[#1] El árbol
Desperté debajo de un árbol vestido con trapos andrajosos. Parecía de cierta cultura conocida la cual era en cierto modo interesante. Cultura céltica. ¿Porqué diablos estaba debajo de un imponente árbol?, ¿Y con cierta vestimenta en particular?.
Recuerdo haberme puesto un short y una camiseta para dormir. Aunque mucho no me importaba, se veía en general apreciable.
Jamás había visto tal paisaje, el pasto fresco y húmedo y el árbol que caía como una cascada de ensueño.
Decidí ponerme de pie y explorar. Me di cuenta que calzaba unas botas con cinturones alrededor, reconozcamos que eran cómodas.
Parecía la mismísima réplica de Link Zelda del videojuego. La ropa consistía en un camisón ocre con un cinturón de cuero y al parecer también tenía una espada.
La desenvainé para estudiarla, era de madera sin embargo tenía un curioso tallado. Símbolos. ¿Griegos, romanos o quizás egipcios?.
No tenía el conocimiento para averiguar aquello, de algún modo sabía en el fondo que su significado era especial y de suma importancia.
De repente el suelo el cual mis botas pisaban tembló y me asusté hasta la médula.
¡Y desperté!, sofocado como quien había recorrido un desierto y sediento de agua con hielo.
Me levanté a trompicones de la cama que crujió con mi peso. Cuando regresé con el vaso de agua, sonó el despertador de metal para ya la segunda semana estudiantil.
Eran las 7 en punto.
Me bebí el vaso entero y caminé hasta buscar mi uniforme, el cual consistía de una camisa blanca presentable y unos pantalones negros de vestir.
Iba a un colegio formal y en cierto modo llegaba a agradarme bien en el fondo.
Al regresar a casa le daría un orden nuevamente a mi clóset de ropa, que no dura arreglado ni un mes.
Baje las escaleras y me tragué un brownie y dejé el café frío a medias. No había tiempo para lujos ni siquiera el desayuno.
— Buenos días Kayn.
— Oh, mamá. ¡Tengo que irme o llegaré tarde otra vez!.
Así es, me nombraron Kayn al nacer. Horrible.
— ¿Quieres que te lleve?–, me preguntó.
— No hace falta–, zanjé e hice un gesto apresurado con la mano cruzando la puerta y el mísero jardín con bastante prisa.
En el camino me reventé la cara con una rama de árbol, de árbol... ¿Con que había soñado esta mañana?.
Recuerdos vagos de mis sueños me llegaban. Y al final del todo acabé abordando 10 minutos tarde el instituto por tratar de recordar el dichoso sueño.
...
–Joven Levin—. me citó el profesor –, No queremos más llegadas tardes— se acomodó su par de lentes en un ágil movimiento.—¿Oyó?.
–Por supuesto—, dije y tomé asiento en el fondo en donde no era necesario formar vínculos sociales con tu alrededor y reinaba cierta tranquilidad.
Están todos los chicos interesantes en el fondo. Los que les llama la atención los cómics, los Creepypastas, son fan de corrientes de moda y los que apoyan las orientaciones de género.
Me refiero a que son raros en el buen sentido, como a personas especiales.
Lo único especial que tengo es mi cabello imparcialmente desarreglado y mi noble impuntualidad sobre los eventos importantes, como por ejemplo venir a estudiar.
No es a propósito, simplemente hago todo a último momento, como levantarme y acordarme de que soy un ser vivo.
– Chicos, retomemos la dicha lectura de la página 11—, dictó el profesor.
Un señor veterano de pelo cano recogido con gel y traje presentable, de estatura discutible.
La materia que daba se titulaba Literatura Mística, la cual era intrigante y posteriormente emocionante.
Se me caía la baja por aprender de las ninfas. Se dice que eran criaturas misteriosas.
<<Todo comenzó debajo de aquel esplendoroso y fortaleciente árbol de ramas caudalosas. En este ser yacía dormitando un jovial chico de aspecto perezoso, y lo acompañaba acompasadamente su camarada Asking. Los dos valientes guerreros. Eran... Las memorias los recuerdan como honorables guerreros de la época medieval Celta. Habrían muerto luchando a favor de nuestra Tierra enigmática y encantada para salvar a múltiples vidas aldeanas.
>> —Narró el profesor.
<<Todo comenzó debajo de aquel gutural árbol...>>
Con esa frase recordé mis sueños, imágenes borrosas iban y venían, y viceversa. Confundido había estado soñando que era un guerrero celta como en el libro.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top