“Te quiero”
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Jimin se veía por última vez en el espejo de cuerpo completo, hoy más que nunca debía verse muy bien. Quería impresionar a JungKook y estaba seguro que lo lograría con aquella loción que compró ayer, era de frutos secos y un toque de canela.

Salió de su habitación con una gran sonrisa, no iba a desayunar en su casa, no quería que sus padres echaran a perder su día.

Ayer después del besar a JungKook este le sonrió tiernamente, luego se abrazaron cálidamente y hasta ahora ninguno había mencionado lo del beso.

“Obviamente le gusto, solo voy a esperar que sea su cumpleaños para que sea mi novio. Seré su regalo”

Si, Jimin investigó el cumpleaños de JungKook para prepararle algo muy lindo.

— Te voy hacer una bufanda, si. Y no va ser cualquier bufanda, va ser una hecha por mi, así que valdrá más — habló consigo mismo mientras entraba a la preparatoria.

Buscó con la mirada aquel pelinegro que había robado su corazón para irlo a saludar, necesitaba que este le dijera que se veía hermoso. No se arregló por nada.

Cuando vio a lo lejos al pelinegro dibujar en su cuaderno, sonrió y quiso ir corriendo hasta él pero se calmó, no quería que los demás empezarán a cuestionarlo. Caminó a pasos lentos hasta el pelinegro y le dió un pequeño abrazo como saludo.

— ¿Qué haces? — cuestionó mirando el bloc de dibujos — ¡Soy yo!

— Espero no te moleste que te dibuje — limpió con una toallita húmeda sus dedos llenos de pastel seco.

— No me molesta, al contrario, me gusta que puedas plasmar mi belleza en una de tus obras — le quitó el bloc para ver mejor el dibujo — ¿Así de hermoso soy ante tus ojos?

— Eres hermoso antes los ojos de cualquiera, Jiminie — le dedicó una dulce sonrisa — Como se que las rosas es tu flor favorita, tengo pensado dibujar muchas rosas atrás tuyo, ¿Te gustaría?

— ¡Sí!

— Ya sé, mejor la haré con pintura óleo en un lienzo grande así voy a poder plasmar mejor tu belleza. ¿Qué opinas?

— Aunque me dibujes con carboncillo siempre vas a plasmar mi belleza a la perfección porque eres un gran artista — comentó con una gran sonrisa.

JungKook pellizcó suavemente uno de los mofletes del contrario, en todo este tiempo que llevaba conviviendo con él, Jimin siempre sonreía como si fuera un niño, con mucha inocencia.

— Duele — se quejó haciendo un pequeño mohín.

— Hoy luces muy hermoso — halagó.

— Siempre me veo hermoso.

— Pero hoy más, ¿Te pusiste algo en especial? — cuestionó mirando fijamente al castaño.

— No. Nada especial — respondió.

Se miraron por unos segundos hasta que Jimin desvió la mirada hacia el frente, borró su sonrisa cuando vio a Taehyung viéndolos con una sonrisa desde lejos.

— Me voy. — se levantó del asiento con molestia  —Hasta luego, Jungkookie. Te quiero.

— Yo... Igual.

JungKook se sorprendió ante el cambio tan repentino y fijó su vista hacia donde el castaño vio antes de irse.

— Hola, cariño. ¿Que hacías con ese? — cuestionó Taehyung.

El menor cerró de manera disimulada su bloc para que su novio no viera el dibujo de Jimin. Le dedicó una dulce sonrisa antes de responder.

— Estábamos acordando la siguiente clase, nada importante — mintió, estaba decidido, no revelaría más información de Jimin. Aparte, Taehyung ya era su novio

— Te has hecho muy amigo de él, ¿No? — habló mirando fijamente al chico.

— Solo lo necesario para que las clases sean más sencillas y menos aburridas.

JungKook trataba de hablar de más o revelar información que pudiera dañar el contrario.

[🥀]

JungKook estaba en la oficina de control escolar, esperando a que la secretaria le hiciera caso.

— Ahora si, ¿Qué necesitas? — la señora le sonrió levemente.

— Uh, bueno, necesito saber si mi amigo pasó unos extraordinarios... ¿Dónde puedo ver esa información? — cuestionó un tanto nervioso.

— Las calificaciones están pegados en el pizarrón de esta vuelta — señaló — Solo busca el nombre de tu amigo en la asignatura que reprobó y ya.

— Oh, muchas gracias — hizo una reverencia.

Caminó hasta aquel pizarrón y empezó a buscar el nombre de Taemin, le sorprendió bastante al ver que este había presentado tres materias distintas. Tomó foto de la listas donde aparecía Taemin y su calificación del extraordinario.

— ¡Muchas gracias, señora! — se despidió con una leve sonrisa.

Iba a pasos apresurados hasta el centro de computación para revisar la boleta de Taemin, a pesar de tener esta en su poder quería comprobar que la boleta que él tenía era la original. Se metió a la página de la escuela y buscó el apartado de boletas, buscó la de Taemin y efectivamente esta era la original.

— Entonces, Jimin siempre te ha superado — Murmuró.

Inmediatamente llamó a Jimin, esperando que este le respondiera. Apenas se escuchó el tercer pitido y pudo escuchar la dulce voz del castaño.

— ¿Sucede algo?

— Jiminie, tengo algo importante que decirte.

— Pues dilo.

— Siempre has superado a Taemin, eres mejor que él.

— Eso ya lo sé.

— No, es enserio Jim. Eres mejor que él.

— ¿Por qué me dices esto? ¿Te ocurre algo?

— Jimin, entre tú y tu hermano, tú sacaste mejores calificaciones.

— ¿Que? No, Tae sacó mejores, si quieres te puedo enseñar su boleta y la mía.

— No. Esa boleta es falsa, la original la tengo aquí conmigo, es más... Ahorita te mando lo que tengo por mensaje para que lo veas tu mismo.

— Investigaste todo eso... ¿Por mí?

— No voy a permitir que tus padres te digan cosas, cuando al que deberían regañar es a Taemin y no a tí.

— Te quiero mucho... JungKookie.

— Yo también, Jiminie.

[🥀]

Jimin entró a la habitación de su hermano a escondidas. Para su suerte su hermano estaba ahí sentado viendo una serie.

— Tae... — Susurró tratando de llamar la atención del mayor.

Taemin se espantó al ver a su hermano ahí parado, no lo había escuchado entrar.

— ¿Que sucede Jiminie? — cuestionó.

— ¿Por qué le mientes a nuestros padres sobre tus calificaciones? — preguntó sin rodeos.

El mayor se sorprendió ante la pregunta y negó con una sonrisa nerviosa.

— ¿De que hablas? — rió.

— De esto — le mostró las fotografías que JungKook le había enviado — Ya no mientas.

—...

—...

— Lo siento.... — empezó a llorar — Yo no quiero mentir pero es la única forma para que ellos no me digan nada...
Soy el peor hermano.

— Tae...

— No sabes cómo me siento al ver que tú te esfuerzas por tus calificaciones y que ellos te digan fracasado... Pero soy tan cobarde que no digo nada y solo miento — soltó sollozos.

— No te preocupes, yo puedo seguir soportando todos sus insultos.

— No, Jimin. Si quieres ve y dile la verdad a papá o a mamá, merezco que me regañen... Que me insulten y golpeen.

— Taemin... Ya estoy acostumbrado a los comentarios de papá, tu sigue esforzándote en las materias. — sonrió levemente — Solo quiero saber, ¿Cómo le hiciste para la boleta?

— Soy bueno editando... — limpió sus lágrimas.

— Oh. — asintió levemente — Tu secreto estará seguro conmigo.

— Jimin, gracias...

— No es nada, haría cualquier cosa para que no sufras como yo lo hago — le sonrió.

— Ya no sufres por aquel chico, ¿Verdad?

Las mejillas de Jimin se pintaron de un leve rojo carmesí. Taemin soltó una pequeña carcajada.

— Te gusta ese chico.

— ¡Ya! — gritó tapando su rostro — Me voy, tengo que hacer cosas.

Sin más salió de la habitación y corrió a la suya para encerrarse.