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Hola mushashos

Votar y comentar, se agradece.

Es probable que fallos ortograficos se hayan colado por ahí.

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La magia.

La naturaleza de esta capacidad sobrenatural ya era un misterio incluso en la alternativa Primera Guerra Mundial de mi pasado mundo. La tecnología no permitía hacer más investigaciones por lo precaria que fue la confianza en la ciencia y el desarrollo teórico mágico.

De forma contraproducente, las milicias internacionales y los centros de investigación (la mayoría, monopolizados por el estado durante esa época) confiaron excesivamente en la capacidad de los magos. No investigando realmente sus totales capacidades y solo basándose en la cantidad de energía mágica que uno emanaba de los cuerpos como el método para determinar su peligro y su calidad.

Años anteriores, a estos magos se les llamaba "bendecidos", pues muy pocos eran los que presentaban el rasgo del mana. Esto parecía ser un insulto cuando las tensiones internacionales se volvían más irascibles. Rápidamente, el alistamiento de magos subió en picada y, junto a ello, el valor de estos al cielo.

El maná era lo que determinábamos como energía mágica. La cantidad de ella, como dije, se utilizaba como medidor para los magos. Mientras más maná poseía un mago, más maná podía utilizar en un hechizo. Un peligro de primera categoría.

Yo era terrible viéndolo desde el punto de vista enemigo. El maná, por algún motivo, tenía alguna relación especial con Ser X y, cada vez que intervenía para atormentarme o hablarme, mi maná aumentaba por consecuencia. Esto provocó que, a medida que recopilamos los encuentros con el bastardo, muchas veces me veía beneficiado de su presencia.

¡Te estoy cosechando, hijo de puta! ¡CO-SE-CHAN-DO!

Eso significaba que mis reservas de maná eran descomunales. Tenían un límite humano, por supuesto, pero podían hacer muchas cosas que los demás no eran capaces. 

Múltiples hechizos consecutivos, múltiples hechizos simultáneamente, potencias incrementadas, etc.

Si abusaba de este sistema, obviamente terminaba cansado como cualquier otro, pero en el aire imperial siempre había maná atmosférico, por lo cual, si se me agotaban las reservas, utilizaría el ambiente como fuente. De hecho, era lo más común entre los magos que lograban asistir a la Universidad de Guerra del Imperio.

Eso no sucedía aquí. El maná estaba ausente en los alrededores y me quitaba esa abrumadora ventaja.

...

Meditar con las olas romper se sintió increíblemente rejuvenecedor. No había estado cerca del mar hace buen tiempo y reconocer este clima como algo clásico de Japón me recordó a los viejos tiempos.

Pensar en mi temperatura, los rayos del sol chocar, la arena en mi piel, la brisa pasar y mi consciencia espacial me otorgó una pista realmente impresionante. Mi entorno estaba repleto de huellas conscientes. En mis ojos cerrados, parecían colores extraordinarios que bailaban alrededor. Formados por una estela y lo que parecía ser una imitación de una aurora boreal.

Esa era la esencia mágica y lo estaba consiguiendo ver con sus ojos desnudos de cualquier visor tecnológico, como se hacía antes.

Se desvaneció poco después al perder la concentración.

Un ruido pesado sonó a la distancia.

Era ese par de entrometidos.

Qué molesto.

...

Caminar un poco y descansar no estaba mal, pero igualmente les pediría si ambos podían ser más silenciosos. Por mi salud mental no quise preguntar qué barbaridades estaba diciendo el chico.

Solo fueron unos minutos rodeando las montañas de basura para lograr tener una vista de ellos. Como había detectado, era una figura alta y esquelética; casi no parecía persona y un adolescente de mi altura con la piel absolutamente negra, cubierto de ropas pesadas en este clima, qué horror.

¿Quizás era un estudiante, como yo? ¿Se habrá saltado las clases?

Me había quitado la chaqueta del colegio y solo tenía la camisa y el pantalón común. Los pies descalzos y tenía mis zapatos formales con los calcetines dentro de ellos en mis manos. No pensaba utilizar la ropa que Izuku dejó atrás ni mucho menos su calzado que destacaba tanto. Sería contraproducente si quería usar sigilo en alguna ocasión.

¿¡Revise qué día era hoy!?

Ah. Saqué mi celular y vi que era sábado.

¡No se suponía que vistiera para clases cuando no había ninguna!

Me quité la molesta chaqueta negra para intentar pasar desapercibido.

Salí más temprano el día de hoy para tener más tiempo en estas sesiones, por lo cual no alcancé a desayunar. Y así no vi a Inko esta mañana para que me hubiese advertido.

Qué molestia.

...

Me iba acercando poco a poco y la curiosidad empezaba a mostrarse cada vez más.

Piel absolutamente negra, huh. ¿Qué peculiaridad podría tener? No es un tono natural, sino que es como la ausencia total de la luz en la superficie. ¿Quizás es un material que lo recubre? Pero eso sería un compuesto químico interesante; un quirk no podría expresarse así de forma común, entonces, ¿es eso?, la ausencia de luz en su piel.

¡Oh! ¿Quizás absorbe la luz en su oscuridad? Si es eso, no sería imposible que se pueda ocultar en las sombras cuando ningún tipo de luz se refleja en él. Si técnicamente fuese desnudo por la oscuridad, deberías ver un vacío absoluto como en un agujero negro. Un vacío visual, como si el espacio se deformara a su alrededor, donde no podrías distinguir ningún rasgo corporal debido a la materialización de la oscuridad absoluta.

Eso también lo convertiría en una máquina que absorbería el calor de forma concurrente del sol. ¿Su temperatura está bien? ¿Tiene alguna contramedida? Debe sentirse mareado cuando pasa mucho tiempo al sol.

— ¿J-joven? ¿Pasa algo? Has estado hablando en voz baja; casi no te podemos oír. — Escuché de parte del esqueleto humano con piel.

¿Que? ¿Estaba murmurando? Qué mal hábito...

— Sí, disculpen, es que usualmente uso este espacio para meditar y me preocupaban los ruidos que se escuchaban a lo lejos. ¿Podrían hacer menos ruido? —

— ¿Meditar? ¿En este vertedero? JAJA, eres alguien raro. —dijo la materia negra.

— Decir eso cuando no distingo ningún rasgo en tu cara es raro. —

Solo podía ver sus dientes que formaban una tétrica sonrisa y sus ojos de iris negro. Se desvaneció esta expresión cuando dije eso. Observándolo de más cerca, me recordaba al prototipo de material y sustancia más oscuro de mi primera vida. Se seguía fabricando y mejorando; incluso la NASA había apoyado su desarrollo, pero no había roto el récord porcentual de absorción luminosa aún. Uhm... Vantablack. Eso es. Ese era su nombre.

Parecía molesto. Causaría mala impresión si lo dejaba así.

— No tenía intenciones de molestarte. Eso pudo sonar grosero, pero no tengo nada en contra tuyo por algo tan estúpido como las condiciones imprevistas de un quirk. —

— Ah, sí, perdón. Es solo que estoy acostumbrado a que me discriminen por mi apariencia. —

— ¿Discriminación de quirk? —

— Sí, junto con la discriminación de apariencia, es terrible. Pareces saber de ello. ¿Te sucedió algo similar? —

— Soy quirkless. — Eso era una verdad a medias.

— Oh, perdón. Eso debió sonar grosero también. —

— Acostumbrado. No te preocupes, solo buscaba hablarles de ello. El ruido es molesto. —

— Sí, eeh... ¿Sensei? ¿Nos movemos de sitio? Aún es temprano; quizás podría despejar el camino hacia el muelle que se supone está por allá. — Apuntó, hablándole al esqueleto, hacia la dirección contraria de donde vine.

— Claro, joven Kuroiro. También sería lindo que los civiles pudieran utilizarlo. — Me miró extrañado, pero prosiguió hablando. — Nos disculpamos por el ruido. Nos estamos encargando de limpiar esta playa. —

— Eso es un motivo noble, no se preocupen. Me encantaría ayudar cuando pueda, pero tengo que dirigirme a mi sitio otra vez. Nos vemos. — Me despedí de ellos.

Kuroiro me dirigió una sonrisa. Quizás no lo sepa, pero es jodidamente tétrica. Aún tenía dudas sobre su peculiaridad, pero no podía seguir incomodándolo.

— Nos vemos, joven. —

— Adiós, buda. —

Me molestó ese apodo, pero era apropiado cuando no nos habíamos presentado.

Levanté la mano abierta como despedida mientras me iba de allí.

Par de raros.

...

Entonces volví al sitio que utilizaba para meditar. Estaba ligeramente despejado de basura; es probablemente el sitio que ese par usó para empezar su proyecto de limpieza. No había olores extraños, por lo que me pareció adecuado. Además, se veía un poco del horizonte.

Cerré los ojos.

Maná, eh.

Qué complicado.

...

Algo en mi cuerpo se movía cuando alcanzaba a notar las estelas mágicas. Esto lo tomé como progreso, pues se habían necesitado lentes monitoreados especiales para observar aquellos ríos de colores extraordinarios.

Lo estaba haciendo sin ningún tipo de visor, por lo que me sentí más cerca de la magia.

Más íntimo.

Moví aquellas corrientes dispersas con mi mente o al menos traté de imaginar mi cuerpo como un gran lago al cual deparar.

Se movían frenéticamente.

Y un gran dolor entró en mi pecho.

El aire se desvaneció.

No podía respirar y tampoco parar la energía mágica que fluía a mi cuerpo.

Entonces cuando me desmayé.

Comprendí que mi maná se distribuía a través de la sangre en mis venas. Se formaban cañerías y circuitos alrededor de la distribución de sangre y la bomba de todo fluido; era un fuego blanquecino en mi interior.

El alma.

Y todo se volvió negro.

...

Parecía que había tomado la mejor siesta existente en el universo. La acumulación de sueño perdido y la relajación absoluta al estar inconsciente de forma natural formaron una experiencia totalmente reveladora.

En la oscuridad de mi inconsciente, también logré ver al mocoso.

— H-hola. —

No quería hablar contigo en este momento. Me estaba sintiendo bien, ¿sabes?

Así que lo evité e intenté despertar. Tuve éxito.

...

No había pasado mucho tiempo con respecto a mi inconsciencia. En realidad, solo una hora, probablemente. La tarde llegó, por supuesto; se supone que debería volver a casa.

Intentaría una vez más entender la energía mágica.

La cosa es que... al observar mi cuerpo notaba la silueta de una estela a través de mi cuerpo. Eran los canales mágicos que observé antes de desmayarme y ahora los podía ver claramente. Intenté disuadir la concentración mágica y eso pareció difuminar el brillo que emanaban mis venas.

Qué curioso, ahora sentía el cuerpo lleno de este gas.

No había adquirido poder ni habilidad.

Solo consciencia y eso le bastaba.

Ahora podía hacer las otras tareas de forma más cómoda.

Primero, tendría que ir a casa. Mañana ya continuaría.

Conseguí una muy buena excusa con el tema de la iniciativa para limpiar la playa, claro que en realidad estaría en otro lado de la costa.

———

Izuku Midoriya

La mañana siguiente / 1 de junio

Temprano, comí el desayuno de madre y le expliqué el asunto que iba a tratar.

Una limpieza de una playa cercana que se encontraba abarrotada de basura.

Parecía un poco preocupada, pero lo entendí. Sufría de un complejo sobreprotector al descubrir que su patético hijo era quirkless. Podía revelarlo... pero frustraría otras cosas que no pienso desperdiciar.

Entonces, sí. Salí de casa temprano, esta vez con el estómago lleno para un día largo.

...

Estaba frustrado. Había intentado usar todos los estados de la materia como una posibilidad de materialización de la magia para manipular objetos distantes sin contacto físico y nada sucedió.

Todo eso fue frustrante, porque sabía con certeza que sí podía utilizar esta habilidad con su magia, pero no sabía el cómo.

Manipular e imbuir objetos para luego alejarse e intentar "conectar" con ellos no funcionó.

Imaginar el objeto con su mente tirando hacia ella. Él. No funcionó.

No tenía sentido. Existía algo que provocaba la levitación de objetos a su alrededor cuando fue testeada, y había logrado mover un lápiz con su mente ese día. Tenía 9 años, sí, pero ocurrió.

Suspiré. Mi fuente de magia se agotaba poco a poco, pero aún tenía de sobra para terminar el día.

Okey. Recopilemos lo aprendido.

—Si, el maná es una energía pseudofísica. —

Comprobado al saber que existe la tangibilidad y presencia de esta en mi alrededor y mi cuerpo. Interactuando con las barreras corporales del mismo. Tenía esta propiedad innata de algo natural.

— ...que se comporta como un fluido multidimensional. —

Atravesando dimensiones tras quedar atrapado en este chico... no importando las diferencias de materias ni experiencias previas.

¿Quizás si le aplico vectores algebraicos? Espera...

¿Por qué intentaba hacer magia sin las fórmulas?

¡Estaba siendo estúpida todo este tiempo!

— Debería... ser capaz de crear una interacción directa con los vectores de fuerza en un objeto sin la necesidad de un intermediario físico. —

Exhalé. Iba a probar esto con una pequeña pelota de playa abandonada.

Me paré en mi sitio.

Extendí mi mano derecha y comencé a utilizar el flujo del maná. Sin el orbe de cómputo, las compuertas se abrían libremente, como un río siguiendo a un cauce.

Y lo sentí.

El modelo conceptual del plástico en mi mente. Sus bases físicas, su peso, su masa y sus propiedades físicas generales. Se sentía como si pudiese atravesar el compuesto molecular del balón a través del mana.

Cinco metros. Esa era la distancia, recuérdalo.

Y lo vi, el balón se tambaleó en su sitio, pero sin éxito al intentar rodar.

— Así que... el maná interactúa con... —

Déjame pensar...

— Con los enlaces moleculares del objeto, creando un campo vectorial alrededor de la masa superficial... —

¿Quizás...?

— Prueba uno. Comprobar si al ajustar la densidad del flujo energético podía generar gradientes de presión de coordenadas. Podría intentar moverlo sin necesidad de un cálculo intermedio de esta forma. —

Tomé aire para concentrarme. Visualicé el flujo de maná que estaba expulsando. Era precioso. Podía también ver mis canales corporales. Al parecer adquirí el tercer ojo, ¿eh?

Concentrate.

Sí, perdón. Entonces...

Las ecuaciones necesarias para el movimiento. Utilizaré las de vuelo como base para manipular los componentes de choque e intervención de un campo no discriminatorio con fluctuaciones posibles... hacía... ¿Arriba?

...Y empezó a flotar levemente.

Lo logré.

Heh.

(@KuroiEnpitsu)

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sup

La perspectiva del protagonista puede parecer lenta, pero necesito explicar las facultades de la magía para poder entender donde se úbica en la balanza de poder.

Por cierto, Tanya no mató a Mary Sue en este caso. Datito extra.

Gracias por leer. Apreciaría un voto para más.

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05-01-2025 (2273 palabras)