005

Sunwoo casi no pego el ojo en toda la noche, el remordimiento le estaba carcomiendo. Cerraba sus ojos y solo podía recordar los ojitos tristes de su aguatero cuando le anunció que no estaría con ellos como jugador este viernes.

Se sento en su cama y vio a Younghoon dormir plácidamente entre sus sabanas. Se frotó el rostro frustrado y se levanto de la cama; mientras caminaba por los pasillos de los dormitorios, se quedo parado frente a la puerta donde Jacob y Changmin compartían cuarto y por alguna razón le dieron ganas de verlo.

¿Para disculparse tal vez? No tenia idea, pero el peliblanco parecía ser una persona sensible y Sunwoo se imaginó que incluso su Hyung ya estaba llorando.

Abrió la puerta lentamente y asomo solo un poco la cabeza, busco en medio de la oscuridad la cama que pertenece al aguatero y fruncio el ceño al verla vacía.

¿Changmin no paso la noche aquí?

Sunwoo cerro de nuevo la puerta y decidió regresar a su cuarto, con una sensación rara desvaneciéndose en su interior.


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Younghoon se sentía incómodo mientras desayunaba, la mirada de Sunwoo lo estaba empezándo a poner nervioso.


- ¿Que? - preguntó por octava vez el alto.

- ¿Que tu? - respondió de nuevo el capitán por octava vez.


El moreno desvío la mirada y Younghoon igual, para segundos después volver a posar su mirada en el crush de Chanhee.

¿Acaso Younghoon sabia donde había dormirdo Changmin? ¿Changmin siquiera aviso que estaría toda una noche afuera? Seguro que Younghoon si sabia y que por eso se encontraba tan tranquilo, ya que eran las siete de la mañana y el peliblanco aún no regresaba a la casa.

Pero Sunwoo no preguntaría, por supuesto que no, eso generaria una idea equivocada a sus amigos y pensaran que el estaba curioso por la actividad del de lentes.

Y no era por eso...puff por supuesto que no. Simplemente que el era muy comprometido con las cosas que hacia y el era el entrenador de Oh, pero este falto a su entrenamiento de esa mañana, lo cual lo deja como una persona irresponsable, no había algo mas profundo en ello, solamente quería saber la razón por la cuál falto a su palabra nada más.

- Escuchen esto...- pidió Kevin mientras sonreía a su teléfono - El primer síntoma para saber que alguien te gusta, no son mas que ese ejército de celos dispuesto a defender lo que ni siquiera es tuyo - finalizó riendo.

- Es estúpido - bufo Sunwoo.

- Pero lo haces de manera inconsciente - agrego Chanhee asintiendo, ya que el mas que nadie entendía ese sentimiento de tener celos y no poder reclamar nada.

- Claro - sonrió malvado Juyeon - Como no dejar que nadie mas lo entrene...

- O crear conflictos en la relación de tus amigos solo por un arrebato de celos - añadió Hyunjae mirándolo con los ojos entre cerrados.

- Que estúpido - soltó el moreno.

Todos sus amigos quisieron girar los ojos, ya que sabían que Sunwoo no se daba cuenta que estaban hablando de él.











Horas mas tardes, todos se encontraban ya en su universidad, la mayoría en la cancha de fútbol, mientras que los otros esparcidos en algún lugar.

- ¿Sunwoo, podrías concentrarte? - gruño Chanhee.

- No se de que me hablas, estoy concentrado - respondió el capitán de mala manera.

- ¿Enserio? - cuestiono Hyunjae mirándolo mal - Reclutaste a una persona que ni siquiera vino a probar.

- ¿Quién mierda es Lee Sangyeon? - preguntó Juyeon confundido viendo el nombre en la lista de aceptados.

- Sunwoo, Changmin esta en la biblioteca - informo Jacob uniéndose a ellos.

- ¿Y a mi que me importa?

Juyeon giro los ojos y camino hacia su amigo.

- Oye Sunwoo ¿podrías traerme un libro de la biblioteca? - pidió el mas alto.

Todos alli sonrieron ya que entendieron lo que el novio de Jaehyun quería hacer.

Sunwoo miro serio a su amigo para después asentir y se puso su cardigan y camino fuera de la cancha.

- Menos mal que no le importa - se burlo Kevin - Se fue a la biblioteca sin siquiera preguntarte que libro querías.





El capitán camino rumbo a la biblioteca, teniendo nuevamente una batalla mental.

¿Y si el peliblanco ahora lo odiaba y por eso lo estaba evitando? ¿O esta sufriendo tanto que ni siquiera puede mirarlo a la cara? Tal vez fue muy duro con Changmin, pero este tenia que entender que no estaban como para dar juegos de prácticas, sin importar que el juego del viernes solo es un simple amistoso.

Paro su caminar al oír esa conocida risa y fruncio el ceño al estar en la puerta de la biblioteca. Desde alli se podría apreciar a un sonriente Changmin, quien estaba junto a un chico sentado frente a una mesa.

Sunwoo chasqueo la lengua y decidió no entrar. Eso le pasaba por interesarse en alguien a quién no conocía.











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Sunwoo decidió actuar normal, pero Changmin opto por el papel de indiferente. Aún seguían con sus entrenamientos, pero esta vez el mayor decidió tomarse las cosas realmente enserio.

Cuando Sunwoo iba con intenciones de despertarle, el de hoyuelos ya estaba todo listo y ese pequeño avance que tuvieron, retrocedió hasta el primer día que se conocieron.

Ya casi no hablaban y lo poco que conversaban, lo cual era intercambios de palabras solo muy necesarias al igual que muy cortantes.


- Muy bien - hablo esa tarde Kevin - Los nuevos integrantes, Lee, Heo, Son y Ju.

Todos se encontraban en las gradas, incluyendo a los aguateros.

- Ya que el equipo esta formado oficialmente, debemos conseguirnos apodos - propuso el canadiense menor.

- No haremos tal cosa - dijo rápidamente Sunwoo.

- Deja que el niño se exprese - pidió divertido Jacob, queriendo oír con que ahora saldría su Dongsaeng.

- Ok...- dijo feliz Moon - Haknyeon tu serás Hannah.

- ¿Porque Hannah?

- Y es por el "Ha" de tu nombre...

- ¿Y porque no solo le decimos Hakkie? - propuso Chanhee aburrido.

- Shhh, Changmin tu serás...

- Pero Changmin ya tiene un apodo - hizo recordar Younghoon.

- Si, pero es uno viejo - giro los ojos - Mejor te decimos Nemo.

Sunwoo cerro los ojos fastidiado y miro serio a su mejor amigo - ¿Y porque mierda le diríamos Nemo?

- Porque no tiene mamá...

- Tienes razón, mejor dejemos nuestros nombres como estan - sonrió forzado Jacob, palmeando el hombro de Kevin.

- Dejemos de perder el tiempo que mañana tenemos un partido que ganar - mando el capitán y se paro de las gradas - iré a traer los equipos y cuando vuelva los quiero a todos preparados.

Todos asintieron y el moreno fue a traer lo que dijo. Changmin y Younghoon también se pararon ya que debían preparar todo el equipo de agua para que ellos se hidraten en el entrenamiento de hoy.

- El capitán es muy guapo - murmuro Haknyeon.

Todos se tensaron al oír aquello y miraron en sincronía al bajo moreno.

- ¿Sunwoo te parece guapo? - cuestiono el pelirosa confundido, como no creyendo que alguien le puede ver bonito a su mejor amigo.

- Si - afirmo - ¿Esta soltero?

Todos los amigos se miraron entre si, pero solo Kevin y Chanhee respondieron en automático.

- No.

Juyeon y Hyunjae giraron los ojos por eso y decidieron levantarse no queriendo oír ahora con que cosas saldrán esos dos.

- ¿Ves al peliblanco que se fue? - interrogo Kevin - Es su novio.

- ¿Enserio? - preguntó Eric - Pero ni siquiera se miran.

- Si, pero son novios - agregó Chanhee - Y su amigo el alto, bueno...ese es mi novio.

Los nuevos levantaron las cejas sorprendidos, ya que al igual que el peliblanco, el alto castaño tampoco miraba a ese bonito pelirrosa.

- ¿Así? - habló altanero Kevin - Y este chico es mi novio - mintió, colocando su mano sobre la cabeza de Jacob, haciendo que este ruede los ojos.

- No es una competencia Kevin - recordó Chanhee.

- ¿Todos aquí son novios? - cuestióno Hyunjoon.

- No, ven a ese dos de allí - el canadiense menor apunto a la única pareja real del equipo - Ellos dos son solo amigos.

- ¿Porque mierda no están todos en la cancha? - bufo Sunwoo tras ellos, haciendo que rápidamente todos se levanten asustados.

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Esa misma noche, Sunwoo estaba refunfuñando mientras estaba en el auto de Kevin, yendo a quien sabe donde.

Solo hace unas horas atrás, el moreno le había comentado a su mejor amigo que estaban muy escasos de dinero ahora que integraron a cuatro mas en el equipo, por mas que la universidad cubría obligatoriamente algunos por cientos de la necesidades básicas del equipo de fútbol, no era suficiente, así que Kevin le pidió a Sunwoo que se prepare ya que saldrían a buscar una solución.

- ¿No tenías otra ropa que ponerte? - pregunto Kevin mientras conducía.

- Estoy bien ¿o preferirías que me ponga un traje de gala?

- Me refiero a ponerte algo mas casual...

- Tengo un maldito jeans y una sudadera ¿que más casual quieres que me vea? - bufo - ¿A donde mierda piensas llevarnos?

Kevin suspiro y condujo mas rápido, preparándose mentalmente para lo que se vendría.



























































- ¿¡Kevin Moon!? - grito Sunwoo furioso una vez se bajo del coche - ¿¡Donde mierda me trajiste!?

- Sunwoo tranquilizate, llamaras la atención...

El moreno estaba con la boca abierta, no pudiendo creer donde le había traído el canadiense.

Llegaron a un lugar solitario entre edificios que parecen estar abandonados por lo deteriorado y sucios que están. La música se escuchaba tan fuerte que debías gritar para que te hoyan, las personas bailaban y tomaban como si estuvieran en una discoteca.

- Kevin, creí que te rescatamos de esto...

- No es lo que piensas..

- ¿Lo estas volviendo a ver?

- No - afirmó - Pero una vez el me enseño este lugar, Sunwoo estabas tan desesperado que no se me ocurrió que mas hacer.

- ¿Que venimos hacer aquí? ¿Vender drogas? ¿Nuestros órganos? - rechisto enojado.

- Es un lugar donde se maneja las carreras clandestinas.

- ¿¡Que mierda contigo Kevin Moon!? - grito - ¡Sabia que ser novio de ese malandro era mala idea!

- No le metas a el en esto, yo vine porque quise y solo quería ayudar.

- Pues no quiero nada de aquí, llevame a casa...

El grito de Sunwoo llamo la atención de unas cuantas personas a metros de ellos, Kevin trago grueso con miedo y tomo a su mejor amigo del brazo para adentrarse entre las personas.

- ¿Podrías dejar de gritar? - pidió mirando nervioso a su alrededor - Llamaras la atención y si las personas descubren que somos nuevos aquí nos comerán vivos y...

Kevin callo cuando a los lejos pudo divisar una figura muy conocida. Un hermoso chico quien le sonreía a un hombre mucho mas alto que el, cuyo chico que ahora contaba con el pelo naranja y aún conservaba esa preciosa sonrisa.

- Lo sabía maldita sea - soltó Sunwoo mas que enojado - Sabia que era por él.

- ¡Ni siquiera sabia que iba a estar hoy! - respondió Kevin saliendo de su sorpresa.

- Es un maldito malandro, las personas como el solo están en basureros como este...

- ¿Vienen a apostar o a correr? - se adentro un gran hombre haciendo que los amigos se tensaran al oír su gruesa voz.

Kevin y Sunwoo en cámara lenta levantaron su cabeza, viendo de apoco la apariencia de ese sujeto: Brazos expuesto, con toda la piel cubierta por tatuajes, mas de cinco piercing en todo su rostro, olor a alcohol y cigarrillos y a algo que los jóvenes desconocían.

- V-vinimos a apostar - respondió el canadiense, haciendo que Sunwoo quisiera refutar, pero Moon rápidamente le pincho el brazo para que no abriera la boca.

- ¿A que van? - preguntó el hombre.

Kevin y Sunwoo se miraron con miedo. ¿A quien van? Ni siquiera tenía idea en que calle estaban.

- Apuestan a favor de Kyu - respondieron por ellos una voz tras el hombre grandote.

Sunwoo golpeo el interior de su mejilla con su lengua al reconocer ese asentó, mientras que el corazón de Kevin bombeaba de manera anormal.

- Yo me encargare de recoger su dinero, despreocupate Jun - sonrió Yoshi y el hombre asintió.

Una vez el japones se aseguro que el mayor se fuera, volteo a mirar molesto a los dos amigos mientras se cruzaba de brazos.

- ¿Que mierda hacen aquí?

- El no vino por ti si es lo que piensas - rápidamente aclaró el moreno mirando con odio al pelinaranja.

- Necesitamos dinero - confeso Kevin, tratando de disimular sus nervios al volver a ver a su ex novio después de tantos meses.

- Este no es lugar para chicos como ustedes, vayan a casa...

" ¡La carrera dará inicio en dos minutos!"

Se pudo oír por los altavoces, haciendo a Nori maldecir.

- Vamos al centro y no se separen de mí...

- No iremos contigo a ninguna parte - bufo Sunwoo, manteniéndose firme.

- Pues como quieran - se encogió de hombros - Quedense aquí, rodeados de personas alcohólicas, drogadictas, rodeadas de personas malas de verdad... - dijo por último y giro para ir a donde se realizará la carrera y sonrió cuando sintio a esos dos seguirlo.

Kevin fruncio el ceño cuando Yoshi se acerco a un chico sobre una gran brillante moto de color azúl. Sunwoo también vio al japonés, pero solo por miedo a que este trame algo.

Vieron a Yoshi decirle algo al chico mientras gesticulaba con las manos, para que después el motociclista gire la cabeza y vea en dirección a donde estaban ellos. Y Sunwoo podría jurar que se estaba volviendo loco, pero aquel chico (cuya identidad era protegida gracias a su gran casco) lo estaba viendo a el.

El motociclista desvío de nuevo la mirada e hizo rugir su motocicleta y el pelinaranja volvió junto a su ex y el amigo de este.

- Denme su dinero - fue lo primero que dijo Yoshi a llegar a ellos.

- ¿Q-que?

- ¿Vinieron a apostar, no? - dijo aburrido extendiendo su mano.

- Mas le vale a ese tal Kyu ser bueno, porque juro que no se que haría si pierdo mi dinero - rogó Sunwoo viendo como su mejor amigo entregaba el dinero.

Yoshi sonrió y guardo los billetes. - Veanlos por ustedes mismos.

Ambos chicos quisieron llevar sus dedos a sus oídos por el fuerte sonido de los motores de los competidores sonando todo juntos. Sunwoo no tenía idea cual moto pertenecía a ese tal Kyu, pero por alguna razón sentía que se trataba de esa gran motocicleta azúl brillante.

La carrera inicio y las motos salieron disparando cual cohetes. La motocicleta azúl tomo ventaja de inmediato, hasta que llego a una curva y se pierde en la oscuridad, haciendo que los espectadores solo vean sus luces traseras desvanecerse de apoco hasta ya no verla.


- Dios, Kyu es tan sexy que pagaría todo lo que hoy ganare para que me folle - se oyó chillar a una chica tras Sunwoo, haciendo que este haga una mueca de desagrado por lo vulgar que todos hablaban allí.

Los minutos pasaron y Sunwoo estaba mordiéndose las uñas nervioso, solo rogando que ese Kyu salga de la oscuridad y gane esta puta carrera.

Solo basto segundos para que una luz en medio de la oscuridad se asome y el capitán cerro los ojos, apoyando su cabeza en el hombro de su amigo, con miedo a ver quién seria el ganador.

"¡Damas y caballeros, Kyu nuevamente a ganado!"

Sunwoo tiro la cabeza hacia atrás, agradecido por eso. Una vez que pase toda esa adrenalina mataría a Kevin por exponerlo así.

- Ganaron - sonrió Yoshi y río cuando vio la expresión del moreno - Ya puedes respirar Sunwoo, Min es el mejor...

- ¿Min? - interrogo Kevin confundido.

Yoshi carraspeo al darse cuenta el sobre nombre que había soltado.

- ¿Que Min? Dije Kyu... - rápidamente quiso arreglarlo.

- Min o Kyu, lo que sea...- el pelinegro chasqueo la lengua - ¿Donde recogemos nuestro dinero?

- Siganme a...

Los tres agrandaron los ojos al oír lo que estaban gritando las personas.

- ¿Policia? - repitió Kevin asustado - Mierda, Sunwoo si la policía me agarra, no se que me harán mis padres...

Las personas empezaron a alborotarse como hormigas cuando se destruye sus hormigueros, gritando y subiendo en cualquier motocicleta y coche para escapar de allí.

Los dos amigos corrieron tras de Yoshi, quién buscaba desesperado su propia moto.

El sonido de la patrulla cada vez se oía mas cercano, haciendo que el alboroto empeore.

- Sunwoo lo siento - murmurmo Yoshi apenado, haciendo que el moreno lo mire confundido.

El japonés tomo a Kevin de la mano y lo hizo correr tan rápido, hasta el punto de perderse en la multitud, dejándolo más desesperado de lo que estaba.

El moreno con miedo busco un lugar en donde al menos esconderse, pero las sirenas lo estaban empeorando todo. Un ejército de motociclistas avanza rápido, el pelinegro corre al igual que algunos, los primeros pasos son inseguros, no logra dominar sus piernas por el terror de ser atrapado.

Ya se empezó a escuchar disparos y todos comienzan a correr en todas las direcciones. Las peronas tropieza, las motocicletas le pasan por al lado. Su corazón se agita mientas oye las sirenas. No muy lejos aparecen los coches con sus techos de colores azules y rojos brillantes.

Sunwoo solo rogaba llegar al auto de Kevin. Alrededor también hay personas que corren al igual que el. Algunos gritan, otros se tropiezan peligrosamente. Una chica con la moto cae a pocos metros de el, otros carros de la municipal se paran alrededor.

El capitán quiso sonreír al divisar el coche en el que vinieron a pocos metros de distancia. Esta a salvo, pero de repente algo lo para, alguien lo agarra por los brazos. Es un oficial; Sunwoo de manera automática lo empuja con fuerza, haciéndolo caer con fuerza al suelo.

El policía se levanto con rabia, con claras intenciones de usar su arma, pero una gran moto azul se interpone.

- Sube - ordeno el motociclista.

Sunwoo agrando los ojos al reconocer aquel brillante color.

- ¡Ahora maldita sea! - volvió a gritar el chico, haciendo que Sunwoo asustado de un salto se suba a la motocicleta y este sin esperar que el moreno le indique que ya podía arrancar, lo hizo sin mas, haciendo que el pelinegro se aferre a ese desconocido chico.

El policía se recupera, se monta en su carro cerca con un colega al volante y parten a su persecución. Kyu pasa fácilmente entre los demas conductores y las motos paradas de los oficiales. Algunos fotógrafos avisados de esa redada llegaron al lugar y toman fotos.

Kyu se levanta sobre una rueda y acelera. Supera a otro policía que con la señal roja le hace señas de pararse. Alrededor, flash enloquecidos. El peliblanco apaga las luces y se baja a la distancia del manubrio.

El coche de la patrullera con el oficial golpeado supera lateralmente la motocicleta y con la sirena chillando esta rápido detrás de ambos.

- ¡Cubre la placa con tu pie!

Sunwoo fruncio el ceño al no entender, puesto que por todo el sonido del albotoro y el casco que el motociclista tenia sobre su cabeza hacia que su voz suene distorsionado.

- ¿Que?

- ¡Cubre el ultimo numero de la placa con el pie!

Sunwoo al entenderlo, hace lo que Kyu pide y tira hacia atrás la pierna derecha tratando de cubrir la placa.

- No lo logro...- informo frustrado.

- ¿Como que no puedes hacerlo? - gruño el del casco, acelerando la motocicleta.

- Bueno, nunca he tenido que escapar en una moto. Seguramente hubiera querido evitarlo hoy también - grito para que el conductor lo oya.

- ¿Preferias que te hubiera dejado en manos de ese policía? - soltó de mala manera.

Sunwoo no contesta, no pudiendo creer como aquel extraño se atrevia a hablarle de ese modo.

Kyu acelera y gira a la derecha. La rueda detrás se desliza ligeramente marcándose en el asfalto. Sunwoo se aferra a el y grita que pare.

- ¡Frena!

Kyu no lo obedece y sigue conduciendo.

- ¡Frena maldita sea!

El coche de los oficiales nuevamente logro encontrarlos. Kyu toma una ruta que va de bajada. El moreno se le acerela mucho mas el corazón cuando oye, no solo uno, ni dos, mas bien cuatro sirenas tras el.

- Matare a Kevin - se decia Sunwoo mientras cerraba sus ojos - Primero matare a Yoshi, luego a Kevin...- Kyu sonrió bajo su casco cuando el moreno cada vez lo abrazaba más fuerte - Moriré y mañana leeré en los periódicos "Apuesto capitán muere en una persecución con un malandro"

- ¿Pero si mueres...como vas a leer los periódicos? - interrogó el conductor divertido.

Kyu acelera de nuevo y se voltea repentinamente a la izquierda. Se meten en una calle que tiene un campo semidesierto. Hay algunas villas con un muro alto y una cerca.

- ¿Porque no estas parando? - preguntó Sunwoo asustado al ver un precipicio asomando a los lejos - ¡PARA PARA!

Kyu lo ignoro, al contrario, acelero como nunca y paso encima del precipicio como si no tuviera miedo alguno, haciendo volar la motocicleta junto con ellos.

Sunwoo cerro los ojos, no creyendo lo que el conductor hizo. El moreno podía jurar que si bajaba los pies podría sentir la "nada" del aire. El sonido de las sirenas cada vez era mas débil y solo se podía escuchar el sonido del motor y el viento chocando con ellos.

Después de segundos, nuevamente la motocicleta estuvo en tierra plana, haciendo que Sunwoo vuelva a respirar. Kyu hizo parar la motocicleta y volteo un poco su cabeza para ver si el moreno se encontraba bien.

- ¿¡Estas loco, maldito demente!? - grito Sunwoo apenas se recuperó.

Kyu sonrió ya que eso significaba que el capitán si se encontraba bien.

- ¡Casi nos matas! - seguía reclamando, pero sin soltarse del amarre que tenia en su cintura - ¡El único que tiene un casco eres tu, bien yo podría caer y romperme la cabeza!

- Aún estas gritando, clara señal que estas bien.

- ¡Y tu que sabes cuales son las señales que indica que estoy bien!

Kyu giro los ojos y llevo sus manos a su chaqueta para bajar el cierre.

- ¿Q-que estas haciendo? - preguntó Sunwoo con los ojos grandes al ver que el motociclista se estaba quitando su chaqueta.

- Puedo jurar que es la primera vez que te oyó tartamudear - sonrió, tendiéndole la campera de cuero - Pontela.

- ¿Eh?

- Estas helado ¿no te quieres resfríar, no? - cuestiono - Mañana es viernes, tal vez tengas algo importante que hacer...

"El juego" fue lo primero que pensó el moreno, así que de mala manera tomo la chaqueta de ese chico y se la puso y solo allí dimensióno el frío que tenía.

- Ahora puedes conducir como las personas normales - gruño el pelinegro.

- Eres muy patán ¿te lo han dicho? - interrogó, ya que el alto en ningún momento le agradeció de haberlo salvado o porque le había prestado su ropa.

Sunwoo jadeo mas que indignado y las quejas digna del gruñón que es no se hicieron esperar y Kyu totalmente acostumbrado a los quejidos del capitán encendió de nuevo su motocicleta y condujo hasta su departamento.

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Llegaron frente a la casa del equipo de fútbol y Sunwoo suspiro mas que aliviado al llegar con todas sus piezas.

- Ya puedes soltarme dulzura - pidió Kyu, haciendo que Sunwoo sea consiente que todo el camino estuvo aferrado a ese malandro de motocicleta azúl.

Sunwoo se bajo apenado y se paro a metros del conductor. Kyu arqueo la cejas y sonrió altanero, sabiendo que el capitán no puede verlo por el casco que cubría su rostro.

- Ten tu chaqueta - dijo con intenciones de sacárselo.

- ¿Asi que no me darás las gracias?

El moreno jadeo mirándolo incrédulo.

- ¿¡Perdon!? ¿¡Gracias!?

- Perdonado y de nada... - río y el alto lo miro mal - ¿Acaso no te divertiste?

- Muchisimo - decreto sarcástico - Ya estoy acostumbrado a este tipo de diversion. Me dejo perseguir por la policía un poco, bajo volando en medio de un campo perdido, vuelo por los precipicios. Nado un poco ahí y después regreso a mi casa con el primer extraño que se me ofrezca.

- Al menos no pasaste frío... - añadió Kyu y Sunwoo rodó los ojos - Y se te olvido agregar algo...

El bajo encendio de nuevo su motocicleta y miro atento al capitán.

- Que hiciste todo eso conmigo.

Sunwoo abrió la boca enojado, dispuesto a tomar la chaqueta y tirarselo a la cara a ese engreido malandro, pero este ya había arrancado y se había ido.

El moreno disgustado porque le dejo con la palabra en la boca, giro para ingresar a su departamento. Sin darse cuenta llevo la chaqueta a su nariz y la olió.

Berrys...

Sunwoo río. ¿No que muy chico malo, pero huele a bayas? El moreno negó con la cabeza e ingreso a su departamento. Camino en silencio hacia los pasillos, hasta que se detuvo en la puerta de Changmin y Jacob, sin excusa en su mente solo abrió la puerta y como clara señal de molestia, golpeo el interior de su mejilla con su lengua al ver la cama perfectamente tendida del peliblanco.

De nuevo Oh Changmin no había venido a dormir.



23 de julio del 2022

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