El horripilante frió del bosque hacia que la rubia se abrazara asimisma mientras frotaba sus brazos con sus manos.

— ¿¡Me pueden decir qué diablos vine a hacer yo aquí!?

— Se supone que a cargar leña Chloé— la castaña se inclinó para recoger un leño que había vuelto a caer—igual que todos los demás.

—¡Guiiiiiuu!¡ni loca recogería esas cosas llenas de polvo y bichos raros!

—Vamos Chloé, no seas así. Tenemos mucho que cargar, asi que por lo menos ayuda en algo—embozó Kim.

Chloé fulminó al chico con una mirada que lo enterraría hasta el centro de la Tierra tan solo estuvieran solos.

—¡Aggh! ¿Saben qué? Mejor comienzo a adelantar, en total, no les hace falta mucho—se giró sobre sus talones para empezar el trayecto.

—Oye, ¡Chloé!...

—Nos vemos al rato.

Kim intentó ir tras su novia pero los pedazos de madera que sostenían sus brazos se lo impidieron.

—No te preocupes viejo. Tendrás tiempo para hablar con ella. — El moreno posó su mano libre en la espalda del esculpido chico, en forma de consuelo.

Los pensamientos de la rubia se encontraban ausentes mientras ella caminaba con la mirada puesta en la tierra y las ramas que pisaba, lo sabía por sus sonidos, pues no lograba verlas del todo.

Chloé se detuvo de golpe. Había escuchado unas ramas romperse, pero el sonido no había sido producido por sus pies.

Alguien estaba detrás de ella.

— ¿Kim? ¿Eres tú?

Caminó hacia el árbol  situado detrás de ella.

—Kim, esto no es gracioso.

La rubia tomó valor. Pensó unos segundos si el ver detrás del árbol sería buena idea o sería una mala decisión.

Su sorpresa fue ver que no había nada detrás del árbol. Poso su mano en la corteza de este y la otra en su pecho mientras suspiraba.

Quiso retomar su camino, pero un pavoroso dolor en su estomago se lo impidió. Bajo la mirada y se encontró con una clase de cuchillo en su estómago.

—Cada vez es más fácil hacer esto.

Chloé levanto la mirada para saber de dónde provenía esa desconocida voz.

— Será mejor que duermas, hermosa.

El sujeto noqueó a la rubia golpeando su cabeza contra el árbol en el que se sujetaba.

Los ojos de Chloé se cerraron, el dolor se desvaneció y todo se volvió oscuro. El único testigo de lo ocurrido sería ese árbol grande y frondoso.

...........

El frío gobernaba en la estancia pero eso no era impedimento para la joven pareja.

— ¡Adrien no! ¡Noo! ¡basta! — la azabache estaba consumida en risas, mientras que las manos de Adrien se movían con rapidez en la cintura y el estomago de Marinette.

—Dí quien es el más amoroso en esta relación y te dejo en paz.

— ¡Pu-pues obvio que yo!¡ ja, ja, ja! ¡Adrien!.

— Lo siento, respuesta equivocada.

— ¡Adrien me haré del baño aquí! — intentó librarse de las manos del rubio pero este fue más astuto al tomar ambas manos con la derecha y seguir provocando cosquillas con la izquierda.

—Pues no me molestaría asearte princesa— embozó una sonrisa ladina mientras que la miraba de forma picara— lo haría con todo gusto.

­— ¡Adrien! ¡No, ya! ¡Por favor para ya! — la azabache se movía de forma escandalosa intentando zafarse de los agarres del rubio.

—No, hasta que lo digas.

— ¡Esta bien! ¡Está bien! ¡Eres tú!

—Perdón señorita, pero ¿Qué soy yo?

Marinette no cesaba de reír. Su única alternativa para salir de ese molesto pero divertido momento sería confesar lo que más rabia le producía pensar y decir.

— ¡Eres tú Adrien! ¡El más amoroso eres tú! — Las cosquillas empezaron a disminuir— el más divertido eres tú— la mirada de la azabache se conectó con las esmeraldas del rubio— el más lindo eres tú.

Adrien posó su mano en la mejía de la azabache para acariciarla con su pulgar. La mirada de ambos seguía enlazada, ninguna presentaba querer terminar con el momento.

—Lamento que hasta el momento no hemos podido estar juntos. Sé que eso es lo que tú quería desde el principio. — Bajó la mirada— Siento ser tan arrogante y molesta...

—Hey, ¿Qué dices? —tomó la barbilla de la azabache haciendo que sus miradas se conectaran. — he disfrutado esto princesa. Sé que no hemos pasado tiempo "a solas" pero no importa, yo me conformo con esto. No te puedo obligar a estar lejos de tu hermana cuando yo fui quien apoyo en que viniera con nosotros.

—Sí, lo sé pero...

—Nada de peros. A menos que quieras que siga con las cosquillas— levantó ambas manos en forma de amenaza cosquillenta.

— ¡No, no! Está bien, no digo nada.

—Asintió con la cabeza—así me gusta...

Ambos estaban en el sillón de la sala de estar. Marinette se recostó en el pecho de Adrien mientras este la rodeaba con sus brazos en un tierno y cálido abrazo.

—Lamento no ser como las demás chicas. No soy muy buena siendo tu novia. — posó su cabeza en el labrado torso del rubio. No quería verlo a la cara y menos a los ojos.

—Yo lamento que pienses eso. — el abrazo se volvió más fuerte pero no molesto; era alentador. — me enamore de tu forma de ser y, si tú no eres la novia perfecta, no sé quien lo sea.

La azabache unió sus carmesís con los esculturales labios de Adrien. Acto al cual el rubio correspondió de manera rápida.

El beso fue tan embriagador que ninguna mostraba alguna señal de querer parar o dar la iniciativa de separarse. Las manos de Adrien estaban ceñidas a la cintura de Marinette. Mientras que las manos de ella estaban posicionadas en el cuello del rubio, despeinando sus hebras doradas.

— ¡A poco no tenía razón! — expuso Kim de manera triunfadora.

Ambos se detuvieron de golpe al ver a su amigo posicionado frente a la puerta con tundas de madera, poco a poco comenzaban a llegar los demás.

—La probabilidad de contacto humano que existía entre ellos era del 99.9% acertada. Por eso decidí dejarlos a solas. —Max venía de la cocina con teléfono en mano.

— ¡A ver, a ver, a ver! ¿Alguien me puede explicar a qué diablos se refieren y porque diántres estaban ustedes afuera? —Marinette se puso de pie con una mano en la cintura y la otra sobre su frente.

—Tranquila chica, solo fuimos por leña. ¿A poco tú no sientes un exagerado frío aquí?

—Mmmm, n-noo— una corriente eléctrica sacudió el cuerpo de Marinette— bueno, ta-tal vez sí. No importa... chicos no tenían que salir, el señor Couffaine dijo que era peligroso y que debíamos mantenernos alejados de la puerta y las ventanas durante la noche.

— ¡Ahh! Esas son tonterías Mari, — musiito Nino— no te preocupes por cosas así, además ya estamos aquí. No te preocupes.

El semblante de Marinette no cambio a pesar de los ánimos que Nino había intentado darle.

—Chicos ¿han visto a Chloé? —Kim se asomó al grupo de amigos con un aspecto preocupado.

.....

El panorama era oscuro. La penumbra abundaba. El miedo era tanto que se podía distinguir a plena vista.

Chloé comenzó a removerse, abrió los ojos, pues un dolor punzante en su estomago le estaba afectando demasiado.

No estaba segura en donde estaba ni que hacia ahí. Lo que si sabía es que no era seguro.

Sus manos estaban atadas y su boca medio abierta se encontraba cubierta por un pañuelo que le impedía poder hablar o gritar.

Intentó removerse y zafarse para liberarse pero eso quedó suspendido hasta que vió como una luz provenía de la lejanía. Una luz que cada vez se acercaba más y más.

Ella fingió seguir desmayada  al empezar a dislumbrar al sujeto que sostenía la luz proveniente de una lámpara.

La luz abundó en la estancia. Logrando hacer que Chloé abriera los ojos para dislumbrar un poco el lugar.

Volvió a cerrar los ojos al ver que el tipo regresaba al lugar en donde ella estaba.

—Se que estas despierta—el tipo le habló de espaldas mientras afilaba una cuchillas.

—¡Sueltame! ¿¡Que quieres de mí!?

—Calma preciosa. Yo no quiero nada de ti. Mi hermana si.

El tipo se acercó hasta quedar a tan solo centímetros de ella.

—Aunque creo que no tienes mucho que darle.

Su rostro quedo completamente visible. Era un chico joven de atractivo físico. Tenía cabello negro con puntas rojizas y unos ojos azules cual océano.

—Sueltame por favor. No diré nada. Nos iremos de aquí,—los ojos de la rubia presentaban miedo y su voz era acompañada de sollozos— N-no hemos hecho, y-yo no he hecho nada para que me hagas esto.

—De hecho, si lo hiciste. Todos lo hicieron y deberán afrontar las consecuencias.— el tipo le amarro los pies con una soga bastante gruesa y la cargó en su hombro como costal de papas.

—¡No, no! ¡Bájame! ¡bájame! ¡Auxilio!—comenzó a patalear y moverse tratando de librarse de los brazos de ese sujeto, lo cual no funcionó.

El tipo la recostó sobre la mesa y le tapó la boca con el pañuelo lo mas fuerte que pudo.

—No hagas las cosas más difíciles.

El joven la cargó de nuevo mientras apagaba la luz y llevaba consigo la lámpara con la cual había llegado al lugar.

      .....

—¡Esto está mal! ¡Esto esta mal! ¡es mi culpa!

Adrien y Bridgette acariciaban la espalda de la azabache tratando de consolarla mientras que ésta estaba escondida en las palmas de su mano.

—A ver Marinette—Alya se colocó de cuclillas frente a la azabache mayor--¿Porqué dices que es tu culpa?

—¡Alya! ¡Y-yo tenía que decirles que no salieran! ¡T-tenían que quedarse en la cabaña! ¡es mi culpa! ¡Esto es mi culpa!—la azabache hablaba entre sollozos, sus ojos estaban llenos de lágrimas.

—A ver Marinette ¿a que te refieres con no salir? —cuestionó el novio de la castaña.

—Se supone que n-no debíamos asomarnos a las ventanas durante la noche y m-mucho menos salir.—limpió las lágrimas rebeldes que comenzaban a salir.

El silencio reinó en la estancia. Solamente se encargaban de soltar miradas de confusión.
Hasta que uno habló.

—Hey hey, esto no es tu culpa Mari, tranquilízate,—el rubio le brindó tiernas caricias en la espalda — se que encontraremos a Chloé, esto es cuestión de buscarla.

—Lo mejor será separarnos— expuso Kim con un semblante serio pero preocupado.

Los chicos se dividieron por secciones, claro que ninguno salió de la cabaña.

Kim caminaba por los pasillos de la cabaña, notando como se observaba algo llamativo sobre una de las paredes. Tocó el artilugio en la pared a lo que rápidamente este fué absorbido por la pared dejando a sus espaldas un descenso a lo que parecía un sótano.

Entendió la linterna de su celular para dislumbrar un poco el lugar. Localizó un túnel muy grande. ¿Cómo era posible que existiera un sótano con túnel en la casa que claramente habían solicitado y no se dieron cuenta?

Al llegar al final del pasadizo divisó una gran mesa junto a una pequeña que contenía herramientas en perfecto orden, al parecer eran de cirugía.

Avanzó por el lugar hasta que algo llamó su atención. Había sangre, mucha sangre, estaba en la esquina del lugar. Logró analizar que alguien había forcejeado ahí por las huellas que el polvo dejaba a la vista.

—Chloé, ¿donde estás?

—Voltea y lo sabrás.

Kim se giró sobre sus talones para ver de donde había provenido esa voz. No dislumbró a nadie en el lugar.

—Atrás.

La plancha de una pala fue aporreada contra su cabeza. Kim cayó al suelo... todo se volvió oscuro.

.......

—¿Crees que sea cierto?

—¿El qué?—contestó el moreno.

—Lo que dijo Mari—musitó la castaña.

—No lo sé, este lugar es muy raro, puede que el vendedor tuviera razón.

—¿Quién? ¿Luka? — preguntó mientras buscaba en el gran comedor.

—Sí, él. Todo esto me da mala espina.

Recorrieron gran parte de la sala de estar, el recibidor, la cocina y el comedor y no había rastros de ella. Mas bien parecía que no había entrado al hogar.

—¿Y si esta afuera? —su mirada se clavó en la puerta principal.

—Ohh no, no, no ¡ni se te ocurra!—caminó hasta quedar frente a él.

—Piénsalo bien Alya,—rodeó a la de lentes —quizás se desmayó por el frío o algo por el estilo.

—No es buena idea Nino—colocó sus manos en el pecho del moreno mientras lo miraba a los ojos con preocupación— espera a los demás, no vayas solo, por favor.

—Estaré bien—depositó un tierno beso en los labios de Alya—regreso enseguida.

Abrió la puerta y salió rumbo al mismo camino que habían tomado al ir a traer pedazos de madera.

—Ten cuidado— susurró Alya mientras cerraba la puerta y se recostaba en la ventana, observando el paso acelerado de su novio al adentrarse en el bosque.

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¡AYAYAYY! Me duele el cuello 😢 toy malita... no ya en serio... perdón, se que tenía que actualizar hace una semana pero, en serio lo siento, pase enferma tres días...

No es mi intención hacerlos sufrir, quiero aportarles algo por esta cuarentena así que disfruten de ese capitulito 😅...

Espero les guste y se diviertan con el 《creo que no de divertiran》

Gracias por seguir y esperar esta historia 😢 eso halaga mi corazoncito... ❤

También, como podrán notar hay cambio de portada 👏😍, en serio lo necesitaba 😅... espero que me disculpen por las portadas pero, es que soy principiante en el mundo de la escritura y me cuesta adaptarme a todoo...

Gracias a  MGAranza por ayudarme con el tipo de Fuente en la portada. (TE AGRADEZCO MUCHO NIÑA)(ERES LA MEJOR 💞❤😍👏)
 
Y bueno, buenito... buenesito. Tu voto me hará muy feliz y tu comentario me sacará una sonrisota.

Ney♡