Parte Cinco

Fue un leve sonido lo que le despertó, las voces distantes de una mujeres que hablaban de limpiar primero la sala y luego la habitación. Bakugou abrió los ojos lentamente y lo primero que se encontró fue con el rostro de Kirishima, demasiado cerca suyo y con el cabello pelirrojo cayendo de una forma muy linda por su rostro. Luego, cuando se movió hacia atrás, escucho el suave quejido de Todoroki, que lo sostenía entre sus brazos sin querer que se moviera.

Todo lo que pasó anoche se repitió en su cabeza, en camara lenta, en cámara rápida, en HD como si se tratara de una película pornografica de alto presupuesto. Quería gritar pero ahora tenía un maldito asunto más importante que atender.

¡El servicio de limpieza no podía entrar en su maldita habitación y ver el desastre que había en ella!

El cenizo se movió bruscamente intentando pararse pero apenas pudo moverse por el horrible dolor en su trasero y con lo poco que hizo, ya había despertado a los otros dos chicos.

Bueno, despertó más a Eijirou que a Shoto que seguía con los ojos cerrados y solo se había volteado en la cama con los brazos extendidos.

— ¿Blasty...? ¿Sucede algo?

Katsuki se sonrojo, se cubrió el cuerpo pese a que era inútil cuando ambos chicos le habían visto todo y solo murmuró que alguien tenía que ir a decirle a las mujeres de la limpieza que no hacía falta que entraran en su habitación. El pelirrojo rápidamente comprendió porqué, se salió de la cama, agarro su ropa y se fue de la habitación.

A los pocos segundos escucho las voces de las mujeres y las de él. Parecía que todo salió bien.

El cenizo estaba por relajarse cuando sintió la mano del bicolor en su espalda, haciendo pequeños círculos y se giro a verlo, parecía que seguía dormido todavía.

—Buenos días, Bakugou —le saludo — ¿Te encuentras bien? Anoche...

El bicolor se sonrojo sin terminar lo que estaba diciendo. El de quirk explosivo apretó más las sábana contra su pecho. En ese momento el de dientes puntiagudos paso por la puerta, al verlos a ambos en la cama y sus expresiones también se sonrojo, pero después se sentó en el colchón y acaricio el rostro del cenizo con ternura.

Y él no lo apartó. Tampoco al de quirk dual cuando le abrazo y apoyo la cabeza en su hombro.

— ¿Te duele algo, Blasty? Te limpiamos cuando te quedaste dormido —menciono el de quirk de endurecimiento —Para evitar que te doliera el estómago.

—E-Estoy bien —tartamudeó el de quirk explosivo.

—Que bueno —sonrió el pelirrojo para después tocar la oreja derecha del cenizo que se había puesto roja —Blasty, ¿puedo preguntarte algo?

El cenizo pensó que era un momento extraño para hacer preguntas pero debía estar relacionado con lo que acababan de hacer. Porque lo que habían hecho pasaba los límites de la amistad y si el de dientes puntiagudos quería hacerle una pregunta, solo le quedaba responderle.

Aunque si le llegaba a preguntar porqué mierda accedió a hacer un trío con ellos no tenía ninguna respuesta.

— ¿No quieres tener una pareja?

Bakugou sintió el corazón acelerado con esa pregunta. Quiso decir que sí, estaba interesado en tener una pareja, alguien con quién estar pero tuvo el presentimiento de que sería una mala idea decir eso ahora. Por lo que negó con la cabeza.

—Entonces, ¿solo quieres tener sexo?

Eso sonaba muy vulgar pero no del todo incorrecto. Sí, quería tener sexo. Pero no por eso quería hacerlo con cualquiera que se le cruzará por el camino e internamente estaba bastante feliz de haber tenido de compañeros a Kirishima y a Todoroki en quienes confiaba como para dejar que lo vieran en un estado tan vulnerable como en el que estuvo anoche.

—Blasty —le agarro la mandíbula para que le mirara a los ojos y le pasó el dedo pulgar por el labio inferior —Contesta.

El cenizo sintió un escalofrío ante la mirada del pelirrojo y por la manera en que el de quirk dual paso sus manos por sus abdominales, como si quisiera ir más allá para tocar su maldito pene que se había puesto duro por distintos factores.

Su mente y sentidos se nublaron por un momento. Solo quería que ambos lo tocaran más.

—Si se trata de sexo, ¿por qué no estamos los tres juntos hasta que terminen tus vacaciones? —le ofreció el pelirrojo en lo que colocaba su mano libre en su cuello dándole un apretón pequeño —Te podemos satisfacer sin problema. Te lo haríamos todo el día y toda la noche.

—K-Kirishima —murmuró aturdido el de quirk explosivo.

—Tendrías mucho placer, Bakugou —susurro el de quirk dual en su oído —Te haríamos sentir muy bien.

—Todoroki...—susurro el cenizo.

— ¿Entonces...

—...cuál es tu respuesta?

Los dos chicos hablaron a la vez pero por lo que estaban haciendo parecían saber que su respuesta sería un sí. Porque Shoto ya lo estaba masturbando y las manos de Eijirou habían pasado de estar en su cuello a sus pezones, tirando con fuerza de los mismos.

Katsuki sabía que la respuesta debía ser no. Porque no estaba bien. Eran amigos, ¿no? Y si dejaban lo de anoche como una pequeña aventura entre amigos, su relación no se vería afectada. Si lo llevaban más lejos y dejaba que durará, entonces el daño podría ser mayor.

Pero su cuerpo empezó a inclinarse hacia los labios del pelirrojo y sus manos fueron hasta la erección del bicolor. Cuando se beso con Kirishima y empezó a masturbar a Todoroki, ellos supieron cual era su respuesta pese a que no pudiera decirla en voz alta.

Bakugou había aceptado.

Entonces ya no tenían más razones para contenerse con él. Por lo que el pelirrojo le agarro de la cara para besarlo bien y el de quirk dual lo masturbo con fuerza y frotó con sus dedos su entrada. El cenizo gimió entre los besos y cuando eyaculó, pudo sentir que el bicolor hizo lo mismo en su mano.

Pero faltaba el pelirrojo. Así que lo empujó contra el colchón y le bajó el pantalón que se había puesto para empezar a lamer su duro erección.

—Oh, mierda, Bakugou. Eres el mejor —le acaricio el cabello cenizo y tiró de unos cuantos mechones para que alzara la cabeza y pudiera ver la expresión que tenía con su pene el boca —Abre bien la boca, ah, buen chico. Eres tan jodidamente lindo.

Nunca lo había escuchado hablar así.

Era exitante, aquel tono ronco y demandante. Más cuando el pelirrojo le miraba como si fuera una especie de postre servido solamente para él. Quería enfocarse en darle una buena mamada cuando sintió un dedo que entraba en su entrada y luego la lengua del bicolor.

— ¡T-Todoroki! —exclamo aturdido y sorprendido, mirando hacia atrás al bicolor que tenía ambas manos en su trasero y lo lamía.

—Ayer Kirishima te probó —se excusó el de quirk dual —Hoy me toca a mí Bakugou.

— ¡N-No tienen que hacer esa mierda! ¡Au!

El cenizo dejo de mirar hacia atrás para mirar hacia Eijirou que le pasó el pene por su boca y lo golpeó. Mierda, eso no debería sentirse tan exitante pero lo fue.

—Deja que Todoroki lo haga, Blasty. Te gustará —le aseguro con una sonrisa —Ahora, sigue chupando, lo estabas haciendo bastante bien.

El de quirk explosivo sintió un cosquilleo en el vientre ante ese tono dominante implementado por el pelirrojo y obedeció, abrió de nuevo la boca y empezó a chuparle la punta en lo que sentía como la lengua del bicolor se metía en su trasero. Le lamió de arriba a abajo y sintió leves tirones en su cabello, junto con empujones de parte de las caderas del pelirrojo.

Cuando Eijirou acabo, el cenizo tosió y escupió en sus manos el semen del pelirrojo, avergonzado y tímido. Shoto había dejado en paz su trasero y le acariciaba la espalda con ternura.

Katsuki no sabía bien cómo actuar hasta que su estómago soltó un pequeño gruñido y los otros dos chicos se rieron.

—Parece que es hora del desayuno —se rió el de dientes puntiagudos —Ve al baño primero, Blasty. Todoroki y yo podemos encargarnos de la habitación.

El de quirk explosivo asintió, se puso de pie y agradeció a algún milagro del cielo que pudiera moverse correctamente, aunque aún sentía sus piernas rígidas y algo temblorosas, aparte del dolor en su trasero y cintura. Una vez salió de la habitación, Kirishima y Todoroki se vieron mutuamente.

—Dime que no es un maldito sueño —pidió el bicolor.

—Creeme que fue lo primero que intente confirmar cuando me desperté —le mosto el dorso de su mano que tenía varios pellizcos y marcas de dientes —Pero esto me dolió, por lo que no es un sueño.

—Mierda —se pasó una mano por el cabello el más alto.

—Sí, mierda —soltó un suspiro el de dientes puntiagudos — ¿Estará bien todo esto, Todoroki?

—No —contestó el de quirk dual.

— ¿Piensas que fue mala mi idea? —cuestiono el de ojos rojos.

—...No, solo que ahora no sé cómo actuar con Bakugou —confesó el bicolor.

—Yo tampoco. Creo que por eso me comporté antes como siempre quise con él. Es que...es tan lindo y sexi que dan ganas de molestarlo. Y aparte es obediente cuando se siente bien —se explicó el de ojos rojos —Es difícil contenerse.

—Te comprendo —asintió el bicolor.

—Tal vez debas hacer lo mismo. Ya no hay marcha atrás con esto —aconsejo el de dientes puntiagudos poniéndose de pie —Oh, por cierto, ¿te molesta que te toque mientras tenemos sexo? O que te bese. Lo que digas que no te gusta no lo haré, lo prometo.

—Los besos están bien. Y...quizás otras cosas también, Kirishima —admitió sonrojado el bicolor y el de dientes puntiagudos se rió un poco —Pero no quiero que halla penetración.

—Vale, lo tengo. Por mi parte es lo mismo. Mientras no toques mi trasero o me pidas que toque el tuyo, todo bien —sonrió el pelirrojo —A Blasty parece exitarlo cuando estamos los dos juntos. Va a ser divertido molestarlo con eso.

—...Tienes un lado inesperadamente sádico —murmuró el bicolor y luego agrego —Y Bakugou tiene un poco de masoquista.

—Es verdad, recién ahora me dí cuenta de lo mismo. Definitivamente hay que hacerle sentir bien con eso.

Desde el baño, Bakugou no tenía forma de saber lo que esos dos chicos planeaban en su contra.

Por lo que no podía estar preparado.

---

El cenizo agradeció a su yo pasado por haber guardado unos buzos grandes y largos. Porque tenía marcas que iban hasta su cuello que no quería que nadie viera y para colmo, cuando salió de su cabaña junto con el pelirrojo y el bicolor noto que ellos tenían marcas de arañazos por los hombros y la espalda. E incluso en los antebrazos.

¡Él no recordaba haber sido tan agresivo! Pero esas marcas eran un testimonio de que no fue un amante fácil de tratar y lo hacían sentirse avergonzado.

—Ya que Blasty no puede ir al mar, ¿buscamos algo más para hacer? —preguntó el pelirrojo ya que por las marcas el cenizo no se iría a nadar —Podríamos ir a algún centro comercial a ver una película.

—O a un parque —opinó el de quirk dual.

Ellos dos se llevan bastante bien, ¿no encuentran raro todo esto?

El de quirk explosivo no sabía ya qué mierda pensar de toda la situación. Se le hacía muy absurda pero más extraño era que las dos personas involucradas actuarán de un modo tan natural.

¡Y eso que se suponía que Todoroki era vírgen hasta ayer como él! ¡Ninguno debía tener ese nivel de experiencia como para andar por ahí tan cómodo en un trío!

Kirishima también le había sorprendido por lo calmado que estaba y lo bien que controlaba la situación cuando estaban en la cama. Cada vez que recordaba su tono de voz ronco para hablarle y la mirada que le daba a su cuerpo en lo que se metía en su interior, sentía un escalofrío de emoción.

Bakugou evito verlos a ambos y giro la cabeza por un momento por el lugar donde estaban comiendo, a lo lejos distinguió a Endveador que venía caminando hasta ellos. Estaba por avisarle al bicolor cuando escucho un ruido y se asustó porque la mesa se movió. Cuando busco al bicolor no lo encontró pero el de quirk de endurecimiento le dió unos golpecitos en el hombro y señalo debajo de la mesa.

El mantel negro de la mesa rozaba el piso, por lo que el de quirk explosivo tuvo que moverlo un poco para ver que el bicolor se había escondido ahí debajo.

— ¿Qué mierda haces? —quiso saber.

—No estamos en edad de jugar a las escondidas, Todoroki —agrego divertido el de dientes puntiagudos.

—No quiero que mi viejo pregunte porqué no llegué a dormir a la cabaña —confesó el de quirk dual —Se pondrá fastidioso si no le doy la explicación que quiere. Además, olvide dónde deje estacionado el auto.

—Serás tonto —se tapó la boca el de quirk explosivo para que no se notará que tenía ganas de reírse —Tendríamos que salir a buscarlo...¿q-qué haces?

Eijirou bajo la cabeza solo para ver que Shoto había puesto sus manos en las piernas del cenizo que, de inmediato, intento cerrarlas. Teniendo una idea de qué quería hacer sonrió un poco divertido y se acercó más al cenizo, pasando un brazo por sus hombros y con la otra mano que le quedaba libre acaricio el cabello del bicolor.

Katsuki pensó que eso era lindo, a el bicolor parecían gustarle las caricias, como si fuera una especie de cachorrito y eso le llevo a olvidar que estaba en peligro. El de quirk dual se aprovechó de que bajo la guardia y metió las manos dentro de su bermuda.

El pelirrojo cubrió la boca del cenizo para que no gritara y le susurro en el oído que Enji seguía dando vueltas, bastante cerca de donde estaban, si los veía y preguntaba por su hijo...estaría en una posición complicada.

—Así que, solo quédate callado y disfruta Blasty —le dijo el pelirrojo en lo que besaba su cuello —Intenta no moverte demasiado.

¡Par de locos pervertidos!

Bakugou gruño cuando las manos de Todoroki tocaron su miembro ya erecto y se llevó la punta del mismo a la boca, ¡estaban en la maldita área de comida! ¡al aire libre! ¡y él se estaba muriendo de vergüenza pero también se sentía muy exitado!

Oh, mierda, entonces era tan pervertido como esos dos. No quería que nadie viera su cara, por lo que se giro hacia el pelirrojo para esconderse entre su hombro y su cuello, sintió como lo abrazaba, como metía su mano debajo de su ropa para acariciarlo.

Kirishima sonrió al tener al más bajo tan pegado a su cuerpo y le susurro al de quirk dual que tuviera cuidado, el cenizo podía enojarse mucho después de esto. Le acaricio el cabello y le dijo que fuera muy lento. Al punto de volverlo loco.

El bicolor siguió las indicaciones, dió lamidas pequeñas y succionó solo la punta del miembro del cenizo, sin llevarlo por completo dentro de su boca. Estaba acariciando también sus bolas que se encontraban muy duras y pasaba sus manos por sus suaves muslos. Cuando él estaba por acabar, se separaba de su pene y volvía el proceso más lento.

El de quirk explosivo paso de estar avergonzado a frustrado cuando no le dejaban acabar. Quería agarrar la cabeza de Shoto para que tragara bien su pene y acabar en su maldita boca. Pero Eijirou le había agarrado las manos, con fuerza, para dejarlas detrás de su espalda. Katsuki esperaba que no estuvieran dando una imagen tan extraña, su mesa se encontraba muy apartada de las demas y todavía era temprano, por lo que no había muchos huéspedes.

Pero si alguien los veía...

—Tranquilo, Blasty —beso su frente —No hay nadie. Solo piensa en la boca de Todoroki, ¿no se siente bien?

—S-Sí —tartamudeó el cenizo —Se s-siente bien. P-Pero vayamos a la c-cabaña, n-no acá.

—Claro, iremos a la cabaña —asintió el de dientes puntiagudos —Cuando termines.

—U-Uhh —balbuceo el de ojos rojos —P-Pero...

Kirishima le dió un pequeño jalón en el cabello a Todoroki para que se encargará de hacer terminar al cenizo y entonces adelantó el ritmo. Bakugou sintió que los ojos se le ponían brillosos y cuando estaba por acabar, se apoyo contra la mesa para evitar que se escucharán sus gemidos.

—L-Los odio a los dos —se quejo el de quirk explosivo cuando recupero el aliento —M-Mierda, están dementes.

El pelirrojo no negó lo que dijo el cenizo y luego de dar una mirada por el lugar, le aviso al de quirk dual que su padre se había ido. Entonces, Shoto salió de debajo de la mesa, limpiando los bordes de su boca lo que hizo que el de quirk explosivo se sonrojara.

—Jodidamente dementes —confirmó el cenizo.

—Pero lo disfrutaste, ¿no, Blasty? —se burlo el pelirrojo y el cenizo le dió un leve gruñido en respuesta.

—Me parece que sí.

Katsuki los miro mal a los dos y luego se paró de la mesa, no había terminado de desayunar pero ahora todo lo que quería era volver a la cabaña y tener sexo. Sin embargo, los chicos seguían sentados, por lo que les vió con un poco de confusión.

—No podemos pararnos ahora, Blasty —le informo el pelirrojo y señalo su entrepierna donde se podía ver un enorme bulto —Ve a la cabaña primero.

El cenizo asintió y se tapó la cara avergonzado por lo que acababa de ver. No se había dado cuenta que a Eijirou se le había parado mientras el bicolor le daba una mamada. Sus pasos se alejaron del área de comida a bastante velocidad y esperaba llegar a su cabaña cuánto antes pero, inesperadamente se encontró con Enji que lo detuvo a mitad de camino.

—Bakugou —lo llamo el héroe de fuego —Hawks me comentó que Shoto estaba contigo, ¿sabes dónde está?

—Lo ví en la playa —mintió el de ojos rojos —Debe seguir ahí.

—De acuerdo —asintió el mayor.

—Eh, Todo...—al ver a hombre fruncir el ceño, se corrigió y dijo —Shoto va a pasar la semana en mí cabaña.

—Oh, está bien. Hawks me había dicho lo mismo —aceptó el hombre — ¿Pasarán las vacaciones juntos?

—Sí, y con alguien más. Ayer salimos a beber pero dejamos el auto estacionado delante de un club —contó el de quirk explosivo —No queríamos conducir estando ebrios.

—Me parece bien, ¿te acuerdas donde quedó el auto?

El cenizo le pasó la dirección. Enji se fue satisfecho y él se sintió feliz de haberle evitado al menor de los Todoroki la incomodidad de hablar con su padre.

Se volvió a dirigir hasta su cabaña cuando pensó que llamó al bicolor por su nombre, ¿y si lo hacía otra vez? También podría usarlo con Kirishima. Sería bueno ser él quién los molestará a los dos cuando estuvieran en la cama, ¡necesitaba ganar alguna ventaja o harían lo que quisieran con él por una semana!

Bakugou se armó de determinación en lo que entraba en su cabaña y se dirigía a la habitación que estaba ordenada. Busco la botella de lubricante que dejaron en una mesita al lado de la cama y cerró las cortinas, dejando el cuarto un poco oscuro pero aún sumamente visible. Por si acaso, antes de desnudarse salió afuera y dejo el cartel de "no molestar" para el servicio de limpieza.

Tuvo el pequeño presentimiento que ese cartel estaría puesto hasta que se terminarán sus vacaciones.

Cuando volvió a su habitación, se quitó la ropa y se acostó en la cama, colocó en sus manos el lubricante y empezó a prepararse. Su ano estaba flojo en la parte exterior pero por dentro seguía muy apretado y mover sus dedos era doloroso pero no insoportable. Y pensó que sus dedos eran más delgados que los de los otros chicos y que quizás por eso no le dolía como ayer. Se abrió de piernas para ver que tan adentro iban sus dedos y se sintió exitado al ver que podía meterlos hasta sus nudillos, pero algo empezó a sentirse como insuficiente. Quería más, quería algo más grande y caliente que lo llenará por completo.

Un pequeño gemido se le escapó cuando metió un tercer dedo pero no fue suficiente. Iba a usar un poco más de lubricante para relajarse cuando escucho la puerta de la cabaña abriéndose y escucho los pasos acercándose hasta su puerta. Pese a que sabía lo que pasaría, su respiración se agito y cuando ambos chicos abrieron la puerta, se lo encontraron en la cama dando un buen espectáculo, con las piernas abiertas y sus dedos metidos dentro de su trasero.

Oh, fue divertido. Más cuando Todoroki casi se prende fuego y el pelirrojo activo su quirk, sin querer, haciendo que la piel de su entrecejo se volviera dura. El cenizo soltó una leve risa y no cerró las piernas, estaba dentro de la habitación y solo eran ellos tres, no se sentía tan avergonzado ahora.

—Tardaban mucho —dijo aunque no era verdad, debieron haber pasado menos de siete minutos desde que se separaron —Me fuí preparando.

—Sí, eso podemos verlo Blasty —tragó saliva el de dientes puntiagudos que no podía separar sus ojos de ese trasero y piernas del más bajo — ¿Ya estás listo?

—Uhm, tal vez —ladeó la cabeza y metió más sus dedos en su ano, viendo como las expresiones de los chicos se volvían más oscuras —A-Ah, uhm, ¿no van a quitarse la ropa, Shoto, Eijirou?

Katsuki esperaba que los chicos se mostraran avergonzados o al menos un poco nerviosos pero todo lo que provocó fue que le mirarán como dos pares de bestias.

El cenizo sintió un hormigueo. Los chicos se quitaron la ropa lentamente, dejando que cayera al suelo y luego se fueron subiendo a la cama.

Eijirou sonrió y reemplazó la mano del cenizo con la suya, metió sus dedos de una manera brusca provocando que soltará un pequeño grito.

— ¡A-Ah!

Shoto se puso detrás suyo en la cama y agarro sus pectorales con ambas manos para apretarlos y amasarlos, también tiró fuertemente de sus pezones.

— ¡D-Duele!

— ¿Sabes, Blasty? Antes de venir pensaba hacerte las cosas fáciles, porque podrías estar cansado y dolido de anoche —dijo el pelirrojo en lo que movió sus dedos en forma de tijera en el interior del cenizo para abrirlo rápidamente —Pero nos has dado una vista muy buena y has dicho nuestros nombres...así que mí nivel de autocontrol está bastante afectado. Todoroki, ¿puedo ir primero?

El de quirk dual asintió, su nivel de autocontrol estaba mucho peor que el suyo. El pelirrojo le dió un beso en agradecimiento lo que hizo que el cenizo le apretara los dedos que tenía dentro de su ano y que se pusiera rojo cuando el beso que estaba viendo tan de cerca subía de volumen.

Kirishima no pensaba hacer demasiado porque no sabía si el de quirk dual se sentiría disgustado pero parecía gustarle el beso. Y Bakugou le estaba apretando mucho los dedos, por lo que debería estar disfrutando del espectáculo. Cuando terminó de besar al bicolor, vió la expresión del cenizo, estaba sonrojado y se veía muy bonito. Su ano estaba dilatado pero todavía le faltaba como para recibir su pene que estaba más duro que una roca.

Aún así, se puso entre sus piernas, agarro su cintura y lo embistió con violencia.

— ¡Ah! —se agarro a los hombros del pelirrojo pero recordó los rasguños de antes y los soltó.

El de dientes puntiagudos noto eso y miro hacia Todoroki, ya que él también había visto que el cenizo lo abrazo primero pero luego quitó sus manos. A los dos le pareció extraño. Más que nada al pelirrojo porque estaba siendo bastante intenso al embestir al más bajo.

— ¡Auh! ¡D-Despacio, lento! ¡Ei...! ¡Ah!

Si supiera que lo que hace que no me pueda controlar es que está diciendo mi nombre.

Mientras más veces saliera Ei o Eijirou de la boca del cenizo, las embestidas se volvieran más fuertes y duras. Pero cuando el pelirrojo se acostumbró un poco a que le dijera por el nombre, se detuvo y empezó a hacerlo más lento.

Katsuki agradeció que los movimientos se volviera más lentos y fue capaz de notar que Shoto le estaba sosteniendo las manos. Al ver que había rastros de sangre ahora en las manos del bicolor, se las quito y se abrazo a sí mismo para evitar lastimar a alguno de los dos.

Entonces Eijirou sí se detuvo.

— ¿Hay algo mal, Todoroki? —le preguntó a él ya que parecía saber qué estaba pasando con su querido amor.

—Creo que Bakugou no quiere dejar marcas como anoche —dijo el bicolor en lo que le mostraba al pelirrojo las marcas de rasguños que tenía en las manos —Pero si se aprieta demasiado las manos le van a quedar marcas de sus uñas a él.

—Oh, así que era por eso —sonrió conmovido el pelirrojo —Blasty, no duele que hagas eso. En realidad, ni me di cuenta que tenía rasguños tuyos hasta que me ví en el espejo está mañana.

—Y tú tienes más marcas que nosotros —señalo el de quirk dual en lo que tocaba el pecho del cenizo dónde quedaban muchas marcas de mordidas y chupones de anoche.

—Eres que el más perjudicado sale —se rió el de dientes puntiagudos —Así que vamos, pon tus brazos en mis hombros.

—P-Pero...¡ah!

Una embestida que no espero, que mando el pene del pelirrojo demasiado adentro de sus entrañas junto con tirones de sus pezones por parte del bicolor, hicieron que el cenizo se sintiera atontado e intimidado. Y sumamente exitado.

—Que lo hagas —demandó el pelirrojo —O te voy a coger más fuerte todavía.

Por primera en su vida Bakugou no fue contra la orden de alguien más, paso sus brazos por los hombros de Kirishima y volvió a ser penetrado pero de un modo más suave y hasta amable. Sus manos empezaron a rasguñar la espalda del pelirrojo hasta que lo sintió acabando en su interior.

Entonces fue el turno de Todoroki que se acostó para atrás en la cama y se lo subió sobre su regazo, haciendo que estuviera de espaldas a él y de frente al pelirrojo.

—Shoto, espera, está posición es...—quería bajarse porque sentía que no tenía equilibrio y podía caerse — ¡A-Ah, carajo, Sho! ¡Shoto!

El de quirk dual perdió el control apenas el cenizo soltó su nombre, le agarro de las caderas y empezó a llevar un ritmo rápido, haciendo que el sonido de sus carnes chocando se volviera muy lascivo, aparte de que el semen en el interior del cenizo y el lubricante empezaron a hacer más resbalosos sus muslos y trasero.

Mientras tanto, Eijirou se puso a lamer los pezones del cenizo y masturbarlo en lo que disfrutaba de cerca los gemidos de gozo que estaba soltando. Cuando el bicolor le dió en cierto punto que le dejo con una sensación de hormigueo, el cenizo apretó las piernas para que parara, pero el de dientes puntiagudos se las separó y le dió una nalgada por no estarse quieto.

Sin saber si fue por el golpe o por la sobre estimulación, termino eyaculando de golpe y sintiéndose muy débil se apoyo en el pecho del pelirrojo. Shoto se salió de adentro suyo, con cuidado y le dejo un beso en el hombro.

Estuvieron abrazados unos pocos minutos. Hasta que Katsuki reclamo que quería un baño y que no volvieran a hacer nada si no tenían condones, porque las sabanas eran un desastre y la sola idea de tener que hacer que el servicio de limpieza del hotel se hiciera cargo de eso le hacía querer morirse.

—Vale, iremos a comprar condones y llevaremos las sábanas a una lavandería —dijo el de dientes puntiagudos pasando una mano por el cabello del cenizo que hacía pucheros por las sábanas —E iré a mi hotel por mis cosas para quedarme aquí. Supongo que ya es estúpido irme cuando pasaré todas las noches acá dentro.

El cenizo dió un asentimiento satisfecho con eso. Y luego, miro hacia el bicolor y le agarro de la mano. Él le miro con un poco de confusión.

—Le dije a tu viejo que te ibas a quedar en mi cabaña y lo del maldito auto —aviso el de quirk explosivo —Así que, eh, tal vez me pase de la raya...

—Buscaré mis cosas también entonces, ¿podemos dormir los tres en la misma cama, no?

—Si es que la usamos para dormir en algún momento —comentó divertido el de dientes puntiagudos.

Bakugou se sonrojo pero estuvo contento que los dos se fueran a quedar en su cabaña y ya que tenían que salir a comprar, les dijo que esa noche quería cocinar y no ir al área de comida del complejo, por lo que les pidió que hicieran las compras para la cena de esa noche.

Kirishima y Todoroki estuvieron más que satisfechos de cumplir con sus órdenes.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top