iv.

capítulo cuatro

Aunque Ariel no lo dijera en voz alta, se sentía completamente mal por Draco. El chisme de que el profesor Moody lo había transformado en un hurón corrió por todo el colegio y Ariel no pudo evitar preguntarse si lo podría haberlo evitado. Quizás si ella se hubiese quedado con Draco como él se lo había pedido las cosas hubiesen pasado de otra forma. 

Ariel no quería que el chico se sintiera humillado, ella lo sufría todo el tiempo y no quería que alguien más lo sufriera aunque fuera Draco. Pero aunque quisiera, Ariel no se había podido acercar a Draco para perdile disculpas porque el la había estado evitando los días siguientes luego de que lo hubieran convertido en hurón.

Pero el momento para que Ariel se disculpara llegó de la forma menos esperada.

La chica había decidido salir de la sala común para ir a la biblioteca a terminar con su tarea. Willy estaba durmiendo en el bolsillo de su túnica tranquilamente pero se despertó sobresaltado cuando la túnica de Ariel se movió bruscamente y tuvo que engancharse para no caer.

Ariel estaba completamente sorprendida cuando ni siquiera pudo salir de la sala común que la empujaron de nuevo adentro. Draco Malfoy estaba parado frente a ella, todavía tomando su túnica con fuerza pero no la estaba mirando a ella sino que había dejado que su vista vagara por la sala común de Ravenclaw.

Lo único en lo que podía pensar Ariel en ese momento era que si alguien de su casa se daba cuenta qur había dejado entrar a alguien de Slytherin la iban a matar. Instantanemente y sin pensarlo mucho tomo a Draco por el brazo y lo arrastró por las escaleras hasta llegar a su habitación (ella sabia que no había nadie allí proque había estado antes).

—Por lo menos invitame a una cita primero, Scamander —se burlo Draco mirando las cuatro camas— ¿Esta es tuya? —preguntó señalando justamente la cama de Ariel— Claro que si, mira esto, sin una arruga.

Draco se sentó en su cama antes de mirarla de forma burlona.

—¿Me traes a tu habitación y no piensas hablarme?

Ariel unió sus manos completamente nerviosa y miro a otro lado antes de hablar.

—Lo-lo siento.

El rubio entrecerro los ojos en su dirección.

—Solo me metiste a tu habitación, Scamander. No tienes que disculparte por eso.

—Lo-lo siento por de-dejarte so-solo cuando el pro-profesor Mo...

Pero Draco no la dejo terminar mientras se ponía de pie de un salto y se acercaba a ella de forma amenazadora.

—Ni una sola palabra sobre eso ¿Lo entendiste, Scamander?

Ariel contuvo el aliento antes de asentir.

—¿Qué..? —Draco inclinó la cabeza— ¿Que carajos? ¿Y ese bicho?

La rubia giro la cabeza para ver a Willy trepando tímidamente hasta sentarse en su hombro.

—Se-se llama Wi-willy es mi-mi bowtruckle.

Draco solto una falsa risa antes de terminar de inclinarse para ver a la criatura de cerca.

—Sí, tendría que haberlo imaginado. Tú y toda tu família extravagante estan rodeados de estas cosas ¿verdad?

A Ariel no le gusto la forma en la que habló de su família y de las criaturas pero realmente no quería menterse en problemas asi que aguardo silencio.

—No fuiste a almorzar antes —le señalo mientras se daba al vuelta de forma casual y miraba la foto de Ariel y su padre que descansaba en la mesa de noche— ¿No me entendiste cuando te lo dije la primera vez? La próxima vez que te saltees la comida vas a tener problemas.

Aunque la intención de Draco era decirlo de una forma amenazadora, Ariel pudo descubrir un tono de preocupación escondido detrás de todo eso.

—Lo-lo olvidé.

—¿Lo-lo olvidaste? —repitió con diversion mientras la enfrentaba de nuevo— Pues no lo-lo olvides más, Scamander.

Draco le dio una última mirada antes de salir de la habitación. Lo único que Ariel esperaba era que no se cruzará a nadie en el camino a la salida porque ella no quería meterse en problemas.

—¿Que crees que-que fue e-eso? —le preguntó Ariel en un susurro a Willy.

El bowtruckle no pareció interesado en eso mientras se bajaba lentamente de Ariel y comenzaba a treparse en su cama, justo en ese momento, la rubia se dio que había una barra de chocolate en su cama que antes no había estado allí.

Ahora, Ariel Scamander estaba totalme confundia sobre que pensaba sobre Draco Malfoy. ¿El solamente se había presentado en su sala común para recordarle que tenia que comer y darle un chocolahe?

Pero rápidamente sus pensamientos quedaron aun lado cuando Willy intentó comenzar a desenvolver el papel de chocolate para comer.

—No-no puedes co-comer esto —le dijo Ariel tomando el chocolate y guardandolo en el bolsillo de su túnica— te-te hace ma-mal.

El Bowtruckle resoplo en su dirección antes de caminar hasta su almohada para acostarse allí.

Recordando que tenía intención de ir a la biblioteca antes de que Draco apareciera, Ariel le dio una última mirada Willy (que fingia estar enojado porque no lo dejo comer chocolate) y se salió de su habitación deseando no tener más interrupciones.

Pero al parecer la suerte nunca estaba del lado de Ariel Scamander, porque apenas piso la biblioteca deslumbró una maraña de cabello corriendo en su dirección que pertenecía a Hermione Granger.

—Hola, Ariel.

La rubia la miró con sorpresa de que se estuviera dirigiendo a ella. 

Hermione Grager era una de las personas más conocidas en el colegio y le resultaba extraño que la niña supiera su nombre. Claro que compartian algunas cases y ella le sonreía en los pasillos, pero Ariel había pensado que solo era por amabilidad.

—Ho-hola Her-hermione.

Ariel deseo que la tierra la tragara cuando Hermione sonrió, la rubia espero que comenzara a reír o que dijera algo hiriente pero eso nunca paso.

—Mira, realmente no quiero molestarte —le dijo Hermione comenzando a caminar y obligando a Ariel a seguirla— Pero se que estas comprometida a cuidar a todas las criaturas como toda tu família ¿Verdad?

Ariel asintió.

—¿Y los elfos domesticos son considerados como criaturas para ti?

—En-en realidad el el-elfo doméstico es con-considerado como un se-ser ya que cual-cualquier criatura que-que tenga inteligencia su-suficiente para entender las le-leyes de la comunidad má-magica y pa-para asumir parte de la-la responsabilidad en la con-configuración de esas le-leyes es con-considerado un se-ser.

Hermione asintió sorprendiendose por lo que Ariel sabía, pero luego recordo que ella era Ravenclaw y que muchas veces había escuchado a la profesora McGonagall hablando con otro profesor sobre lo inteligente que la chica era. 

De hecho se había sorprendido mucho más cuando descubrió que hacía magia no verbal, en realidad no tenía que haberse sorprendido tanto porque si Ariel lanzaba un hechizo y tartamudeaba era muy probable que las consecuencias fueran malas, pero para alguien de su edad era muy sorprendente.

La chica de Gryffindor salió de su aturdimiento y comenzó a contarle a Ariel que habia creado, una asociacion llamada P.E.D.D.O. Dicha organización se basa en la defensa y libertad de los derechos de los elfos domésticos en Hogwarts. 

Aunque Ariel amaba a las criaturas mágicas no estaba tan acostumbrada a los elfos domésticos, de hecho nunca había visto uno, pero a lo largo de los años había aprendido que los elfos eran felices trabajando para sus amos, aunque ella suponía que siempre habia uno que quería ser libre. 

Asi que estuvo de acuerdo de unirse en la asociaron mientras no la hicieran hablar frente a nadie, además de que apreciaba realmente el gesto de Hermione en interesalrse en el bienestar de la criatura.

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