CAPÍTULO 8
—Dr. Seiko Ishimoto.
Éste saluda cómo lo hizo el anterior y ahora es su imagen la que se proyecta en tamaño inmenso. Observo aquella proyección formada por las millones de partículas azul brillante e inmediatamente recuerdo otra, diferente pero esencialmente igual; una imagen.
¿Iwin, sigues allí?
Lamentablemente...
Esta mañana, cuando hablamos en el comedor, cuando tú me abriste la mano, en el instante en que entramos en contacto vi...digamos que pude ver parte de lo que había visto en el área restringida.
Lo sé. Lo viste porque yo lo pedí.
¿Lo pediste? ¿Cómo?
Desde mi lóbulo. Oh vamos, ya has visto que soy un ser más bien empático, ¿Como te crees que ese chiquillo Niegel recordó su nombre?
Pienso.
—Contacto físico—murmuro siguiendo mi fluir mental.— ¡Por eso mismo evitas el contacto físico con otros!
—¿Qué?— me pregunta desconcertado uno de los letrados de mi división.
Vuelvo en mí y doy cuenta que el Dr. Hoffgärd sigue presentando mentores. Todos los demás continúan observando en devoto silencio.
—Nada.— miento simulando volver al frente.
¿Entonces qué? ¿Funciona por tacto?
Para conectarse con recuerdos puntuales, si. La precisión del recuerdo se alcanza con la cercanía de los cuerpos conectados.
Y puedes conectarte con recuerdos de otros que quizá ni siquiera quieras ver, por solo rozarlos.
Depende muchísimo del estado de ánimo y la predisposición de la otra mente en ser invadida. Por ejemplo, cuando me encuentro muy sensible o exaltado emotivamente hablando, me es mas fácil invadir recuerdos ajenos o bajar la guardia de los míos. Hay mentes y momentos más permeables que otros.
¿Y esto? ¿Cómo es que puedes hablarme telepáticamente aunque estemos lejos? Por cierto, ¿dónde estas?
Tranquilo, fisgón. Estoy en el lado Oeste del campo, tu estás al Norte.
Sin comprender mucho desde dónde orientarme, busco con la mirada pero no tardo en darme por vencido. Son demasiadas personas.
Lo que sí, conectarse con otra mente y establecer una comunicación fluida, es algo muy complicado de lograr. Apenas puedo mantener conversaciones de tres diágolos con otros de mi brigada que tienen mis mismas aptitudes.
¿Aptitudes? Querrás decir poderes sobrenaturales.
¡La tienes con eso! Lo que sea, puedo leer algunos pensamientos y conectarme con otros por cortos lapsos de tiempo, pero contigo...
¿Qué pasa conmigo?
Contigo es diferente porque eres híbrido. Lo que yo proyecto en mi mente, por ejemplo las dos veces que te toqué y estuvimos en contacto físico, lo has podido ver tú también. Lo mismo ocurre al revés, acceder a conectarme con tu mente es fácil...mírate, ni has tomado una clase de telepatía y ya llevamos al menos diez minutos conectados. Hay letrados que ni tardando meses logran siquiera establecer conexiones con otras mentes.
—Y por último...la doctora Agatha Kressler.— concluye Jack mientras la imagen de la doctora se proyecta en el aire. Su sonrisa se borra segundo a segundo, igual que antes. Pareciera que no deseara estar aquí.
Entiendo tu abrumación, fisgón. No voy a negarlo pero entenderás mucho más después del ritual.
Cuando bajo la mirada de costado, finalmente me encuentro con la de Iwin.
Lo juro.
Lo observo entre los demás letrados que fijan su mirada en el escenario. Estoy satisfecho. Asiento y vuelvo mi mirada al frente.
—Muy bien letrados, bienvenidos sean todos al ritual de iniciación.— Dice Agatha adelantándose y tomando el espacio que hasta entonces ocupaba Hoffgärd.— Aquí en el fuerte creemos en las virtudes, en los valores humanos, en desafiar nuestras capacidades y eso es lo que determinan nuestro fuerte a la hora de combatir nuestros miedos y proyectar nuestros escudos. Tienen que entender, esto no es magia ni poder sobrenatural... es energía psíquica, es capacidad ejercitada. Ahora si, sin más preámbulos, letrados, proseguiré con explicarles en que consisten las brigadas. Tenemos cuatro brigadas que corresponden al dominio de cada área del cerebro humano. Cada uno de ustedes, letrados en etapa cero, formarán parte de una de ellas y serán entrenados para dominar al cien por ciento el sector cerebral de la brigada a la cual pertenecen...
Las luces cambian nuevamente y la oscuridad pretende ocultar las tribunas. Con que eso somos al fin y al cabo, engranajes en un sistema desconocido. Se me ponen los pelos de punta al elegir el lado de la mayor desconfianza.
—Comenzando por el lóbulo parietal, su virtud es la fuerza. Su habilidad es la de tener la capacidad de realizar campos de fuerza, telequinesis y con el tiempo, y con la práctica, pueden adquirir el poder de teletransportación. Son los encargados de recibir las sensaciones del tacto, calor, frío, presión....y dolor. Tienen la capacidad de manipular objetos y coordinar el balance en el resto del equipo. A menudo son llamados 'los sensibles' y 'competitivos' pero en verdad son los valientes de las brigadas. Reconocibles por su llamativo color amarillo, al este del campo...Briefell.
De inmediato la zona Este se ilumina de color amarillo y festejos. Acentúo la mirada: Los trajes de los letrados de dicha zona poseen dos líneas que les cruzan el tórax con luz vibrante de dicho color. Entre ellos, la encuentro con la misma coleta alta pero esta vez con una media sonrisa aunque siempre frunciendo el ceño. Aparentemente Ray es Birefell.
—Su virtud es la protección, su habilidad es la de ser médiums comunicativos y hasta previsualizadores de tipo teletransportivo mental. Al igual que el lóbulo occipital que dominan; interpretan, visualizan, descifran. Pueden ser llamados soberbios y hasta sin sentido del humor pero eso solo se debe a su instinto protector y aguda visualización de metas. Por eso pueden desarrollar la fotoquínesis y la umbraquínesis. Actúan principalmente en la visión, son los ojos de las brigadas. Por eso y por su natural talento de equilibrio propio y para con su equipo son los guías...al lado sur del campo, de rojo imperdonable: Gythor.
De la misma forma, la zona sur se enciende de festejos y rojo. Pienso en Enoch, quien está allí infundido en rojo, demasiado enojado como para permitirse un momento de entusiasmo. No creo que su actitud devenga de una selección, no, pero aún sin conocer el resto no creo que haya lugar más idóneo para alguien como él. Ya entiendo de dónde viene la compatibilidad entre Enoch y Ray.
—Les dicen los depresivos por pasar tanto tiempo en el pasado pero su coeficiente intelectual es del más alto de la brigada. Su habilidad es la telepatía por imagen y sonido que como consecuencia da la sonoquínesis y el mentalismo. Su función es la de la percepción y reconocimiento de estímulos auditivos relacionados a la memoria. Los leales de la brigada cuya virtud es el entendimiento. Al lado oeste, divisibles por su inconfundible color verde...Remembrant.
No despego la mirada de dónde gracias a la ausencia de luz, calculo está Iwin. De pronto, se enciende de verde. Observa desafiante el frente, recibiendo las palmas de sus compañeros. Aún así y en medio de tanta gloria, traga saliva.
—Y por último y no por eso los menos importantes...su virtud es el mando y su habilidad es la planificación, coordinación y control de todas las demás conductas. Así como el lóbulo frontal del cerebro, procesan el pensamiento consciente, resuelven los problemas, o los crean. Tienen el poder de manipulación mental que con el tiempo genera la habilidad de ilusionismo en los demás y en el peor de los casos, en sí mismos. Controlan los impulsos, el juicio, la memoria funcional, las funciones motoras. Los justos y espontáneos pero también conocidos por ser los orgullosos de las brigadas, son asimismo, los líderes. Los justicieros. Siempre al frente, al lado Norte del campo, los podrán reconocer por su notable color azul...Leaden.
Ya sin saber a dónde mirar trato de asimilar lo que está sucediendo, porque de ratos lo olvido.
—¡Atrás! ¡Arriba nuestro, miren!— Grita una de las niñas de mi fila.
Como todos los demás, me doy la vuelta. Trajes negros, pero ahora, con luz azul brillante.
Corroboro mi ansiedad al observar los trajes de nuestra división, tocando las líneas transparentes de mi tórax que pronto serán ocupadas por un neón definitorio. ¿En cuál de estas me alistarán? ¿Briefell, Gythor, Remembrant o Leaden? ¿Realmente me importa?
—Se avecinan tiempos desafiantes, no voy a mentirles.— Comenta Hoffgärd acercándose a Kressler.— Pero nosotros prometimos devolverle la humanidad a nuestra era. Una humanidad que aprenda de nuestra historia y no se hunda a partir de ella. Una humanidad que desafíe sus propios límites para combatir todo aquello que no le permite avanzar. Queridos letrados, ustedes están ayudando a que eso ocurra; están re-escribiendo nuestra historia.
Observo como la sonrisa de Agatha Kressler vuelve a borrarse y noto la manera en la que su cintura evita el tacto del doctor desde la proyección amplificada.
Los gritos y la felicidad me abrumen en un sin fin de extrañeza. ¿Cuál es el límite de nuestra libertad si somos apenas cuatro funciones? cuatro colores, cuatro grupos.
Las tribunas encendidas con entusiasmo, un deseo implantado y ajeno a lo que ellos realmente son. Festejan, tienen algo por qué luchar, un motivo más grande que ellos mismos y a pesar de querer hacernos creer que todo se debe a motivos puramente científicos y salvar a la humanidad, no termino de creérmelo. Después de todo, esto parece una arena y nuestras vidas, un puto juego.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top