de Sarah y se desvanece junto con ella. —

— ¡¿De que se trataba todo eso?! —

— MIERDAAAAAAAAAAAAAAAAA —

— Oye tranquilo que- —

— ¡¿Tranquilo?! ¡¿Tienes idea de quién es?! —

— Parece un hombre de negocios. ¿Qué tan malo puede ser? —

— Muy mal. —

— ¿Quién es él de todos modos? —

— Un experimento que salió terriblemente mal. Esa cosa no es un hombre de negocios, es un demonio. Solía ​​ser un arma bioquímica utilizada en la Primera Guerra Mundial, pero el proyecto se suspendió. —

— ¿Descontinuado? —

— Créame, no sabe por qué. Además, no sabemos qué planea hacer. —

& ¿Por qué no le preguntas a los asesinos? Si ella fuera la más confiable de todas. Ella tiene que saber algo. —

— Ya lo intentamos, y ella no nos dijo nada. Tal vez quieras probarlo. —

— Siento interrumpir, pero ¿qué hay de nosotros? —

— Bueno, no podemos tener muertos caminando por las calles como si nada hubiera pasado. Además, el FBI los secuestraría en cuanto los viera. Creo que es mejor que se queden aquí hasta que se acabe todo este problema. —

— ¿Jefe? Es la primera vez que ven un lugar real en décadas. Tú debería al menos dejarlos ver el exterior por un tiempo. —

— El mundo podría llegar a su fin mañana. Así que hagan lo que tengan que hacer. —

— ¡¿Perdón?!  —

— Estoy bromeando, pero en serio, estén a salvo. —

— ¿En qué habitación está Lucía? —

— D4 en el bloque médico. —

(T/N) entra en la habitación oscura del hospital solo iluminado por una pantalla de televisión estática. Lucía parece estar observando la estática.

— ¿Qué estás viendo? —

— Candle Cove. —

— Um, eso es solo aire muerto. —

— ¿Qué quieres? ¿Es para ponerse bien?. —

(T/N) se acerca a la cama de Lucía y puede obtener una mejor descripción de su apariencia. Parece que tiene el pelo suelto y un poco de tinte morado en la parte de atrás. Tiene tatuajes de flores, serpientes y Atenea por todos sus brazos. Los piercings están alrededor de su boca y nariz. La mujer también parece tener rímel negro debajo de los ojos.

— Te ves mejor cuando no estás tratando de matar gente, Lucía quédate tranquila. —

— ¿Cómo me uno a Athena? —

(T/N) parece llamar la atención de Lucía con ese comentario.

— ¿Te unes a Athena hilarante?. —

— Lo digo en serio, ustedes parecen tener una gran causa.

— ¿Estás de nuestro lado? La última vez que hablamos tenías un rifle bozal en mi cara. —

— Y tú tenías un cuchillo en las minas, por lo que estaban un poco a la par. Mira, lo siento, está bien. Solo quería saber qué hacen ustedes. —

— Esa niña lo envió, ¿no? —

— ¿Me creerías si dijera que no? —

— Bueno, al menos eres honesto al respecto. Lo que hacemos es casi cualquier cosa. —

— ¿Como? —

— En ciertos horarios, ayudamos a las personas que no saben leer, tenemos un programa de tutoría, un programa de Becas, un sistema de Albergue, clases de AP y hacemos torneos de videojuegos. también lo hacemos. _

— Paren ahí, ¿ustedes tienen todas esas cosas?. —

— Sí. —

— umm, ¿ustedes son una secta? ¿O una casa club? —

— No, somos una secta. —

— Pero lo que acabas de describir era un club. ¿Cómo es que ustedes tienen el dinero para eso? —

— Atenea —

— Sí, eso me devuelve a la pista. ¿Quién es Atenea exactamente? Como si les hablara a ustedes o.....

— Sí, en realidad lo hace. Sin embargo, soy la única persona que conoce su verdadera forma. —

— ¿Forma verdadera? —

— Si, tiene dos formas. Su Espíritu y Cuerpo están separados el uno del otro. —

— Entonces, ¿Quién es Sarah? Quiero decir, Atenea te muestra. —

— Su cuerpo. —

— ¿Cómo terminaste en este culto? —

— Atenea. —

— ¿Te importaría explicármelo? —

— Cuando murió mi madre, tuvimos que mudarnos desde Rusia. Así es como terminé en los Estados Unidos. Después de que mamá falleció, papá se convirtió en una persona diferente. Lo recuerdo llegando borracho a casa muchas veces y se desquitaba especialmente conmigo. Me encerraba en el patio trasero en noches muy frías y me dejaba por horas. —

— ¿Por qué no llamaste para pedir ayuda? —

— Tenía miedo de lo que haría a continuación. Nunca sabes lo que lo haría estallar de inmediato. Desafortunadamente, él no fue el único problema con el que tuve que lidiar. Mi hermana, por alguna razón, creía que le había robado toda la atención de papá. Habría días en que llegaría a casa y encontraría mi ropa destrozada, animales muertos en mi cama y un completo desastre de estos. Entonces, me echarían afuera por eso. Empeoró aún más cuando tuvo novio. Mantiene la idea de que estaba tratando de robárselo. Fue un infierno viviente. Hasta que un día encontré este disco. No sabía por qué, pero me estaba llamando. Quiere que lo recoja. Así que hice exactamente eso y lo llevé a casa. Lo dejé en la mesita de noche y fui a darme una ducha. Cuando salí, ella estaba allí. —

— Es una bonita habitación la que tienes. —

— ¿Quién eres? ¿Y cómo entraste aquí? —

— No temas, he venido a responder a tus oraciones. —

— ¿Oraciones? ¿Estás sin hogar por casualidad? —

— Me arrojas dudas. —

— Bueno, sí, acabas de entrar a mi habitación sin previo aviso y ahora básicamente dices que eres un ángel. —

— ¿Ángel? No soy un ángel del mar. YO SOY DIOS. —

— De verdad, entonces demuéstralo. —

Sarah procede a caminar hacia una pared y luego se para boca arriba en el techo.

— ¿Es esto suficiente? _

— Woah, ¿como lo hiciste? _

— Soy Dios, recuerda. —

— Ok, ese es un truco genial, pero sigo sin creerte. Hmm, ¿qué desayuné? —

— Nada, no comiste nada en todo el día. Además, ahora te mueres de hambre. —

gruñe el estómago de Lucía.

— Umm si, no he comido nada recientemente. —

— Oye, ¿qué pasó con el vestido que llevas puesto? ¿Por que es está tan sucio y hay agujeros por todas partes?. — Sarah salta del techo y se limpia la mano en el vestido. —

El vestido se arregla completamente solo.

— Bueno, ¡como nuevo!. —

— ¿Qué?....¿Cómo quién....eres tú? —

— Ya te lo dije Oh, se me olvidó. — Sarah forma un plato de comida justo en frente de Lucia. — aquí tienes comida. —

— ¿Esto es para mí? —

— ¿Quién más tontita? —

Lucia va a comer la comida pero una individua interrumpe en su abitación.

— ¡Lucía! —

— ¿Vera? —

Sarah desaparece antes de que Vera pueda siquiera verla.

— ¿Dónde está? —

— no se de que hablas. —

— Mi collar, no te hagas la estúpida conmigo. —

— ¡Nunca moví eso! —

— ¿De verdad ahora?, ¿y como esta el plato de comida? ¿lo robaste no? —

— ¿Robar? No, alguien me lo dio. —

— Junior, ¿no? Primero, papá. Ahora, él. ¿Cuánto quieres quitarme? —

— ¡No, él no! —

— ¡Solo puede ser él! Siempre estás tratando de sacar cosas de él. —

— No, se trata de.... —

Vera consigue ayuda a abofetear a su hermana pequeña.

— ¡Dios, ayúdame! —

De la nada aparece, Sarah.

— ¿Qué diablos? —

— ¿Así es como tratas a tu hermana? ¿Tu propia familia?. —

— Oh, ¿entonces vas a traer amigas a casa ahora?. Papá va a lidiar contigo por esto. — Vera intenta alejarse de Sarah, pero no lo consigue. — Déjame ir, idiota. —

— ¿Por qué debería? —

La puerta de la habitación se cierra detrás de ellas. Sarah mira la pupilas azules de Vera con su pupilas rojas. —

— ver gente como tu creo que te sales con la tuya forma en que tratas a las personas. es repugnante ¿Es por eso? — Sarah se aleja de Vera y queda completamente paralizada. —

— ¿No puedo moverme? ¡¿Qué me has hecho?!.  —

— Vera, te voy a dar una valiosa lección sobre las consecuencias de tu acción. Lucía, ¿qué tal si jugamos un jueguito? Aquí están las reglas, quiero que hagas una lista de todas las cosas malas que tu hermana te hizo en las últimas dos semanas, y para todos ustedes. perder un dedo. Eso suena justo, ¿verdad Lucía?. —

— Estás bromeando, ¿verdad? —

— Será mejor que no empieces a hacer ruido o empezaremos de nuevo. —

Sarah gira el cuerpo de Vera en dirección a su hermana, y la hace sacar las manos y abrir los dedos.

— Empieza, porfavor. —

— Bueno, ella abofeteó la semana anterior al lunes. —

— ¡Eso no es ciert-! —

¡Crack!

— ¡Ahhhh! —

Sarah agita su mano y la boca de Vera se cierra de golpe.

— Continua —

— Ella robó mi dinero. —

¡Crack!

Sarah continúa chasqueando los dedos de Vera mientras Lucía continúa enumerando.

— Hmm, nos quedamos sin dedos. Pequeña solución. — Sarah devuelve los dedos de Vera a la normalidad. —  Está bien, continúa. —

— Espera....Sin parar. —

— Siguiente —

— ¿Qué?.........espera...um....Lucía, lo siento, lo siento mucho. Me duele la cabeza, ya no puedo sentir mi cuerpo Lucía. Sólo dile que se detenga, por favor. Te dejare solo. Solo haz que se detenga. —

— Para, ¿Cuántos días has estado llorando por ella? ¿Cuántos amigos te ha quitado? ¿Cuántas veces te robó el dinero, destrozó tu ropa? —

— No me dejaste terminar. —

— Destruyó mí habitación y te vio morir de hambre afuera. —

— ¿Hmm? —

— ¿Puedes lavarle el cerebro a la gente? —

— Creo que me gusta ir con esto. —

A la mañana siguiente

— ¿Has visto a Vera? — Dijo el padre de Lucia con los brazos cruzados. —

— No. —

— No estaba en su cuarto, ¿tenias algo que hacer con eso?

— No. —

Lucía se va a la escuela. Desconocido para el padre de Lucía, su hija mayor está siendo torturada en un disco de videojuego durante horas y horas. Lo que se siente como siete horas en realidad. Se sintió como semanas en el disco. La mente de Vera se ha destruido por completo. Lucía entra a su habitación después de un largo día de escuela.

— Su justo a tiempo aquí está ella. —

Vera está en la habitación mirando sin emoción.

— ¡Ahora mira esto, Vera! —

— Sí. —

— Recoge ese cuchillo y córtate la cintura. _

— Si, dios Sarah. —

Vera hace exactamente lo que Sarah le dice qué hacer. Sarah cura la herida de Vera antes de que pierda mucha sangre.

— Ella está bajo tu mando ahora. —

— ¿Harás algo ahora? —

— Acabas de ver lo que hizo. ¿Qué estás planeando hacer ahora?. —

— Ya verás en un rato. —

Lucía susurra algo al oído de Vera y espera en su habitación durante horas esperando a su padre.

— ¡Lucía! Ven aquí en este instante —

— Quiero que sepas algo. Por lo que está por suceder. Nada de eso es tu culpa. No tuviste ninguna participación en esto en absoluto. Así que no te culpes por nada. Acepto toda la responsabilidad por esto. —

Lucía baja las escaleras con su padre.

— Si señor. —

— ¿Dónde están todas mis cervezas? —

— Los tiré. —

— ¡¿Tú QUÉ?! —

— Los tiré. Los vas a necesitar más. —

— ¡¿Me estás jodiendo, verdad?! —

—No, no te estoy jodiendo. —

— ¿Qué acabas de decir? ¿Has perdido la maldita cabeza? Nunca me insultas. ¡Sabes que-! —

El padre de Lucia comienza a envolver sus manos alrededor de la garganta de Lucia y comienza a estrangularlo. Ahí es cuando un cuchillo se clava en su espalda.

— ¡Ahh! ¡¿Qué carajo?! ¡¿Vera!? —

Esto consigue que se baje de Lucía.

— ¿Qué estás haciendo? —

— Protegiendo....Mi....hermana.... —

— ¡Maldita perra! —

Vera apuñala a su padre en el pecho una y otra vez hasta que se derrumba.

— ¡E-Espera! — Tose sangre. — para, ¡¿que haces?! —

Vera va a apuñalarlo de nuevo, pero Lucía le arrebata el cuchillo.

— ¿Ves que no es tan divertido no tener poder contra alguien? — Dijo ella para después apuñalo. — ¡Esto es por encerrarme afuera! — Le dio otra puñalada. — ¡Esto es por dejarme morir de hambre! — Dijo para después volver a apuñalarlo nuevamente. — ¡Esto es por todos los mosquitos que me picaron! — Dijo para después seguir cada vez más peor. — ¡Esto es por cuantas veces me pegaste! —

Lucía sigue apuñalando a su padre continuamente. Su cavidad torácica está completamente abierta hasta el punto de sus costillas y pulmones perforados. Lucía finalmente se detiene después de su puñalada número 28.

— Dios mío, ¿qué he hecho?.... —

— No pasa nada, lo que te hicieron los hizo completamente merecedores de su destino. Fue su elección aprovecharse de ti y no se arrepintieron hasta la muerte los enfrentó. — Dijo Sarah al lado de ella sonriendo con los brazos detrás de su espalda. —

— P-Pero yo.... — Fue interrumpida cuando Sarah la abrazó. —

— Como yo es triste, esta es mi responsabilidad. Yo como dios voy a hacer que todo esté bien.... —

— Jesús, Sarah realmente hizo eso que te jodió.... —

— ¿Quién es Sarah? — (T/N) sostiene una foto de Athena, también conocida como Sarah. — ¡¿COMO CONSEGUISTE ESO?! —

— Sarah García, Tu diosa es solo una estudiante universitaria desaparecida de los años 60. Ella es solo un espíritu de una mujer muerta. —

— ¡Mientes! —

— Entonces, ¿realmente crees que un dios vino al mundo, la torturó psicológicamente para que hiciera cualquier cosa y te obligó a matar a tu propio padre?, y dime Lucia. ¿Qué has estado haciendo después de eso? Porque si eres una asesina, eso significa la noche que mataste a tu padre. Te convertiste en una asesina. —

— ¡Basta, ella nunca haría algo así! ¡ALGUNA VEZ! —

— Tranquilízala (T/N) No te hablará si sigues poniendo a prueba su fe. — Dijo (T/N) en su mente. —

— Vale, vale, me equivoqué. Athena nunca se aprovecharía de ti. Lo siento por molestarte. —

(T/N) se levanta para salir de la habitación.

— No, tienes razón. ¿(T/N)? —

— ¿Si? —

— Tienes idea de cuantas personas he matado por el nombre en la que creé que es dios. —

— No puedo decir que sí. —

— Demasiado. Al principio no sientes nada y luego lentamente comienza a acumularse. Empiezas a tus víctimas en tus sueños. Sin decirte nada solo mirando. Ese silencio dejándote solo con tus propios pensamientos. Lo peor es que las caras se vuelven tan grandes que ni siquiera puedes recordarlas. Allí las caras simplemente se combinan. Ya no puedo dormir porque sigo escuchando los llantos y gritos de tanta gente. Solía ​​sentirme completa.........pero, ahora no tengo ganas. Por eso yo, el paraíso sigue abierto para mí. —

— Eso es algo que tienes que responder por tu cuenta. —

— Ya veo, la iglesia de la calle manga ahí es donde adoramos a Athenea. Está fuertemente vigilado y necesitarás esta tarjeta. —

Lucía le lanza una carta a (T/N).

— ¿Qué pasa con el cambio de corazón? —

— (T/N), me completaste. —

— Dime eso otra vez. —

— Me completaste. —

(T/N) sale de la habitación sabiendo que está repitiendo la declaración nuevamente.

— Soy demasiado guapo para mi propio bien. Me pregunto cómo estarán esas dos. —

(T/N) entra en la sala médica de Hailey y Lilith. Las dos están en completa oscuridad.

— Doctor, supongo que le gusta pagar las facturas de electricidad. —

— No, no lo hace. —

Hailey tiene algunas vendas en la cara y su pierna parece volver a colocarse.

— Te ves mejor que la última vez, que te vi. —

— Esa es tu frase favorita, ¿no? —

— ¿Cómo lo supiste? —

— Escuchamos tu conversación en la habitación de Lucia. —

— Escuchaste eso eh. Sí, eso es duro por su parte. —

— (T/N), ¿por qué haces esto? —

— ¿Haciendo qué? —

Hailey: Esta investigación, todavía no te han pagado y estás trabajando como si no esperaras una, así que ¿por qué sigues aquí?

— Eso es algo un poco personal para mí. —

— Hmmm, estoy en el mismo trabajo. Solo entré en esto porque me prometieron un hogar y unos amigos. —

— Proscrito eh. _

— Sí, nunca antes había tenido un amigo hasta que conocí a Lilith. —

— Sí, eso me recuerda. —

(T/N) se dirige a la cama de Lilith.

— Déjame en paz. No estoy de humor para hablar. —

— Bueno, me siento un poco mal. Básicamente es mi culpa que ambas salieran heridas. —

— No, no lo fue, actué muy dura. Cuando en realidad, yo era débil. No tenía nada bajo control y me descuidé. Lo que me pasó fue culpa mía. No tienes que lastimarte la cabeza por nada. —

— ¿Por qué te inscribiste en esto? —

— No querías decirnos por qué sigues siendo parte de esto, sin embargo, deseas escuchar nuestros motivaciones. —

— Esa súper audiencia está empezando a ser molesta ahora. —

— Bueno, podrías tener un agujero en el pecho. —

— Creo que voy a pasar. —

— Mira, no le digas a nadie fuera de esta habitación este derecho, pero solo me inscribí porque Thomas desapareció. Realmente estaba enamorado de él y cuando escuché que desapareció. Entré en un estado depresivo. Estaba planeando invitar al baile de graduación también. Todos esos sueños se fueron en un instante. Fue entonces cuando un tipo se me acercó y me ofreció esto. —

— Supongo que ese hombre es el padre del doctor. —

— Sí, doctor Samael Gibson. Al principio no me interesó hasta que mencionó que sabía quién se había llevado a Thomas, y después de eso me enganché. No me importaba que tuviéramos que sacrificarnos. No quería morir sin saber cuál sería su respuesta. —

— Bueno, sigue tu corazón mi amiga mía. — (T/N) se levanta para irse. —

— Oye, gracias por eso. —

— De nada. —

El doctor alcanza a (T/N) en el pasillo.

— ¿Cómo te fue? —

— Bien, ella me dio esta tarjeta. —

— Nueva calle manga de la Iglesia Revolucionaria que es donde están. Bueno, es hora de ponerse en marcha. Consígueme a Lucía. —

— ¿Todavía no se está recuperando? —

— (T/N), somos una organización gubernamental secreta de clase alta. Tenemos la tecnología más avanzada y la medicina aquí. Estará lista para la operación de esta noche. Tú, por otro lado, necesitas disfrazarte. —

— ¿Disfraz? —

— Bueno, ellos saben quién eres porque enviaron a un asesino tras de ti. Así que no puedes simplemente entrar. —

— Más vale que esto no sea nada tonto. — Dijo (T/N) tocándose la frente con los dedos dando un suspiro. —

— ¿Por qué estamos aquí? — Pregunto Thomas. —

— Lo verás en un minuto. — Dijo L. —

L Abre la puerta de la habitación y encuentra a la anciana africana familiar en una silla.

— ¿Linda eres tu? —

— Traje algunas visitas. —

Lily se da la vuelta para encontrarse cara a cara con el divertido grupo.

— Bueno, estaré maldita. ¿Cuánto tiempo ha pasado? —

— catorce años. — Respondió Kyle. —

— Dios mío, sigues tan inteligente como siempre. —

— Me gustaría decir — Dijo Luther cruzando de brazos sacando una pequeña risa. —

— Tu nunca cambias ¿verdad, Luther? No tienes que disculparte. —

— ¿Sabías? — Dijo el sorprendido. —

— Desde esa noche, la metiste en tu baúl. De verdad pensaste que no me había dado cuenta de que pusiste esa gran bolsa que nunca antes habías llevado en tu coche, y que desaparecieron eso solo me lo confirmó. Lo hecho, hecho está, no puedes cambiar el pasado por mucho que lo intentes. Solo podías poner lo que tienes y seguir. Ahora, estoy segura de que ustedes no vinieron aquí solo por viejos recuerdos, ¿verdad? —

— ¿Q-Qué te dijo Sarah? —

Flashback

Año ; 1965

Se ve a Lily caminando a casa del trabajo bajo la lluvia. El paraguas se abre sobre ella evitando que las gotas caigan sobre su cabello. Ella mira hacia el suelo para encontrar un disco.

— Ya era hora de que aparecieras.... —

Silencio

— Sal, ya sé que eres tú, Sarah. —

— ¿Qué lo delató? —

Sarah se para detrás de Lily bajo la lluvia con lágrimas negras saliendo de ella de sus ojos.

— Te conocí mejor de lo que te conoces a ti misma — Se vuelve hacia atrás para mirar de cara a cara a Sarah — ¿Y ahora qué? —

— Quiero que vengas conmigo. —

Lily suspira y se tapa la cara con la palma de la mano.

— S-Sarah....Sarah, ¿todavía no te has dado cuenta?. —

— Puedo hacerte joven de nuevo, inmortal, poderosa, no tendrás que preocuparte por las facturas, el alquiler, la comida, el agua. Finalmente podríamos estar juntas para siempre. —

— Sarah, no voy a renunciar a mi humanidad por ti. Mira, Sarah, lo que te pasó fue desafortunado, pero he seguido adelante con mi vida. Estoy casada y tengo un hijo con la que volver a casa. Las cosas buenas no duran para siempre, Sarah. Cuando algo se rompe solo porque pasaste horas arreglándolo no significa que vaya a ser lo mismo. No sé cuánto tiempo pasará antes de que puedas darte cuenta de eso. —

— Ya veo.... — Sarah comienza a alejarse. —  En los próximos años, levantaré una torre hacia el cielo, y cuando eso suceda, toda la humanidad gritará mi nombre. —

— ¿Eh? ¿Qué quieres decir? —

Sarah desaparece.

— Bien, esta es la iglesia. Tienes la tarjeta verdad? —

— Si. —

— Oye, escucho demasiada base en ti Chloe ¿o debería decir (T/N)? —

— Muy divertido doc. Hice que usáramos esta mierda solo para obtener en esta iglesia. —

— Bueno, eso era lo único disponible que teníamos. —

— Entonces, ¿por qué no dejaste ir a L? —

— Porque ella no podría quitarse ese traje si tuvieras un arma en la cabeza, y Lucía quería ir contigo. Trató de matar a cualquiera que dijera que no podía. Así que tenías que ir con vestido, ya estamos cortos de personal. —

— ¿Y ponerme un vestido con maquillaje fue lo mejor ocurrencia?. —

— Sí, además eres genial con eso puesto. Pienso que te conviene. —

— Vete a la mierda, vamos Lucia. —

La pareja sale por la parte trasera del camión Odin Swat estacionado en la calle.

— Recuerda que necesitamos información, donde aquí si algo sale mal, y Lucía intenta algo divertido y- —

— Lo se. —

— Me alegro de estar en la misma página. —

El doctor cierra la puerta de la furgoneta y los deja.

— Una iglesia, el callejón trasero o los sótanos subterráneos estaban demasiado llenos. —

— Athena trajo esta iglesia para nuestras reuniones. —

— ¿Con dinero real? —

— Sí, yo estaba allí cuando trajo la propiedad. —

Lucía llama a la puerta de la iglesia. Una monja abre las puertas de madera.

— Señora Lucía, ¿Cómo puedo ayudarte? —

— Tengo que hacer un informe al director, y tenemos alguien que quiere convertirse. —

— Bueno, por favor entra. —

La monja permite que la asesina y el detective encubiertos entren a la iglesia. En los bosques vecinos, un grupo de agentes parece estar observando la iglesia.

— Dos individuos desconocidos acaban de entrar al edificio. — Dijo uno de los agentes del FBI. —

— Muy bien, estén atentos, estamos casi listos para partir. — Dijo el comandante. —

— Hermana Flora, ¿Dónde está el director? — Preguntó Lucia a la ya mencionada. —

— Entró en la cámara para hablar con Athena, por cierto, tu amiga puede presentarse. (T/N) ni siquiera puede acumular la cantidad de coraje para siquiera decir cualquier cosa a la monja. —

— Ella habla mucho. Se pone nerviosa cuando está con gente de la que no sabe mucho. —

— Las timidas, no sabia que tenias unos tipos de esos. —

— No estamos saliendo. —

— No estás engañando a nadie Lucy, nunca has traído a nadie aquí antes, así que ella debe ser importante para ti de alguna manera. —

— Algo así. —

Flora abre la puerta a una reunión en la iglesia. Hay varias personas que solo se ocupan de sus propios asuntos y chatean con otros. Ni siquiera parecen darse cuenta de que el trío entró en la habitación.

— Este lugar no parece una secta. Es más una casa club. — Dijo (T/N) mentalmente. —

— Aquí tienen, ustedes dos disfruten. —

— ¿Esto es una secta? — Pregunto (T/N) susurra mente hacia Lucia. —

— ¿Qué esperabas? Pentagramas, rituales de sangre, sacrificios humanos. —

— Bueno, sí, pero este lugar se ve increíble. Espera un momento, ustedes tienen una sala de juegos y una etiqueta láser. ¿Cómo encajaba siquiera aquí? —

— Athenea, mi amiga. —

— ¿Cómo me uno a esto de nuevo? Estoy muy interesada ahora. — Pregunto (T/N) dándoles a los demás una sonrisa falsa para intentar de mostrarse como nuevo en el club. —

— Te unes hablando con Athenea. —

(T/N) se da la vuelta para ver a una dama con una túnica blanca. Tiene los mismos tatuajes y piercings que Lucía. Sin mencionar, el mismo peinado. Es como si se vieran casi iguales. ¿O tal vez esta mujer es?

— ¿Vera? Me refiero al director. —

— ¿Te encargas del Detective? —

— Está fuera de la ecuación. —

— Bien, veo que trajiste a una amiga. —

— Sí, ella quiere convertirse. —

— Interesante, bueno hermana, si es amiga tuya, es amiga de Athenea. Dirígete a la cámara en la siguiente habitación. —

(T/N) toma las órdenes de la dama y entra en la cámara.

El silencio llega a sus oídos. Una voz angelical comienza a hablarle.

Se le aparece una Diosa. La diosa no tiene cuerpo, ni rostro, solo un rayo de luz. Por alguna razón, (T/N) tiene la sensación de confesar todo lo que ha hecho, pero quién sabe quién es este dios falso y lo devuelve a la realidad.

— Oh otra alma perdida. Permíteme guiar tu espíritu hacia el paraíso. ¿Cómo te llamas joven? —

(T/N) pone su mejor impresión femenina.

— Chloe. —

— Chloe, ese es un nombre peculiar. Consiénteme Chloe, ¿qué te trae por aquí? —

— Bueno, mi amiga Lucía me dijo cosas maravillosas sobre ti y Athenea ayuda a muchas personas a ser mejores personas en la sociedad. —

— Lucía, mi fiel apóstal. Si Lucia es tu amiga entonces yo soy tu amiga. —

— Suenas familiar, como si te hubiera escuchado antes. —

— Cuido a todos mis hijos queridos. como esta mañana tenías panqueques y racha. —

— Así es como funciona la lectura de la mente. —

— ¿Perdón? —

Julius: No estás leyendo mi memoria. Solo estás leyendo lo que pienso. Lo acabas de demostrar, Sarah —

— ¿Sarah? No recuerdo ese nombre. —

(T/N) deja caer la impresión de su voz.

— No me estás engañando con esta mierda. —

— ¡¿EH?! (T/N), ¿CÓMO ENTRASTE AQUÍ? ¿Y POR QUÉ ESTÁS VESTIDO COMO SI FUERAS UNA MUJER? TE QUITAS DE ESE EQUIPO INCLUSO MEJOR QUE YO! —

— ¡No vamos a tener esta discusión! Y sí, tu fiel apóstal me hace entrar. —

Athena vuelve a Sarah y baja al nivel de Julius.

— Ahora, ¿por qué haría ella algo así? —

— Parece que tienes un problema moral, hermana, pero ese es el menor de tus problemas. De cuantas personas te has aprovechado en este culto. Al hacer tu trabajo sucio, estabas torturando a tus amigos. —

— ¿Crees que los estaba usando? —

Sarah usa su control mental para poner imágenes de diferentes personas dentro de su cabeza.

— Esas personas vinieron a mí. Cuando oraron y rezaron para que nadie viniera por ellos. Por eso respondí a sus problemas, y mira cuánto maravillosas se volvieron sus vidas. Algunos de no tenían comida, así que les doy un banquete. Algunos no tenía ropa, así que les di un guardarropa. Algunos de ellos tenían refugio, así que les di un castillo, y algunos de ellos no tenían familia, así que les di un lugar al que llamar hogar. Le di a esa gente lo que en justicia se les debía. —

— Difundiendo creencias falsas, mintiendo a las personas y obligándolas a matar a sus familias. —

— Eso fue un sacrificio, estaba dispuesta a hacer por orden. —

— ¿Orden? —

— Les quité el control a esas personas y mira lo bien que se volvieron sus vidas. Todo lo que hicieron fue seguir mis palabras. —

— Saca estas imágenes de mi cabeza, por favor. ¡Eso no cambia el hecho de que engañaste a la gente! —

_ ¿No es eso lo que es la religión? Un gran truco, excepto el mío es realmente ayudar a la gente. —

— Ya veo, estás haciendo esto porque te arrepientes de lo que les hiciste a tus amigos. No, no solo a ellos, sino a toda la gente que has matado. Estás tratando de lavar toda la sangre de tus manos. _

— ¿De verdad crees que me arrepiento de lo que hice? No intentes ponerme en terapia, (T/N). Tú lo dijiste mejor que yo. El pasado no cambia. No espero ni un ápice de perdón por mis acciones, y ya me decidí hace años. No me convences de nada. Lo que me recuerda a algo. ¿Por qué sigues involucrado en esto? ¿No tienes ninguna conexión entre esto? Te gustan las pasas en una ensalada de frutas. Simplemente encajas dentro de esto, especialmente porque todavía estás vivo. No sé qué ve Zalgo en ti. —

— Sigo en esto por mis propias necesidades personales. —

— ¿Cuáles son esas razones personales? Reconocimiento, Placer, o tal vez solo eres un tonto. O....... — Sarah se inclina más cerca de (T/N). — ¿Crees que ODÍN puede resucitar a tu madre y hermanita?. —

(T/N) es tomado por sorpresa por eso.

— Por eso te acompañaste en el viaje. —

— No es por eso. —

— Puedo hacer que suceda. También puedo encontrar al hombre que arruinaste tu vida, tu familia. —

— No, eso no es- —

Sarah agarra la mano de (T/N).

— Déjame manejarlo. No hay necesidad de preocuparse por eso. Sus manos serán limpiadas. —

— ¡NO! — (T/N) aparta la mano de Sarah. —  Así es como le lavas el cerebro a la gente. Tratando de tomar el control de sus acciones. Estas está enferma.  —

— (T/N), la gente responde demasiado sobre sus propias elecciones. Morí por las elecciones de mis amigos y tu familia murió debido a las elecciones de alguien. —

— Las elecciones nos trajeron aquí hoy. Tomaste la decisión de vengarte de tus amigos. Tomaste la decisión de convertirte en Dios, y tomaste la decisión de matar a dos niños porque pusieron un maldito disco en su canal de YouTube. Crees que eres lo suficientemente justo como para tomar las decisiones correctas para las personas. Las personas tienen libertad, por lo que pueden tomar sus propias decisiones. —

— Tomé esas decisiones para que nadie más pueda hacerlo. Maté, robé y mentí por mi propia gente. Si ese es el precio a pagar por la salvación, que así sea. —

— ¿Qué pasa con aquellos que se oponen? —

— Morirán. La gente tiene demasiada libertad, y esa libertad siempre conducirá a que se aprovechen de alguien. —

— ¿Quién querría vivir en un mundo así? —

_ Ese mundo evitará que cualquiera pierda todo lo que le importa. Un mundo donde un hombre de familia no perdería a su madre y hermana por culpa de un cabrón enfermo. —

(T/N) se queda callado mirando al suelo. Ni siquiera se le ocurre nada más que decirle a Sarah.

— Veo que incluso sabes que tengo razón. —

(T/N) sale de la cámara.

— ¿Cómo fue? —

(T/N) ni siquiera trata de mantener su impresión.

— ¿Dónde está Lucía? —

— ¿Eres un hombre? Siento mucho no haber sabido que eras travesti. —

— Está bien, ¿Dónde está Lucía? —

— Ella subió a la iglesia. —

El poder de repente se corta.

— Oigan, ¿alguno de ustedes cortó la energía? —

— No señor. —

El doctor pone su Mic y trata de llegar a (T/N).

— ¿Cuál es tu estado....(T/N)?. —

— Señor, hay algunas personas que intentan asaltar el edificio. —

— ¡¿QUÉ?! —

— ¿Alguien no pagó la factura de la luz? —

Una ventana se rompe y un destello blanco cae sobre la cara de (T/N) y del director.

— ¡FBI, NO SE MUEVA! —

— ¡¿Qué están haciendo?! ¡Mierda! Toma el teléfono y saca a Lucia y (T/N) —

— ¡Sí señor! —

Se ve a (T/N) tapándose los ojos.

— El peor momento imaginable. —

— ¡Alto! —

— Oye, relájate que los estoy poniendo. —

— ¡Ok, en tu dolor de estómago! —

El agente recibe un disparo en la frente justo antes que (T/N).

— ¡Abran fuego! —

— ¡Genial! —

(T/N) no tiene más remedio que dirigirse a la escalera. Su chaleco antibalas recibe varios disparos de la tormenta de balas. (T/N) está aturdido por el dolor.

— Maldita sea, pensé que estos chalecos estaban avanzados. Joder, Doctor —

(T/N) se empuja a sí mismo a través del dolor y comienza a subir por la iglesia.

— ¡Lucia! —

— ¡(T/N)! —

— ¿dónde estás? —

¡Bang!

(T/N) casi evita que le vuelvan la cara con un calibre 12. Otro agente entra en la escalera.

— ¡Alto! —

— Dices congelar primero y luego disparar a la mierda. Aprendes ese entrenamiento. —

El agente carga otra bala y la apunta hacia (T/N). (T/N) vuelve a levantar las manos. Excepto que nota algo. El agente sostiene el indicador con una mano. (T/N) aprovecha el momento y carga directamente contra el oficial. Dispara de nuevo, pero golpea el chaleco de (T/N) y el oficial parece estar sosteniendo su brazo. Julius agarra el arma de fuego del hombre.

— Error de novato, nunca disparas una escopeta con una mano. El retroceso te romperá el brazo. — (T/N) no tiene problema en desarmar al agente. — Ve a un campo de tiro, amigo mío, toma algunas lecciones.

(T/N) noquea al oficial con la escopeta. (T/N) continúa caminando para subir las escaleras. Hasta que escucha pasos detrás de él. Los oficiales están tratando de salir por la puerta, pero una explosión fue suficiente para hacerlos retroceder. (T/N) sale de la escalera y cierra la puerta.

— ¡Lucía!, ¿dónde estás? No puedo ver nada. —

(T/N) escucha que algo se mueve detrás de él y (T/N) se apresura a la fuente del sonido.

— Woah, woah, tranquilízate amigo. —

— ¿Esa voz? ¿Suena familiar? —

El agente se quita el casco.

— Realmente te gusta estar en el peor lugar en el peor momento posible. ¿Por qué estás vestido así? — Pregunto revelando que era  James. —

— Larga historia, ¿recuerdas esa investigación?. —

— Ah, mierda, aquí vamos de nuevo. —

— Lo explicaré más tarde. — (T/N) y James dijeron los dos al mismo tiempo. —

— Tu eslogan favorito. Te das cuenta recientemente cada vez que me acerco a ti. Tengo que luchar por mi vida. —

— Bueno. —

— ¡Suéltame! —

— ¿Quién está gritando así? —

— Lucía, um, tengo que ser amable al encontrarme contigo. —

— No vas a salir de esta, (T/N). Me quedo detrás de ti. Esta es técnicamente mi investigación también. —

— Bien, pero no puedo decirte mucho. —

— ¿Por qué no? —

(T/N) sigue caminando.

_ También podrías cerrar algo para lo que no estás preparado. —

— ¿Qué significa eso?.... ¡(T/N)! —

James abre el camino con su linterna. El grupo busca en varias habitaciones tratando de encontrar a Lucía. Su búsqueda se detiene cuando encuentran un camino con múltiples cuerpos. Lucía se sienta en el centro.

— ¿Lucia? —

La asesina está cubierta de sangre y no sostiene nada más que un cuchillo.

— ¿Seguí tu consejo? Múltiples objetivos no son lo mío, pero la oscuridad me da una gran ventaja sobre ellos. —

— ¿Tú hiciste esto? —

— Me intentaron matar, yo solo me defendía. —

James pone a (T/N) detrás de el.

— James, espera.... —

— ¡¿Espera?! ¡Está sentada en un charco de sangre y diecisiete agentes están muertos! Si ella es su testigo o no. No puedo dejar que se salga con la suya con el asesinato. — James pone su pistola en Lucia. —

— Esa no es una buena idea, James. —

— ¡¿Por qué no?! —

— ¿Quieres que lo mate? —

— ¡¿Qué?! —

— No, Lucía. —

— ¿Matar? ¿Sabías que ella era capaz de cosas como esta? —

— N-No es lo que parece. —

James cambia su objetivo de Lucia a (T/N).

— Vas a contarme todo ahora mismo. Quién te paga por esto, y quién es esa mujer. —

— No puedo decírtelo. Además, incluso si lo hiciera, no lo creerías. —

— ¿No lo creería? ¿Que se supone que significa eso? — Toma una respiración profunda. — ¿Sabes qué? —

James le pone las esposas a (T/N).

— ¡¿Que haces?! —

— Estás bajo arresto. Vas a explicar esto a la sede de todo. Tu y tu amiga. —

— James, no es una buena idea acercarse a ella. —

— ¿Que quieres que haga (T/N)? — Pregunto Lucia. —

— No hagas nada. Mira James ella no sabe:nada de esto. —

— Eso no me hace cambiar de opinión. ella viene conmigo. —

James pone sus manos sobre Lucía para arrestarla.

— ¡No me toques! —

— ¡Dejen de resistirse por favor! —

— ¡Suéltame! ¡Deténgase! ¡Deténgase! ¡Deténgase! —

Lucia rápidamente agarra una de las pistolas del cuerpo de un agente muerto y le dispara a James en la pierna. James se cae de dolor. Lucía se acerca para terminar el trabajo.

— ¡Lucía para! — Gritó (T/N). —

Lucía deja de moverse.

— ¿Qué debo hacer ahora?.... — Pregunto mirando la pistola. —

— Dios mío, qué diablos le metió Sarah en la cabeza a esta mujer. Ella es como un robot. Siguiendo cualquier orden que le des. No le queda ningún sentido de la mortalidad. ¡No, no digas eso! Parecía tener algún tipo de remordimiento antes. No puedo pensar en esto demasiado. Tenemos que salir aquí. — Dijo (T/N) mentalmente. —

— Encuentra sus llaves y quítame las esposas. —

Lucía busca a James y encuentra las llaves. Ella le saca las esposas a (T/N).

— ¿Qué hacer ahora? —

— Repara la pierna y dirígete a la salida más cercana. —

Lucía le quita la camiseta a un agente muerto. (T/N) toma la camisa y la envuelve con fuerza alrededor de su pierna.

— ¡Ahhh! ¡eso duele! —

— Aguanta, te han disparado en lugares peores que este. —

Lucía levanta a James y lo lleva a la espalda.

— ¿Qué tan fuerte eres para levantar este cerdo? —

— Vete a la mierda. ¿Qué diablos es esto (T/N)?. No los dejarán afuera. —

— ¿Crees en la magia, James? —

— ¡Deja de decir acertijos! ¿Qué dices? —

— Estás a punto de presenciar un milagro. —

El grupo sale y están rodeados por agentes del FBI.

— ¿Qué te dije —

— ¡FBI ponte de rodillas! —

— ¡Ella tiene un arma —

— Baja el arma o nos veremos obligados a disparar. —

— ¡No te atreverás! —

— ¡¿Quien dijo eso?!. — Dijo el comandante. —

— ¡Yo! — Gritó el doctor. —

— ¿Es esto una especie de broma? Estás perdido, niño. —

— Conteste su teléfono. —

¡Ringing!

— ¿Cómo supiste que eso iba a pasar? ¿Hola? Lo siento, ¿hizo qué?....Y te llamó.... ¿No señor?....Lo siento por eso....Muy bien, se lo haré saber. —

Colgar.

— ¡Déjenlos ir! ¡Hagan retroceder a todos los agentes! —

— ¿Qué pasó? —

— Este chico es la cabeza de ODIN. Aparentemente, llamó al Secretario de Defensa y llamó al Director. Lo que lo llevó a llamarme. Lamentamos interrumpir su investigación. —

— ¡Cállate! Vas a entregar cada pedazo de pruebas y filmaciones de cámaras corporales. —

— Si, señor. —

— Y si alguien pregunta. Ocurrió un tiroteo entre un grupo de kkk locos. No menciones nada sobre Athenea. Nosotros nos encargaremos de la cobertura de noticias. —

— Todas las unidades regresan a sus vehículos. —

— ¿Qué? —

— ¿Ves?, te lo dije. —

El doctor se acerca a ellos.

— Julius, Lucia, y....¿Quién eres? —

— James. —

— Oh, este es el tipo del que hablaste. Encantado de conocerte. —

— ¿Porque hay un niño aquí, y quién eres tú? —

— Irrelevante para su negocio. Bueno, (T/N) y Lucia vamos. ¿Podrías dejarlo Lucia?. Sus amigos lo cuidarán. —

— No puedo dejarlo aquí. Sabe un poco sobre nuestra amiga aquí y Sarah. —

— Entonces, ¿quieres que lo llevemos al exterior mi secreto? —

— Base de la organización. Ni un día en el infierno. —

— Bueno, ¿qué pasa cuando habla?. —

— Lo mataremos.

— ¿Estás bromeando, verdad? —

— No puede venir, (T/N). —

— Si el no puede venir yo tampoco voy. Julius desea llevar a su amigo, y su deseo es mi orden. — Dijo Lucia en defensa. —

— Interesante, ahora te ve como un dios. Ese vestido está haciendo maravillas. Tráelo. —

El grupo se dirige a la camioneta. Todos excepto James se ponen una máscara de gas.

— ¿Por qué están poniendoseee.....? — Antes de que James pudiera terminar su pregunta completa cae dormido. —

— Ok, ¿donde listo para ir?. —

El vehículo se aleja. (T/N) está sentado al lado de Lucía. Decide entablar una conversación.

— ¿Lucia? —

— ¿Sí? —

— Puedes tomar decisiones por ti misma. No necesitas a alguien para decir que hacer. —

— Por que no los tengo a todos ustedes como mi guia. —

— No, no lo soy. Solo soy una persona normal, y tampoco necesitas ver a las personas como dioses. Te decepcionarás cuando te enteres la verdad. No sé todas las opciones correctas. Por eso hay que hacer ellos mismos. —

— ¿Cómo hago eso? —

— Lo sabrás cuando llegue el momento. —

(T/N) enfoca sus ojos en la ventana a su lado. El patrón continuo de árboles casi lo hipnotiza. Se vuelve hacia Lucía y la encuentra durmiendo sobre su hombro.

— Tal vez finalmente puedas dormir un poco. —

— Lo siento Athena. —

— No te disculpes, me di cuenta de que mis apóstoles no eran lo suficientemente fuertes. Eso fue mi culpa, y asumo toda la responsabilidad. —

— ¿Qué planeas hacer? —

Athena vuelve a ser Sarah.

— Da un paso adelante, Vera. —

El director da un paso hacia la diosa. Sarah besa la frente de Vera y alas forman su espalda.

— Rafael. Lleva a cabo mi voluntad. —

— Tu deseo es mi mandato. —

Continuará