❦ Capítulo 19: Superaciones y arrestos

Las paredes blancas, el techo del mismo color y las sábanas de una tela algo tosca y muy gastada al ser utilizada con todos los pacientes, que pasaban por ese hospital era lo único que vio y sintió Tae Hyung al despertar.

Lo único que recordaba era haber estado en su departamento, junto a HoSeok, teniendo sexo y fumando una de las mejores drogas y éxtasis que pudo haber probado jamás. Sin embargo, ahora se encontraba en una lugar que desconocía... bueno, que conocía, pero no del todo.

Sintió su cuerpo pesado y sus ganas de vivir eran pocas, parecía que un camión lleno de más autos lo hubiera arrollado por completo. Incluso tomó en cuenta el hecho de que lo hubieran atropellado, por esa razón estaba en un hospital ¿No?

Con pesadez, se levantó de la cama y tocó su frente, sintiendo de inmediato un dolor punzante en esta misma zona y unos sonidos raros que de seguro emitían esas asquerosas máquinas, de las que no se había percatado de su presencia hasta ese momento.

- Mierda. - susurró con temor de haber cometido algo grave. No recordaba casi nada a excepción del buen sexo que iba teniendo con Ho Seok.

- Sí, mierda. - contestó alguien. Tae Hyung de inmediato miró al frente, encontrándose con sus padres, su madre indiferente a la situación y su progenitor con una cara de pocos amigos.

Maldijo el doble al encontrar a sus padres en lugar de su novio.

- ¿Recuerdas algo de lo que sucedió? - preguntó su padre. El menor negó. - me lo suponía, sin embargo, eso ya no importa desde ahora, tu presente es aquí y ahora, todo lo que haya sucedido con ese bebé o con ese hombre es cosa del pasado.

La cabeza de Tae Hyung daba vueltas y casi explota al escuchar la palabra bebé y pasado. Eso no tenía sentido, ¿De qué bebé hablaba su padre? Y ¿Por qué Ho Seok era cosa del pasado?

No comprendía nada y lo poco que llegó a entender no le servía para pensar o reconstruir lo que sucedió esa noche.

- ¿Qué bebé? - se atrevió a preguntar, mirando directamente a su padre y a su madre, esta última rio al darse cuenta de lo ocurrido y no desaprovechó la oportunidad de encarar a su hijo y hacerle sentir mal.

- ¡EL QUE MATASTE POR ANDAR DE DROGADICTO! - el grito de la mujer se escuchó por toda la habitación, incluso se podría decir que los pacientes de al lado lo escucharon por igual.

Tae tragó grueso, tratando de analizar lo ocurrido y de procesar las palabras dichas por su madre.

- ¡NO TE ATREVAS A HABLARLE ASÍ! - también gritó el padre. La señora Kim miró mal a los dos hombres y terminó por salir del lugar, veía aquello como algo insólito, no podía soportar como su esposo mal acostumbraba a su hijo, y lo trataba como si fuera un niño de 10 años cuando en realidad iba a cumplir ya 22 años.

Mientras tanto, dentro de la habitación se encontraba un padre que aún pensaba en como decirle a su único hijo que acababa de perder un bebé por culpa de su irresponsabilidad y claro, de su pareja también. De por sí ya era algo difícil decírselo a una madre joven, no imaginaba qué sucedería al decírselo a su hijo.

- ¿Dónde está HoSeok? Quiero verlo. - pidió el pelirubio.

Por acto reflejo, el señor Kim apretó sus manos hasta formar un puño, y es que ese chico seguía sin caerle del todo bien. Jung Ho Seok solo significaba desgracia en la vida de su hijo, de su pequeño.

- Tae Hyung, tenemos que hablar sobre eso...

- ¿¡DÓNDE ESTA HO SEOK!? - pidió nuevamente, gritando en esta ocasión. - ¡Y QUÉ MIERDA SIGNIFICA ESO DEL BEBÉ!

El padre ya podía observar la desesperación en los ojos de su hijo, la forma en la que se comportaba no era normal, aunque para ser sinceros, Tae Hyung nunca se comportó como los otros niños de primaria o de secundaria, jamás fue normal, pero el señor Kim adoraba a su hijo, ¿Qué padre no lo haría? Todos los padres adoran a sus hijos y ven el lado bueno de este, suprimiendo los malos comentarios e ignorando algún defecto que otras personas puedan ver en sus primogénitos.

- Está bien. - aceptó el hombre mayor. - Pregunta todo lo que necesitas saber, yo contestaré.

Tae trató de tranquilizarse un poco, aunque moría de ganas de saber qué había ocurrido, dónde estaba su novio y por qué no sentía la parte inferior de su cuerpo o incluso por qué se encontraba en una camilla de hospital.

- ¿Qué es eso del bebé? - preguntó temeroso, esperando que eso solo haya sido una tonta broma de su madre y de verdad no haya matado a una criatura inocente

- Tuviste una aborto espontáneo, todo fue ocasionado por las drogas y la mala alimentación que llevabas. El feto no iba a terminar por desarrollarse, en cualquier momento moriría. - explicó. De inmediato, Tae Hyung se quedó helado, por así decirlo. Su corazón dejó de latir por un momento y su mirada se perdió. Ahora sólo podía observar a un chico desorbitado, pálido y con los labios resecos. - No debes sentir culpa, hijo. Toda la culpa fue de ese hombre, pero me aseguraré de que no vuelvas a verlo, pagará por todo lo que te hizo. Lo aseguro totalmente.

Y entonces, el pelirubio salió de su ensoñación, en donde había estado imaginando momentos bellos al lado de su posible hijo y Ho Seok, ambos como una verdadera familia, sin matanzas, ni cadáveres que puedan influir en su presente y llevarlos a la cárcel de por vida.

- ¿De qué estás hablando? ¿Dónde se encuentra Ho Seok? - las preguntas atacaron al señor Kim y la respuesta fue obligada a salir de sus labios.

- Hijo, ese chico tiene que pagar por todo lo que ha hecho. El daño que te causó y la pérdida de tu hijo es algo grave, sin contar que es un ladrón.

- ¡El niño también era su hijo y jamás logró robarme nada! ¡Trae a Ho Seok en este instante!

El padre se negó y no es que fuera difícil traerlo, pues sacar a una persona de la cárcel es sólo mediante una fianza, que el señor Kim no estaba dispuesto a pagar.

- No puedo. - dijo indiferente.

Tae Hyung solo dio como respuesta un grito, unas sacudidas de piernas (apenas, pues estas le pesaban mucho) y manos, tal y como cuando un niño hace berrinche.

- ¡TRAE A HO SEOK! ¡QUIERO VERLO! ¡TRÁELO! - gritos y más gritos se escucharon.

El señor Kim por más que trató de calmarlo, no lo logró, por lo que solo optó por decirle la verdad.

- ¡NO PUEDO TRAER A HO SEOK DE VUELTA PORQUE ESTÁ EN LA CÁRCEL! - eso fue como un botón de apagado en el cuerpo de Tae Hyung, quien dejo de hacer todo tipo de berrinche y se detuvo a observar detenidamente a su padre.

No había acabado de procesar el tema de bebé y tampoco creía que pudiera terminar de procesar el hecho de que Ho Seok se encontraba en cárcel y no junto a él.

Ambos, tanto padre como hijo, se mantuvieron sumidos en un silencioso sepulcral, mirándose y perdiéndose en las facciones del otro... ambos estudiándose mutuamente.

- Y muy pronto su hijo también lo estará. - irrumpió alguien.

Ese alguien era nada más y nada menos que ChanYeol junto a su esposo y compañero.

Los pasos igual de limpios y coordinados del detective hicieron eco en la habitación.

El señor Kim abrió sus ojos en par y no comprendió nada hasta que logró ver cómo se llevaban a su hijo, importándole muy poco que Tae Hyung esté en un hospital o conectado a algunas máquinas.

- ¡NO SE LO PUEDEN LLEVAR! ¡MI HIJO NO HA HECHO NADA MALO! - reclamó el padre.

- Eso no es lo que dice Jung Ho Seok. - mintió el más alto, tomando del antebrazo al pelirubio. - su hijo está implicado en el asesinato de Karina Woods, al igual que ese otro asesino, que ahora está tras las rejas gracias a su dinero.

Tae miró a su padre, rogando en el interior para poder matarlo con solo verlo de esa manera. Y es que no comprendía el odio que tanto le proclamaban a su novio, Ho Seok era alguien bueno, tenía sus defectos al igual que cualquier hombre o mujer, pero era bueno en todos los sentidos.

Sus manos fueron llevadas a su espalda y esposadas en esa posición mientras que su mirada viajó desde su padre hasta su madre, quien parecía desprender sorpresa mediante una sonrisa de oreja a oreja. Miró mal a las personas que le dieron la vida y caminó sin oponer fuerza, pues sabía que al final vería a Ho Seok y podría decirle que su embarazo fallido no fue culpa de él, que podrían volver a intentarlo y lograrlo.

Solo quería ver a HoSeok, pues dentro de su cabeza se desataba una guerra emocional que solo le causaba más confusión y desesperación.

[❦]

Regresé después de tiempo. Ahora estudio los sábados, que sad conmigo ;-; Tengo otro capítulo más para escribir, pero el tiempo me gana y la batería por igual u.u

Nota actual:

Maratón 4/5

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top