Lo hicieron dentro del coche, el cual se encontraba aparcado en el estacionamiento del complejo de departamentos en donde Jeongguk vivía. Y no conformes con eso, lo terminaron haciendo en su cama hasta que Taehyung lloró y rogó que lo dejara correrse. No acostumbraba a dejar a sus conquistas pasar la noche en su hogar, pero de alguna forma Tae se había portado muy bien y lo permitió porque notó como él solo necesitaba unas pocas horas de sueño para comenzar a funcionar.

O es lo que creyó desde un principio cuando lo vio caer rendido contra la almohada. Eran las dos de la tarde y Taehyung aún no despertaba, el desayuno se había enfriado y no estaba seguro si le gustaba el café. Pero tenía la alternativa que a unas pocas cuadras había un Starbucks y si el muchacho quería algo de ahí él iría a comprar sin ningún problema.

Estaba mirando televisión cuando sintió pasos arrastrarse por el pasillo y cuando giró el rostro encontró a Tae mirándolo con el ceño fruncido, parecía molesto y algo más.

— ¿Qué mierda me miras?

Tan dulce, Jeon. Tan dulce.

—Son como las cuatro de la tarde, imbécil. ¿Por qué mierda no me levantaste y me echaste a patadas como seguramente haces? Tenía tarea para hacer y debía de empezarla a las nueve—Se quejó y luego se tiró a su lado, cruzado de brazos. La molestia se había ido, bien podía tomarse un día y algo más, pero mañana estaría a primera hora levantado para comenzar a hacer todo en lo que se había atrasado.

Miraron fijamente la televisión, cada uno metido de lleno en sus pensamientos. Jeon cuestionandose a sí mismo con las cosas que últimamente venía haciendo y Taehyung insultando a Jeongguk en su cabeza porque había sido un total imbécil que no lo había despertado.

—Debemos hablar—Dijo un tiempo después Tae, lo miró solo unos segundos antes de mirar hacia el frente, algo incómodo—. Hay que poner reglas—Suspiró y se acomodó en el sofá para poder mirarlo mejor—, esto no puedo hacerlo. No puedes permitirme quedarme porque solo estamos acostandonos juntos ¿bien?

—No es que quería tampoco que te quedaras, te dejé agotado y lo entendí, necesitabas dormir un poco. No creí que realmente lo harías hasta esta hora.

— ¿Estás seguro de querer seguir haciendo esto?—Preguntó dudoso conectando su mirada contra la contraria. Y hasta ese momento notó de mejor manera el color de su mirada. Eran de un precioso color miel que estaba seguro se volvían más claro cada vez que los rayos de luz los iluminaba.

—Claro que sí.

—Entonces, tienes que entender que puedes acostarte con más personas, pero por favor cuídate incluso cuando estés conmigo. No voy a aceptar escenas de celos porque tienes que entender que no vamos a pertenecernos, no vamos a estar saliendo y de igual forma no tienes derecho a reclamar nada—Lo miró muy fijamente mientras encogía los hombros.

—Te llamaré cuando tenga ganas y te irás luego de eso, fácil—Jeongguk tenía una pequeña sonrisa en sus labios—. Si por casualidades del destino, te encuentro en otro lugar ¿te irás conmigo?

— ¿Tendrás Kali Mist?—Preguntó en burla, recordando las veces que le había dicho eso hace una semana atrás.

—Oh, tengo mucha. ¿Quieres ver?—Se levantó de un salto del sofá y caminó por el pasillo que llevaba a cuatro habitaciones más y el baño sin contar que su habitación tenía el propio. Taehyung lo siguió un poco después.

Llegaron a la última habitación, la cual estaba frente al baño y Jeon abrió la puerta. Dentro parecía haber todo lo ilegal del mundo, pero se mordió la lengua para no decir absolutamente nada y lo observó unos largos segundos, esperando que hablara. Habían luces tenues, de colores y algunas carpas metálicas que él no entendía absolutamente nada de lo que eran o para qué servían. Lo que conocía muy bien eran las plantas cultivadas de marihuana, habían muchas de ellas y el aroma era bastante fuerte cuando ingresabas dentro.

—Tengo de la que quieras.

— ¿No es ilegal?—Preguntó algo asustado por el cambio repentino que había tenido todo.

—Sep, pero es legal cuando es medicinal—Tae enarcó una ceja antes de negar con la cabeza—. Oye, me costó mucho hacer que me creyeran que realmente es para uso medicinal.

—Estás mintiendole a la ley y estoy seguro que aquí tienes más de las que permiten para cultivo propio.

—Hay de Namjoon y Hoseok. También de mi papá—El otro abrió la boca sorprendido—. Tranquilo, no la fuma, la usa para hacer gotas y cremas que calmen los dolores para sus huesos.

Taehyung asintió convencido y Jeongguk lo sacó de ahí unos segundos después, llevándolo hasta su habitación porque ambos necesitaban una ducha después de lo mucho que habían sudado la noche anterior.

—Quiero tu culo ahora, luego puedes irte—Murmuró mientras le quitaba la remera que tenía puesta, dejándolo completamente expuesto.

Lo empujó con suavidad dentro del baño que había en su habitación y Taehyung se tomó unos segundos para admirar su alrededor. Cuando se había levantado fue hasta el otro baño del departamento y era elegante, pero no podría compararlo con este. Las paredes y el suelo eran de mármol negro, había un espejo en forma de medialuna junto al lavado, todo combinado en colores negros, blancos y marrones. La bañera estaba protegida por una mampara de vidrio y la ducha estaba al otro lado. Todo el lugar era amplio y se preguntó como es que este tipo había podido pagar todo eso, aunque luego de enterarse de dónde venía su auto no tenía que hacerse muchas ideas.

Jeongguk encendió la ducha mientras lo besaba con fiereza, sus manos tocando su cuerpo por completo, tomándolo de los hombros y empujándolo contra la pared, su cuerpo rebotando por la forma en que lo había hecho. Jadeó en su boca, rozando sus labios mientras pasaba sus brazos detrás de su cuello, acercándolo aún más a él. Jeon sonrió en su boca y le permitió a Tae que lo besara.

Pero tal vez sus pensamientos estaban yendo más allá porque no podía sentirse completamente lleno de él, era como una adicción que lo hacía querer probar más y más. En ocasiones no le importaba lo que hacía, peo ahora estaba siendo tan cuidadoso con cada movimiento que realizaba.

Y tenía miedo. Tanto miedo de que sucediera lo mismo que con Yoongi.

¡𝘼𝙍𝙍𝘼𝙉𝘾𝘼!
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𝙅𝙅𝙆 ,,,,, 𝙆𝙏𝙃

Las escenas a continuación contienen escenas +18 y lenguaje malsonante sino son de tu agrado, te pido por favor que dejes de leer.

Las manos se volvieron invasivas en el cuerpo del otro, se miraron a los ojos en todo momento y sus bocas se mantuvieron conectadas en un caliente beso. Jeongguk había gemido cuando Taehyung se arrodilló y lo chupó, haciendo círculos con su lengua en su glande, delineando las venas de su pene con su dedo índice mientras lo miraba desde abajo con ojos brillosos.

Su garganta profunda era magnífica y Jeongguk no se lo iba a negar a nadie si es que alguien, alguna vez le preguntaba. La forma en la que lo tenía por tanto tiempo en el fondo de su garganta, tocando su úvula y sin hacer ni una mueca de desagrado. Le hizo una seña cuando lo separó y en pocos segundos lo tuvo envolviendo sus piernas alrededor de su cintura mientras se alineaba en su entrada.

Lo apoyó contra la pared de azulejos mientras entraba en él, quedándose quieto unos segundos mientras veía como Taehyung contraia el rostro. Se abrazó con fuerza clavando sus uñas cortas en la ancha espalda gimiendo su nombre y pidiéndole en susurros que se mantuviera quieto. Lo habían hecho la noche anterior, pero por alguna razón se sentía como si fuera la primera vez que Jeon entraba en él. El dolor desapareció de a poco cuando Jeongguk comenzó a mover sus caderas con tranquilidad, en un ritmo suave y lento, el placer comenzó a reemplazar el ardor que sentía al ser estirado de esa manera con ese pene grueso que el otro tenía.

Jeongguk empujó sus caderas con fuerza contra Taehyung, gruñendo por lo bajo y contrayendo su rostro mientras aumentaba cada vez más el ritmo. Tae gemía con fuerza mientras se aferraba a él, deslizando sus uñas desde sus hombros hasta su espalda baja.

—Eres una puta—Murmuró y Taehyung sonrió.

—Lo soy—Soltó entre un gemido—. Puedo ser tu puta—Lo miró con ojos brillosos e inocencia, era tan lindo cuando hacía eso que Jeongguk quería tomarlo fuertemente del rostro para que pusiera su mirada solo en él.

Sus caderas se encontraron con fuerza y la gruesa carne de los muslos de Tae rebotó haciendo que Jeon se mordiera el labio inferior con brutalidad, clavando sus dientes en la piel con brutalidad. Sus miradas volvieron a encontrarse y Jeongguk pudo ver el momento de cómo ponía sus ojos en blanco en cuanto encontró su punto dulce, golpeándolo con violencia y haciendo que el otro fuera un manojo de gemidos, los temblores se notaban en todo su cuerpo y las lágrimas se mezclaban con el agua que caía de la ducha.

El inmenso placer se transformaba en una sensación abumadora, llena de calor y miles de burbujas naciendo. La forma en la que ambos estaban temblando les hacía entender que estaban cerca de tocar el paraíso. Jeongguk siguió embistiendo, sabiendo que había encontrado ese punto tan deseado que dejaba a Taehyung con la mente nublada, los sentidos volviéndose más sensibles y enroscando los dedos de los pies. Ninguno de los dos supo cómo fue y por qué, pero la gran conexión sexual que poseían era... simplemente magnífica y ambos lo sabían sin decir muchas palabras. No volverían a encontrar algo así en sus vidas. Por eso, las burbujas explotaron al mismo tiempo, gimieron al mismo tiempo y temblaron al mismo tiempo mientras Jeon se corría dentro de Tae y él, machaba el abdomen de ambos.

Jeongguk nunca creyó que vería algo así, ver como Taehyung se destruía por el orgasmo mientras gritaba su nombre, el como sus ojos vidriosos lo observaban con una sonrisa cansada y la respiración agitada. Era como ver una obra de arte, se sentía tan fugaz que no llegaba a creerlo del todo porque de un golpe podía volver a caer en la realidad y que esto nunca hubiera pasado.

Se ducharon por separado luego, Taehyung fue el primero y Jeongguk le siguió un tiempo después. Había dejado ropa preparada sobre su cama para que el pelinegro pudiera cambiarse aunque sabía que le quedaría enorme. Ambos eran de la misma altura, pero la contextura de Jeon era más grande y Tae era pequeño desde su espalda hasta su cintura, era un perfecta combinación con lo gruesos que sus muslos eran y la forma algo ancha de sus caderas.

Nuevamente estaba sobrepensando absolutamente todo. ¿Por qué mierda le estaba dando su ropa? Aunque en su interior se decía que era por una buena causa porque nadie querría ir por la calle con una enorme mancha de semen en su camiseta o pantalones. Se cambió a una rapidez que no creía posible mientras escuchaba su teléfono sonar con fuerza sobre su cómoda.

— ¿Qué sucede?—Preguntó mientras se colocaba los calcetines, Taehyung estaba recostado contra el marco de la puerta de su habitación mientras lo observaba con el ceño fruncido—. Bien, estaré ahí en una hora—Murmuró para segundos después colgar la llamada.

— ¿Qué mierda estás haciendo?—La brusquedad del tono de su voz hicieron que su corazón se parara por un milisegundo—. Las medias van antes del pantalón, Jeon. ¿Sabes todo el tiempo que te ahorrarías?—Lo miró incrédulo, no creyendo lo que estaba diciéndole.

— ¿Qué? ¿Por un minuto estás haciendo un drama?

—No estoy haciendo un drama, todavía no puedo creer que en el mundo siga habiendo gente idiota que no sepa que es algo fundamental.

—Cierra la maldita boca. Camina, te llevaré a casa—Tae puso sus ojos en blanco haciéndole una burla discreta antes de comenzar a caminar junto a él.

Se metieron juntos en el auto y Jeon arrancó saliendo del estacionamiento mientras Tae se quejaba de algo que el otro no prestó atención. El silencio reinó dentro y la música sonó en un volumen bastante alto.

— ¿En serio te la pasas escuchando este tipo de música todo el tiempo?—Preguntó mirándolo había olvidado abrocharse el cinturón y el sonido molesto que avisaba le taladró los oídos más que la música.

—El cinturón—Volvió a repetir Jeongguk apretando la mandíbula con fuerza—. Y no, es una playlist que hizo Hoseok y es la única que tengo acá—Mintió porque tenía Spotify abierto  y ahí había más de cincuenta playlists que había hecho en su tiempo libre—. El cinturón, Taehyung.

—Ah, sí, sí—Dijo abrochandoselo con rapidez antes de volver su mirada por todo el auto. Los asientos de cuero negro se encontraban mucho más atrás de lo que estaban en otros autos, haciendo que ambos pudieran tener las piernas completamente estiradas. Las luces alrededor del tablero, la palanca de cambios y rodeando la parte supieror del auto le daban un aspecto que hizo a Taehyung suspirar. Era un lindo auto, caro también y obviamente tenía que ser posesión del idiota más grande de toda la ciudad, y tal vez, de todo el país.

Zona norte a todo ritmo, está todo pago. Si los pollos dicen pío, están re jugado'. Él se hace el tira tiro, me mandó al juzgado.

— ¿Cuántos años tienes?—Preguntó y Jeongguk dejó de cantar, dándose cuenta lo muy distraído que él era.

Falso chorro, manda en cana, está re quebrado. Y yo re tuneado, ando re ganado. Voy endemoniado, la morocha al lado.

Miró a Taehyung unos segundos, observando su cabello negro antes de preguntarse seriamente qué mierda estaba pasando. ¿Era idiota o la marihuana le había quemado las pocas neuronas que tenía?

—Veintiséis—Murmuró y lo miró durante un tiempo mientras esperaba que el semáforo cambiara—. ¿Tú?

—Veintitrés. ¿Tienes alguna carrera hecha?—No lo creía posible, pero preguntaba por educación.

—Ingeniería automotriz—Soltó girando el volante—. Soy dueño de un talle mecánico en el centro de la ciudad.

Había un solo taller mecánico en el centro de la ciudad y era el más famoso de todos porque sus empleados también participaban no solo en el circuito internacional de Corea sino que también participaban en Suzuka, Nürburgring, Circuito de Mónaco y el Indianápolis Motor Speedway. No es que fuera un gran fanático, pero su padre lo era y durante mucho tiempo intentó meterlo en eso explicándole cosas que él nunca llegó a entender, pero quería a su papá y le gustaba escucharlo cuando hablaba de algo que le fascinaba luego de que se quejara los problemas que habían en la empresa.

— ¿Eres el dueño Neoj?—Preguntó sin poder creerlo realmente—. Dios, mi padre te admira. No puede entender como es que siendo tan joven manejes uno de los lugares más famosos y que además hayas sido partícipe de los arreglos en los circuitos de carreras... legales—Le dio una mirada obvia.

—Aw, ¿tu papi me admira, princesa?—Se llevó una mano al pecho fingiendo ternura para luego sonreír con burla.

Diablo y bellaco. Ella lleva zapatillas, nunca tacos. Y yo lo arranco, es que no me tranco. El que te mire de más, yo lo ataco.

Taehyung no odiaba ese tipo de música porque Jimin la escuchaba todo el tiempo, pero en ocasiones era insoportable aunque no negaba que habían buenos temas y que a algunos se los sabía de memoria, por eso dejó que la música siguiera reproduciéndose o sino ya estaría como loco gritándole a Jeon que lo sacara de una maldita vez.

Llegaron al hogar de Taehyung mientras hablaban suavemente de algunas cosas como la admiración del padre del pelinegro hacia Jeon y lo mucho que él sabía del circuito de carreras porque había sorprendido al castaño cuando comenzó a decir cosas que recordaba. La despedida fue algo incómoda, no sabían cómo hacerlo, no era apropiado despedirse con un beso en la boca y tampoco sabían si era adecuado hacerlo con uno en la mejilla, por eso Taehyung dio el primer paso y apoyó sus belfos sobre el cachete de Jeon antes de salir del auto y correr hasta su hogar. Si se saludaban de esa manera entonces era seguro que ninguno había caído y debían de hacerlo hasta que alguno se cansara de esto.

Jeongguk volvió a encender el motor mientras la música seguía sonando en el estéreo, tamborileando sus dedos en el volante mientras el nudo en su estómago se volvía más grande y molesto. Llegó al taller unos minutos después porque había aumentado la velocidad a un número que sabía, no se podía, pero quería llegar lo más pronto posible al lugar.

— ¿Qué mierda pasó?—Preguntó viendo los destrozos, bajó del auto y azotó la puerta haciendo una mueca luego de darse cuenta lo que había hecho.

Sus muchachos estaban ahí, limpiando los vidrios rotros y juntando la basura que se había vuelto wl lugar. Chris llegó a él, asustado y molesto mientras hacía una seña con sus manos.

—No sabemos quiénes fueron—Murmuró—. Pero vinieron y dijeron que necesitaban que miraramos un auto, y cuando nos dimos cuenta estaban haciendo una escena. Rompieron los vidrios, tiraron basura y dijeron que iban a volver.

— ¿Cómo se veían?—Preguntó demasiado molesto que unos idiotas hayan intentado arruinarr su negocio.

—No los vi, estaba al fondo con una motocicleta—Dijo y le hizo una seña a uno de los chicos que se estaba encargando de los vidrios—. Jiwoo los vio un poco. ¿Cómo eran?

—Eran tipos grandes, parecían guardaespaldas. Llegaron en una camioneta y el dueño del auto venía aparte, pero a él no lo pude ver.

—Yo sí—Soltó y Jeon miró con intensidad a Juwon—. Era pequeño, parecía joven y tenía pequeños ojos, pero su personalidad una total mierda. Hizo una escena como que había sido nuestra culpa de que su auto no encendía bien y quiso irse sin pagar. Los chicos trataron de detenerlo y luego bajaron esos gorilas de la camioneta y comenzaron a romper todo cuando él les dio una señal.

—Perra psicópata—Murmuró para sí mismo—. ¿Era un Alfa Romeo Giulia de color gris?—El muchacho asintió y Jeon solo pudo maldecir por lo bajo—. Sé quién es—Jiwon y Juwon lo miraron sorprendidos, pero el jefe se había calmado muy rápido, eso quería decir que alguien muy conocido para él.

Lo dejaría pasar, solo por esta vez, pero para la próxima dejaría que todo se saliera de sus manos. Yoongi de a poco lo estaba hartando demasiado.

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Holis, como le respondí un comentario a alguien (no me acuerdo bien, perdón) el drama del fic se va a venir muy rápido, pero va a tardar un poco mucho en irse.

Espero que el cap les guste.

Cuídense♡