Tessa había cambiado su semblante, ahora con esa nueva información no podía confiar en nadie. Pero si era alguno de sus compañeros de trabajo debía de saber quien era, debía exterminar a esa rata.

-Levántense ya

Dijo Tessa parándose y agarrando la tableta y mirando a Sebastian para después ver a Grell, los dos la veían con confusión.

-¿A dónde iremos?

Preguntó Grell levantándose y acercándose a ella, Sebastian se levantó y la miró esperando la respuesta de la pregunta.

-A mi trabajo

-¿Qué no tu trabajo está aquí?

Preguntó Sebastian confundido, Tessa volteó a verlo y negó con la cabeza.

-Iremos al lugar de donde yo vengo

Tessa comenzó a caminar, Grell solo pudo decir A antes de que Sebastian también empezará a seguirla, el Shinigami se quejo por haberlo dejado hasta atrás y corrió hasta ellos. Ya los tres reunidos salieron de la biblioteca y fueron a la fuente más cercana del lugar, Tessa se metió a la fuente y captó la mirada curiosa de varios Shinigamis sin contar a Grell y Sebastian.

-¿Esperan que les de permiso o algo?

-¿Para que vamos a entrar a la fuente?

-Para poder llegar a la Atlántida... ¡Para ir a mi trabajo, no seas estúpido!

-Pero no me grites

-Solo entre al agua Señor Grell

Sebastian entró a la fuente y llegó con Tessa, Grell soltó un suspiro para después meter un pie lentamente. No quería arruinar su traje ni su cabello.

-¡Pero muevelas!

Gritó Tessa tronando los dedos y con una mirada exasperada, Sebastian se rio por la expresión de ella.

-¡No me apresures que este abrigo cuesta más que tu vida!

-¡Grell Sutcliff!

Gritó una voz extraña a lo lejos, pero el mencionado palidecio y se dio la vuelta rápidamente para sonreír intentando disimular su nerviosismo.

-Hola William... Y hola Ronald

-Grell exijo una respuesta a está... ¿Qué hacen ellos ahí?

Will apuntó con su guadaña a Sebastian y Tessa, Grell se rasco la nuca y seguía sonriendo.

-Vamos a ir a un lugar, con su permiso

Tessa jaló a Grell del brazo, si no fuera porque ella tenía un sexto sentido la guadaña de Will le hubiera arrancado su mejilla. Lanzó a Grell hasta donde estaba Sebastian, quién lo atrapó sólo para evitar que le mojara el traje con su caída. Tessa peleó un momento con William hasta que Ronald se metió a la pelea, ella los metió al agua con disimulo, ya adentro los cinco ella alzó la voz.

-Mistik ho bisogno di voi per aprire le porte per me

El agua subió formando columnas, los dos Shinigamis vestidos de traje pararon la pelea para mirar la escena. El agua formó una burbuja gigante, segundos después el espacio donde estaban se lleno de agua. Tessa se encontraba calmada al igual que Sebastian, los tres Shinigamis entraron en pánico ya que no había salida.

La burbuja se rompió pasados dos minutos, el agua dejó que el aire volviera a reinar en el espacio que estaban, Grell tomó bocanadas de aire de manera dramática, Ronald se dejó caer y tomó aire, William se arrodilló y tomó aire de manera normal. Sebastian sólo se sacudió la ropa y se arregló, Tessa seguía parada y no se movió.

Unas compuertas pequeñas se abrieron y soltaron una ventisca de aire, si no fuera por los gritos de dos Shinigamis hubiera sido lo más relajante. El aire acabó y todos estaban secos, solo se acomodaron sus ropas que estaban algo desordenadas.

-Bien, Roller abre la puerta

La puerta se abrió apenas dijo Tessa, ella caminó hasta está esperando que los demás estuvieran detrás de ella. Se dio la vuelta y el único que estaba detrás de ella era Sebastian que se tomaba muy literal la orden de seguirla, Grell caminó rápidamente hasta llegar con ella, los otros dos se voltearon a ver.

-¿Y, a que hora se van a mover?

-¿Cómo sabemos que no es una trampa?

Preguntó Ronald entre cerrando los ojos, Grell sonrió de manera burlona para después contestar la pregunta.

-Si fuera una trampa ni si quiera estaría yo aquí, ahora sigamos a la señorita

-Juro que me la pagaras Grell Sutcliff, por tu culpa tendré horas extras

-Si Okay ajá, entonces vamos muevanse

Dijo Tessa entrando a un corredor metálico, de una puerta salió un joven de cabello azul y ojos grises. Sus facciones eran finas pero debido a una cicatriz en su ceja derecha no se notaban mucho, venía sonriendo hacia Tessa hasta que vio a Sebastian y después a los otros tres. Entonces se puso serio.

-¿Y ellos?

-Metiches de primera, pero no romperán nada si eso te mortifica Roller

-Aún así sabes que un Escolta va a aparecer para seguirlos ¿No?

-En tres, dos, uno...

Un sonido mecánico se escuchó del lado izquierdo, para mala suerte de Grell el reptil robotico lo volteó a ver haciendo que el pelirrojo soltara un grito y se pusiera detrás de Will. Ronald estaba asombrado y William seguía con su semblante serio.

-Caballeros, saluden al nuevo Escolta, Fire

Éste se enderezó mostrando que era un dragón robot, no tan grande pero tampoco tan pequeño. Sebastian se acercó y lo miro fijamente, se parecía mucho a los perros ciberneticos pero el material y su color era diferente.

Los perros estaban echos de metal grisáceo, y se podía ver a simple vista sin contar que era pesado y muy filoso. Además de tener pedazos de carne provenientes de un perro real, lo cual los volvía ciborgs.

En cambio, el dragón que tenía delante de él era de un material más ligero, parecía un dragón de verdad si no fuera por los ojos. Podía decirse que era de carne y hueso por lo realista que resultaba ser, además de que no mostraba ese carácter agresivo como al de los caninos.

-Interesante...

-Cuidado que si lo tocas te muerde

Dijo Roller en forma de burla, el demonio solo sonrió de lado para después darse media vuelta y volver a donde estaba Tessa.

-Iremos al Archivero y después nos iremos, no digas que nos viste

-Lo intentaré, pero tu llamas demasiado la atención con tu simple existencia Tessa

-Que bromista me saliste Roller

La joven empezó a caminar seguido de los demás, el joven rió y entró nuevamente a la cabina. El dragón empezó a caminar con la tarea de seguir a los intrusos, después de un intento de revuelta de parte de unos prisioneros la seguridad había aumentado un cincuenta por ciento.

¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬

Habían pasado por un palco donde se podía ver la sala de operaciones que estaba llena de muchas personas que iban de un lado para otro, algunos tenían trajes puestos mientras otros usaban ropas extrañas para los nuevos invitados. Algunas criaturas volaban y otras corrían, lo único raro era que tenían cajas en el lomo las cuales estaban llenas de papeles o aparatos raros.

-¿Dónde estamos?

Preguntó Ronald deteniéndose al ver un grupo de personas con algunas características extrañas, Tessa se detuvo por un momento para mirar al joven de cabello rubio y negro con lentes.

-Estamos en Assassini futuristici, mi lugar de trabajo y hogar

Tessa reanudó su andar al igual que los demás, pero uno te ellos tenía curiosidad.

-¿Hogar?

Preguntó William caminando un poco más rápido para llegar con Tessa, ella suspiró y calmó su semblante.

-Si, los únicos recuerdos que tengo han sido aquí... No recuerdo nada más de eso

-Así que técnicamente vives aquí

Dijo Sebastian sonriendo, Tessa asintió sin mirarlo. Volvieron a pasar por un pasillo hasta estar enfrente de una puerta de madera oscura, ella la abrió dándole vuelta a la manija.

-Todo tan tecnológico y muy futurista ¿Y los documentos más importantes están protegidos por una manija común y corriente?

Grell miró a Tessa y ganó la vista de los demás, ella se encogió de hombros.

-A veces lo más simple es lo más seguro

Abrió la puerta lentamente, dejó que los demás entrarán primero. El dragón se manifestó y miró a Tessa, ella inclino la cabeza y lo volvió a ver, el reptil robotico sacudió su cabeza y entró. Ella entró y cerró la puerta, al hacerlo vio a Grell y Ronald tocando todo mientras William miraba de manera discreta y Sebastian sentía pena ajena por los dos primeros, el dragón rugió y les dio un coletazo en la mano a los dos curiosos que se pasaban de listos tocando todo. Los dos gritaron por el golpe y fruncieron el ceño.

-Aquí nada se toca a menos que sean parte de la agencia

Dijo una voz masculina en el fondo, todos voltearon a ver al hombre que se veía. Era alto y su piel de un tono algo moreno, su cabello negro y corto brillaba con la luz, sus ojos azules claros mostraban paz y tranquilidad, tenía una sonrisa en su rostro que demostraba que podías confiar en él sin si quiera conocerlo. Como se esperaba Grell se quedó embobado viéndolo porque según él decía que era un ángel caído del cielo y Tessa se arrodillo mostrando respeto.

-Buenas tardes Jefe Toshi

-Buenas tardes señorita Tessa

-¿Usted es el jefe de ella?

Preguntó Ronald apuntando a la joven que se estaba enderezando, Toshi asintió levemente aún sonriendo. Sebastian se le quedo viendo fijamente, sentía que lo había visto en algún otro lado pero no sabía donde, en cambio Toshi saludo a cada uno incluyendo a Sebastian quién se mantuvo pensativo todo el rato.

-Si, soy su Jefe y debo agregar que me es sorprendente ver Shinigamis y un demonio aquí en el Edificio

-Venimos porque la señorita Tessa necesita investigar algo, según entendí yo

Dijo William antes de acomodarse sus anteojos, Grell se encontraba en las nubes aún viendo a Toshi. En cambio Tessa rodó los ojos debido al comportamiento del Shinigamis pelirrojo, Ronald y Sebastian veían la escena sin decir nada aún.

-¿Tessa, que estás buscando?

-El Archivo de todos mis compañeros de trabajo, señor

-¿Para que los buscas?

-Una pregunta... ¿Para que sirven los Archivos?

Dijo al fin Ronald mirando los estantes y después a los dos, el hombre sonrió de lado y aclaró la garganta para hablar.

-Los Archivos son el registro de los movimientos de cada empleado, desde su última misión hasta una compra que hayan realizado, con ellos podemos saber donde se encuentran en caso de alguna emergencia o bien si sospechamos de alguno de ellos solo es cuestión de ver su Archivo

-¿O sea como un Registro Cinematográfico?

Preguntó Grell saliendo de su burbuja rosa, Toshi lo volteó a ver y asintió sonriendo.

-Si, solo que estos no nos cuentan sus vidas sino más bien las acciones y dezplasamientos de cada uno

-Eres increíble...

Dijo Grell entrando otra vez en su modo estúpido, Sebastian se sintió aliviado de que ahora él no sería hostigado por el pelirrojo. Dio un paso enfrente y miró al Jefe.

-Jefe Toshi ¿Nos da el permiso para revisar todos los Archivos?

-Si se los daré pero antes ¿Para que desean verlos?

-La misión que me fue entregada Jefe tiene muchos secretos y uno de ellos lo he resuelto gracias a un aparato que encontré en...

-Encontramos disculpa

Grell la interrumpió y se le quedó viendo a Tessa con algo de enfado por no darle parte del crédito, ella suspiró y volvió a mantener la calma.

-Está bien, que encontramos el señor Grell y yo en una escena del crimen, al prenderla descubrimos que formaba parte de nuestra empresa ya que yo la pude encender... En conclusión, uno de mis compañeros de trabajo esta atacando Londres con perros ciberneticos

-Eso es grave, está bien, tienen la autorización para revisar todos los Archivos, no se detengan hasta que busquen al culpable

Tessa asintió con seriedad, Toshi les dio una ficha a cada uno para que pudieran tocar y pedir cualquier Archivo. Pero había un fallo en el Escolta ya que no dejaba que algunos Archivos los sacaran por lo tanto Toshi se tuvo que quedar, llevaban media hora revisando Archivos cuando Ronald iba a sacar otro de un estante y un chirrido llamó su atención.

-¿Qué sucede?

Volteó a ver arriba y vio como el dragón robotico se retorcía de manera pausada, segundos después se dejó de mover pareciendo que había sido apagado, antes de que Ronald pudiera llamar la atención de los demás el dragón se volvió a encender pero sus escamas se volvieron negras y sus ojos se volvieron naranjas. Rugió de manera atronadora y se le dejó ir al joven Shinigami, él sacó su podadora de césped y se protegió de las mandíbulas del reptil metálico.

-¡¿Y a ti que te pasa reptil?!

-¿Ronald todo...? Ay no

Sebastian se había asomado y contemplado la escena, el dragón lo vio y le rugió para después volar y atacarlo. El demonio dio un salto a tiempo y pudo evitar el intento de ataque, los demás se asomaron debido al ruido notando que el Escolta se había vuelto loco.

-¡Todos fuera!

Gritó Toshi de forma seria, los demás le hicieron caso y salieron de ahí. Apenas llegaron al pasillo el dragón destruyó la pared, sacudió su cabeza antes de volver a empezar su ataque contra ellos. Llegaron al centro de comando y notaron que el dragón no era el único que se volvió loco sino también los demás Escoltas, algunos habían caído y otros masacraban gente a diestra y siniestra.

-¿Quién es el encargado de esas cosas?

Preguntó William antes de agacharse para evitar que un lobo robotico le cortara la cabeza, Tessa sacó sus espadas y las enterró en su lomo logrando apagarlo.

-El único con los conocimientos de robótica es...

Tessa abrió los ojos como platos, ahora las piezas encajaban, miró a Toshi quien también mostraba sorpresa.

-¿Es?

Dijo Grell entre gritos debido a que apenas acababa con un Escolta salía otro que intentaba cortarlo en dos, Toshi y Tessa se miraron y después vieron a los demás que esperaban la respuesta.

-Es Roller

Dijeron los dos al unísono, Toshi prendió su comunicador y dio la orden de ir por Roller antes de que escapara. Cinco sujetos se movieron rápidamente para ir a la cabina, Tessa también decidió ir y con ello se llevó a Sebastian detrás junto con los tres Shinigamis.

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El grupo estaba cerca de la cabina, pero se detuvieron cuando un león de metal dio vuelta en el pasillo siguiente y se les quedó viendo.

-Ay no...

-¿Por qué un Ay no?

Preguntó Ronald preocupado y mirando a Tessa, ella limpio sus espadas y se puso en posición de ataque.

-Es Goliat, el Escolta mejor entrenado

-¿Y?

-Tiene el récord a mayor número de víctimas, jamás han podido ponerle una mano encima... Se le apoda como "El León de Nemea"

-¿O sea qué...?

Dijo Grell entrando en pánico.

-Jamás a recibido un disparo ni una herida

Goliat rugió mostrando su fuerza, después se les dejó ir para demostrar que en menos de cinco segundos recorrió más de quince metros de distancia. Apenas pudieron reaccionar a tiempo quitándose de su camino, William intentó cortarle una parte del lomo pero sólo se escucho un tintineo como si hubiera tocado una campanilla.

-¿De qué está hecho ese animal?

-Nadie sabe, todos los Escoltas son creaciones de Roller jamás nos dice de que los hace

-Entonces... ¡Huyamos de aquí!

Gritó el pelirrojo antes de correr, Ronald lo siguió arriba de su cortadora de césped y los otros tres negaron con la cabeza. Goliat se dio la vuelta y los miró con ojos fríos, los tres se dieron la vuelta y empezaron a correr.

A lo lejos escucharon un grito, que ubicaron perfectamente que era de Grell, y apuraron el paso. Al llegar vieron a los dos tirados en el piso pero encima de alguien, ellos se quitaron y vieron que quien estaba abajo era nada más ni nada menos que Roller.

-Roller

-Yo... Yo no lo hice... Yo no hice nada... Yo no lo hice... ¡Yo no hice nada de esto, lo juro!

Roller tenía miedo reflejado en su cara, decía la verdad pero no podían hacer nada para ayudarlo.

-¡Allá está!

Fue un grito que llamó la atención, Roller intentó huir pero uno de los hombres le disparó a la pierna dejándolo inválido. Lo tomaron por los brazos y lo alzaron, Toshi se acercó a él con un semblante frío y serio, muy diferente al que había mostrado cuando lo conocieron. Incluso parecía que era una persona hostil, como si fuera un monstruo.

-Roller Decler Unders quedas arrestado por intento de motín y asesinato en primer grado

-¡Yo no hice nada, jamás haría algo así, me manip...!

-¡Silencio, llevenselo!

Los hombres se lo llevaron mientras el seguía gritando e intendo escapar, Toshi se fue detrás de ellos sin decir media palabra. Los cinco se quedaron en silencio y estupefactos, en cambio Tessa había entrado en conflicto interno pues Roller iba a decir algo pero el Jefe no lo había dejado terminar. Sebastian la miró y noto ese semblante pensativo que Ciel a veces ponía cuando descubría algo, así que sonrió y se volteó hacia con Tessa.

-¿Qué sucede?

-Roller es el único que tiene conocimientos en robótica, eso queda claro, pero el jamás le haría daño a alguien y lo último que iba a decir... Yo no hice nada, jamás haría algo así...

-Me manipularon

Completo Sebastian esperando a que Tessa diera la siguiente orden, este caso se estaba volviendo cada vez más confuso pero ella demostraba que podía manejar todas las pistas que tenían hasta ahora.

-Alguien lo manipulo para encender a los Escoltas en su modo Hostil pero puede ser que también lo hayan manipulado por igual para crear esos perros ciberneticos

-Entonces...

Preguntó William uniéndose al hilo de la conversación, los otros dos se mantenían callados escuchando las nuevas pistas.

-Debemos de interrogar a Roller antes de que lo asesinen por traición

-¿A dónde lo llevan?

-A las celdas subterráneas, se supone que están vigiladas por Escoltas de alto rango pero con esto que acaba de pasar simplemente estarán custodiadas por soldados azules

-¿Soldados azules?

-Si, son novatos en otras palabras, así que será fácil evadirlos

-¿Cuando asesinan a los traidores?

-Cinco horas después de descubrir su traición

-Vamos entonces

Dijo Sebastian dejando así en claro el fin de la conversación, los demás asintieron y Tessa los guió hasta las celdas subterráneas. Algo muy raro estaba pasando y debían resolver esto para llegar con el verdadero culpable.