❦ Capítulo 12: Sexo
Las piernas del menor fueron a parar en la cintura de Ho Seok, quien comenzó a ejercer movimientos circulares, logrando sacar suspiros y gemidos de parte de Tae Hyung. La fricción que se daba entre ambos cuerpos era exquisita, el pelinaranja simulaba embestidas mientras le "comía" la boca a su pareja. Por su parte, el pelirubio se sentía en el paraíso, los empujes que recibía, aún estando con ropa, lograban volverlo loco, al igual que los labios de Ho Seok encima de los suyos.
- ¡Ho..! - soltó un grito inconcluso cuando logró sentir las manos frías de su pareja rodeando su pene y empezando con un lento vaivén que estaba logrando ponerlo más duro que antes. Sin embargo, Ho Seok no se detendría por más gritos o rasguños -que por cierto ya había comenzado a sentir en su espalda- le entregara o diera, Tae Hyung. Él estaba dispuesto a hacerlo fuerte y sin compasión.
El glande fue apresado entre sus dedos, Ho Seok lo masajeó y delineó a su gusto, mientras que su vista se fijaba en una sola cosa: Tae Hyung soltando suspiros y cerrando con mucha fuerza sus ojos; la extensión fue atrapada, de igual manera, por las manos del pelinaranja, quien ya tenía una dolorosa erección dentro de sus pantalones.
Tae iba a correrse, estaba a punto de hacerlo, cuando la mano que se encontraba bombeando su pene se detuvo. Sus ojos lograron abrirse en par y notar la sonrisa malévola que destellaba en el rostro de su pareja; rogó y gimió en alto, pidiendo que volviera a tocarlo, sin embargo, Ho Seok no le hizo ni el más mínimo caso.
Jung prosiguió a soltar las piernas de su contrario para tratar de bajarse el cierre del pantalón, prenda que le estaba jodiendo desde que comenzó a excitarse minutos atrás. El pelirubio se apoyó en sus codos mientras observaba la imagen tan sexy de su pareja y rio al ver que no podía hacerlo solo, razón por la que comenzó a ayudarle con sus manos. Ho Seok gimió ante el toque tibio de su pareja dentro de sus pantalones; ambos cuerpos estaban sumamente calientes, ocasionando cualquier sensibilidad ante el toque frío de algo.
Los labios volvieron a unirse al dejar en libertad el miembro del mayor, que estaba más que duro y mojado. Ho Seok paseó sus manos por las piernas desnudas de su novio y comenzó a levantar la camiseta -que por cierto era suya- que traía este, dejándolo semidesnudo.
- ¡Ah!.. a-amor.. - susurraba Tae al encontrarse con las piernas abiertas y enredadas en la caderas de su novio, con un dolor espantoso en su zona baja al no poder correrse y con su cuerpo sumamente pegado al de su contrario.
Ho Seok no se extrañó ante el apodo cariñoso, pues Tae Hyung siempre solía decir alguna palabra tierna en pleno acto sexual, tomándole poca importancia a aquel asunto, pasó a dirigir sus labios al pecho del menor, para ser exactos, a sus pezones, que fueron objeto de diversión para la boca del pelirrojo, quien succionó y mordió a su gusto.
- Mmm, Ho-Ho ¡Ah! - gimió el pelirubio al guíar el movimiento de las succiones, teniendo una de sus manos entre los cabellos de Ho Seok, este último logrando saciarse con el sabor exquisito de su contrario.
- Eres mío, Tae Hyung, solo mío - sentenció el pelirrojo al haberse alejado del pecho del aludido y dirigiéndose esta vez a sus labios, que contaban con una herida, producto de su pelea; pasó a saborearlos y acariciarlos con los suyos, obteniendo un gemido bajo.
Jung no tardó ni más de cinco minutos en alejarse del beso y bajar la ropa interior de Tae Hyung, no hubieron protestas, ni nada por el estilo, sólo gemidos y jadeos que demostraban el placer mutuo.
Para cuando ambos se encontraron desnudos un silencio embargó la habitación... un silencio en el que solo las miradas de ambos hablaban por ellos. Ho Seok miraba a Tae Hyung y viceversa, parecían querer expresar algo más allá de lo que siempre se decían, pero eso no pudo ser, pues el mayor rompió con la tensión del momento y en un intento de olvidar aquello, se dirigió hacia las piernas del menor, lugar donde comenzó a dejar marcas, ya sea apretando o succionando. Tae Hyung rio y gimió cuando sintió un fuerte respiro en su muslo interno. Ho Seok estaba muy cerca del pene de Tae e importándole poco o nada, se aventuró a hacerle una mamada al pelirubio, iniciando con el glande, que entró por completo a su boca; no podía negar que Tae Hyung la tenía grande, pero tampoco iba a aceptar que su novio le ganara en cuanto a tamaño, claro que no, Jung la tenía igual o incluso más grande que su gran ego.
- N-no lo hagas - dijo Kim, tratando de alejar con sus manos a Ho Seok. No es que no disfrutara de aquella primera felación que le estaba entregando nuevas sensaciones. Lo hacía. Disfrutaba, pero odiaba ver que su novio hiciera el trabajo que se le estaba asginado a él, pues para Tae Hyung, Ho Seok solo estaba para metérsela y listo. - Yo lo haré. - Logró formular aquellas palabras antes de tirar su cabeza para atrás y gritar. El mayor había logrado meterlo todo en su boca.
Las expresiones de su novio fueron suficientes para Ho Seok, quien se vio en la obligación de tragarse el semen de este, pues Tae Hyung se había corrido sin avisar, esto definitivamente merecía un castigo, o eso pensaba Jung, quien no tardó en posicionarse y tomar con fuerza las caderas de Tae, simulando embestidas nuevamente.
Por otro lado, el pelirrojo no estaba feliz, el dolor en su pene lo mataba de a poco y las ganas de romperle el culo a Tae Hyung eran más grandes que su propia racionalidad. Fue de esa manera que se adentró en el menor, importándole poco el lubricante o la protección, que por cierto habían dejado de usar hace más de tres meses atrás.
El grito desgarrador se hizo escuchar por toda la habitación e incluso por el departamento entero. Las lágrimas no se hicieron esperar, al igual que las embestidas que comenzó a dar Ho Seok.
Las manos de Tae Hyung se aferraron a la espalda de su ajeno, arañando esta con poca delicadeza y sirviendo de soporte para no desvanecerse en pleno acto sexual.
Por su parte, el pelirrojo no dejaba de pensar que el sexo con Tae era mucho mas delicioso que con una mujer; su pene era apresado y podía jurar que el menor nuevamente tendría otro orgasmo, pues sus paredes se contraían cada vez más, haciendo que las penetraciones fueran lentas.
- T-te amo... - susurró el chico de cabellos rubios antes de dejar caer sus manos y chocar su espalda con la cama, logrando sumirse en el placer que le brindaba su segundo orgasmo.
Ho Seok siguió con las embestidas hasta que sintió que no aguantaría más, dejándose caer encima de Tae y disfrutando del orgasmo que lo había atacado.
- También te amo. - musitó el mayor, saliendo del interior de su pareja y acomodándose a su lado.
Tae Hyung sonrió a más no poder y se lanzó a abrazar a Ho Seok, quien inició con un beso lento y suave para su gusto. Ambos se abrazaron, como cualquier pareja al término del acto sexual.
- Harías lo que sea por mí, ¿cierto? - cuestionó de improviso el mayor. Tae salió de sus pensamientos y no tardó en asentir.
- Aborta. - dijo el mayor, convencido en la decisión de no tener hijos.
- No estoy embarazado. - apenas terminó de formular aquello comenzó a reír. - No tendremos ningún hijo... por ahora.
Ho Seok se tranquilizó y abrazo a Tae Hyung. Por lo menos no tendría de que preocuparse aún.
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Mi lemon del aska :'c
Nota actual:
Maratón 2/5
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