Nuevamente Ho Seok fijaba su vista en la mansión de los Kim, era un lugar muy bello, grande y se podía notar claramente que estaba hecho por y para millonarios. El pelinaranja no entendía cómo o por qué Tae Hyung odiaba ese tipo de vida, si él hubiera tenido la oportunidad de vivir en ese lugar, jamás se hubiera marchado, como lo hizo su novio.

- Solo serán diez minutos. - aseguró el menor con una sonrisa plasmada en su rostro.

Ho Seok asintió sin darle mucha importancia al tono meloso y tierno que estaba utilizando su novio, poco o nada le importaba el comportamiento que tenía Tae Hyung con él.

El rubio corrió por las escaleras hasta llegar a la puerta principal y esta vez no hizo falta tocar para que alguien lo recibiera, pues su padre ya se encontraba de pie, delante suyo, junto a su madre, quien tenía una cara llena de preocupación y asombro.

- Entra ya - la voz de su padre sonó, por primera vez en toda su vida, autoritaria.

Tae Hyung lo ignoró por completo, pero acató sus órdenes, entró a la mansión mientras que Ho Seok solo se dedicaba a observar el lugar y sus alrededores, buscando algo que tuviera un gran valor como para robarlo y venderlo.

- ¡NO PUEDES ESTAR CON ÉL! - gritó el padre, estando dentro de la casa, para ser exactos en la sala de estar.

Tae Hyung lo ignoró por completo y prosiguió con lo acordado: pedir lo que tanto deseaba.

- Necesito dinero. - sentenció. - sin contar que también requiero de mis tarjetas nuevamente.

El hombre mayor abrió sus ojos en par. ¿Acaso su hijo no le había escuchado? Estaba más que claro que no.

- Tae, cariño... - empezó su madre, acercándose de a poco a quien era su primogénito. - Ese chico no es bueno para ti, dicen que anda en drogas.— El aludido la miró de pies a cabeza y no tardó en levantarse del sofá para emprender marcha hacia la puerta principal, algo que no logró concretar, pues el grito de su padre lo detuvo en su totalidad.

- ¡SI LOGRAS CRUZAR ESA PUERTA, TE OLVIDAS DE QUE ERES NUESTRO HIJO Y DE QUE TE SEGUIREMOS DANDO DINERO A PESAR DE QUE NO VIVES CON NOSOTROS! - el grito del padre se logró escuchar por toda la casa e impuso un poco de respeto hacia su persona.

Tae Hyung no vio de otra, más que hacer caso y regresar al sofá, al lado de su madre. El señor Kim sonrió mentalmente, ya tenía a su hijo entre sus manos. Sabía que podía controlarlo si de dinero se trataba.

- No pienso dejar a Ho Seok. - sentenció el menor, retando con la mirada al que era su padre. Este ultimo bufó en respuesta y negó con la cabeza.

- Te ordeno que lo dejes. Él no te hace ningún bien Tae Hyung.

El mencionado comenzó a reír de manera abrupta y no dudó en tocarse la barriga por el dolor que le estaba causando soltar tantas carcajadas

La madre del chico solo tenía la mirada preocupada, ella amaba a su hijo, pero en momentos como ese, creía que su único heredero estaba mal de la cabeza.

- Tae, bebé, él te puede hacer daño.. - la mujer trató de tocarlo, pero este solo la recibió con un empujón y con el ceño fruncido.

- ¡NO VUELVAS A INTENTARLO! ¡NO INTENTES TOCARME NUEVAMENTE! - gritó a todo pulmón el menor. El padre lo observó todo, pero no dijo ni objetó algo, pues sabía que sí decía algo fuera de lugar podrían perder para siempre a su hijo.

- Quiero mi dinero. - habló Tae Hyung, mirando a la vez a su padre. El hombre mayor suspiró y se dirigió hacia el gran ventanal de la sala de estar, desde ahí podía mirar a la "pareja" de su hijo y juzgarlo completamente. No era un buen partido para su pequeño.

- No ha pasado ni dos semanas​ desde la última vez que te entregué dinero. - dijo tranquilamente el señor Kim. - ¿Estás seguro que el dinero que te entregó es para ti?

Tae Hyung ni se inmutó, sabía que si daba indicios de sorpresa o algo parecido, sus padres descubrirían que el dinero que se le era entregado iba a las manos de Ho Seok y era gastado en todos los lujos que este se daba y le compartía en algunas ocasiones.

- Sólo rompí algunas cosas en el departamento y necesitaba arreglarlo... por esa razón me gasté el dinero en menos de un mes. - en todo momento trató de sonar convincente, algo que no le sirvió del todo, pues sus padres ya no eran tan tontos, no desde que Jin les dijo la verdad. - ¿Me piensas dar el dinero o seguirás observando a mi novio por la ventana?

El padre suspiró y asintió, sacando de su bolsillo derecho un cheque. Su hijo estaba antes que todo, incluso, antes que su propia esposa.

Tae Hyung se colocó de pie con una sonrisa plasmada en su rostro y no tardó en tomar el cheque entre sus manos y admirar los ceros que se encontraban en estos. Eran seis ceros en total, su padre era el mejor en cuestión de dinero.

- Tus tarjetas serán liberadas de inmediato, podrás ahorrar o retirar dinero de cualquier cajero del país.

El rubio no evitó sentir una gran felicidad en su pecho al escuchar aquello, jamás pensó que sus padres le devolvieran todo su dinero después de que logró escaparse de su casa y ser "independiente".

- ¿Entonces...? Nos vemos dentro de un mes o tal vez un año. - Tae Hyung ya había girado sobre sus talones y se dirigía hacia su madre con la intención de despedirse, cuando su padre volvió a hablar.

- Quiero conocer a Jung Ho Seok. - esas cinco palabras lo detuvieron por completo y esta vez no pudo evitar abrir la boca y mostrar el asombro a través de su rostro. - Quiero darle el permiso adecuado para que esté contigo. — El rubio se estremeció en su sitio y viendo el rostro preocupado de su madre, negó lentamente. - Jin nos contó que ese chico era alguien que sólo te utilizaba por el simple hecho de que tenías dinero, pero no creo en el mentiroso de tu primo, por lo que quiero hablar con Ho Seok, así se llama, ¿cierto?, bueno eso no importa, lo que de verdad me interesa es que quiero tener una cena con ustedes y así conocer al novio de mi maravilloso hijo. - Tae pudo notar la burla en el tono de su padre. Él lo estaba provocando e iba lograr enojarse enserio si seguía con aquello. - ¿Qué dices, Tae? ¿Tu novio puede cenar con nosotros?

El pelirubio no contestó, solo respiró hondo y continuó con su camino, importándole muy pocos los gritos de su padre o los llamados de su madre.

Salió casi corriendo de su casa y de igual manera entró al auto, donde Ho Seok lo esperaba.

Con aquello, sus padres confirmaron todas las "mentiras" que les había venido a decir Jin la noche anterior. Su hijo estaba siendo utilizado como cajero automático de un drogadicto y asesino; nadie querría eso para sus hijos, ¿cierto?, pues eso tampoco querían los padres de Tae Hyung para este mismo.

Ellos se encargarían de tener de regreso a su hijo. Mientras tanto, Ho Seok y Tae Hyung se habían detenido en el banco más cercano a la mansión de los Kim para retirar todo el dinero que se la había sido entregado al menor de ambos.

El rubio colocaba la contraseña y no dudaba en vaciar todas las reservas de sus tarjetas. Ho Seok, en cambio, aprovechaba aquello para recibir dinero y guardarlo en una maleta negra.

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- Te amo - murmuró el pelinaranja, teniendo entre sus brazos a un extasiado e ido Tae Hyung. Ambos se encontraban en la cama matrimonial del departamento del menor y con el dinero lanzado a alguna parte de la habitación, al igual que las jeringas que contenían la heroína.

Inicialmente, habían gastado la mayoría de dinero en una mercancía muy buena y recomendable, sin contar que también habían comprado heroína en polvo, como metanfetamina y la droga más común en todo el mundo: la cocaína.

- Yo también te amo, Ho Seok. - murmuró el rubio mientras miraba un punto perdido en el techo de la habitación. El mencionado sonrió como loco antes de subirse en el regazo de su pareja y comenzar con besos rápidos y llenos de pasión. El menor recibía todo lo que le daba su pareja mientras gemía y soltaba gritos al sentir mordidas.

Iban avanzando de a poco, ahora se encontraba a tan solo dos prendas de quedar desnudos y empezar a hacer el amor, cuando el pelinaranja mencionó algo que alteró al rubio.

- Matemos a tus padres. - susurró Ho Seok contra la piel de su novio.

Tae Hyung dejó de disfrutar y empujó a su novio, mirándolo mal de pronto.

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¿Con quién emparejan a Seul Gi de Red Velvet? Por otro lado, el Ho Seok del multimedia me repone 7uu7

Nota actual:

Último capítulo de la maratón. Espero que les haya gustado ❤