La época de lluvia en Atomic City siempre era bienvenida por los ciudadanos, incluso para los androides que recorrían las calles. El parque central de la capital era el más frecuentado para pasear e incluso si había lluvia los locales en los alrededores protegían a la mayoría de las gotas de agua. Dazai por su parte, se escondía de la lluvia bajo un árbol, después de todo si un rayo decidiese apuntar hacia él estaría agradecido.

Las luces neón eran como manchas borrosas, incluso mirando las gotas de lluvia golpear el suelo, todas se dispersaban entre ellas. Pensar en el proceso de las gotas separándose era mejor que pensar en las cosas que habían pasado en toda la semana, Dazai no era una persona positiva para ser honesto consigo mismo, a veces creaba la fachada alegre para las personas que preferían ese tipo de filtro, crear máscaras y fachadas era una especialidad aparte de su ingenio como científico. A veces le gustaba pensar que en una línea alterna fue actor, al menos sus mentiras y máscaras llevarían el nombre de un personaje. Pensar en películas actualmente era ridículo, pocas personas veían filmes, era algo poco común en la actualidad.

Él tampoco las conocía hasta hace tres años. Oda Sakunosuke fue quien le mostró que eso existía.

Odasaku como le gustaba llamarle, un tonto mote cariñoso que le pareció en su momento gracioso, y Odasaku no parecía molestarle. Nada le molestaba en realidad.

Conocerlo fue una de las mejores cosas que pudo haberle sucedido a Dazai, para él la ciencia en la que tanto trabajaba y estudiaba era algo que no disfrutaba hacer, pero al ser el hijo y pariente de los fundadores de MIND AND SOUL tenía que ser parte del equipo de científicos y trabajadores del lugar. Pero en estos momentos Dazai quería reírse de la ironía de la situación, sus padres lo forzaron a permanecer incluso cuando él expresó su descontento por las formas en las que se llevaban acabo las investigaciones, y ahora los altos cargos lo habían echado del lugar con una amenaza sobre no volver. Sus padres también cerraron sus puertas tan pronto como escucharon lo que su hijo estaba haciendo, por supuesto, no dejarían su lugar de trabajo.

Después de todo en Atomic City no importas si no tienes estatus social.

Dazai debería estar feliz, ya no estaba bajo el manejo de sus padres, por fin podría dejar de hacer pruebas de laboratorio, no tendría que pasar horas en el establecimiento buscando el error que otros cometían, no tendría que forzar a nadie a colaborar por el avance al futuro... sin embargo, desde dentro era más fácil ingresar a la información. Estuvo meses tratando de encontrar documentos, grabaciones, pistas... algo que lo conectará a ese día.

El día en el que encontraron el cuerpo de Odasaku.

Dazai aún sentía náuseas al recordar el estado en el que el cuerpo fue llevado para ser reconocido, siendo Dazai el único el que asistió al lugar. El olor a químicos, sangre y metal le dio la bienvenida, incluso al lugar al que lo habían enviado era una morgue la cual era generalmente para aquellos quienes no tenían fondos para siquiera pagar una cremación, por más indignado que Dazai se hubiese sentido, en ese momento era más fuerte el horror que crecía en su pecho al ver a su amigo totalmente irreconocible, sus brazos completamente destrozados, sus manos habían sido suplantadas por unas de metal, un modelo con el cual Dazai estaba relacionado, pues juntos habían creado esas manos hace años atrás. Su otra mano ni siquiera estaba, la ropa rota escondía pocas partes de su cuerpo pero podía ver que trataron de alterar sus proporciones humanas por unas más robóticas.

Forzaron su cuerpo.

Su cuerpo estaba temblando mirando a su amigo en la mesa, incluso sus ojos azules no fueron cerrados antes de entregarse a la muerte, estaban inyectados de sangre, aquella calma que siempre tenían esos amables ojos ahora miraban el techo sin vida. Dazai recuerda haber caído al suelo negándose a creer que quien estaba ahí era Odasaku, no lo era, ¡NO PODÍA SER ÉL! ¡No! ¡No! ¡No!

Incluso mientras estaba gritando con las lágrimas llenando su rostro, el hombre quien lo guió a la habitación solamente se cruzó de brazos poco interesado en la escena frente a él, acostumbrado a esto.

"Oye, chico, está muerto "el tono helado del hombre le hizo levantar la mirada. " Solo dime si lo conoces, paga la factura si deseas un decente utensilio para meter las cenizas y firma el puto documento para que puedas irte. Tengo trabajo que hacer.

Dazai recuerda poco después de esa interacción con el hombre, pero si recuerda haber incendiado algo en el lugar. Por suerte, era una morgue para gente pobre, incluso si el hombre quiso reportarlo, nadie le daría la atención necesaria para tomar represalias contra él.

No pudo llorarle correctamente, no se lo permitieron porque Atomic City no tiene espacio para las emociones como la tristeza, la ciudad después de las guerras era un lugar la cual se jactaba de ser diversión, lujos y libertinaje. La cruda muerte era algo ignorado, aquellos que le tomaban demasiada atención a los fallecimientos eran considerados "dañados", sentir demasiado no era parte del programa. Tenías que seguir el ritmo de la ciudad, si alguien fallecía entonces debías beber, bailar o comprar un androide de compañía. A Dazai le enfermaba el sistema y el ritmo al que todos habían cedido seguir.

Estar sentado debajo de un árbol también era algo extraño para las personas que estaban pasando a su lado, lo estaban juzgando y algunos comenzaron a señalarlo. Pero Dazai nunca fue de los que le importara lo que los estúpidos de la ciudad sin cerebro opinaban, la única opinión y critica que aceptaba era la de Odasaku, su amigo y...

"Joder, joder, joder"

El cuerpo de su mejor amigo nuevamente aparece en su mente atormentándolo, no importa cuán fuerte agite su cabeza tratando de sacarlo, no puede. Incluso si tira de su cabello, no puede dejar de pensar en la imagen de su amigo en esa mesa en un lugar abandonado. Ese no era un lugar para un Profesor de robótica con medallas de honor por sus investigaciones e invenciones, sus proyectos de inteligencia avanzada, el primer y único en lograr que una puta máquina pueda llegar a imitar las emociones puras. ¿Qué hacía esa persona tan grande y apremiada en un lugar totalmente pútrido abandonado?

¿Por qué arrancar despiadadamente sus manos para reemplazarla con modelos que no eran su talla? ¿Por qué exigir un cuerpo a adaptarse a un exoesqueleto que no estaba terminado? ¿Por qué su cerebro estaba frito? ¿Por qué forzaron su cuerpo tanto hasta matarlo? ¿Odasaku aceptó para una investigación propia? ¡No, él no haría algo así! ¿Entonces, por qué harían algo tan despiadado? ¿Odasaku estaba... consciente?

Dazai vomita en el árbol sin poder evitarlo, su garganta arde, siente que se asfixia, pero no hay nadie quien pueda calmar el pánico que estaba sintiendo. Nadie extendería su mano a ayudarlo, la única persona que se preocupaba por él había sido asesinado, y nadie parecía prestarle atención.

Nadie en MIND AND SOUL se inmuto por la noticia del fallecimiento de Odasaku, todos continuaron con su día, cuando Dazai ingresó la denuncia para iniciar una investigación, durante dos meses pretendieron hacer su trabajo y pronto cerraron el caso diciendo que no hay rastros de lo que pudo haber pasado, se concluía por falta de pruebas. Dazai golpeó al oficial.

No hubo consecuencias, de nuevo. Después de todo era el puto Osamu Dazai, tenía una empresa gigante cubriendo la puta espalda. Dazai lo odiaba, odiaba tanto que no hubiera represalias en una ciudad tan podrida.

Entonces, decidió investigar todo por su cuenta, de todas formas, él era más que capaz que cualquier autoridad en Atomic City. Durante los últimos cinco meses estuvo buscando sin parar información, solicitando grabaciones de los lugares y rutas que llevaban a la morgue en donde lo llevaron, pero la mayoría de ellas estaban... mal. Puede que su fuerte no sea ser un detective, pero podía intuir que el vídeo estaba sobrepuesto sobre otro, el reflejo de los espejos de los autos le ayudaron a notarlo.

Las grabaciones lo llevaron a un camino sin salida, después de todo saber que estaban manipulados no le mostraba quien lo había llevado, pero le daba el indicio que había algo detrás de la muerte de su amigo. Entonces, decidió seguir los pasos de su amigo revisando las grabaciones del edificio y verlo en vídeos fue abrumador, estaba tan relajado fumando caminando hacia su coche, incluso se despidió de los guardias de seguridad. Dazai tragó el nudo que sentía crecer en su garganta, y luchó por concentrarse, y nuevamente el vídeo se detiene cuando entra al carro, nada sucede después. Ninguna de las cámaras nota el carro salir, y Dazai comienza a desesperarse.

No hay nada.

Toma el camino de revisar todos los documentos de Odasaku, aunque le toma más trabajo saber sus contraseñas y pasar los filtros de seguridad, después de semanas comienza a revisar los correos de Odasaku, y todos son normales. Incluso el chat que tenía con Dazai estaba ahí, sus carpetas de investigaciones, ninguna incluía alteración de cuerpo. Por mucho que leyó y leyó, no logró encontrar nada que pudiese ser de ayuda, todos eran sobre proyectos a realizar con otros colaboradores del lugar. Entonces, recuerda que Odasaku tenía una carpeta encriptada, guardaba la información que no quería perder.

Le toma más tiempo lograr entrar, pero lo logra después de días. Los trabajadores habían comenzado a preguntarle que era en lo que estaba trabajando y debido al estrés acumulado y noches sin dormir se limitaba a responder con monosílabos, lo cual ahora sabe que erró al no crear una mentira adecuada. Quizás eso habría evitado la dramática expulsión como colaborador y futuro postulante a sucesor.

En ese momento no le importaba, algo en su interior le decía que encontraría una pista importante, y no se equivocó. Entre tantas ideas y proyectos secretos de Odasaku encontró una transcripción, de alguien bajo el criptónimo de N.

Era una transcripción sobre N halagando todos los proyectos de Odasaku, pero asimismo invitándolo a beber para hablar sobre un asunto en el que necesitaban ayuda de un experto en la simulación de almas como él. Sin embargo, no mencionaba el lugar ni tampoco la hora de encuentro. Seguramente Odasaku se contactó con él de otra forma.

Pedir los registros de llamadas fue otro movimiento en falso que no consideró.

Escuchar cada llamada fueron otros largos días en los que no se permitió dormir, bebía grandes cantidades de cafeína. Entre todas las llamadas de consultas y otros asuntos relacionados al trabajo había una de ellas que destacó. Una con Ango Sakaguchi.

­"¿Sucede algo, Oda? "el tono monótono de Ango lo hace sonar como un trabajador como los del edificio, Dazai no cree haberlo escuchado antes.

"¿Estás trabajando? "Dazai ya ha escuchado la voz de Odasaku hace varias llamadas atrás pero esta era la única que tenía un tono de voz más suave, más cariñoso.

"... Sí "Ango parece estar buscando un lugar con menos ruido, hasta que logra hacerlo "Lo siento, cariño, no quiero meternos en problemas.

"Lo sé, no te preocupes "la pequeña risa coloreada de tristeza de Odasaku resuena en sus oídos, emociones, emociones reales. Dazai no estaba acostumbrada a ellas.

"¿Hay algo mal? "pregunta Ango casi sospechando el estado de ánimo de... Odasaku.

Dazai nunca pudo adivinar cuando Odasaku estaba molesto, tampoco se llamaron cariño, pocas veces se hablaron suavemente. Dazai sentía que estaba fuera de lugar, en algún momento pensó que sabía cada faceta de su mejor amigo, ¿lo era realmente?

"¿Recuerdas del proyecto al que me invitaron? "murmura Odasaku con un suspiro cansado y Ango solo afirma con un 'uhum' "Pues, decidí rechazarlo".

"¿Oh? Pensé que esto ayudaría con tu investigación sobre las almas"

"Ellos... no creo que quieran saber sobre eso, Ango, ellos están haciendo cosas que... "

Las voces comienzan a fallar y Dazai revisa su computadora mirando como la grabación sigue, pero parece haber interferencia, lo cual sería no sería raro si no estuviese en el puto edificio de inteligencia con la mejor tecnología. Dazai revisa la grabación de nuevo, pero parece dañada, y concluye que definitivamente estas no son coincidencias.

Sin embargo, tiene ahora dos pistas.

N y Ango Sakaguchi, hay un proyecto, pero ¿eran sobre lo mismo o ambos no estaban relacionados?

Eso le llevó a revisar los expedientes de los mencionados.

Ango Sakaguchi

Puesto: Asistente General

Edad: 26 años

Jefe Inmediato: Mori Ougai

...

...

...

Realmente la información no era nada fuera de lo común, solamente se apiadaba del hombre que estuviera que trabajar con alguien tan macabro como Mori, Dazai en lo personal lo detestaba, un poco menos que a sus padres. Mori Ougai había sido su instructor durante los primeros años antes de conocer a Odasaku, cuando ya había sido formado como científico no necesitó que nadie lo guiase para las investigaciones y proyectos que fueron solicitados, pero conocía la personalidad oscura de Mori.

Entonces, Ango Sakaguchi era una persona más normal de lo que esperaba, pero Odasaku nunca lo mencionó frente a él, otro secreto que su mejor amigo le ocultó, pero incluso con su cansancio no podía enojarse, lo haría cuando supiera quien había arrebatado algo tan vivo de Atomic City.

Dejó de revisar la información de Ango cuando no encontró nada relevante.

Y su error definitivo fue buscar en la red de información de MIND AND SOUL sobre N.

Tan pronto como abrió el primer documento, saltaron múltiples ventanas emergentes, y antes de que pudiera reaccionar el sonido de zapatos resonando contra el suelo de mármol se hizo cada vez más fuerte.

Y ahí se encontraba Murase.

Fue en ese momento en el que todo se fue al carajo