Mina se sentó en la mesa larga con la espalda rígida, tratando de no mirar el espectáculo a su alrededor. Demonios. Por todas partes que sus ojos se posaban hallaba más y más demonios.

Refresca mi mente, darling. ¿Habían tantos demonios aquí cuando llegamos esta mañana?

Él le agarró uno de sus puños que descanzaban sobre su regazo y acarició la palma, tratando de calmarla mientras respondía telepáticamente. Sí, pero estaban en sus formas humanas. Como madre envió al personal mortal a casa ahora tienen la oportunidad de caminar en su propia piel. ¿No te aprovecharías una oportunidad como esa si estuvieras en sus zapatos?

—Supongo que sí —murmuró ella sin apartar los ojos de las criadas que caminaban alrededor trayendo comida y vino. Por lo que parecía, las tres hembras eran diferentes tipos de demonios. Una estaba envuelta en llamas y aparentemente desnuda; la segunda tenía la piel gris y alas de murciélago con el interior de un color naranja amarillento; y la última tenía pequeños cuernos que asomaban por sus sienes, extrañas alas pegadas a sus brazos y una cola muy delgada. ¡Al menos las aladas están vestidas! Pero... ¿Qué son?

Vergil rió a su lado sin embargo, antes de que pudiera responder, se abrieron las puertas dobles y entró Lilith, seguida de un diablo con dos cuernos negros en espiral que le recordaban a las astas de ciervo. Espinas negras corrían por su espalda, formando una fila amenazadora que terminaba en la punta de su cola.

El extraño tenía los ojos en el suelo mientras caminaba detrás de la madre de Vergil, pero los levantó en el momento en que la reina mencionó su nombre.

—Éste es Aaron Dittrich, mi querida nuera. Él será tu guardaespaldas de ahora en adelante —La pelirroja sonrió cálidamente.

El diablo levantó la cabeza y cuando su mirada se encontró con la de ella, su aura cambió por completo. Pasó de la oscuridad total a una mezcla de emoción y miedo en tan sólo un par de segundos. Sus hermosos ojos plateados sin irises eran difíciles de leer mas Mina pensó que una chispa de reconocimiento brilló brevemente dentro de ellos antes de que él bajara su mirada una vez más.

¿Quién era esa criatura y dónde lo había conocido? Nunca me encontré con un demonio antes de Vergil, entonces por qué...

Lilith miró a la criatura a su lado y habló con una expresión aburrida.

—Avanza. Muéstrale tu piel humana a tu princesa, Lilu.

Mina notó cómo Aaron apretó la mandíbula cuando Lilith se dirigió a él como "Lilu" e hizo nota mental de nunca llamarlo por el nombre de su raza. Era demasiado obvio que lo odiaba.

La reina demoníaca chasqueó su lengua y él palideció antes de cambiar a su forma humana sin perder un segundo más.

La princesa se puso rígida en su asiento, abriendo mucho los ojos y la boca antes de recuperar la compostura en un instante. Era el mismo... ¡El mismo stripper que Mary trajo a su despedida de soltera!

Aaron tenía una piel ligeramente bronceada, cabello rubio oscuro y ojos verdes claros como el hombre que vino a bailar en uniforme de policía a su casa. Los mismos hombros anchos y el torso bien esculpido que ella... Un furioso rubor calentó sus mejillas cuando recordó qué tipo de paquete estaba escondido debajo de los pantalones de cuero que cubrían sus piernas en aquel momento.

No había ninguna duda al respecto. A menos que tuviera un hermano gemelo en algún lugar de la ciudad, Aaron Dittrich era el hombre con el que había dormido la noche anterior a su boda.

¡Oh no! Miró a su esposo sentado a su lado y el color desapareció de su rostro. ¿Oíste eso?

—Por lo menos no fue un humano.

—Toma tu lugar detrás de la princesa —Lilith atrajo su atención cuando le dio otra orden fría a Aaron, una que él se apresuró a cumplir en segundos. Echó un vistazo al plato vacío de Mina y volvió a chasquear su lengua—. ¿Qué, en nombre de Lucifer, están haciendo? —exclamó la diabla mayor, alzando la voz a las criadas—. ¡Desen prisa y traéganle la cena especial a la princesa!

—Pero puedo comer de lo que ya se ha servido —dijo ella, no queriendo poner a las criadas en problemas por algo que podía hacer por su cuenta.

Cuando extendió su mano para afarrar unas costillas que se veían muy deliciosas, Vergil sostuvo su mano y la detuvo. Ella sintió un breve cambio en su aura, pero no pudo identificar la emoción antes de que todo volviera a la normalidad.

—¿Qué estás haciendo?

—Hoy perdiste mucha sangre, lo que tu cuerpo necesita es algo que te ayude a aumentar la producción sanguinea —El príncipe volvió sus brillantes ojos rojos a los diversos platos de la mesa—. Tienes prohibido comer cualquier carne que no se te traiga.

—¿Estás bromeando, verdad? —
Mina miró a Lilith. La reina demoníaca tenía una media sonrisa en su rostro perfecto, haciéndola parecer más siniestra de lo que ya era. Incluso en su forma humana, su suegra era una dama aterradora.

—No, él no está bromeando, pero basta de eso —La pelirroja agitó su mano como si le restara importancia al comentario—. Vamos a discutir asuntos más importantes ahora. Mina, tienes prohibido abandonar la mansión. Considéralo un arresto domiciliario.

—¿Qué? —exclamó la chica, levantándose de su silla y golpeando la mesa con ambas manos al mismo tiempo que una sirvienta le traía su comida en una bandeja de plata—. What the fuck are you talking about? ¿Me podrías explicar por qué? —Un segundo después, Mina se puso rígida cuando un escalofrío le recorrió la espalda y su voz la abandonó. Algo muy malo estaba dentro de la mansión.

*********************
N/A: Esta actualización se las doy como sorpresa. En realidad me aburrí en el hospital y continué traduciendo 😁. Mañana empezamos con el capítulo 15 💖.

Inglés
1- What the fuck are you talking about?= ¿De qué carajo está hablando?