Capítulo dedicado a leidyvh_ym ♥

[❦]

¿Por donde empezar? ¿Por los golpes? ¿Los abusos? o ¿Las malas juntas que me llevaron a ser la persona que ahora soy?

En ese entonces mi vida era una miseria. Nací en una familia cruel, infundada por el miedo y temor a mi padre, un hombre de no más de 30 años que se dedicaba la mayor parte de su tiempo a beber, violar y asesinar a jóvenes.

¿Lo sabía? Pues claro que lo sabía, tenía que saberlo, era mi padre ¿no?

Mi madre, por otro lado, era un prostituta muy conocida en los barrios bajos por su belleza y su perfecto cuerpo. También lo sabía, incluso podía ver como se vendía a mis compañeros de la escuela.

Crecí en ese mundo, sumergido en la miseria y en los horrores que hacían mis padres. Mi hermano mayor, Yoon Gi, me quiso ayudar, pues él era el único que sí había logrado salir de esa espantosa vida y ejercía una carrera de abogado, pero... yo solo tenia 18 años y como cualquier joven de esa edad, creía que tenía el mundo a mis pies, por lo que ya había decidido el rumbo de mi vida. Disfrutaba ver como mis víctimas pedían a gritos y súplicas perdón, cosa que no les daba, al contrario, los mataba a balazos o a puñaladas.

Yoon Gi no quería ese destino para mí, su pequeño hermano, pero no podía hacer nada más, yo ya había decidido el estilo de vida que llevaría y él no podía  forzarme a nada. Ya era mayor de edad y sabía lo que quería y lo que hacía.

Por mi parte, ya había conseguido una " mujer y unos amigos. Según yo, no necesitaba de nada más, pero al enterarme de que la puta que tenía como esposa estaba esperando un hijo mío, la maté a simples golpes. No deseaba formar un familia, muy en el fondo tenía miedo de traer niños al mundo, no quería hacerlos sufrir, ni pasar por todo lo que yo viví.

Para los 25 años ya había olvidado a aquella mujer que me iba a dar un hijo y ahora solo me enfocaba a buscar amoríos por las noches, llegando al punto de matarlas al no complacerme. Así era mi vida, llena de asesinatos, drogas, sexo y alcohol, pero me gustaba vivir de esa manera, mejor dicho, amaba vivir de esa manera, al igual que amaba a mi pequeño sobrino que había conocido hace más de un mes. El pequeño SungMi era un copia idéntica de Yoon Gi y del bello cuñado que tenía, Park Ji Min, con quien intenté muchas veces tener más de una aventura, pero ese enano con un buen trasero nunca me lo permitió. Ji Min amaba a Yoon Gi, al igual que a mi mejor amigo, Jung Kook.

ES UNA MALDITA ZORRA, eso fue lo primero que pensé y dije al ver que el "maravilloso" esposo de mi hermano tenía encuentros sexuales con mi mejor amigo. Pero nunca dije nada, adoraba demasiado a mi sobrino como para destruir su familia.

Para los 29 años, volví a casarme. Esta vez había jurado cambiar y amar a Soo Min en las buenas y en las malas. El primer año juntos fue puras maravillas en el ámbito sexual, pero al llegar al segundo, conocí a un chico diez años menor que yo, algo que no fue un impedimento para llevármelo a la cama.

Tae Hyung, así se llamaba el chiquillo. Pensé que fue algo de una sola noche, pero él quería más, deseaba más, al igual que yo. Ambos iniciamos una aventura que no nos llevó a nada bueno. Terminé enamorándome de ese pequeño rubio, al igual que él de mí.

Por otro lado estaba Soo Min, ella era realmente inocente e hipócrita al creer fielmente en mis palabras cuando había presenciado como se la iba metiendo a Tae Hyung en nuestra propia cama matrimonial. Pero todo lo hacía por el bebé que llevaba en su vientre. Sí, me convertiría en padre nuevamente.

Al recibir la noticia sentí enloquecer e incluso me apresuré a darle dinero para el aborto. Lamentable fue la situación al enterarme que Soo Min ya tenia tres meses de gestación. No podía hacer nada.

Esa misma noche me fui a revolcar con Tae Hyung, ambos debajo de las sábanas y con la calentura del momento juramos matar a esa "perra y a ese bastardo que esperaba", para al final reírnos mientras nos entregábamos de manera pasional.

Para los siete meses de Soo Min, la llevé a un parque a media noche. Estaba casi seguro de que ella ya sospechaba algo, pero traté de creer que ella era una estúpida... una estúpida que luchó hasta el final.

Tae Hyung se encargó aquella noche de desaparecer a mi esposa e hijo. Él la apuñaló en el vientre y luego en el pecho, introdujo el cuchillo más de veinte veces y al terminar, la quemamos juntos.

Nadie investigó la desaparición de mi ex esposa y tampoco sospecharon de alguien como yo... Nadie se preocupó por una zorra como ella.

[❦]

Regresé con esta sádica historia, espero que sea de su agrado.

La única advertencia que pueda dar es que estén preparadas para todo y que no falten el respeto, si es que algo no les llega a gustar.