XVII | La Confianza de Horus |
| Música de Multimedia: Wish You Were Here - Pink Floyd |
——————————
Version A
——————————
"Hemos encontrado un material que soporta el esfuerzo del salto espacial. Solo tendremos que reconfigurarlo en el escudo y, por fin, podremos entrar en la etapa final".
Segunda nota de un técnico—.
——————————
Poco tiempo después de que Emma y Sebastián dejarán a Emmanuel en el colegio, y de que los confundieran con los padres del mismo, aparecieron en la plataforma de recibimiento de la armadura planetaria.
Después de aquella confusión no lograron hablar con naturalidad. Había cierta tensión tras el hecho.
—Puedo notar que sus pulsos cardíacos se dispararon desde hace rato —dijo el androide mientras aparecía flotando entre los dos. Esto los sorprendió—. ¿Quieren que le informe a Forseti...?
—¡No! —exclamaron al unisono. Ray levitó con lentitud de arriba a abajo y sacó unas pequeñas pinzas de metal de su estructura, las unió frente a su lente, como si estuviera pensando. Sebastián se apresuró a decir—. Culpa del disparo espacial, está tecnología están rústica que provoca un repentino aumento en los latidos, ¿o me equivoco, Emma?
—Para nada, Sebs —confirmó la Diosa, abrió su chaqueta para dejar entrar aire a su cuerpo, esperando que el gesto lo entendiera el androide—. A mí me provoca muchísimo calor aunque esté acostumbrada a peores situaciones.
—Está bien —exclamó el Espectro, sus luces se volvieron de un tono amarillo—. Les avisaré a los demás que están a punto de llegar, en la sala de Astrea, por favor.
Ray desapareció y ambos liberaron el aire contenido. Solo los habían confundido porque era una nueva profesora, ¿no?
.
Seth y Héctor se encontraban viendo a Gabriel y Alec jugar al fútbol americano en miniatura. Mientras uno hacia la forma de una portería uniendo sus dos índices y levantando sus pulgares de forma perpendicular el otro preparaba su gol de campo con trozos de papel.
—Es tu turno, anciano —mencionó el hombre de los Dankworth—. Veamos si puedes ganarme
Era el turno del Dios ruso, tomó un pedazo de papel y con su brazo mecánico lo comenzó a amasar con sumo cuidado, necesitaba una esfera perfecta para anotar el punto ganador.
Respiró profundamente y puso entre ceja y ceja su objetivo, necesitaba anotar el punto más importante de su vida. Bajó sus latidos y puso la bolita de papel sobre la mesa, le dio el toque de Dazhbog y golpeó con toda la fuerza que su mano cárnica le permitió.
El papel salió disparado e hizo un recorrido en una parábola perfecta, pasando entre la portería del Dios griego. Los espectadores gritaron ante este logro y el Dios ruso se incorporó con las manos en alto, celebrando la victoria mientras Gabriel se lamentaba.
—¡Eso fue trampa! —señaló Apolo mientras la pareja de Vanguardia entraba y contemplaba el espectáculo—. Sebastián entró y me distrajo.
—No los metas, niño —interrumpió con diversión el ruso—. Él estuvo viendo desde el inicio del tiro.
La pareja de retaguardia comenzó a discutir de una forma acaloradamente amistosa y Emma se puso a lado de Seth.
—¿Cómo es que siempre logran encontrar formas nuevas con las que entretenerse? —preguntó Emma al oído del Dios egipcio. Este volteó—. Nunca terminaré de entender a los hombres.
—Somos sencillos —aseguró Horus, se soltó el cabello, este ya estaba lo suficientemente largo—. Encontrar formas nuevas de pasar el tiempo es nuestro trabajo.
Emma negó divertida mientras el Capitán se colocaba enfrente de la mesa, estiró la mano y las luces se apagaron.
—Bien, de antemano les quiero dar las gracias por cubrirme en el cumpleaños de Sofía —dijo Sebastián, alzando la voz. El Espectro apareció a su lado—. Pero hay una buena razón...
—Siempre te cubriremos —aseguró Héctor, abriendo su cinturón y esparciendo sus partículas sobre los brazos del Dios azteca que seguían en tratamiento por la explosión de hace dos años—. Solo intenta quitarte esa costumbre.
—Te juro que está vez hay una razón —respondió Mixcóatl con elocuencia—. Ray enciende la pantalla, por favor. —El Espectro flotó en silencio y encendió la pantalla holográfica, dos imágenes parecieron sobre la pantalla—. Tenemos nuestro siguiente objetivo.
Una gota rebelde de sudor cayó de la frente de Seth Zeki, buscó de forma desesperada aire al saber que pronto irían por él.
—¿Te encuentras bien, Horus? —preguntó Emma, colocando su mano sobre el hombro del Dios—. Si necesitas un minuto a solas, dilo.
El antiguo Medjay negó con rapidez, no necesitaba estar solo... únicamente necesitaba procesar las palabras que le acababa de decir su Capitán.
Después del festejo de Sofía Márquez, los Dioses y Hambre fueron citados a primera hora del siguiente día a la sala de conferencias de la estación espacial defensiva con dos propósitos, Uno de ellos era compartirles la posición del segundo Jinete perdido, Disputa.
El antiguo amante del Dios egipcio.
—¿Podrías repetirlo, Mixcóatl? —se atrevió a decir Seth al cabo de unos segundos. El Capitán lo observó con los brazos cruzados y asintió—. ¿A dónde tienen a Dorian?
—Claro, Horus —respondió Sebastián con tranquilidad—. Nuestro objetivo es la prisión térmica, ubicada en un punto lejano del espacio conocido por la Resistencia y muy oculto de la Federación, irrastreable de cualquier forma.
»Excepto por un error humano —añadió el Dios azteca, estiró la mano y Ray apareció—. Un error que él pudo rastrear.
—Sí, cómo podrán observar. —Una pequeña pantalla holográfica se proyectó desde el lente del Espectro—. Al liberar a Hambre de su prisión, la Federación cometió el error de mandar al Arcángel Miguel a registrar las tres prisiones dónde se encuentran Disputa, Muerte y Guerra.
»Antes de que Miguel pudiera ocultar su huella térmica, logramos rastrear su última posición conocida e hicimos simulaciones de la posible ubicación de uno de ellos. —Se mostraron tres planetas, dos con atmósferas amistosas y una con una hostil.
El androide hizo una pausa y un enorme planeta rojo fue mostrado: Marte. Uno de los antiguos planetas pertenecientes a la Vía Láctea, el sistema de origen de la humanidad.
El cual, durante los últimos siglos, su Sol había sido destruido por completo por estaciones energéticas, al punto de llamarlo una enana blanca y provocando desbalances en todos los planetas de aquel sistema.
—Ahí se encuentra Disputa —señaló Sebastián con su índice—. Y vamos a ir por el este mismo día. —Apareció nuevamente seis imágenes de los Regalos Divinos de los Dioses—. Porque me alegra decir que por fin Henry Garza y Karina Montes lograron quitar las barreras a todos sus Regalos Divinos.
»Mis queridos compañeros y amigos, quiero presentarles el control avanzado. —Los Regalos Divinos se encendieron y una estela de luz plateada los envolvió, cada uno sintió el calor emanado—. Algunos pudieron desbloquearlo por uso como es el caso de Seth pero otros no, su programación tenía un bloqueo en el código que impedía el reconocimiento de la voz; desconozco a ciencia cierta cuál sea el límite de sus Regalos Divinos pero se que existe uno que ni yo he podido soltar.
—El control Maestro —aseguró Alec, cerrando su puño, de el brotaron ciertas chispitas plateadas.
—Correcto. —apuntó y chasqueó el Capitán—. Recuerden, nuestro objetivo es dar con la ubicación del creador de los Regalos Divinos. —Hizo una pausa y suspiró, se rascó las cicatrices de los brazos—. Esa es la única razón por la que estamos vivos.
—Aún así tenemos que rescatar a los que se sacrificaron —aseguró Gabriel, recordando las facciones de la fría Muerte—. Ellos intentaron plantarle cara a él.
El Arcángel Miguel seguía siendo un tema del cual no se sentían cómodos mencionado, la atmósfera era tensa al haber escuchado aquel nombre salir de la boca de Sebastián y aún así necesitaban ganarle.
—Bien, ese es el plan —añadió Mixcóatl, cerró su puño y observó al equipo, todos estaban listos y el único ansioso era Horus—. Te prometo que lo rescatemos sano y salvo, Seth, sé lo que significa Dorian para ti.
El Dios egipcio dio las gracias y se incorporó con seguridad, los demás miembros lo vieron con una sonrisa. Con un equipo así jamás dudaría de la palabra de su Capitán.
Hipólita bajó los brazos inmediatamente después de que le tomaran las medidas de su cuerpo para su nuevo traje.
Después de la ceremonia, los Arcángeles fueron transportados hacia la reconstruida Base Central de la Federación en calidad de secreto de Estado. Pocos eran los afortunados en tener el nivel de seguridad suficiente para conocer a las monstruosas figuras.
Pero ahora, todos estaban observando a Tamara en una plataforma, cada uno la juzgaba con la mirada y solo Miguel le hablaba.
—El traje estará listo en una semana —dijo el líder de los Arcángeles, se cruzó de brazos y caminó con altanería—. Agradezco que tengas la misma talla y medidas cercanas a la primera Ariel, su traje te quedará con unos arreglos.
—Mi Comandante, ¿por qué todos están aquí? —se atrevió a preguntar la antigua Amazona, ella todavía sentía mucho respeto por aquellas figuras. Jäger tomó la Espada Divina que le pertenecía a la antigua Ariel y la arrojó a Tamara, esta la atrapó con facilidad—. ¿Por qué debo...?
—Sígueme —ordenó el Comandante.
Miguel salió por la puerta y fue seguido por la antigua Amazona, detrás de ellos los demás miembros estaban murmurando entre ellos.
Los pasillos pasaron y al final encontraron a Montserrat de espaldas, ella giró al sentir la presencia de sus soldados.
—Mi General —dijo Miguel, arrodillandose en el acto. Todos los imitaron menos Tamara, ella hizo la clásica pose de saludo militar—. Aquí está, como lo ordenó.
—Levántense, mis Arcángeles —impuso Montserrat, todos siguieron la indicación. Observó uno a uno a los integrantes hasta detenerse en Tamara—. Hipólita, no, Ariel II, hoy tendrás que pasar el mismo ritual que tus compañeros.
Las luces de la cámara se encendieron y por fin la amazona se dio cuenta de dónde se encontraba. Vio la enorme puerta circular y arriba de esta, un enorme letrero en curva con las palabras Pruebas de Hércules.
—Si quieres soportar esta cruzada, tendrás que pasar el mismo infierno que tus compatriotas —exclamó Guaichia con elegancia—. ¿Estás lista para sobrevivir al mismo infierno que Heracles?
N. de A.
Pues hola, no es domingo pero está cercano a unos días después de lo prometido xd.
Pues a partir de hoy tendremos una nueva adición a la historia las "versiones", esto es más por cuestión personal que otra cosa, les explico:
AALII tiene muchos fallos los cuales se y consciente pero no he reparado por lo cual he creado está forma de adecuarme y son las versiones:
Versión A: Capítulo sin edición y puede contener errores para Wattpad.
Versión B: Capítulo corregido pero sin edición para Wattpad.
Versión AB: Capítulo corregido y con edición para Wattpad.
Versión Z (ó Versión O): Capítulos redactados desde cero para su publicación (no version de Wattpad).
Yo avisaré cuando está historia pase a su versión B o AB (sí, como los tipos de sangre xd).
En fin, dicho esto: ¡Comenzamos con una breve introducción de la cruzada de Hipólita y los Dioses! Pronto más jugosos detalles UwU
¡Nos vemos la siguiente semana!
Vota, comenta y comparte.
¡Farewell!
Pd. La de los guioncitos.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top