COMO TODO EMPEZO [Parte 3]

En estos momentos estoy en mi habitación dormido cómodamente ya que anoche no dormí bien, hasta que tocan la puerta de la casa, de seguro son vendedores y los ignoro, pasa un rato y no dejan de tocar insensatamente hasta que me harto y salgo de mi habitación, bajo las escaleras y paso por la sala ahí esta Liz con una sonrisa. ¿Qué tramará?

-Escóndete Liz- le digo y esta se desvanece en el artefacto.

Siguen tocando la puerta con desesperación.

-¡Ya voy!- me dirijo hacia la puerta. -¿Quién es?- pregunto atrás de esta.

-Somos Dan y Ángela - me contesta ella atrás de la puerta.

Quito la cerradura y la abren con tal fuerza que golpean mi cara y caigo al suelo. Solo veo como corren hacia la sala.

-¡Auch!- exclamo y me levanto para ir hacia la sala con ellos, llego y ahí los encuentro a los dos enfrente de Liz.

-Liz acepto- dijo Ángela con seguridad.

-Yo también- hizo lo mismo Dan

-¿Y tú Max, también aceptas?- me pregunto Liz

No sé qué decir ya que estamos hablando de todo el Universo. Los tres me miran directamente esperando mi respuesta.

Doy un suspiro. -¡Acepto!, y dime Liz que te ¿Tenemos que hacer primero para detener a esas cosas? - dije seguro de mi decisión

-Chico no saben cuánto se lo agradezco - hablo mientras tenía los ojos llorosos.

-¿Cómo llora una IA?- hablo Dan

-Perdón- dijo mientras se frotaba los ojos. -Lo primero que hay que decirles existe un ciclo en el cual ahí un mega-portal que conectara este mundo con el suyo por donde cualquier tipo de Umbra podrá entrar, anteriormente hubo dos portales de pre-inicio antes de que comience en nuevo ciclo, uno por uno de ellos llagaron los que te atacaron y otro por donde tu Max llegaste a su mundo, para detenerlos necesitan armas ya que la armas humanas no les harán ningún tipo de daño. No tengo mucha información sobre que propiedades tengan solo sé que son y donde están.

-¿Cómo que no tienes mucha información?- pregunto Max

-Las IA inactivas durante mucho tiempo tienden a perder mucha información y deteriorarse, en resumen me muero si no estoy en funcionamiento y yo he estado inactiva cerca de 15 años, pero pude salvar unos datos importantes que recabé hace años- bajando su cabeza con vergüenza.

-¿Cómo es que no tienes no tienes una copia de seguridad?- dijo Dan

-¿Has intentado de almacenar toda la información existente?-

-No-

-Entonces calla-

-¿Y dónde están esas armas?- pregunto Ángela

Mostrando un mapa holográfico. –Aquí *Señalando una parte del mismo* Aokigahara, Japón ahí encontraran la guadaña de la Muerte, tu arma Dan-

-¿Mi arma?- contestó este

-¡Sí! Y tienen que darse prisa, el ciclo, no sé cuándo comenzara todavía tengo que hacer unos cálculos con respecto a ello y por como los veo aún ni han desayunado, ¿Verdad?, necesitaran energías ya que no se con exactitud la ubicación y es un gran bosque- hablo Liz

-Yo me acabo de despertar- dijo Max

-Nosotros nos dirigimos aquí en cuanto nos despertamos, ¿No Dan?- contesto Ángela y Dan solo asintió con la cabeza

-Bien, voy a buscar cosas para nuestra "excursión", Dan dame una mano – dijo Max para luego subir las escaleras y Dan le siguió dejando solo a Liz y Ángela.

-¿Y tú sabes cocinar?, ya que no veo intenciones en esos dos- le pregunto Liz a Ángela

-Un poco- hablo apenada

-Y ¿A cuántos has intoxicado?- dijo burlándose

-¿Eh?, ¡A ninguno!- contesto enojada dirigiéndose a la cocina.

-La juventud de ahora - dijo mietras miro como se fue.

-¡Y para que lo sepas solo fue uno y tenía ocho!- regresando Ángela a la sala para luego irse.

En el ático de la casa

-¿Y que buscamos exactamente?- pregunto Dan

-Linternas, repelente, mochilas, cosas así- contesto Max mientras buscaba en una caja. –Tu... no hablas mucho, ¿Verdad?- pregunto Max

Dan solo lo ignoro y se fue a otro lado del ático.

-¿Dan?- pregunto dirigiéndose a donde este se encontraba. -¡Los encontraste!- dijo mirando unas cajas en donde se veía los objetos que buscaba. -Ayúdame a poner todo en mochilas.

Mientras tanto abajo

-Le demostrare a Liz que si se cocinar- se expresó enojada mientras ponía batía, formando masa en un tazón.

10 minutos después

-¡Ya tenemos todo listo Ángela, hora de irnos!- grito Max mientras entraba a la sala. No la vio, solo estaba Liz haciendo algunos cálculos en una pizarra holográfica que ella creo.

-¿Dónde está Ángela?-

-Creo que en la cocina- contesto Liz sin voltear a verlos ya que estaba ocupada.

Ambos se dirigen a la cocina. –Ángela hora de irnos... ¿Ángela?-

-¡Ya llegaron, ahora siéntense a desayunar!- dijo mientras servía un plato de hot cakes

-¡¿Tú cocinaste esto?!, Se ve bien- sentándose en la mesa

-Sí y ya he practicado desde la última vez- también sentándose

-¿Por qué no sientas Dan?- le pregunto Max

-¿Por qué no le respondes su pregunta?- dijo este mirando a Ángela

-Casi lo intoxico- dijo apenada esta

-¡¿Casi?!, ¡Pase tres días en observación en el hospital!-

-¡Tenia ocho!-

-¡Usaste lodo en lugar de harina!-

-¡Tú te ofreciste!-

-¡Me obligaste!-

-¡Ya chicos no pelen!- tomo la palabra Max. -Mira- dijo comiendo un pedazo de hot cake. -Ves no hay problema, no me he muerto, ahora porque no se sientan y comen tranquilos.

-De acuerdo- dijeron unísono

-Por cierto, ¿Ángela?- hablo Max

-¿Si?- contesto esta

-¡Te quedaron bien!-

-¡Gracias!- dijo con una sonrisa

10 minutos después

-¡Listos Liz hora de irnos!- dijo Max entrando a la habitación en donde se encontraba esta.

-¿Preparados?, saben... todavía tengo que hacer algunos cálculos ya que no sabemos cuándo iniciara el ciclo-

-Lo Entendemos- dijo Ángela

-Bien- dijo para que luego apareciera un portal delante de ellos. -Chicos antes de que entren tienen que saber que de momento solo puedo abrir dos portales hasta pasadas dieciocho horas, así que en cuanto la encuentren me contacten ¿Entendido?-

-¿Cómo lo haremos?- dijo Ángela

-Me enlace con sus celulares, así que no hay problema-

-Bueno Liz, nos vamos - entrando Max primero al portal sin miedo.

-¿Es seguro?- pregunto Ángela viendo como Max entraba.

-Noventa y nueve por ciento seguro- contesto ella

-Suficiente para mí- dijo Dan saltando al portal.

-Ven Ángela es completamente seguro- dijo Max sacando medio cuerpo por el portal y ofreciéndole su mano.

Ella solo dio un suspiro. -Está bien- le entrego la mano para ser jalada dentro del portal.

-Les deseo suerte jóvenes héroes- dijo Liz mientras veía como el portal se cerraba.

///////////////////////////

Ubicación: Bosque Aokigahara, Japón

-Y bien... ¿Por dónde empezamos? –hablo Dan mirando los alrededores.

Era un lugar oscuro ya que era de noche con solo árboles y más árboles a sus alrededores, un lugar perfecto para que una persona pudiera perderse y nunca ser encontrada.

-Bien en marcha -dijo Ángela mirando un camino espeluznante al frente de ella. -Mejor tu ve al frente Dan. –empujando a su primo al frente.

-Ya que- dijo este

Empezaron a caminar los chicos solo con sus linterna cada mano cada uno. El camino era espeluznante, un lugar lúgubre, capaz de hacer correr hasta a los más valientes. Pasaron alrededor de cuatro horas sin que ninguno dijera alguna palabra, sin perder en ningún momento el paso, Dan iba al frente sin ningún temor en al contrario de su prima que estaba muerta del miedo.

-¿Saben que a este bosque se le llama "Mar de árboles"?- dijo Ángela tratando de romper el silencio

-¿Enserio?- contesto Max

-Sí, se un poco de Japón y su también hablar su idioma, siempre he querido venir pero no de este modo- dijo Ángela

-¿A través de un portal?-

-No, en una misión para salvar el Universo-

-Pues créelo ahora estamos involucrados en esto ya que nadie más puede- dijo Max.
-Sabes este bosque me recuerda a algo- continuo Max

-¿A qué?-

-A el día en que nos conocimos-

-¡¿Todavía te acuerdas?!-

-Como no, si pensaste que casi te ibas a morir en ese momento y también yo-

-Estaba muy asustada y no me di cuenta, pero tú siempre supiste que hacer en el momento y en teoría si me salvaste-

-¿Y por eso conservaste la pulsera que te regale?-

-Un regalo de alguien que quieres mucho es para toda la vida...- dijo mirando la pulsera

-¿Entonces me quieres mucho?-

-Pues yo...- dijo nerviosa

-Pues yo también te extrañe sabes-

-¡Hey!, par de tortolos saben que llevamos horas caminando sin rastro del arma y estoy seguro que caminamos solo en círculos- dijo Dan harto de la larga caminata

-Tranquilo Dan solo la estamos pasando bien, ¿O no Ángela?- mirándola

Estando nerviosa por lo que dijo su primo solo asintió con la cabeza.

-¿Y si mejor descansamos?- dijo Max

-¡Aquí!- exclamo Ángela

-SI no veo el problema, ¿Tu que dices Dan?-

-A aparte no podemos regresar- dijo Dan

-Mira qué te parece ahí- apuntando a un pequeño claro con un tronco tirado.

-Okey, no parece muy aterrador- dijo Ángela

Los tres se dirigieron al claro y se sentaron en el tronco.

-Voy a encender una fogata- dijo sacando un mechero de la mochila.

-¿Y por qué no usas tus poderes señor elemental de fuego?- hablo Dan burlándose

-¡No sé cómo, entiéndelo! ¿Y tú? ¿Porque no me dices donde está tu arma heredero de la Muerte?- le contesto Max mientras encendía la fogata.

-Si lo supiera no estaríamos aquí en medio de la nada buscándola-

-¿Y tú familiar de dioses griegos que poderes tienes?-

-La verdad no lo sé- respondió observando sus manos.

-¿Y tú rey del fuego que tienes?- mirando a Max

-Pues encendí la fogata- hablo con una sonrisa

-Tu eres idiota, y yo como sabrán soy un heredero ¿De qué? Pues no lo sé, solo lo sé porque que una IA loca nos trajo a miles de kilómetros de casa por un portal mágico sin ninguna pista para encontrar mi arma y salvar al maldito Universo- dijo sarcásticamente Dan

-No es para tanto- dijo Max

-¡¿Que no es para tanto?! Y ahora dime, ¿Cómo nunca supiste que tienes una piedra en el pecho?-

-Si te soy sincero, hasta yo me sorprendí de eso-

-¿Max y que tan peligrosas son esas cosas?- hablo Ángela cambiando de tema.

Max solo subió su manga izquierda para mostrar la herida que le dejaron.

-Ellos fueron ¿Verdad?- comento tocando la herida

-Si... pero creo que solo jugaban conmigo ya que pudieron haberme matado en cuestión de segundos-

-Y ¿Cuándo los viste?-

-Veamos- dijo mientras se tocaba la barbilla. –Solo fueron dos veces, una de regreso a casa después de que te acompañe a la tuya.

-Yo... lo siento mucho- dijo apenada por casi matar a su amigo.

-Descuida me salve de esa y otra en su mundo-

-¿Su mundo?- dijo Dan

-Si su mundo.... Es un lugar oscuro sin nada aparte de ellos donde casi muero, pero fui salvado-

-¿Salvado?- hablo Ángela

-¡Si salvado!, por unas flechas misteriosas-

-Y sabes quién las lanzó- dijo Ángela

-La verdad no, pero eso no importa ahora- dijo levantándose del tronco. -Tenemos una misión pendiente y salvar al universo, y no podemos perder el tiempo. -hablo acercándose y apagando la fogata. -Andando.

Los demás se pararon y empezaron a caminar siguiéndole el paso, iban como anteriormente, Dan enfrente y Ángela y Max atrás.

-¿Sabían que a este lugar también se le llama "Bosque de los suicidios"?- Dijo Dan

-Su... su... su... ¡Suicidios!- hablo tartamudeando Ángela

-¡Tarado la asustas! – dijo tratando de calmarla

-Si... siempre he querido venir, aunque no he logrado ver ningún cadáver-

-Mira como la dejaste- hablo señalándola

Ángela estaba paralizada con la piel pálida y con la vista fijada hacia la nada.

-¡Hey! * chasqueando los dedos*, ¡Responde!- dijo Dan

-Ya se nos fue- comento Max

-Tengo una idea- hablo Dan

-¿Cuál?- preguntó desconfiado

-Sígueme el juego y nadie saldrá herido-volteando hacia su prima. -Ángela si encontramos la guadaña Max te invitara a cenar-

-¡¿Enserio?!- dijo Ángela saliendo del trance

-Si es enserio, ¿No es verdad Max?- dijo mirando a este con una sonrisa macabra

-Sí, es completamente verdad pero primero tenemos que encontrar el arma-

-Bueno y que estamos esperamos vamos- hablo antes de empezar a caminar-

-¿No se te ocurrió algo mejor?-

-De nada y respondiendo tu pregunta, era eso o darle o que le dieras un beso- dijo caminando

-¡Espera!, ¡¿Qué?!- exclamo siguiéndolo

-¡Chicos aceleren el paso!- dijo Ángela que estaba más adelante que ellos.

-¡Entendido!- hablo Dan. -La ultima ves que paso eso duro horas y se de sobra lo pasa entre ustedes dos-

-Yo no sé qué decir- dijo rascándose la cabeza con nervios.

-Ves la pulsera que trae en la mano derecha-

-Sí, yo se la di-

-Exactamente por eso, ella nunca te olvido a pesar de haber pasado los años, solo hablo de ti cuando yo me mude a la ciudad tú eras su único amigo en ese entonces-

-¿Y que paso después de que me fui?-

-Mi tía me dijo que estaba algo deprimida ya que solo confiaba en ti, pero poco a poco confió en más gente y sin tu ayuda no sé cómo sería ella ahora o si estaría aquí con nosotros-

Max solo sonrió por haber cambiado la vida de alguien para mejor. Siguieron caminando por una hora más hasta que alguien tuvo necesidades.

-Chicos- hablo Max

-Si- dijeron unísono

-Necesito un tiempo a solas- dijo Max nervioso

-¿A qué te refieres?- hablo Ángela

-A atrás de los arbustos por favor- dijo Dan señalando unos arbustos

-Vuelvo enseguida- entrando a ellos

Ángela y Dan solo se quedaron a espaldas de estos esperando a su amigo. Hasta que Dan vio una figura blanca.

-Viste eso-

-¿Ver qué?-

Dan solo se adentró del bosque dejando a Ángela sola.

-¡No me dejes sola!-dijo viendo como este entraba en el bosque.

Dan a lo poco que distinguía parecía ser una figura humanoide pequeña que se alejaba de él.

-¡Espera!- grito tratando de seguir la figura

La figura paro en seco y Dan pudo acercarse lo suficiente para verla claramente. Era una niña pequeña aproximadamente de once años con vestido blanco y rasgos asiáticos.

Dan se acercó y se agacho a la altura de esta. ¿Estas perdida?- le pregunto a la pequeña

Esta solo asintió con la cabeza asustada.

-No tengas miedo, ven te llevare a casa- dijo ofreciéndole su mano con una sonrisa.

La niña con un poco de temor la tomo y se fueron con los demás.

-Por fin llegas ¿Dónde estadas?- exclamo molesta ya que la dejaron sola.

-Pues vi algo, que resultó ser una niña perdida y la traje para regresarla a su casa-

-¿Y la niña?-

-Aquí- señalando la nada para Ángela.

En ese momento sale Max del arbusto. -¿De qué me perdí?-

-De que Dan tiene una nueva amiga-

-¡Enserio!, ¿Dónde está?-

-¡Aquí!- señalando la nada. -Vamos di algo- diciéndolo a la niña.

-¿Te pico algo cuando entraste al bosque?- dijo Ángela

-Yo solo veo tu mano extendida- hablo Max

-¡No estoy loco!-

-"Karera wa watashi o miru koto ga dekimasen"- dijo la niña.

-¡Oyeron ya hablo!- dijo Dan

-Yo no oí nada ¿Y tú?- mirando a Ángela. Ellas solo negó con la cabeza.

-Como sea, si no me creen es su problema y tú hablas coreano ¿Verdad?-

-Japonés y un poco-

-Entonces que significa "Karera wa watashi o miru koto ga dekimasen"-

-"Ellos no pueden ver" creo y ¿Para qué?- contesto ella

-Perfecto solo yo puedo verte y escucharte- le dijo a la niña mientras empezaba a caminar.

-¿Así es siempre?- dijo Max

-No- empezando a seguirlo

Los chicos caminaron el pasar de las horas y poco a poco empezaba a amanecer.

-¡¿Enserio no la ven?!-

-Te dijimos que no- dijeron unísono

De un momento a otro la niña se soltó de la mano de Dan y se adentraba en el bosque corriendo.

-¡Oye espera!- grito y empezó a seguirla.

-¡Oye espéranos!- grito Ángela y junto Max empezó a seguirlo.

La niña corrió y llego a lo que parecía un árbol con una soga atada en una de sus ramas y debajo de esta estaba un traje de estudiante de la región junto a unos huesos humanos de lo que parecía un menor de edad.

-Eres tu.... ¿Verdad?- dijo Dan tranquilo

La niña solo deja caer un par de lágrimas.

-"Kea"...- dijo la niña

En ese momento aparecen Ángela y Max.

-¿Ángela que significa "Kea"?-

-Cuidado por... ¡Ah!- dijo acercándose a este pero cayo junto a Max a por una trampilla que estaba cubierta por hojas-

Dan solo se asomo por esta y vio que habían caído unos dos metros y medio

-¡Estamos bien!- dijo Max que tenía encima a Ángela.

Dan salto por la trampilla cayendo a un lado de ellos y la niña lo siguió, pero esta cayó lentamente alada de él. Observo detenidamente el lugar y vio que era una cueva pero por un hueco en lo más profundo de la misma entraba un rayo de sol que iluminada directamente a una guadaña que estaba sobre una capucha negra encima de una roca.

-¡Mira Dan el arma, la traigo!- dijo Max corriendo hacia ella pero es parado estrellandose con la nada.

-Miren chicos aquí dice que solo el heredero de la muerte puede pasar-

Dijo mirando un pedazo de madera viejo donde decía dichas palabras.

-Supongo que yo no soy- comento Max un poco avergonzado de su acción.

-Supongo que soy yo- pasando donde Max no pudo. Acercándose lentamente a la guadaña y quedando frente a ella. Era una guadaña tallada de madera afilada y con una cinta blanca que la envolvía la casi por completo. Dan solo la tomo.

El de un momento ya no encontraba en la cueva ahora estaba en lo que parecía una casa y ahí está la niña que el encontró pero él no puede verlo, ella se encontraba dibujando tranquilamente parecía que nada podría romper su tranquilidad, hasta que llegan dos personas una mujer adulta y un hombre, parecen ser sus padres, ellos solo gritan cosa que él no entiende pero por el tono parecen insultos entre ellos, solo ve como su pelea continua y la niña esconde sus colores, ve por un breve segundo el dibujo de la niña de lo que parece ser ella y sus papas fuera de su casa felices, lamentablemente ese solo es un pensamiento de la niña, ella agarra el dibujo y corre a su habitación, Dan la sigue, la niña cierra la puerta de su cuarto con cerrojo pero Dan la atraviesa como si de un fantasma se tratarse, ve que ella se acuesta en su cama mientras sostenía el dibujo en su pecho y lloraba mientras oía a sus padres gritarse.

Una luz lo ciega, ahora ya no está en esa casa ahora está en lo que parece una escuela ve a la niña jugando... sola con unas muñecas de trapo. Se acerca a ella perece que todavía no lo puede ver a él, se ve feliz jugando pero su felicidad no parece durar mucho en ese momento llegan unas niñas más grandes que ellas y le quitan sus muñecas.

-¡Oye devuélveselas!- dice enojado Dan pero parecen que tampoco lo pueden oír o ver.

Las niñas solo les cortan las extremidades a las muñecas y las tiran a piso junto a la pobre niña que empezó a llorar mientras que las demás solo se burlaban de ella.

Otra luz lo ciega, ahora se encuentra en la entrada a l bosque y ve a la niña parada mirándolo hacia la espesura, segundos después empieza a correr hacia su interior.

-¡No entres!- grita Dan pero ya no puede moverse y otra luz lo ciega ahora se encuentra en la cueva mientras sostiene la guadaña en sus manos y ve que la niña está a su lado con una sonrisa y lágrimas en los ojos.

-Yo lo siento mucho....- dice mientras deja caer una lagrima.

Dan ve que en una de las cintas dice lo que perece un nombre.

-Kokoro Maki, es tu nombre ¿No?-

-La niña solo sonríe.

Dan también ve que en la empuñadura de la guadaña dice unas inscripciones y las lee.

-"Auxilium invenietis illos in via"- dijo Dan

En ese momento la niña da un leve destelló mientras se alejaba volando por la entrada de la cueva.

-¡Arigato!- dice la niña mientras se alejaba

-¡Ángela que significa "Arigato"!-

Ángela se encontraba viendo atrás de la barrera observando ahora si a la niña como se alejaba volando por el tragaluz de la cueva al igual que Max.

-¡Ángela!- grito Dan llamando su atención

-¿Si?-

-¿Qué significa "Arigato"?-

-¡Creo que gracias!-

-Pues de nada Kokoro- dijo mientras veía como la niña se desvanecía frente suyo mientras se se alejaba de él.

-Es hermoso no lo crees- hablo Ángela que se encontraba atrás de la barrera junto a Max.

-Si... igual que tu- dijo sin pensarlo y sacando su teléfono. -Liz la tenemos.

-Perfecto- hablo Liz atreves de él y de un segundo a otro un portal aprecio.

Max se acercó al portal pero antes de entrar dice.

-Se quedan o ¿Qué?- dijo antes de saltar dentro

Ángela si alcanzo a escuchar lo que dijo Max y se quedó pensando hasta que llego Dan sujetando la guaña y la capucha en cada mano.

-Vienes o ¿Te quedas?- dijo saltando al portal

Ángela solo sonrió y corrió saltando al portal...




Agradecimientos a Dlandini

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top