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Este capítulo es, en cierta parte, otra simple reflexión de Tanya.

En compensación por no subir capítulo ayer, hoy habrá dos. (Lo intentaré, al menos)

Mañana también habrá uno y desde el 9 hasta el 16 no subiré nada.

Espero que les guste.

No se olviden de votar.

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El frío metal del capó de un auto funcionó como un asiento cómodo donde podía acostarme a ver las olas. ¿No era útil tener semejante cantidad de chatarra a mis alrededores?

Había limpiado, por motivos de relajación, esta parte de la playa. Podía ver el mar y las olas, podía tocar la arena limpia de escombros y, aún más importante, tenía una privacidad única.

Quítale los colores oxidados y de pobre calidad, pero este lugar hubiera servido como un espacio de lujo en algún resort pequeño.

Da igual. El punto eran las olas y el tiempo. La manipulación de elementos varios a través de la magia seguía en curso, pero mi maná diario no bastaba para satisfacer todas las exigencias que planteaba mi programa. Eso era un problema, pero utilizaba el descanso como un apaciguador y recuperación.

Era bastante extraño que un cuerpo tan insignificante como este pudiese albergar semejante cantidad de intensidad mágica. La primera vez que abrí los ojos en esta existencia, no fui más que la sombra de mi previa forma. Me sentí calmado por los entornos similares a mi primera vida, me sentí calmado cuando noté tiempos de paz a mi alrededor, me sentí calmado cuando no había guerras internacionales ni conflictos mundiales por preocuparme.

Era relajante, pero todo eso al mismo tiempo...

Era falso.

Mis manos, mis hombros, mi cuerpo, acostumbrados al peso de un rifle, a la presión atmosférica y al dolor de la guerra, tiemblan de forma inocente con solo pensar en el pasado. Corrompido por un adolescente que alguna vez soñó ser un héroe.

Héroes.

En mi previo mundo, los héroes no existían. Claro, existieron soldados, políticos, estrategias, economías y mercados, pero por encima de todo esto, los vencedores y los vencidos. La guerra del imperio me lo dejó claro.

La virtud nunca gana las guerras; el pragmatismo lo hace. Como dijo Carl von Clausewitz: "La guerra es un acto de fuerza que se lleva a cabo para obligar al enemigo a hacer nuestra voluntad."

¿Acaso no es eso lo que mueve a las naciones? No importa cuántos discursos inspiradores se den, al final, todo se reduce al poder y a la capacidad de imponerlo.

Fui moldeada con esa idea, para sobrevivir y para triunfar en un tablero donde cada peón y cada pieza era equivalente a la pérdida o vida de miles, cientos de miles e incluso millones de personas.

Todo para que... ¿En este mundo existan los héroes? Aquí el concepto de héroe no era una expresión de alguien que asesinaba a pelotones con sus propias manos como recurso. Aquí ser un héroe no significaba tener alas de plata, ni una medalla reconocedora. No es inspiración ni es recompensa.

Acá es una profesión. Los héroes patrullan las calles, reciben sueldo, otorgan entrevistas y tienen agencias que responden por ellos.

Son productos. Son vendidos como productos.

Dime, Izuku. Díganme, espectadores del Ser X.

¿Qué diferencia hay entre un héroe y un mercenario de lujo?

El padre del capitalismo, Adam Smith, lo expresó mejor: "No es de la benevolencia del carnicero, del cervecero o del panadero de donde esperamos nuestra cena, sino de su propio interés."

Este sistema de héroes no está impulsado por la bondad ni el altruismo. Es un producto de las necesidades por mantener la maquinaria económica que sostiene el balance.

Izuku, la consciencia maldita que Ser X obligó a compartir conmigo, se retuerce ante mi lógica. Se incomoda ante mi crítica.

Lo noto en mis temblores, en mis palmas vibrantes.

¿Qué tiene de malo salvar personas?

Lamentablemente, él era muy pequeño aún para entender el mundo. Aún peor, la sociedad había sido construida para tener personas como él. Inocentes, vulnerables e inspiradas. ¿Existía algo peor que eso?

El heroísmo, para Izuku, era más que una carrera profesional; es un ideal palpable.

Y ese es el problema de nuestro conflicto, el origen en su esencia.

Su creencia es un orden basado en la bondad innata. Totalmente contrario a mi entendimiento de un sistema basado en la construcción de intereses y poder.

Mira al cielo, Izuku.

Mira el cielo, Tanya.

Está limpio. Vacío de toda guerra, vacío de todo campo de batalla. Ausente de sangre, y sin mis subordinados bañados en esta. La guerra germánica no fue una guerra de intereses, sino un conflicto por la supervivencia.

Allí, no fue una aplicación de justicia sobre el mal. Fue cuestión de supervivencia nacional.

Mis superiores fueron cegados ante un ego atractivo. Su ceguera estratégica fue producto del ego inflado tras unos pocos éxitos pequeños y, lamentablemente por ello, ocurrieron errores garrafales que costaron innumerables vidas. Las líneas de mando se llenaron de incompetentes que anteponían el orgullo antes que el bien común. Acabar con la guerra era el bien común.

En mi historia personal, ya había incontables académicos, generales, líderes mundiales que trataron este asunto de una forma sublime. Sun Tzu, El arte de la guerra.  "La excelencia suprema consiste en romper la resistencia del enemigo sin luchar."

Mis comandantes no lo entendieron.  En este mundo veo los ecos de esas gotas de memoria, veo ecos en la incompetencia de los héroes que priorizan su popularidad sobre su efectividad.

¿Es este mundo de héroes tan diferente?

¿Cuántos "héroes" aquí están más preocupados por su ranking que por las vidas que salvan?

¿Cuántos de ellos aceptarían una misión suicida si no hubiera cámaras que capturaran su sacrificio?

Podía responderlo con seguridad.

Muy pocos.

Sin embargo, algo de Izuku me atraviesa, como un eco que no consigo apagar. Existe una pureza en su anhelo de rescatar, una luz que no consigo desestimar. Su batalla interna por actuar correctamente me hace recordar algo que perdí en las guerras: la habilidad para soñar con algo que va más allá de la victoria.

Y sin embargo, no puedo ceder completamente. Max Weber lo define bien: "La política es el arte de repartir poder y recursos limitados de manera racional." Un mundo de héroes necesita más que esperanza; necesita estructura, reglas claras y, sobre todo, un liderazgo efectivo. Los héroes aquí, con todo su poder, son un ejército sin un Estado Mayor que los dirija con verdadera visión estratégica.

Tal vez esa sea la diferencia que puedo aportar. Si este cuerpo, este poder, me obliga a jugar el juego del héroe, entonces lo haré a mi manera. No por gloria, ni por reconocimiento, sino porque un sistema tan defectuoso necesita alguien que vea el tablero completo.

El dueño original de este cuerpo no está de acuerdo, claro. Pero puedo sentir cómo poco a poco lo va entendiendo. Está empezando a comprender la sinfonía humana.

"El hombre está condenado a ser libre, porque una vez arrojado al mundo, es responsable de todo lo que hace." Recordé la cita que le mencioné a Izuku.

Esa responsabilidad no es algo que se pueda esquivar. Izuku quiere salvar personas, y yo quiero que ese salvamento sea sostenible y efectivo.

Un soldado y un niño jamás deberían ser uno.

Pero yo soy la prueba viviente de ello.

Hay mucho trabajo por hacer. Necesitaba seguir con mis prácticas mágicas.

Un héroe que entiende la guerra. Esa sería una paradoja interesante, ¿no crees, Izuku?

———

Día después.

Izuku Midoriya

2 de junio.

Necesitaba dormir, por lo que el día anterior terminé mis ensayos más temprano. Sin ejecutar la experimentación con la barra de metal.

La energía fluyó como un río invisible, infiltrándose en las microestructuras del metal.

Por un momento, nada ocurrió. Luego, una leve vibración recorrió la hoja, como si estuviera resonando con una frecuencia que solo yo podía percibir.

—Interesante... — Murmuré. 

Está generando un efecto piezoeléctrico invertido. El flujo de maná induce una polarización momentánea en la estructura atómica... quizás incluso cargas dinámicas que podrían ser explotadas para crear una reacción específica.

Canalizar el maná en su cuerpo, distribuirlo con calma. Ese era el proceso para activar los ojos que permitían ver los flujos mágicos.

Observé la barra de metal y...

Mi sonrisa se ensanchó.

—Como lo sospechaba, el maná no solo se adhiere a la superficie; está interactuando con las capas internas del material. Esto significa que el acero puede actuar como un capacitor mágico. —

¿Cuánto puede almacenar antes de que se sobrecargue? Las pilas de maná eran una idea potencial, pero tendría que revisar las posibles fugas y riesgos.

Saqué el cuaderno de mi mochila antes de continuar.

Anotar. Anotar era importante.

///

"Experimento magia pura. Barra de metal.

"El acero responde al maná como un material conductor pseudoenergético. Requiere pruebas de resistencia bajo flujo sostenido y sobrecarga para determinar su límite de almacenamiento."

El mana actuará en este caso como un fluido energético que conecta y se almacena dentro de los confines metálicos.

Tomar en cuenta.

Un exceso que sobrepase la capacidad del material usado puede conllevar riesgos desconocidos.

Tomar en cuenta.

Los riesgos potenciales podrían ser descargar una energía en masa que provocaría efectos similares a una explosión invisible.

///

Había descubierto una pieza fundamental para su uso diario. El acero como fuente de almacenamiento mágico.

No quería experimentar la primera explosión mágica pura en la historia, por lo que pospuse la observación de límites.

Con unos cálculos breves, la barra de metal se lanzó hacia la basura general que había en la playa.

Sonó un breve estruendo. No apliqué fórmulas de reforzamiento porque eso venía ahora.

Con mi nueva habilidad, intenté conectarme a través del maná con la barra de metal que tiré.

La imitada jabalina alcanzó unos 50 metros. Diez veces el rango efectivo con el cual antes había probado mi telequinesis.

Y no funcionó. La distancia era demasiado.

Tuve que caminar, probando cada diez metros aproximadamente, el rango de efecto.

...

5 metros.

Ese fue el resultado. Resulta que la distancia con la cual había probado al principio era el límite.

Temí que si no hubiera tenido suerte, hubiera desistido pensando que quizás el fenómeno de levantar objetos a su alrededor era un simple sueño y no una memoria real.

Era suficiente, sin embargo.

5 metros y pronto en mis manos.

Agregué un poco más de mana y manipulé el roce del aire a través de las fórmulas y cálculos para que la barra viniese a una velocidad mucho más rápida.

Parpadeé y unos dos segundos bastaron para que estuviese en mi agarre.

Recordar. Utilizar protecciones en las manos para evitar el dolor que siento ahora.

Ugh.

La palma de su mano derecha estaba roja.

———

Parque municipal de playa Dagobah

Izuku pasó la barra a su mano izquierda y empezó a teorizar distintas fórmulas aplicables.

Tanya exhaló lentamente, observando la tosca superficie de la barra de acero en sus manos.

El maná fluía desde su núcleo como un torrente contenido, listo para ser moldeado. Con cuidado, extendió su mano y canalizó una fracción precisa de energía hacia el metal, mientras sus pensamientos corrían como una tormenta de ecuaciones.

Pensó primero en lo que tenía.

"La barra tiene una masa inicial constante. Si aplico un gradiente de densidad, debería crear un cambio localizado que simule el efecto de una 'barrera de impacto'. El truco estará en dirigir este cambio hacia un extremo mientras mantengo el equilibrio estructural."

Tenía por resultado una integral de la fuerza aplicada sobre el objeto a lo largo del tiempo. En este caso, el flujo de maná que Tanya aplica cuidadosamente para alterar la densidad de forma localizada más la masa inicial del objeto.

Tanya se enfocó en intentar imbuir su maná de forma irregular en la barra, observando cómo la densidad del metal aumentaría gradualmente hacia la punta de la barra. Conforme el maná fluía, el final de la barra empezó a resplandecer levemente, señal de que el cambio estaba operando. Tanya intentó elevar la barra y experimentó un incremento notable en el peso del extremo alterado. Era prácticamente como controlar un martillo desbalanceado.

"Curioso... el punto pesado podría resultar perfecto para ataques fuertes. Sin embargo, necesito que esta masa adicional desaparezca al moverla, o será complicado de controlar en lucha."

Revisó a sus alrededores mientras desactivaba el hechizo para moverse cómodamente. Casi se le había caído de las manos por el simple hecho de aumentarle un poco su densidad.

"Este cuerpo no sirve para el combate cuerpo a cuerpo, pero puedo optimizar las variables." pensó.

Se dirigió al vehículo que estaba usando esa mañana. El asiento que había ocupado iba a sufrir daños severos, pero eso no pareció preocuparle a Izuku.

Tanya golpeó en el medio horizontal del carro con el extremo modificado de la barra. El impacto creó una grieta profunda en la superficie, mientras que el resto de la barra permaneció intacto.

Sonó metal fracturándose y el techo del auto fracasó en mantener su estabilidad, cayendo y provocando que se hubiera transformado en un descapotable imprevisto.

"El aumento de masa fue eficiente, pero necesitaré calcular una forma de revertir la densidad justo después del impacto para no comprometer el balance. También sería interesante experimentar con proyecciones: si lanzo esta barra, podría alterar su masa en el aire para mayor efectividad."

Tanya estaba pensando cosas muy peligrosas en este momento.

"Si optimizo este proceso, podría transformar cualquier objeto ordinario en un arma devastadora. Pero, ¿qué pasaría si reduzco la densidad en la parte central y aumento ambos extremos? Tal vez logre crear un arma equilibrada y devastadora al mismo tiempo."

Abandono la barra en el suelo. Era momento de intentar eliminar el componente de fricción y reducir las resistencias aerodinámicas. El muchacho tenía un poco de experiencia en ello tras años de vuelo imperial, pero nunca aplicó este concepto a objetos literales.

Izuku intentó recordar los componentes necesarios para una aplicación así...

"La fuerza de resistencia aerodinámica estaba determinada por la fuerza que el aire ejercía sobre el objeto en cuestión... resultado... de" pensó y se hundió en sus cálculos.

— ¡Eso es! — gritó golpeando su palma izquierda con el puño derecho.

"La fuerza de resistencia aerodinámica se determina por la densidad del aire en el entorno, considerando la velocidad del objeto en movimiento, agregando el coeficiente de fricción del aire dependiente de la forma y superficie y el área frontal que tomase la dirección del movimiento..."

— ¡Es imposible! —

Izuku no tenía un orbe de computación para que hiciera todos estos cálculos en el momento e incluso si lo tuviera, le sería imposible, sin unos minutos de antelación, encargarse de hacer este hechizo una realidad.

Manipular una resistencia y alisar las irregularidades microscópicas con su maná era posible, pero... ¿Crear una superficie lo suficientemente lisa mientras se crea un campo repulsor contra específicamente moléculas de aire dependientes de entornos cambiantes?

"A la mierda. Lo haré cuando tenga en mis manos un orbe mágico. "

...

Izuku seguía intentando distintas variaciones de fórmulas mágicas que manipulaban la inercia y la densidad. Tuvo éxito en combinar ambas técnicas, pero requirió de un cuarto de hora para aplicar un solo movimiento físico.

Quedó completamente agotado en maná. Sus ensayos habían terminado a las 3:37pm. Tenía muchas horas libres.

¿Cómo las gastaría?

Interpretó que el resto de su lista de actividades era imposible con tan poco potencial matemático y aritmético.

Sí, notó que últimamente estaba manipulando su cuerpo para provocar espasmos de reflejos e incluso aumentar su velocidad de visión. Utilizar la magia y hechizos simples era suficiente para manipular sus sentidos físicos. Eso fue una victoria, pero usaba constantemente maná para ello y lo volvía dependiente.

Si quisiera imitar un comportamiento quimico-mágico, necesitaría entender y manipular las constantes mágicas para crear compuestos químicos precisos para el propósito deseado. ¿Eso sin un orbe de cálculo? Imposible.

La prenda de nitroglicerina no sirvió para nada. Era frustrante para la perfeccionista Tanya, pero la guardó como recurso de emergencia. Nadie estaría preparado para una molotov casera, ¿verdad?

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sup

Las explicaciones resultan un poco más complejas de hacer con Wattpad no pudiendo soportar la integración de formulas compuesta, pero meh. Espero se entienda.

Gracias por leer. No olviden votar.

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08-01-2025 (2572 palabras)