Estar con Logan mientras hacíamos nuestro trabajo me había llevado a conocerlo, era un chico gracioso cuando no estaba molestando a alguien y cuando salíamos de clases se ofrecía para llevarme. Como llevábamos algunas semanas juntas descubrí algunas cosas típicas como que su color favorito era el rojo, prefería comer sushi y que era alérgico a las abejas. Algunas veces se ausentaba y me enviaba algún mensaje diciendo que no podríamos vernos para seguir con el trabajo. Era bueno en lo que hacía y se esforzaba mucho para que saliera perfecto. La mayoría del tiempo nos reuníamos en mi casa o en la biblioteca pero nunca me llevo a la suya y eso me intrigaba un poco.

Como era fin de semana habíamos decidido que ese día seria libre, no tenía mucho que hacer así que solo me dedique a mirar el techo. Mi padre llego y se sentó a mi lado.

―Hace tiempo no hablamos.

―Hemos estado ocupados.

―Solíamos hablar mucho antes.

―Antes no tenía tantas responsabilidades.

―¿Sigues molesto por la mudanza?

Lo pensé un segundo y no, no estaba molesto, sonreí un poco al pensar en los pocos amigos que había hecho y en Logan.

―Estas sonriendo.

―No estoy molesto, extraño a mamá y extraño ir a visitarla pero tengo amigos.

―¿Quiénes son esos amigos?

―Hay dos chicos llamados Derek y Mark, aunque no me prestan demasiada atención, están muy ocupados entre ellos, una chica llamada Amanda y un chico llamado Víctor, y bueno también esta Logan.

―¿Logan?

―No es tan mal chico, creo que solo quiere llamar la atención y por eso causa problemas.

―Ten cuidado con ese chico.

Iba a contestarle pero mi celular comenzó a sonar, lo tome y vi una llamada de Logan.

―Hola...

―Tienes 5 minutos para alistarte.

―¿Qué?

―Corre que ya casi llego a tu casa, vamos a salir.

―Logan...―Me había colgado y comencé a buscar mis zapatos y una camisa más limpia.

―¿Vas a salir?

―Eso parece.

―No me has...―Escuchamos el ruido de una moto y vi que estaba frente a mi casa, llevaba un casco extra.

―¿Puedo?

―Bien...

Salí corriendo con lo indispensable, Arthur estaba en la puerta y cuando la abrió pase a su lado, Logan me tendió el casco y me lo coloque a como pude, me subí y nos marchamos a quien sabe dónde.

🌞🌞🌞

Llegamos al centro comercial donde comenzamos pasar por los centros de comida, no me decía nada solo se dedicaba a caminar, se detuvo frente a uno y pidió una hamburguesa, papas fritas y una gran bebida.

―¿Una hamburguesa?

―Soy vegetariano. ―Logan me miro como si estuviera loco.

―Pide que le quiten la carne.

―No gracias...

―Bueno ya vamos a buscarte una ensalada deja que pague.

Llevando su bandeja caminamos hasta otro puesto donde pude pedir algo de comer, tampoco es que hubiera variedad, nos sentamos y Logan no dejaba de ver lo que había pedido.

―Escogí mal para tener una cita. ―Murmuro.

―¿Disculpa?

―Nada conejito, come tus matas.

―Y tú come a tu vaca.

―¿No te molesta que coma carne?

―¿Por qué debería? Mi padre adora la carne, es mi elección no comer carne, los que intentan imponer su dieta a otros son idiotas, además no soy completamente vegetariano puedo comer productos lácteos.

―Eres raro me agradas.

―No quisiera saber cómo serias si no te agradara.

―No quieres saberlo créeme.

―¿Por qué eres tan idiota?

―Estoy enojado con la vida fin.

No quiso decirme más sobre eso, después de comer en algo que era parecido a un silencio incomodo se levantó y comenzó a caminar, apenas podía seguirle el paso.

―Si esto es una cita es muy rara y además ¿Por qué tendrías una cita conmigo? Apenas me conoces.

―Bien...―Se detuvo y tomo mi mano para que caminara a su lado.

―Va-vamos suelta mi mano.

―No, si dices que es una cita te daré la mano.

―Yo no lo dije, fuiste tú.

―Entonces si esto es una cita puedo tacharlo de mi lista de cosas por hacer para este año.

―¿Lista?

―Salir con un chico guapo listo.

Logan debía estar loco, creer que esto era una cita y también decirme directamente chico guapo. Soy guapo lo sé pero es raro que me lo digan gracias a mi timidez.

Después de eso me arrastro por todo el centro comercial, por algunas tiendas, en una sala de juegos, también fuimos al cine donde vimos una película de acción que quería ver, cuando nos deteníamos para sentarnos a hablar hablábamos de cosas sin importancia como el instituto, los amigos, sus peleas con la mitad del instituto, cuando una chica del grupo de animadoras lo abofeteo por darle una nalgada delante de la cafetería. Ese día simplemente se levantó de su lugar de la cafetería y se acercó a la chica más guapa de la mesa donde se sentaban las animadoras, intercambiaron unas cuantas palabras y cuando ella se dio la vuelta, aparentemente ignorándolo, le dio una nalgada y ella se volvió furiosa, después escuchamos el sonido de un golpe y él tenía su cabeza volteada, desde eso ella lo odia y cada vez que puede lo trata de matar con su mirada y más siendo compañeros de clase. Comenzó a reírse porque se daba cuenta de sus miradas y sabía que ella lo deseaba varios metros bajo tierra. Al ver la hora que era me di cuenta que era tarde, pronto tendría que irme ya que el sol se iba a ocultar pronto.

―Logan ya es un poco tarde creo que...

―No, no, todavía es muy temprano y quiero ir a un lugar.

―¿Dónde quieres ir?

―Solo sígueme.

Cuando fuimos a la moto empezó a buscar algo en su celular y después lo coloco en una porta celular, vi que había puesto el GPS.

Después de algunos minutos en carretera el cielo comenzó a volverse oscuro, nos íbamos adentrando en la montaña y cuando llegamos a nuestro destino, vi las estrellas en el cielo. Me di cuenta que estaba en un mirador, pude ver como la ciudad se iba iluminando gracias a la luz artificial, nos bajamos de la moto y nos acercamos a la baranda a admirar el paisaje, también la vista de las estrellas era hermosa nunca había visto algo tan hermoso. Estuvimos en silencio durante unos minutos antes de que se pusiera a hablar.

―Cuando era niño me encantaba correr pero después la lesión no pude volver a hacer lo que me gustaba, sabía hacer gimnasia y competí en algunas carreras pero eso quedo en el pasado ¿Cómo es que de pronto algo puede arruinar tu vida? Me gustaría volver a ese tiempo pero ya no se puede. Conservo los trofeos pero no me gusta verlo, quisiera meterlos en una caja donde se quedaran para siempre, los dejo fuera porque a mi padre le gusta verlos y mi hermana alardea con sus amigas sobre eso, creen que soy guapo y genial pero solo tienen 10 años no les prestaría atención de ningún tipo, además de que mi madre sabe que me van los chicos, no sé cómo decirle a mi padre que me gustan los hombres. Tal vez no quiero que me vea diferente como el día que descubrimos que jamás podría volver a competir, su rostro lleno de lastima. Intentamos buscar opciones pero no las hay.

―Lamento escuchar eso.

―Jamás he tenido novio, he besado a algunos chicos pero solo eso. Quisiera poder tener un novio y que mi padre me vea como siempre, como en los días donde todos éramos felices.

―Jamás sabrás que piensa sino le dices Logan.

―¿Lo dices por tu padre?

―Mi padre y yo tuvimos nuestras charlas incomodas respecto a su sexualidad, mamá lo sabía y no le importaba, amaba a mi padre como para dejarse llevar con los comentarios. Uno de nuestros antiguos vecinos conocía ese lado de mi padre y pasaba hablando mal de mi familia e incluso en una fiesta organizada por todos los vecinos le sugirió a mi madre divorciarse de mi padre y que me tomara lejos para que no me pegara lo raro.

―¿Y tu mamá que hizo?

―Le lanzo el contenido de su baso en la cara y se marchó molesta a otro lado de la fiesta.

―¿Cuántos años tenías?

―8 años.

―¿La extrañas?

―Mucho, me enoje y no le hable a mi padre y tampoco lo ayude con la mudanza solo me di cuenta que nos íbamos cuando él y Arthur habían empacado las cosas para marcharnos.

―Te debió afectar mucho su perdida.

―Todavía lo hace, por eso no puedo verte a la cara y me cuesta hablar con desconocidos, por eso me pongo nervioso cuando me piden hablar en clase, antes era tímido pero tenía 11 años cuando ella se fue de repente, no nos dimos cuenta de su enfermedad hasta que fue tarde. Lo intentamos todo e incluso hornee galletas y las vendía a mis compañeros para tratar de ayudar, pensé que era buena idea y que así podría salvarla, mi tía que es hermana de mi madre me ayudo con las galletas y mamá se puso tan feliz cuando le lleve y le dije porque quería hacerlas, después de cada día contaba las monedas con ella y aunque no lo creas logre reunir 220 dólares ya que les gusto tanto que me pedían mucho, e incluso los profesores, mi papá fue al banco y cambio mis monedas por billetes y lo guardábamos en una caja de madera. ―Me arre coste sobre mi brazo para que no me viera llorar. ―Después de su funeral papá se me acerco con la caja y me di cuenta que el dinero estaba intacto, mamá no quiso usarlo ya que sabía que el tratamiento sería inútil, su deseo era que yo me comprara algo con ese dinero. ―Me levante y mire a la ciudad, mirando cómo se movían las luces de la carretera de los autos que viajaban a toda velocidad.―Todavía conservo la caja con los 220 que reuní.

Para este punto no podía dejar de llorar, quería de vuelta a mi mamá pero ella se había ido a un lugar donde no la podría alcanzar. Trate de limpiar las lágrimas pero estas no dejaron de caer. Sentí la mano de Logan en mi hombro y el me dio la vuelta para plantarme un beso. Me sorprendí mucho al sentir el contacto de sus labios contra los míos, no pude responder y cuando se apartó miro hacia otro lado.

―L-lo siento es que no quería verte llorar y...

―No estoy molesto.

―¿No?

―También le oculto secretos a mi padre, también me gustan los chicos y sé que es idiota no decirle pero no quiero que recuerde lo que le decían sobre mal influenciarme.

―Te doy tú mismo consejo.

―Si tú le dices a tu padre yo le digo al mío.

―Es una promesa.―Levanto su meñique para hacer el juramento.

―Una promesa. ―Tome su meñique con él mío para sellar la promesa y él lo termino dándome un beso.

Terminé el capítulo en tiempo récord así que aquí tienen otro capítulo está semana💖
Dato interesante sobre la dieta de Oliver

Lactovegetarianismo es una dieta vegetariana que además de excluir la carne y el pescado, excluye los huevos, pero a diferencia de dietas más restrictivas como el veganismo, incluye productos lácteos —es decir leche y sus derivados, como el queso y la mantequilla— además de los alimentos vegetales como cereales, legumbres, setas, frutas, verduras, etc