| Música de Multimedia: Gears Keep Turning - Steve Jablonsky |

La fiesta de cumpleaños de Sofía Márquez había concluido hacia escasos minutos, su hijo ya llevaba más de un par de horas y el amanecer estaba a tan solo una media hora.

Y después de todo el festejo, la mayor de los Márquez se encontraba sentada en un camastro con una malteada de café, la favorita del amor de su vida, en sus manos.

La pelinegra dio un sorbo y el líquido fluyó en su garganta con tranquilidad, cerró los ojos y se recargó, dejando el vasito en el portavasos.

Tuvo una de las mejores noches en mucho tiempo; tuvo un momento de intimidad con Héctor, su hermano e hijo estuvieron en su natalicio y no solo eso, sino también el que fue el amor de su vida, el acaecido Ray Ferrel.

—Reproducir memoria —susurró, activando el comando que el Espectro implantó en su mente—. Modificación: Relajación.

Sofía cerró sus ojos y un segundo después la figura de Ray se encontraba en la silla contigua, la pelinegra sonrió y tomó la mano del fallecido mientras le depositaba un beso.

—Gracias por venir hoy, Ferrel —le dijo Sofía, observándolo a los ojos, la Luna se reflejó en sus ojos—. Tu presencia me ha fallado a diario, veo mi reflejo en el espejo y tú no te encuentras sosteniéndome la cintura.

Ray Ferrel no dijo nada, giró la cabeza y vio el horizonte, la silueta quitó su mano y se incorporó en la balaustrada. Sofía Márquez solo se dedicó a observarlo. Era el vivo recuerdo del antes de que, nueve años atrás, partiera al frente con la esperanza de volverse un miembro de Élite.

—Te hubiera encantado ver a tu semilla crecer —añadió la pelinegra, sosteniendo el vaso de la malteada—. Se está volviendo un hombre tan bueno como tú, de forma lenta y constante; incluso es un superhéroe como tú. —La tristeza la embriagó, sintió unos leves escalofríos en su columna y el viento le removió el cabello—. Todas las Lunas llenas sale a este mismo balcón y habla contigo, héroe de la Luna; él piensa que no lo veo, que no lo sé...

»Pero, mi querido Ferrel, sé que él crece sin su figura paterna y me duele. —Agachó la cabeza y comenzó, lentamente, a abrazarse las piernas—. Tengo miedo de que Héctor piense que no lo quiero, que lo estoy usando para llenar ese vacío que dejaste.

—Cuando te conocí tenías el corazón igual de herido que cuando partí. —Sofía abrió los ojos y levantó la cabeza sorprendida; Ray Ferrel se encontraba de espaldas a la Luna y la veía con tranquilidad pero, lo más importante, es que abría la boca, su ilusión estaba hablando—. Y tenías ese mismo miedo cuando te enteraste que serías madre. Y era normal tenerlo, era un salto de fe.

—Pero me atreví a darlo cuando te tomé la mano —añadió la pelinegra con nostalgia, estiró las piernas—. Y todo fue más fácil a partir de ese punto.

—Porque nos teníamos el uno al otro —completó Ray Ferrel, se acercó a su amada y la tomó de la barbilla, ella se estremeció al sentir el contacto—. Como ahora lo tienes a él, confía en Héctor porque mereces sonreír de nuevo, permítele ingresar a tu condenado corazón y déjate llevar; solo eso, dale una parte de tu amor, mi Coatlicue.

Ray Ferrel se acercó lentamente a los labios de la pelinegra, Sofía cerró sus ojos y sintió un beso dulce y rápido del padre de su semilla.

—Te amé hasta el último segundo —murmuró Ray Ferrel, tomando la mano de la mujer de ojos verdes.

Al cabo de unos segundos, Sofía Márquez abrió los ojos y la ilusión había desaparecido, dejándola tranquila porque tenía el permiso del amor de su vida de abrir nuevamente las puertas de su helado corazón. Se reclinó en su silla y se dedicó a terminar su malteada bajo la luz del astro menor, hogar del héroe de la Luna.

Hace dos años, cinco minutos antes de la operación de flota conjunta "Dunas del Ocaso".

El polvo se elevó a causa de un estruendoso golpe seco de la vieja maquinaria del lugar, las chispas salieron y rápidamente un hombre de avanzada edad y complexión esquelética cargó un extinguidor con demasiada facilidad.

—¡Accionando! —gritó el viejo con una voz cortada a causa de la misma enfermedad que cierto General tenía.

El espeso líquido salió a presión y el chispazo inicial no detonó. Paró el fuego del desastre mientras su vieja y anticuada máquina de fax comenzaba a funcionar.

Siendo este su único método de comunicación con la Federación, al estar exiliado de su terreno protegido; estaba en el abandonado y desértico planeta Mallow, esto a causa de su extraño núcleo de titanio y cobre, haciéndolo completamente estéril y con una gravedad hostil que acabaría con los seres bióticos de la zona.

El viejo dejó el extinguidor en el piso y corrió a tomar la hoja, leyó atentamente el comunicado y sonrió de oreja a oreja.

—¡Por fin! —Saltó de alegría y se acercó a su ordenador—. Solo tengo que activar el comando maestro al Espectro... Solo una pequeña ayuda.

Tecleó varios comandos en su terminal y suspiró.

—Por fin haré salir al pupilo de mi hermano —musitó para él mismo mientras una pequeña ventana se abría, dejando ver a los seis Dioses: Mixcóatl, Artemisa, Apolo, Forseti, Horus y Dazhbog caminar hacia su nave—. Por favor, Mixcóatl, eres el único que puede detener a Miguel, solo necesitas controlar el Control Maestro. Todo lo he dejado en ese Espectro tuyo, por favor, dame esa dicha antes de que mis pulmones se acaben.

Tosió sangre de forma agresiva, manchando el teclado, vio hacia abajo y tomó una pequeña jeringa de IS-Core y se la inyectó directo al pecho, era la única forma de retrasar lo inevitable.

El Maestro Divino original, el Dr. Gallagher, quería detener la guerra que su hermano el Almirante de los Arcángeles, Zadquiel Gallagher, junto con su pupila la General Montserrat Sáenz habían iniciado de forma egoísta.

Giró y vio un viejo tablero de ajedrez, se sentó del lado de las blancas e inició el juego más largo de su vida.

N. de A.

Por fin, después de mucho tiempo (en el cual lo he invertido en los Dark Souls) he terminado los Interludios y con ello... ¡HEMOS TERMINADO LA PRIMERA PARTE DE ARCÁNGELES ANCESTRALES! 

Solo me tomó dos años xd.

Pero, apartir de aquí ya todo será más sencillo y no habrá más personajes nuevos, estas son las cartas, los Arcángeles y Dioses están en el tablero y solo uno saldrá bien parado...

¿Quién ganará? ¡Descúbranlo conmigo en las siguientes semanas!

A partir de hoy y espero que sea constante ahora sí ja, ja, ja, van a tener más actualizaciones porque ya tendré un teléfono en condiciones (espero el viernes tenerlo) y así seguir con los Leyenda y mis otras historias.

Espero les hayan gustado los interludios y nada, pásense por mi canal de Twitch ( https://www.twitch.tv/solohaz) que todos los días ando haciendo directos pasándome el DS3 sin voz (lamentablemente no me escucharán gritar xd). En fin, ¡nos vemos! Que mañana hay trabajo.

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¡Farewell!

PD. ¿Será que este año me anime a participar en los Watty's?