Capitulo 3: Intentando ser el héroe
Aquella noche, mientras el silencio reinaba en la casa de los Bakugou, Katsuki estaba acostado en su cama, mirando fijamente el techo, el incidente del autobús no dejaba de rondarle la mente
Podía sentir la mirada asombrada de sus compañeros, los murmullos que resonaban por los pasillos de la escuela y las preguntas que lo seguían, incluso en su propio hogar
"Empujé un autobús con una mano... ¿Cómo lo hice?" pensaba, repitiendo una y otra vez lo ocurrido
Se dio la vuelta en la cama, inquieto, siempre había sentido que había algo especial en él, algo más allá de lo que conocía
Pero ahora, por primera vez, ese sentimiento le generaba dudas ¿De dónde provenía realmente su poder?
{Al día siguiente, después de la cena}
Masaru se acercó a la habitación de Katsuki y tocó suavemente la puerta
-¿Estás despierto, Katsuki?- preguntó, asomando la cabeza
-Sí, papá, pasa- respondió Katsuki, sentado en su cama con los brazos cruzados
Masaru se acercó y se sentó junto a él en el borde de la cama, tomando aire profundamente antes de hablar, sabía que había llegado el momento de contarle la verdad
-Hijo... sé que has estado preguntándote muchas cosas después de lo que pasó con el autobús- comenzó Masaru, con una voz tranquila pero seria
Katsuki lo miró de reojo, interesado
-Sí, papá, no entiendo lo que hice... Y la gente en la escuela no deja de hablar de eso, hasta mamá está preocupada- confesó, bajando la mirada
Masaru asintió, sintiendo la tensión en el ambiente, no podía postergarlo más, era momento de decirle la verdad, algo que él y Mitsuki habían ocultado durante años, con la esperanza de que este día no llegara nunca
-Katsuki... hay algo que tu madre y yo hemos mantenido en secreto, algo que no te hemos dicho hasta ahora- comenzó Masaru, sintiendo el peso de sus palabras, Katsuki lo miró, claramente intrigado
-¿Qué cosa?- preguntó Katsuki, su voz baja, casi temerosa
-Hace mucho, antes de que nacieras... bueno, antes de que llegaras a nosotros, te encontramos en circunstancias muy inusuales- Masaru hizo una pausa, como si estuviera reuniendo fuerzas para continuar -No naciste en esta tierra, Katsuki-
El silencio se apoderó de la habitación
-¿Qué...?- Katsuki frunció el ceño, sin comprender del todo lo que su padre intentaba decir
-No eres de este mundo- Masaru prosiguió, con el corazón en la mano -Eres... eres de otro lugar, un lugar más allá de las estrellas-
Katsuki lo miró, atónito, tratando de asimilar lo que acababa de escuchar, su boca se abrió, pero las palabras tardaron en llegar
-¿Estás diciendo que... soy un extraterrestre?- preguntó con incredulidad
Masaru asintió lentamente
-Así es, cuando eras apenas un bebé, tu madre y yo te encontramos en lo que parecía ser una nave... una cápsula, escondida en los campos, cerca de aquí, te adoptamos porque, en el momento en que te vimos, supimos que eras nuestro hijo, aunque no compartieras nuestra sangre, pero siempre supimos que eras especial, que había algo en ti que no podíamos explicar del todo-
Katsuki se levantó de la cama, caminando de un lado a otro, tratando de procesar lo que acababa de escuchar
-Entonces... ¿Esa fuerza, lo que hice con el autobús...?- preguntó, su mente comenzando a atar cabos
-Sí, creemos que tiene algo que ver con tus verdaderos orígenes, sabíamos que tenías un poder increíble desde que eras un niño, pero lo que ocurrió el otro día... es posible que tus habilidades estén empezando a manifestarse de una forma más profunda de lo que habíamos anticipado- explicó Masaru
Masaru se levantó y le hizo un gesto a Katsuki para que lo siguiera
-Ven, quiero mostrarte algo- dijo
Ambos caminaron en silencio hacia el granero en la parte trasera de la casa, Masaru abrió la pesada puerta con cuidado, revelando un viejo cobertizo lleno de herramientas y cajas, en el fondo, bajo una lona polvorienta, se encontraba lo que parecía ser una cápsula metálica, pequeña y de forma redondeada, con inscripciones extrañas en su superficie
-Aquí es donde te encontramos, hijo- dijo Masaru, mientras levantaba la lona y dejaba al descubierto la nave que lo había traído a la Tierra
Katsuki se acercó lentamente, sus ojos recorriendo cada rincón de la nave, su mente estaba en blanco, abrumada por la revelación
-¿Por qué no me lo dijeron antes?- Preguntó Katsuki, sin apartar la vista de la cápsula
-Queríamos que tuvieras una infancia normal, que vivieras como un niño común y corriente- respondió Masaru -Y, sinceramente, siempre tuvimos miedo de que el gobierno o alguien más viniera a buscarte si descubrían de dónde provenías, queríamos protegerte-
Katsuki se quedó en silencio por un momento, procesando todo lo que había escuchado, finalmente, se giró hacia su padre
-Entonces... ¿Qué soy?- preguntó con seriedad, mirando a su padre a los ojos
-Eres nuestro hijo, eso es lo único que importa- respondió Masaru con firmeza -Y seas lo que seas, siempre te protegeremos-
{Semanas después}
La vida en la escuela había vuelto a una relativa normalidad, aunque los rumores sobre Katsuki aún seguían flotando entre los pasillos, sin embargo, él estaba más centrado en entender lo que realmente era, y qué significaba ese poder que comenzaba a manifestarse en su interior
Una tarde, mientras descansaba en su habitación, encendió la televisión y se topó con una antigua grabación de All Might, el héroe número uno
En el video, All Might aparecía rescatando a un grupo de personas atrapadas bajo los escombros de un edificio colapsado, la fuerza, el carisma y el valor del héroe resonaron en Katsuki
Cada movimiento, cada palabra que pronunciaba, lo llenaba de admiración, All Might era un faro de esperanza, alguien que hacía el bien simplemente porque podía
Katsuki apagó el televisor y se quedó mirando el reflejo de su rostro en la pantalla en negro
"Quiero ser como él" Pensó, el corazón acelerado por la idea "Quiero ser un héroe"
Con la determinación ardiendo en su pecho, Katsuki bajó corriendo las escaleras para hablar con sus padres, encontró a Masaru y Mitsuki en la sala, leyendo tranquilamente
-Papá, mamá- dijo, con una seriedad poco común en él -Quiero ser un héroe, quiero usar mi poder para ayudar a la gente, como All Might-
Sus padres se miraron sorprendidos, Mitsuki fue la primera en reaccionar
-¿Qué? ¿Un héroe? Pero, Katsuki, eso es peligroso- dijo, levantándose del sofá con preocupación en su rostro - No es tan simple como parece, tienes un poder que ni siquiera entiendes completamente-
Masaru, aunque más sereno, también estaba preocupado
-Tu madre tiene razón, Katsuki, sabemos que tienes una gran fuerza, pero ser un héroe... implica mucho más que eso, es un camino lleno de riesgos, y la verdad... no sabemos cómo tus orígenes podrían complicar las cosas-
Pero Katsuki no se dejó intimidar
-Lo sé, pero eso es lo que quiero hacer, si tengo este poder, entonces debo usarlo para algo bueno ¡No quiero esconderme más!- respondió con una convicción feroz, su mirada fija en sus padres
Mitsuki suspiró, mientras Masaru bajaba la mirada, pensativo, sabían que su hijo era terco, pero también sabían que había algo noble en su deseo de proteger a los demás, de hacer el bien
Aunque la idea los aterraba, también comprendían que era imposible detenerlo
-Vamos a pensarlo, Katsuki- dijo Masaru finalmente -Solo te pedimos que tengas cuidado y que pienses bien en lo que implica ser un héroe-
Katsuki asintió, sabiendo que, aunque sus padres dudaran, no podían detener lo que ya había decidido, el sería un héroe
Y no cualquier héroe, sería el mejor
Era una tarde lluviosa cuando Katsuki, con su mente llena de emociones contradictorias, decidió salir de su casa sin decirle nada a sus padres, se había cansado de las dudas, de las advertencias y de la constante preocupación de su madre
Su decisión de convertirse en héroe lo empujaba a tomar acción, a probarse a sí mismo, se sentía listo, o al menos quería estarlo
"Si quiero ser un héroe, tengo que empezar ahora" Pensó mientras caminaba hacia la ciudad, con las manos metidas en los bolsillos y el agua cayendo con fuerza, la lluvia no lo detenía, necesitaba ver cómo era el mundo fuera de la protección de sus padres, el mundo real donde los héroes luchaban todos los días
Al acercarse a una intersección concurrida, escuchó un grito que cortó el ruido de la lluvia
-¡Deténganlo! ¡Me está robando!- gritó una mujer desde una tienda cercana
Katsuki se giró rápidamente y vio a un hombre encapuchado corriendo con una bolsa en la mano, empujando a la gente mientras intentaba huir por la calle, sin dudarlo, Katsuki comenzó a correr hacia él, mientras corría tomo una manta de un tendedero y se la puso haciéndose una capa impulsado por un instinto que no lograba controlar
"Este es mi momento, puedo hacerlo" Pensó mientras sus pies golpeaban el pavimento con fuerza, al hacerlo, notó algo extraño
Iba más rápido de lo que jamás había corrido, mucho más rápido, sentía cómo su corazón latía en su pecho, bombeando adrenalina por todo su cuerpo
-¡Oye, detente!- gritó, su voz resonando con una autoridad que no había planeado
En cuestión de segundos, Katsuki ya estaba sobre el ladrón, no lo había planeado, pero su velocidad lo había llevado hasta él en un abrir y cerrar de ojos
Extendió su mano para detenerlo, pero al tocar al hombre, su fuerza descontrolada lo lanzó contra la pared de un edificio con una brutalidad que lo dejó inconsciente al instante mientras un charco de sangre se formo
El cuerpo del ladrón cayó al suelo con un golpe seco, mientras la bolsa robada rodaba por la acera, Katsuki se quedó quieto, respirando pesadamente, mirando la escena frente a él
"¿Qué acabo de hacer?" Pensó, con los ojos abiertos de par en par, no había querido lastimar al ladrón tan gravemente, solo detenerlo, había perdido el control
De repente, escuchó un grito desde la distancia
-¡Alto ahí! ¡¿Qué estás haciendo?!- Era la voz de un héroe profesional, dos figuras uniformadas corrían hacia él
Uno de ellos era un héroe con una apariencia musculosa y un gran escudo en su espalda, mientras que el otro era más ágil, con una capa que ondeaba detrás de él
Katsuki sintió el miedo apoderarse de él, sabía que había cometido un error, que había usado su poder sin control
No estaba preparado para lo que seguía
-¡Detente ahora! ¡No te acerques más!- gritó uno de los héroes, levantando el escudo con precaución mientras se acercaba lentamente
Katsuki dio un paso hacia atrás, levantando las manos, pero su mente estaba nublada por el miedo, no quería lastimar a nadie más, pero también temía lo que los héroes podrían hacerle
No entendían quién era ni lo que estaba pasando
-¡Lo lastimaste!- exclamó el héroe más ágil, quien ya estaba revisando al ladrón inconsciente -¡Este chico es peligroso!-
Los héroes pensaban que él era una amenaza, lo miraban como si fuera un villano. Katsuki sintió una mezcla de pánico y rabia creciente, no podía dejar que lo atraparan, no quería que lo vieran como un monstruo
-¡No soy un villano!- gritó Katsuki, tratando de explicarse -Solo intentaba detenerlo, ¡No quise hacerle daño!-
Pero los héroes no escuchaban, avanzaban lentamente hacia él, listos para neutralizarlo, Katsuki sintió cómo su corazón se aceleraba, y antes de poder controlarse, su cuerpo reaccionó de nuevo, sus piernas lo impulsaron hacia adelante a una velocidad increíble, y con un movimiento rápido, golpeó el escudo del héroe musculoso
El impacto fue devastador, el héroe voló varios metros, chocando contra un coche estacionado
El otro héroe, viendo lo que acababa de suceder, se lanzó hacia Katsuki con una velocidad impresionante, usando su habilidad para rodearlo y atraparlo en un torbellino de viento, pero Katsuki, con los reflejos acelerados por su miedo, reaccionó antes de que pudiera atraparlo
Una explosión resonó desde su mano derecha, lanzando al héroe volador contra una pared cercana
-¡No, no quería...!- balbuceó Katsuki, horrorizado al ver cómo había lastimado a dos héroes profesionales, el pánico lo consumió completamente
Sin saber qué más hacer, se dio la vuelta y corrió, su velocidad era tal que, en cuestión de segundos, había desaparecido de la vista de los héroes, dejando a los dos luchando por levantarse entre los escombros
Katsuki siguió corriendo, sus pies apenas tocando el suelo mientras las lágrimas se mezclaban con la lluvia que seguía cayendo, su mente estaba hecha un caos, había intentado hacer lo correcto, pero todo había salido mal
No solo había herido a un ladrón, sino que también había atacado a héroes que solo trataban de detenerlo
"Soy un monstruo..." pensaba mientras corría sin rumbo fijo, el miedo y la culpa lo invadían por completo, no sabía a dónde ir ni qué hacer
Estaba asustado, más de lo que jamás había estado en su vida
Después de lo que parecieron horas corriendo bajo la lluvia, finalmente se detuvo en un callejón oscuro, su cuerpo temblando por la adrenalina y el frío, se dejó caer al suelo, apoyando la espalda contra la pared, con las rodillas recogidas contra su pecho
"No quería hacerles daño... no quería..."
Su respiración era agitada y su corazón seguía latiendo con fuerza, se sentía más solo que nunca, sabía que tarde o temprano los héroes lo buscarían
Sabía que había cruzado una línea que no podía deshacer
Pero, sobre todo, sabía que no podía volver a casa, no después de lo que había hecho
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¿COMO ESTUVO EL CAPITULO?
¿BUENO O MALO?
¿ENTRETENIDO O ABURRIDO?
¿BUENA TRAMA O MUY FORZADA?
Creo que mas de uno notara algunas referencias a Homelander de The Boys
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