cero
capítulo cero
efectos colaterales
en la escala del uno al diez, mi vida sexual se reducía a un cero. ni siquiera era algo que me interesara de forma genuina, tan solo acepté mi poco interés por el sexo. la palabra penetración me resultaba ajena, tal y como si no perteneciera a mi vocabulario, a mi pequeño mundo. debes saber, quién sea que lea esto, que el espectro de la asexualidad es muy extenso y que, dado a lo complejo y único que es cada ser humano, tal vez yo no me parezca a ti... si es que también eres asexual. en mi adolescencia, de forma inevitable, me vi forzada a hacer cosas que no ansiaba, con el único fin de complacer mi agitación por pertenecer. el ser humano, por naturaleza, es un ser social y la necesidad de pertenecer a un grupo, en ocasiones, sobre todo en la pubertad, nos arrastra a hacer cosas poco interesantes para nosotros. yo no entendía nada de la vida o por qué debía besarme con chicos desagradables, que en realidad, no estaban interesados en mi como ser pensante, sino en mi cuerpo.
ser extranjera no fue lo peor que me pasó. en cambio, tener que huir de casa, sí. abandonar mi hogar fue solo uno de los tantos efectos colaterales de existir. volar lejos del nido forma parte de eso que llamamos independencia o libertad, pero yo no quería marcharme, en serio. con la respiración entrecortada y dos ansiolíticos en el bolsillo, cogí mi pasaporte y me marché. tal vez para nunca volver.
hubo muchas cosas que fui capaz de contarle a él. alex era, sorpresivamente, muy bueno escuchando. le conté de mi infancia, de mi familia, de mis miedos, traumas y la razón por la que abandoné mi lugar seguro.
la parte espinosa de abrirte con alguien no es hablar; puedes soltarlo todo y lamentarte después. lo realmente complicado de exponerte ante alguien, son las secuelas que estas confidencias pueden traer.
yo no quería perder a alex. incluso aunque pudiese parecer una niñita caprichosa que patalea a mitad del supermercado porque sus padres no quieren comprarle tal golosina, me negaba en seco a dejarlo marcharse de lejos de mí.
sabía que necesitaba tocar ese tema y sabía que no deseaba verlo alejarse.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top