En este capítulo, voy a narrar lo que les ocurrío en su viaje hasta que fueron capturados.

Les digo para que no se revuelvan xD además ya le toca al Otayuri 💖

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Disfruten...

Especial 3/7

Otabek y Yurio estaban de viaje, unas muy merecidas vacaciones, debido a todas sus misiones con exito. Se encontraban en Francia, un lugar muy tranquilo y lujoso, cenaban una extraña comida.

—No se que rayos es esto pero me encanta - Le gusto la comida.

—Se llama Coq Au Vin - Aclaro el casajo.

—¿Pollo al vino? - Pregunto curioso.

—Así es, aprendes rapido, ¿Te gustaría ordenar algo mas gatito? - Sonrio coqueto.

—No me llames gatito, albañil y no - Fruncio el seño.

—Lo siento, es divertido - Rio bajo.

—Te odio - Sentencío.

—Yo tambien te amo - Dejo el dinero y propina.

Al salir del restaurante, ambos estaban satisfechos por esa deliciosa cena, pronto regresarían a su hogar. Por lo cual aprovecharon esta ultima noche.

—¿Que hora es? - Jugaba con un mechon de su cabello rubio.

—11:56 p.m debemos volver al hotel - Tomo su mano para caminar juntos.

—¿Qué haces? - Se sonrojo.

—Nada en especial, todas las parejas lo hacen - Lo observo inexpresivo.

—Eso ya lo se, idiota! - Se ruborizo aun mas.

Siguieron su camino a el hotel, nunca pensaron que sus vidas dieron un giro muy drastico. Varias camionetas negras los arrinconaron, no había escapatoria.

—¿Qué esta pasando? - Saco su arma.

—No tengo idea, nos superan en número no seas imprudente y guardala - Rodo los ojos Otabek.

Varios hombres encapuchados los atraparon, les inyectaron un tranquilizante cayeron rendidos, por lo menos estaban juntos ( No por mucho 😈) .Al despertar ambos estaban encadenados, no podian alcanzarse, las cadenas los ataban de los pies a las muñecas.

—Otabek ¿En donde demonios estamos? - Intento liberarse.

—Es inutil, a lo poco que escuche estamos en Japón, nuestro hogar - Susurro.

—¿Qué? - Impresionado.

—Shhh hablo mas despacio - Hizo una mueca.

—Lo lamento - Susurro.

Ninguno de los dos tenía idea del porque este ataque tan repentino, dejando eso de lado por lo menos se tenían el uno al otro, y eso para ellos era suficiente. Luego de que despertaran entro un hombre encapuchado.

—Al fin despiertan - Comento impaciente.

—¿Qué es lo que quieres de nosotros? - Otabek lo observaba fijamente.

—De ti nada, pero de Yurio si - Relamio sus labios al mencionar al rubio.

—Esa voz... Acaso tú eres... - Trago saliva incrédulo.

—Oh si, perfectamente sabes - Se quito la capucha que le cubría el rostro.

—Jean... Jackes.... - Apreto sus puños.

—Bingo, más conocido como JJ - Hizo su pose del JJ Style.

—Eso es patetico - Susurro Otabek.

—Creí que habias muerto, desgraciadamente sigues vivo - Serio movio su cabello rubio.

—Oh querida que ruda eres, por eso me encantas - Abrío la pequeña celda en donde estaban y analizo a Yurio de pies a cabeza.

—¿Cómo es que sobreviviste? - Abrazo un poco su cuerpo, le incomodaba y molestaba su mirada.

—Facíl, una persona me ayudo y atendio mis heridas debidamente - Rio y se acercaba a él.

—Alejate - Intento retroceder.

—¿O qué? Vas a golpearme? No puedes hacerlo - Jalo sus cadenas y acariciaba sus piernas.

—Sueltalo, el es mio escoría - Grito Otabek celoso.

—No me toques!! - Le dio una patada en el estomago él pequeño ruso.

—Ahg eso dolio maldita perra - Le dio un golpe en el rostro.

Yurio escupio sangre, luego observo a JJ con furía, Otabek estaba asustado no quería que lastimaran a su pequeño e indefenso gatito.

—Yurio seras mia, y tú... Luego me encargare de ti - Agarro las cadenas de Yurio y admiraba su rostro.

—Jamas sere tuya, solo soy de Otabek Altín - Escupio en su rostro.

—Insolente - Limpio su rostro, arrastro las cadenas y a él ruso por el camino.

—Te amo - Susurro debilmente a Otabek.

Claro que Otabek se negaba rotundamente a dejarlo ir, nunca le había dicho algo tan tierno, hizo todo lo que pudo... Pero otro hombre lo anesteciaron y con sus pocas fuerzas se arrastro pero no funciono.

—G-gatito yo tambien te amo... - Cuando menos lo espero, perdio el conocimiento.

Mientras tanto con JJ y Yurio

—Sueltame! - Se movía intentando safarse.

—Por supuesto que no, eres mia ahora, veamos que tan importante eres - Carcajeo mientras hacia una llamada.

Si, tal y como lo penso la voz de su hermano, esto se salio completamente de control. Más que nadie sabia que su hermano se alteraba facílmente, estaba enfurecido por no poder hacer nada.

—Jefe, aqui tengo a la chica - Se arrodillo ante una enorme silla volteada.

—¿Y él chico? - Pregunto.

—Encerrado - Contesto.

—¿Ya tienen a mi amado Víctor? - Movio sus uñas impaciente.

—Afirmativo, pronto estara con usted - Serio.

—Excelente, puedes hacer lo que desees con ambos solo no los mates... Por ahora... - El humo de su cigarrillo se filtraba por toda la habitación

—Muchas gracias jefe, me retiro - Se levanto hizo una reverencía y se marcho.

No quería, no lo deseaba, si Víctor venía aquí, eso solo significaba una cosa el cerdo... ¿Estaba muerto? ¿Fueron vencidos? Intentaba no alterarse, este tipo de situaciones le ponían los nervios de punta, JJ arrojo a el rubio en su cama, tendrían relaciones si o si.

—Al fin seras mia - Se coloco arriba de ella para inmovilizarla.

—Carajo sueltame - Asqueado.

—Mira si no quieres que tu noviecito sufra tendras que hacerlo conmigo, te guste o no te guste - Prendio un televisor.

En la pantalla se podía ver a Beka sentado en una silla eléctrica, al parecer desperto de ese medicamento. Le arrojaban baldes de agua helada y despues encendían la maquina, su cuerpo reaccionaba de una manera escalofriante.

—Detente! Lo haré! Solo dejalo en paz, te lo imploro! - Sollozo.

—Perfecto - Ordeno a los demas que se detuvieran.

Así fue, se detuvieron Beka ya no sufría estaba respirando agitadamente Yurio ataco los labios de JJ, no le gustaba, le repugnaba y más que metiera su asquerosa lengua. Tenía nauseas, soportarlo fue su unica opción, aprovecho el momento de su guerra de lenguas y lo mordio fuertemente.

Al hacerlo hizo que le saliera demasiada sangre, se separo y con sus cadenas apreto su cuello, lo estaba ahogando quería matarlo (creo que quedo muy claro xD) JJ dejo de moverse, Yurio no lo solto hasta que noto que era suficiente, saco las llaves de sus cadenas era libre por su seguridad tomo una arma del otro bolsillo, la cargo y inhalo y exhalo despacio.

—Voy por ti Beka, nadie volvera a ponerte un dedo encima - Lanzo una mirada de odio al cadaver y salio de la habitación para buscarlo.

Espero el capítulo les haya gustado :3 se que me pase con el Yurio yandere pero admito que me gusto xD tenia que hacerlo o no viviria feliz.

Les dejo unas imagenes para que se imagen mas o menos las cosas, hasta mañana.

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