Antes que nada quiero avisarles que este capítulo sera algo largo, no lo quiero dividir en partes como el anterior ya que sería algo repetitivo y pos así no se puede espero que tomen su valioso tiempo para leerlo, pongan música u algo para que se concentren yo les recomiendo Lindsey Stirling o David Garret. También decirles que habrá sexo en este capítulo 7u7 fantasma o lectora que este leyendo esto por favor deja tu estrella no cuesta nada sin más que agregar (creo) comencemos con el capítulo que es lo que quieren xD...

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Desperto algo mareado por la inyección que le pusieron, Cerro un momento sus ojos para tratar de analizar todo lo que le había ocurrido en tan solo unas cuantas horas.

—Fui a la escuela, hubo un tiroteo salí ileso, un señor me secuestro y ahora no tengo idea de donde estoy - Giro su vista para ver si había una salida pero estaba todo oscuro, lo único que pudo distinguir sin alguna dificultad fue una puerta.

Intento levantarse de donde quiera que estuviera acostado, pero sus manos estaban aferradas a unas cadenas al igual que los pies, al lado había un encendedor así que la luz iluminó la habitación solo se podía acercar a una mesa con comida, un retrete y por supuesto a la cama, pero no a la puerta .

—Demonios ¿Hay alguien aquí? - Grito desesperado.

Como imagino no hubo una respuesta, su estómago rugió efectivamente tenia mucha hambre, se acerco a la mesa y se sento en un banco que era bastante pequeño.

—Esto es extraño - Observo la comida era algo parecido a una sopa (curry) y un jugo de Manzana.

Los tomo, había una nota pegada a el jugo no entendio con claridad lo que quería decir.

Si intentas huir vas a acabar como lo que esta arriba de ti,  encuentra la campana y recibirás una recompensa no olvides las llaves te podrían salvar Disfruta tu comida.

—¿Arriba de mi? - Penso un poco en lo que decía la nota, tendría que acabar primero la comida porque no se concentraba.

La sopa estaba algo picante, algo que sin duda alguna no le agradaba pero ya que era eso o morirse de hambre, el jugo estaba algo espeso no se si ya habían pasado semanas o unos cuantos días como para que estuvieran así.

—Esto es asqueroso - No podía soportar esa asquerosa comida más, solo se comio unas cuantas cucharadas y la tiro sin remordimientos.

—Extraño la comida del cerdo... - Abrazo su cuerpo y nuevamente tomo la nota analizando con sumo cuidado cada palabra.

—Bien creo que es algo estúpido ya que yo no veo ninguna ventana, mis pies y manos están atados por lo que no alcanzo a llegar a la puerta... Espera olvide la parte de la llave pero ¿Donde pudo haberla escondido? - Se cruzo de hombros y dirigío la mirada al techo en busca de ideas, pero lo que observo lo hizo gritar de horror.

—¿QUE ES ESO!? - Se arrincono a la pared asustado.

Era un cuerpo deformado, sus ojos estaban en su estómago, sus manos en la cabeza, las piernas en las caderas y la cabeza donde irían los geniales. Noto que le faltaban algunas partes como las orejas, los dedos y el cabello sin embargo algo brillaba en lo que sería su cuello.

—Esa debe ser la campana o las llaves... Pero no solo me da miedo eso, si no que también ¿Cómo llegare ahí? No soy muy alto... - Calmo su corazón ya que esa cosa espantosa alteró sus sentidos.

Tomo el banco y se subio arriba de él, el cuerpo deformado estaba bien aferrado al techo como imagino no pudo alcanzar, tuvo que bajarse y choco con la mesa, gracias a eso se dio cuenta de algo.

—Espera estos palos de madera son mas largos que los del banco, se pueden desarmar ambas partes, entonces tengo que sustituirlos y tal vez así alcance - Chasque los dedos por mi idea y puse manos a la obra, sustituí los palos pequeños para poner los largos y me volví a subir esta vez pude alcanzar y tome la llave de lo que era el cuello y se bajo.

—Bien primer paso listo, ya tengo la llave ahora me falta la campana - Por fin pude liberarme las manos y pies para moverme con más facilidad.

Debajo de mi cama estaba la campana eso fue muy fácil, pero ¿Para que clase de recompensa me serviría? La segunda llave fue más difícil de buscar ya que me di varias vueltas por la habitación, hasta que fui al retrete no había nada adentro me decepcione sin embargo  pude ver el espejo, por alguna razón decidí romperlo lo mejor que pude hacer ya que ahí estaba la otra llave, removiendo los pedazos de vidrio con mis manos y con mucho cuidado la tome, salí de ahí y ahora sólo faltaba pensar en como usar cada una.

—Esto cada vez se complica más - Puse las llaves y la campana en el suelo y nuevamente puse mi mente en marcha, como estaba solo y el silencio me abrumaba dije mis pensamientos en voz alta.

—Bueno la llave número uno me dejo liberarme de las cadenas, la llave número dos puede servir para abrir esa puerta ¿Algo me esperará ahí dentro? ¿Sera bueno o malo? No lo se necesito actuar para saber, ahora la campana... - Me hice una coleta de caballo para concentrarme un poco más.

—La campana no tengo idea para que es - La hice sonar para saber si algo ocurría pero nada.

Me levante y abrí la puerta, tenia miedo y muchas dudas en cuanto entre ahí estaba mi secuestrador sentado con un gran banquete.

—Felicidades! Has pasado mi prueba, solo te llevo 1 hora y media - Aplaudió y me invito a sentarme.

Hice lo que me pidió y se acerco a mi.

—Como no se tu nombre bella dama, me gustaría saberlo - Empecé a ponerle una comida más saludable, parecía muy delgada espero que no sufriera de algún problema.

—¿De verdad importa que te lo diga? Vas a estar en la cárcel muy pronto no creo que sea necesario decírtelo - Talle mis ojos y di un bostezo.

—Oh que agresiva, así me gustan... No creo estar en la cárcel ni la policía de otros países lo a podido lograr y si lo intentan están muertos - Reí y le entregue el plato.

—¿Eso esta envenenado? - La comida se veía deliciosa pero no confiaba mucho en el.

—¿Me crees capaz de hacer semejante maldad? - Tome una copa para servirle el vino rojo.

—Si fuiste capaz de modificar el cuerpo humano y matar personas dudo que sería algo difícil envenenar a alguien como yo - Aparte el plato y me cruce de hombros.

—Cierto pero no tengo esas intenciones, me gustan las muertes creativas no las clásicas - Bebío el vino mientras comía la lasaña.

—Claro voy a confiar en alguien que me secuestro y me puso una extraña prueba  - Dijo sarcástico.

—Bueno si fuera tu lo haría, esa comida que te deje estaba podrida y contenía una droga, si quieres estar en tus 5 sentidos entonces come lo que te acabo de servir. ¿Aun tienes la campana no? Esa era tu recompensa la cura. - Sonrió y volví a acercar el plato hacia mi.

—Lo hubieras dicho desde un inicio ahora entiendo porque la necesidad de moverme tanto y los mareos constantes - Sin mas remedio empecé a comer, sabia deliciosa mejor que lo otro me sentía en esas cenas caras a las que solía ir con mis padres y el cerdo.

Estuvimos en silencio hasta terminar nuestra comida, me limpie los labios y sentía la enorme necesidad de tener relaciones sexuales de la nada.

—¿Que rayos hiciste? - Rasguñé la mesa con mis uñas.

—Ah si, esa medicina tiene efectos secundarios como la necesidad de tener sexo, o mareos, vomito, mucho sueño ¿Qué es lo que sientes? - Jugaba girando una cuchara.

—No voy a decir algo tan vergonzoso... -Susurro y baje mi mirada.

—Te escuche... Acaso tu... ¿Quieres tener sexo? - Detuvo la cuchara y sonrió mostrando un poco sus dientes.

No pude contestar, mis pensamientos se estaban llenando de cosas obscenas las palabras no me salían por la vergüenza que estaba sintiendo, Cerré mis ojos intentando pensar en otras cosas pero el se acercó donde estaba, se puso detrás y me susurro a la oreja.

—Tranquila cariño te tratare con mucho cuidado - Lamió el lóbulo de mi oreja y empezó a dar besos en mi cuello.

—No detente... -Lo aparto de mi con mis pocas fuerzas.

—Oh vamos hermosa solo esta vez enciende esa llama que te conduce al placer... - Puso su mano en mi estómago y fue subiendo hasta mis pechos.

—Lo haré... Pero con una condición - Sabia que me arrepentiría de esto.

—¿Cual? - Pregunte con curiosidad.

—Que me dejes ver a mi hermana, uno de tus amigos se la llevó y también que uses condón - Me cruce de brazos nuevamente.

—Esta bien ¿Algo mas que decir? - Se quito los guantes y chaqueta arrojándolas al suelo.

Tenia miedo de contarle mi secreto, pero era eso o que no me dejara ver a el cerdo, todo podía cambiar según sus gustos era ahora o nunca.

—Soy hombre - Cerré mis ojos esperando un gran golpe y señas de repulsión pero no paso nada, cuando los abrí el ya estaba completamente desnudo.

—¿Eso importa mucho? Digo eres el primer hombre que conozco que se viste de mujer pero en realidad mis gustos son hacia el genero masculino y femenino pero mas a los hombres... - Abrio el condón y lo coloque en su miembro.

—Solo era eso puedes hacer lo que quieras con mi cuerpo, excepto deformarlo como el de esa habitación, soy virgen y mi nombre es Yuuri pero me dicen Yurio... Es todo. - Apunto a la habitación donde estaba antes y después acomode mi cabello soltándolo de esa coleta que me hice.

—Yuuri, Yurio me gusta más y me llamo Otabek - Despojo mi uniforme de poco a poco hasta que quedara en ropa interior.

Era todo tan vergonzoso nunca creí que lo haría con mi propio secuestrador y menos en una mesa, Otabek con su lengua lamió alrededor de mi ombligo me estremece aquel contacto siguio bajando hasta llegar a mi entrepierna solté unos suspiros de placer, primero lo acarició para empezar a masturbarme y luego chuparlo dando pequeñas mordidas en este. Los gemidos se hicieron presentes en mi, al parecer a Otabek le excitaba escucharme y a mi me excitaba que hiciera eso con su lengua y manos, estuvimos así un buen rato hasta que sentía que me iba a correr advertí a Otabek pero le dio igual tragándose mi líquido.

—Ponte en cuatro... Ahora... - Exigió.

Hice lo que me indicó me puse en esa posición, sentí unos dedos dentro de mi ano cosa que me excito mas de lo que ya estaba.

—Ah... Otabek si... - Gemía ligeramente.

—Voy a entrar Yurio... - Seguía moviendo mis dedos dentro de él.

Ascendí con la cabeza sentí una ligera penetración al principio tarde en acostumbrarme a esto, luego el siguió pero ahora con las penetraciones un poco mas fuertes lloraba de placer y de dolor, esos sentimientos estaban completamente combinados. El ritmo de las penetraciones era rápido y después lento metía y salía ambos estábamos gimiendo no sabia exactamente como sentirme ante esta nueva etapa en mi vida. Estuvimos así por 1 hora ya que lo hicimos dos veces, mi respiración era agitada, sudaba por todas partes.

—Eso fue maravilloso - Me dio un corto beso en los labios.

—Si... Tengo sueño voy a dormir - se estire un poco.

—Corrección, vas a dormir conmigo - lo tomo en brazos y le llevo a una enorme habitación.

No pudl fijarse en todos los detalles ya que el cansancio le hizo caer rendido en la cama, Otabek lo cubrió con las cobijas y después lo abrazo.

—Gracias por acceder a tener sexo conmigo - Movió mi cabello de su rostro.

No respondí ya que era la primera vez que alguien me decía eso, solo me aferre a su pecho su corazón latía muy rápido al fin podría ver al cerdo si es que seguía vivo... Esa ídea se metió en su cabeza pero tenia fé en que pudo sobrevivir, Otabek y él después de esa noche de pasión caímos rendidos en brazos de Morfeo.

Les contare algo de esta humilde escritora, me tarde mucho escribiendo la parte donde tenían sexo porque era la primera vez que lo hacia. La segunda es que de 318 personas que leen esto solo 35 dan una estrella eso me deprime y mucho. La última es que iré a un concurso de Cosplay y estoy emocionada ¿Les gustaría ver fotos de como me quedo? Las quiero mucho, hasta la próxima dejen su estrella no lo olviden :3.