El toma asiento en el sillón su mañana es calma, calma como pocas veces, en lo normal escucha el ruido de casa y a sus padres, usualmente los escucha hablar del trabajo y cosas como sus calificaciones.

Fuera de eso, el aprovechó la calma para responder una llamada muy animado.

- Oí Kudo! , ¿ qué es esta gran ocasión para que personalmente me llames? - dijo con un gran toque burlón -calla! Hattori solo necesito... Ya sabes una ayuda - tímida salió su voz.

Su risa fue estrepitosa pero no causó gracia a su amigo de la otra línea, de hecho, lo encabrono y solo hubo una risa sarcástica de el.

- jodete, no pediré más tu ayuda - le dijo tan molesto que no había un tono de broma ni la mínima pisca -oh! Pero Kudo, fue broma no te lo tomes a pecho. Hombre que mal rollo te traes -

Con un buen suspiro se acomodo en la silla de Oficina y con el click del plástico, tomó una buena postura - ahora si, dime, ¿ qué necesita? - Heiji adora su trabajo, sobre todo la parte donde debe investigar.

La tinta del lápiz se agotó mientras escribe en la libreta, no es fácil seguir el ritmo de habla de Kudo pero se la ingenio para anotar lo importante.

- entonces, debo conseguir información del supuesto culto que pasó hace dos días por Beika y ahora viene a Osaka... ¿ és correcto? - pregunta intrigado con el teléfono bien pegado a la oreja espera la respuesta de Kudo muy pacientemente.

- si, pero quiero imágenes también, pruebas porfavor - amablemente pidió y el osaqueño se burló en su silla - por eso cobro 5 más! - pícaro canto.

- oh jodete Hattori! Ni un favor me haces - su voz dio un golpe en más notas infantiles.

Y a Heiji se le borró la victoria del rostro, se lo pensó un poco y exhausto se dejó deslizar al suelo.

Casi bostezo pensado en todo el trabajo, nadie debe juzgarlo, pues todos tenemos algo de pereza.

- okey, sin deprimirse mañana tendré que comenzar el trabajo así que ten calma - y a su termina la llamada.

Si bien, él no es un hombre muy de pensamientos fríos, suele dejarse llevar por su corazón y emociones o dejarse llevar por su racha de buenas deducciones. Pero aún así busca la justicia y el evitar la muerte del inocente.

Mas no negará de que él también está interesado en ese culto, se siente cliché, pero no negará lo que no se puede . No tiene argumentos más para no ordenar sus cosas pues debe cumplir su trabajo de detective.

Le da gracia que, su amigo, el gran detective de Beika, le pidiera ayuda en una investigación. Digamos que Shinichi Kudo.

Detective de renombre llama una mañana y pidió ayuda. Muy raro en Shinichi.

Heiji dio un portazo y mordió la madera de su helado, buscar información en la computadora primero ya que con suerte sabía que ese culto existía.

De hecho, fue raro ver la poca información que había de ellos se supone que eran muchos y miles casi una ciudad entera.

Hasta ahora como sabe que se llaman así mismos " Los Hijos De Aquel " o también " Los Que Aquel Comanda ". Un culto a una deidad que no se sabía exactamente el nombre .

Aunque se refieren a él como " aquél ".

No hay registros de dibujos , estatuas o siquiera alguna representación de aquél pero si se le podía asociar a la naturaleza misma y las plumas, cabellos negros , los cuadrados y la cabeza de un ciervo.

Lo escribe todo en su libreta y luego se desinfla en su silla , cruje la madera bajo sus pies y el se encorva en si mismo, contra su mentón pensando . ¿ quién es aquel

Su siguiente movimiento debería ser , ver que debería investigar exactamente , la hora en la que iría, ver si ellos hablarían con él de su culto y muchas variantes que heiji pensó rápidamente.

Si el moreno mintiera diría que eso no lo ponía un poco nervioso.

Pero decidió, agotado y angustiado apretar el tabique de su nariz. Se alza sobre sus pies y camino descalzo fuera de la habitación.

Con las manos en sus bolsillos, muy amenamente se tomó su tiempo de bajar y ver si su madre, quien de casualidad se encontrsba en casa y le vio pues bien cómo es que sólo tomaba con amabilidad un poco de té , sonriéndole.

el osaqueño disfruto pasar por la sala , tomar asiento a un lado de su madre, compartiendo la misma mesa y mirar la televisión.

una sonrisa cómoda crece en su rostro , vio a su padre en la televisión , su padre es un importante jefe de policía y él está orgulloso de ser su hijo .

- ¿ de qué están hablando ? - huroneo metiendo casi todo el cuerpo sobre la mesa donde estaba su madre , ella dio un respingo y con suave risilla palmeo la espalda de su hijo y le pidió asi que se sentará bien.

con calma su madre le indico prestar atención .

- tu padre está hablando con la prensa sobre esos religiosos - su voz dulcinea como siempre le dio a heiji luz verde para hablar .-¿esa religión? Kudo , me pidio investigar sobre ella - dio una mueca zorrona casi sintiéndose un poco especial.

ante eso su madre dio un leve golpe con su abanico en su cabello.

- con calma , se que eres un buen detective pero no deberías ir solo , además si vas a ir a un lugar así donde hayan deidades ... deberías rezar por protección - heiji gime en respuesta a lo dicho por su madre . -bueno pasare por el santuario -

ella rebusca en su ropa y le ofrece un amuleto de protección muy lindo , se sintió levemente avergonzado por aquel gesto de su madre que muy en el fondo se le hizo tierno y lo tomó dulcemente entre sus dedos , lo apretó bien en su muñeca, le hizo doble nudo y quedo como un brazalete. - creo que me gusta -

se levantaron , dejaron abarrotada la televisión y viajó hasta las escaleras .- voy a tomar mis cosas y volveré a las ... uhm - observa atento el reloj y lo baja - a las 6 aproximadamente , si no llego a esa hora puedes llamarme o hablarle a papá -.

ella dio un bramido en afirmación como un " ujum " .

cruje la madera de las escaleras , heiji tomara el camino fácil con suavidad por su pasillo hasta su habitación , busca una mochila donde poner desde guantes , bolsas para guardar alguna prueba o quien sabe , tambien una camara de fotos para poder pasarle bien las imágenes a Kudo y evidentemente su teléfono de chapa.

- okey , ya voy a salir ! nos vemos mas tarde - fugazmente bajo las escaleras que crujen y gime con sus pasos apurados hasta la sala de estar , se fue a la recepción y se puso los zapatos , dio unos leves golpes al suelo y tomó su gorra de su equipo favorito de béisbol .

- no olvides pasar por el santuario - dijo su amada madre desde su pieza - lo haré ma ! - clamó mientras ponía los pies fuera de la casa y sacudía las llaves en señal de que las llevaría con el.

camina por sus calles usualmente tarareando , el sol es vibrante y actualmente son las 1:30 de la tarde , está a la vuelta de la esquina de aquel santuario donde siente que debería pasar de largo.

mas teme decepcionar a su progenitora sin embargo sintió el desliz frío de aquel amuleto otorgado con tanto cariño , se soltó lentamente y cayó al suelo ensuciándose en un charco de agua sucia y jabón .

sintió cierta pena al ver el regalo de su madre ahora , hecho mugre en el suelo , lo tomó en sus manos y lo sacudió a paso lento , cruzó afuera del umbral y no puso pie adentro.

a puro sosiego se hizo paso en la calma de la ciudad , inusual en la vida y reclama por su soleado espectro se le cruzó por la mente ya cuando la mugre se secó estaba lejos del santuario para pedir protección . mas decidio pensar positivo .

si fuera sincero no se sentia ningun tipo de molestia o mal que en el fondo lo ahogara , por lo que , decidió , no darle importancia a las señales por muy supersticioso que fuera realmente quería investigar también , por lo que debió rápidamente hablar con algún vecino amable que le diera indicaciones .

sus pulmones se llenaron de aire alegre cuando pidió una bicicleta prestada de un compañero de clase , quien solo por ser buen amigo , se la presto , conociendo a Heiji no penso que tendria que caminar o gastar tanto en transporte .

heiji agradece que su amigo se compadezca de él y le haya ofrecido su bicicleta , tuvo que pedalear bastante hasta las afueras de su locación , a pocas leguas se notaba que había un nuevo camino entre los matorrales , las hojas y ramas habían sido movidas amablemente .

y de hecho Heiji dudo , dudo de que hubiera sido por humanos cuando animales pasaron como si a ellos se les tuviera que adjuntar este nuevo camino .

bueno , si bien heiji puede ser supersticioso no sabe si debía ser obra de algo más o alguien pero espero paciente para ver donde dejar la bicicleta y no perderla , después de todo no quería que alguien se la robara era su unico metodo de transporte a casa y no era suya , se cala en sus huesos un escalofrío .

fue frío y profundo , inconscientemente hizo presión en el amuleto que su madre le dio y rezo por que aun funcionara. lo que sea que lo miro desapareció al igual que el ruido de la naturaleza.

todo quedó en blanco , excepto sus pisadas , todo estaba en omisión de ruido total la discreción con la que entró en el camino de hojas y tierra pudo haber sido casi fantasmal , su mano sudo con lo amplio del llano terreno que le ofreció al salir del primer sendero.

heiji admira por última vez la bicicleta que lo esperara , se alivia de saber que al menos algo tiene que quedarse allí para cuando vuelva .

por lo que no quedará más que cortar camino a pie y en silencio , para asegurarse dio una foto al sendero por donde vino y luego a cada detalle que sintiera relevante , como piedras que tuvieran una forma curiosa ya sabes piedras apiladas o algo similar , tambien por varas que tuvieran alguna decoración como banderas o carteles , todo cuenta.

si fuera sincero no se sentía ninguna vibra aterradora o extraña , pero si era indudablemente raro el silencio sepulcral que atasco hasta sus pasos , el latido de su corazón vibró en sus oídos por tal mutismo ambiental.

luego solo tierra , luego solo hierba y piedras , ni un cántico ni nada .

el río fluyó a un lado de heiji y este se pregunto , ¿ desde cuando habia un rio aqui ? el conocía estos lares como la palma de su misma mano y nunca vio ni un solo escupitajo de agua bajar por un caudal así . fue extraño por lo que heiji saco fotos mas para si mismo que para Kudo.

sus pasos se habían detenido y cruzó de brazos ante el gélido viento que movió las copas de los árboles trayendo de nuevo el frondoso sonido que había llegado a extrañar , se le iluminaron los ojos con su cotilla interior muy contento de por fin encontrar algo destacable .

era un ejemplar hermoso de la mas pura evidencia . una foto y dos , luego tres para asegurarse , esta muy tranquilo cuando acorta distancia y se acerca a la piedra.

no sabe bien si lo rojo es pintura o algún otro elemento así que rebusco en su mochila para poder sacar una pequeña muestra de lo que era , le pediría a algún amigo de su padre que viera que es . después de todo entre trabajadores se apoyan .

al terminar levantó su vista por si había algo atrás de la piedra aún solo vio un poco más de camino , habían lo que parecían ser unas carpas , se le hizo extremadamente curioso y se escurrió cual hurón por la hierba alta . buscando más pruebas de cualquier tipo.

exactamente solo está investigando por curiosidad a este misterioso culto de religión curiosa , ah , y por qué Kudo se lo pidió por lo que tampoco se queja.

está intrigado por toda esta curiosidad , le gustaría saber y tener respuestas .

por lo que camino entre tanta maleza moviendo con sus manos lo que impidiera el camino , por alguna razón aquí ya no habían senderos planos lo que lo irritó levemente , por lo bajo un bramido suave que fue acurrucado con el viento alargado por la mirada de Heiji a donde el viento se llevó el ruido.

se detuvo fríamente , sintió la necesidad de apretar aquel amuleto .

cuando sus manos sudorosas lo hicieron retorcerse y dejar caer el amuleto colorido y mugriento al suelo , no pudo darse cuenta de la penumbra que lo cubrió ensombreciendo su ser.

era grande , alto y ancho , su sombra fría crujió en el alma de heiji , alzó su vista tembloroso y temeroso con la más ancha pesadez en el vientre.

el aire que heiji inhalo se perdió con un gemido apretado de puro pavor que lo hizo con mucha quietud , aunque muy inquieta , alzar su rostro con una cara contorsionado de angustia.

- SANTA MADRE - protestó muy alto Heiji , cara a cara con un venado ... Que para su gran gracia no estaba vivo , lo noto tan rápido ya que no sintio ningun ruido venir del animal , era solo un muñeco creado a partir del mismo cuero del ser.

observo cada mínimo detalle , su palpitar casi rompiendo contra la caja de sus costillas , helado de los dedos se levantó con mucho sosiego y le miró con intriga , muy en el fondo desea curiosear mas de el hecho de que haya una pieza de taxidermia en un lugar como este.

si bien , le saco fotos al animal , tuvo que tomar precaución por que el muy instinto de el dio un grito y ahora no tenía al sigilo de su manto , más no se siente intimidado por eso .

dio un lamento leve al tomar el amuleto , no había pasado ni un dia y ya estaba sucio y con tierra , se siente levemente dolida por eso pero tiene que sacar sus creencias de la cabeza antes de caminar entre la hierba , tropezó con alguna cosa en el suelo que decidió no investigar ya que noto que era una mísera piedra. quien no merecía mucho de su atención.

el aullido del follaje llamó su atención , igual que las risas que pasaron como viento a un lado de él. si bien Heiji no es miedoso estaba tenso . apretó la respiración y con falsa calma suplico que este suplicio acabará pronto.

si su teléfono de chapa era bendito pues no se lo creía ni a Dios en persona por que ni grabar un bendito audio podía .

un jadeo , se cubre la boca al escuchar los granos del suelo de tierra seca crujir cerca de él y como el viento mueve su ruido , y si bien , no se a movido ni un solo pelo de lo tenso y preso que está . ya sabe que , quien sea que esté afuera , noto su presencia.

- hermana , ¿ que es lo que ocurre ? - una voz juvenil habla sin aflicción ni cobardía , pura seguridad y refinado habla muy suave , casi pudo sentirlo hablarle en su oído . - siento que alguien está cerca , eso es todo . mi hermano pero de seguro será uno de los ciervos - esta vez , la voz joven obtuvo respuesta de una cálida y baja , más bien un susurro que hiela a heiji aún oculto entre los matorrales .

sus piernas tiemblan un poco atemorizado por quien fuera que fuera , escucha que alguien suspira con un silbido y la tierra vuelve a crujir , dos y cuatro , seis , ocho y diez pasos.

el rebaño se juntó , escucho al matorral llorar cuando se removió , y aun , el adentro , lo que fue escondite seguro se convirtió en un peligro inminente , reservado a quedarse quieto y listo para cuando el ruido cesara usar las piernas y huir.

sus pies , los de ellos , no los de heiji , se mueven hasta que se puede apreciar sus cabezas pasando afuera del matorral y se armó de valor y seguridad que no tenia pero aun así , decide que , vale la pena correr este riesgo.

la tensión se pega incluso en su ropa , viento con ramas crujientes , el suelo arenoso y seco bajo sus pies , las hojas secas del matorral , como aun podía sentir que esto no era seguro pero sabe que , debe ser , como buen detective que es no puede dar vuelta atrás .

estando tan cerca que puede sentir el aroma metálico de la herramientas , y el cuero ,y el humo tan diferente de la madera , curioso es poco pero el viento volvió a aullar , pasos más rápidos , casi corrieron y Heiji sintió , sintió un toque , y paso tan rapido que solo quedaron las marcas.

huellas de polvo que se levantó y Heiji realizó que , el matorral nunca fue seguro , y desde un principio se lo habían hecho notar.

Agradece que aquella persona con la que chocó no dio vuelta atrás, ni topó con el rostro con rostro.

el necio y de cabeza dura , reniega la idea , la única verdad de que su seguridad está en riesgo.

pero , ¿quién podría culpar a un detective como el ? . quien solo cumple su trabajo y a el tambien le nace hacer esto.

si ser detective fue siempre resolver misterios y crímenes , pues bien el sabe que esto también implica peligros que no todos pueden afrontar y que no siempre son cosas simples . si no supiera de los riesgos sería un verdadero tonto.

- oh mi ...- la hierba , alta y vieja , hizo música cuando heiji llegó a su límite , ya que su cobijo dorado había acabado , tan alta y vieja que lo acurruco para ocultarse un poco más . debe recuperar el aliento y tomar las fuerzas que tiene en su jovial ser , no hay más matorral , ni nunca fue algo para ser llamado seguido.

su sombra se guío con el ruido sordo de un chillido áspero , madera contra piedras , eso escucho a sus espaldas y el corazón le latió contra el tórax que sintió que se iba a quedar sin pecho , su sombra , esta vez refresco todo su ser y Heiji casi pudo sentirlo respirando en su cuello.

sea quien sea , no dijo palabras , respira más del cansado joven .

quien solo atina a sentir como su labio tiembla , sin palabras que decir , son leves gimoteos que susurran desde la boca , no siente una mano no siente ni el aire contra su rostro. lo que sea que sigue atrás de el , no se mueve , y no cree que se moverá.

mas heiji desea saber que es. algo le dice , ¿ y si mejor nos vamos ? por que muy en el fondo noto que quien lo mira , no lo ve como alguien que debería estar donde está , pero. he llegado muy lejos como para ahora dar media vuelta y volver a casa.

no le ve sentido a huir , no al punto al que llego , si se desea arriesgar pues como bien se sabe , heiji es de creencias. tomo aire tan tenso como las ramas secas , bajando la mirada mientras aun ve esa sombra sobre el .

tiembla y le crujen los dientes mientras hace una reverencia , pego toda la frente al suelo de tierra , y casi inhalo polvo para hablar.

su voz carraspeó . - yo... soy , soy Heiji Hattori , no..no vengo con malas intenciones , yo se que usted notaría eso...solo le pido , déjenme investigar un poco más - esta acobardado , con la pulpa de su ser hecha ya liquido , solo escucha silencio , la sombra se oscurece más sobre él y eso baja hasta tocar su cabeza.

el sepulcro del sonido que se había formado desaparece cuando el ruido del agua , la tierra siendo pisada revive , y incluso su propio corazón en sus oídos , el aire tembló cuando salió de sus labios .- usted, cuando sienta que debo irme puede avisarme... no tocaré nada , lo prometo -

como si aceptara el trato , lo que sea que hizo sombra se empezó a levantar , el sol se sintió bien en su piel y no levantó la vista de la tierra , aterrado hasta cada gramo de su ser , incluso su cerebro reconsideró la investigación.

está totalmente asustado , su sollozo se vio creado por el alivio y su mano cubrió su boca , no tiene ni la menor idea , si con lo que hablo fue una persona de la secta o si no lo fue pero sabe que ahora lo único que hay es el ruido de la naturaleza , por lo que apretó sus ojos y empezó a levantar la vista del suelo.

lo que una vez fue el matorral alto por donde vino , ahora había sido pisado , convertido en un camino directo al suelo , ni un pedazo se salvó de ser aplastado. heiji no tenía donde esconderse más , pues un cuadrado de un metro por un metro a su alrededor era la misericordia más miserable que había recibido en toda su vida.

pero , quién es el , detective que acaba de hacer una reverencia , a juzgar lo que se le dio por estar metiéndose sin permiso. y tomó aire ahora si , por fin parecía que podría entrar sin dificultad a aquella secta , sacar fotos , escribir algo en la libreta y listo .

heiji se tomó un momento , para tomar una foto de como quedaron los matorrales , dio su media vuelta y empezó a caminar lejos de lo que quedó del matorral siguiendo las huellas de la gente del culto , aún va con cautela , levemente temeroso de que pueda hallar .

si bien el bosque no era alto ni hermosamente frondoso , pudo notar que se hallaban árboles pintados con la misma marca de aquella roca , y habían como piedras contra el suelo haciendo una valla . así que heiji tomó su equipaje y camino sin ninguna velocidad alguna hasta quedar a tres metros de las piedras.

tomo fotos , de frente y caminando para ver qué tan grande era esta valla de piedras , luego corre levantando el polvo hasta los árboles sin corteza , y saca muchas fotos , estas marcas eran iguales pero esta vez estaban hechas de la savia del árbol.

tiene un rostro donde se nota que esto es asombroso e interesante , si es que omites , lo aterrador . si bien ahora heiji no tenía nada de que temer quizá se puso cómodo demasiado rápido en el ambiente suave de la naturaleza por lo que decidió saltarse la valla de frías rocas.

se impresionó con brillante sombra de lo que había adelante , carpas , cientos de carpas de un color café y terracota. algunas tenían puertas de tela roja , y había un camino de cenizas o quizá piedras de color blancas hasta un altar , uno muy bonito , heiji se sintió atraído.

pero cuando se quedó en a medio camino del altar observó las carpas , no había nadie . ni una sola persona , no había ni un solo suspiro , por lo que heiji dudo , dudo mucho en cada paso que dio pero no se detuvo .

Se encaminó como los minerales en el río hasta los bosques y los mares, deslizó su ser para arrodillarse mirando primero lo que se le ofreció al altar.

Desde pieles y platos con hongos picados, aceites , y mieles, y huesos, roidos y no roidos.

Sus dedos tocaron el botón y la cámara saco fotos, si bien sabe que no debería estar picando tan cerca del altar solo se alzó hasta quedar cara a cara con un cráneo de ciervo.

La pluma y el pelaje oscuro, viento lo engatuso, sacar una foto, y luego otra a todo el perímetro del objeto. Su voz es un suspiro cuando da un suave golpe tirando algo al suelo. La grava a sus pies crujio y su sombra se alzó en una mandíbula humana.

Si el hielo es su palabra más no frío no puede estar, se queda estático y desconcertado, atrapado en una pregunta de ¿ me equivoqué? ¿ éso es humano? ¿ qué? , su rostro se torció los músculos más cercanos de su boca que mostraron cierto horror.

Reconoció, aquel pedazo de calcio ya sucio. Fue tomado, alzado entre sus dedos y se analizó minuciosamente, le faltaba un canino inferior y una muela.

Mas era muy pequeña para ser la de un adulto y la sola idea que se le floto por cabeza le dio un escalofrío.

Dios, si bien, ahora cae en cuenta, y teme lo que a hecho, se arrepiente de haber visto lo que no tuvo que ver. Si bien , adoro el silencio y aborrecía cuando la gente no estuvo. No deseo que esto pasará.

Escucho, bien si, la seca tierra y grava llorar tras su espalda. El viento le enfrió el rostro o quizá fue su propio sudor sintiendo su corazón golpear.

Sintió los nervios saltar, dispararse y desear huir.

Más no pudo. Su sistema le pidió , correr al igual que su ansiedad ahora que reventada contra cada pedazo magro de su cuerpo. La electricidad golpeo ante un suave tacto.

Presión en su espalda, un apoyo, alguien apoyo su mano en su espalda y su respiración se detuvo, sintió que fallecía allí mismo y que sería sepultado vivo.

Y que, que todo lo que vivió, no valió la pena.

- usted, no debería tocar, lo que prometió no tocar - heiji bajo la cabeza, rota su promesa, roto el trato que hicieron y se condenó a mantener la ansiedad asqueroso del momento en su horrible sensación sin pasaje.

¿ voy a terminar aquí y... De esta forma? , ¿ acaso voy a morir? , no puedo hacerlo, no puedo permitir el gusto de morir y menos cuando no desea que este capítulo de su vida termine.

Horrorizado por la propia naturaleza de lo que investiga sintió el apretón de más manos contra su cuerpo, prisionero del pánico se atraganto con el miedo, movió sus piernas, el más puro espanto en su voz que se rompió en trizas.

Sabe que nadie escuchará sus gritos , y de lo más hondo de su cuerpo ni el alma suya oirá el aullido de las cuerdas de su garganta , que, clama y reclama la más buena bondad del mismo humano.

Pero incluso el ser humano es rival de si mismo . Con cada presión y uso de fuerza, más usa el contra ellos, de todas formas un ejército de hormigas puede matar hasta el más grande de los pichones.

Y el a pesar de ser fuerte , no es nada a comparación de lo que debe suponer son más de 10 o 20 personas presionandose jansenismo contra otras, aplastando toda su gravedad y masa contra el, moliendo con azotes su carne, lo que lo vuelve peor es el calor que emana la pequeña riña.

Se le quema la garganta cuando una tos , que muy asquerosa, brota desde lo hondo del pecho, cuando busca oxígeno de nuevo algo crujio entre las olas de su mente, como aquella sombra fría.

Y luego la gente, todo su calor se fue y heiji siente la grava pegada en su piel, heiji realizar por fin que estuvo contra el suelo. Que cayó al suelo, y se quedó allí buscando aire de nuevo. Una mano se guio a su estómago le dolía, y posiblemente tosio por buen golpe que se le dio en la zona y le arrebató el aire.

Por ahora es buen hombre miserable y suspiro, sus ojos de encuentran llorosos, alza la mirada al cielo que fue cubierto por estos sectarios.

- usted había hecho la humilde promesa de no tocar nada, aun así... Pudo haber sido perdonado cualquier cosa menos esto, usted tocó una ofrenda divina sin permiso - una voz suavemente femenina le hablo a un costado y lo jalo de los brazos para levantarlo.

- hechadlo al río! - grito otro.

- Tiradle al río! Y que el caudal lo lleve a donde debe ir! - una voz se une y luego van cuatro, el coro completo de sectarios.

Si bien Heiji sabe nadar, nadie le asegura que lo hecharan al río de buena forma. - que el anfitrión lo decida - dijo un niño o eso supone, no deseo abrir sus ojos por las lágrimas que habían nublado su vista ni tampoco desea ver su final próximo, tan cerca que podía oírlo aullar a la distancia pero tan cercano que tocaba su piel.

Fue obligado a levantarse, por pura piedad de ellos , limpiar la grava y un poco el polvo y espero silencioso, igual que todos, si bien miente al decir que no tiene miedo.

Su temor crece, se merece y remece en su ser moviendo su estomago ante más ansiedad , terrible tiempo de espera mal augurio que crece, si bien a usado esta frase muchas veces y no deja de usarla , pues la verdad ahora mismo se está haciendo tiempo de lo que sea que pase.

Heiji escucha lo grave de las pisadas profundas y pesadas, sus pestañas pegadas por las borrosas gotas de llanto, y entre más trata de ahora abrir sus ojos, su corazón fugado entre las blancas costillas, que titilan los huesos en su mediocre silencio.

- al río - su voz se sintió atrás de si , sus manos apretaron tras su cuello y lo hicieron caminar , si bien no se había desesperado antes, eso ya había quedado en el olvido y trató de hacer fuerza contra su , diremos que, captor. Quien forcejeó más contra el.

Lo derribó a mitad del camino y luego lo levantaron de nuevo, mas parecía muñeco de trapo de tanto que lo manejaban con violencia y sin su consentimiento.

Termina de cara a la tierra , casi come polvo por que sus pies tropezaron con las rocas y quien lo sostenía ya no estaba.

Escupe y tose, se levantó del suelo, lo agarraron del asa de la mochila y tiraron del el escuchandola crujir y el quedo quieto.

Su cuerpo se mueve, tímido por su estupidez.

el no es Santo, no merecía este mal ni menos meterse en dicho problema por investigar mas les da la razón por muy estúpida que sea, pues Heiji sabe que toco algo que no debería.

Sentía estúpido que ahora temiera ante las consecuencias, límite que le habían impuesto y el lo rompió por su curiosa forma de manejar la situación.

Una torpe, toda culpa de su lado detectivesco que quería resolver algo que no le competía.

Si este fragmento te hace sentir desconectado solo trataré de decir que estoy atrasando la inevitable premisa de lo me va a ocurrir, temiendo lo que se me avecina, hago terribles descripciones para aludir a que nada escalofriante ocurre.

Rebajando por mi propia salud estos eventos de malhueso que carcome mi cuero.

Decido solo contar lo que no me genera la más grande de mis agobios, pues temo abrumar al lector con mi extrema y sensible realidad. Que incluso ustedes creyeron que me pasaría.

Pues mi cuerpo es levantado como la misma basura y la bolsa que pateas varias veces hasta que decides aburrirte, se le arrastró camino abajo hasta la frescura húmeda de aquel río donde el agua casi se volvió rabiosa, su misma presencia la enrabio.

Sintió el loco, ruido rocoso, gente y sus voces, una turba gritando por algo que el hizo y merecía pero cuando sintió sus piernas apretadas en un punto, volvió a abrir sus ojos, casi dio un grito antes de ser lanzado al río con manos y pies atados.

Supone que, el río estaba con la cólera tan alta que heiji escucho la violencia que obtenía su cuerpo en el agua, asfixiando su grito cuando el frío de una sombra ( posiblemente un árbol) , tomó su energía, agotado de luchar contra la corriente.

De vez en cuando saltando contra el agua, probando bocados de aire y luego hundiéndose para ahogarse, si la situación no se lee traumática es que por qué no se desea relatar así mas si se permite sentir que el pobre hombre pronto encontró algo más.

Oh, heiji tose secamente, siente que se quedó estancado a mitad de camino lo bueno es que su cuerpo a quedado sentado en una cama de lo que supone son altas y suaves algas, el tacto es desagradablemente viscoso y suave como algo esponjoso.

Sus manos están aún atadas, al igual que sus extremidades inferiores, le arde un poco pero el frío agua lo a refrescado aún que ahora vuelve a dar una tos y el asco de vomitar.

Nada sale de su boca, más siente el contenido, lo que sea que había intentado vomitar. Se siente como las algas que siente debajo de él.

Y algo lo hace estremecerse cuando vuelve a dar una arcada áspera, aun que nada sale de su boca más allí de la saliva espesa y ahora el sabor del metal.

Notó que en su reflejo , colgaba de entre lo hondo de su boca lo que parecía ser la piel mojada y las plumas de un animal cuales resecaban su garganta y le evitaban respirar correctamente , a pesar de que se debe respirar por la nariz todos podemos perdonar el hecho de que su respiración irregular fuera motivo además de temblar constantemente.

Pero aun asi, su cerebro empieza a entrar en un estado de alteración mayor , pues no reconoce donde a caido , el río empieza a correr más fuerte y su cuerpo que lucha contra la corriente se desliza de a poco , loco maniobrar sin chocar contra ninguna roca o hundirse más pero realmente era incomodo tratar de manejarse aún con  manos y piernas atadas .

se terminó de deslizar por río abajo hundiéndose en un pequeño socavón de lodo , arena , arcilla y grava , era una sensación húmeda , pegajosa y que al mismo tiempo parecía sentirse como si el suelo lo estuviera atrayendo a quedarse estancando y si bien su espalda chocó contra la orilla y se enganchó allí , por fin heiji ya después de unos minutos de frío remojo en el agua empezó a relajarse . lo más probable es que solo fue una sombra o quizá había tragado más que solo agua.

no quiere pensarlo mucho , jadeo con frío cuando trató de arrastrarse como un gusano para salir fuera del agua aunque solo consiguió caer en lo que parece ser un pequeño y de suerte , poco profundo charco , ya sea que no deseaba esto pero era mejor que nada .

de pronto entre el silenciosos bosque , escucha tras suya ruido , como un pequeño tono , tono que reconoció rápido y no sabe que clase de contorsionismo hizo para que su teléfono cayera al suelo , tuvo que arrastrarse por el lodo y abrirlo con dificultad por lo mojado que estaba.

-...halo?- heiji soltó casi sin aliento - hey , hola - una voz familiar y animada le contesto y luego se quedaron en un largo silencio.

casi lo escucho reírse - necesitas ayuda ? - el pobre no dudo en responder - si , porfavor  - y su charla acabó con otro tono , está decepcionado de lo corto que fue.

heiji debe admitir , que es , la conversación más rara que tuvo en toda su vida , y el es detective creanme las llamadas pueden ser bizarras , pero en eso quedó su charla en que pidió ayuda y ahora está tirado en el suelo. se le están entumeciendo las extremidades y el sueño está reclamando su cuerpo.

si bien , el ruido de la naturaleza lo aterra un poco , sabe que si al menos su teléfono vuelve a sonar lo va despertar,cosa buena si es que un animal o sabe dios , trata de comerse a heiji . esta muy agotado y hasta derrotado .

sabra dios solo a donde mierda fue a parar. al menos sabe que sigue en Osaka .

Eso lo alivia y más cuando entre todo el frío silencio por resuena de nuevo su teléfono, más cuando logra revisar la hora en esos números pixeleados se dan cuenta de que son exactamente las 2:05 de la mañana.

Hattori se horrorizó y logró hacer click para contestar una llamada nueva, tímido y preocupado un revoltijo de angustia.

Espero un tono antes de una voz hablando.

- servicio de emergencia de Osaka en conjunto con un grupo de Hirakata, pudimos dar con usted gracias a sus familiares, usted es Hattori Heiji? -

El detective se quedó en silencio procesando hasta que abrió la boca casi sin aliento - si, soy Hattori Heiji... Me pueden ayudar? - Su voz nunca se había escuchado tan ropa y áspera.

Se escuchó unos tonos de silencio antes de un respuesta.- el equipo va de inmediato, tiene alguna herida o incapacitación que tengamos que saber? -

- estoy... Atado de manos y pies - heiji menciona y da un resoplido entre dientes ante el frío del lugar - además de que estoy a un lado del río... Podría venir rápido? Tengo frío -

- muchas gracias por la información, no corte la llamada en lo que vamos a buscarlo - Y heiji suspiro contentó aun que temblaba aun temeroso.

cuando llego la ayuda , heiji vio a oficiales de Hirakata más que de Osaka y se pregunto ¿ en serio viaje tanto río abajo? Mas decidio no cuestionarse.

Sus amarres fueron desatados y fue llevado al hospital más cercano, por que bueno , si bien no se sentía mal tampoco estaba en las óptimas condiciones.

Y ni creía sentirse religiosamente bien, las ropas que tenía se sentían mugrosas, se sentía como si lo hubiera metido a una lavadora , luego tomaran su cuerpo y lo tiraran a la secadora antes de pasarlo y dejarlo caer al agua de nuevo.

Se sintió terriblemente mal, su conciencia se sentía un poco brumosa cuando sus padres llegaron, y su padre, quien no suele tener ni buen genio ni buena cara, se vio preocupado.

Se sintió como un puñal.  Mas dolió terriblemente su corazón y su conciencia nuevamente al ver a su madre tan cariñosa, se acercaba destruida S abrazarlo como si fuera una hoja seca y fría de otoño.

Por lo que sabía y había escuchado estaría bien, aun así necesitaban hacer unas preguntas de como, cuando y donde. Algo de rutina para que supieras como es que heiji término aquí.

Y si bien hasta ahora, los aparatos de heiji funcionaban, algo de los que estaban revisando sus cosas estaba seguros de que el agua y el viaje tuvieron que haberlos estropeado.

Más las fotos y su cámara estaban en perfecto estado, las fotos sin embargo estaban ligeramente borrosas pero no se encontraban irreconocibles.

Heiji pudo contar gran parte de los eventos hasta que llegó el momento de cruzar la valla de rocas , donde el aire que tenía se empezaba a ir, y con cada palabra el de Osaka sabia que algo andaba mal.

La primera vez que sintió esto sus manos temblaron con la poca reacción y conexión que tenían su cerebro y su boca, mas sus palabras quedaron hechas murmuros sin sentido.

Se le pidió mantener la calma y realmente le costó recuperar el aliento, si no podía comentar el terror asfixiante de la turba de sectarios entonces tampoco podría decir que en realidad fue culpa suya. Fue invitado a pasar con la única promesa de no tocar nada. No hizo caso y rodo por el agua hasta Hirakata.

Su energía se fue drenando de él hasta que quedó recostado totalmente, los ojos pesados pensando exactamente las cosas, logrando poder decir que " hicimos una promesa, una que yo rompí ".

Aunque suena como cosa aterradoramente cliché, pero bueno no vamos a indagar más en estas descripciones de aburrida trayectoria , además heiji merecía su descanso después de casi morir ahogado y no podían estar tanto tiempo hablando con el , después de todo ya era muy tarde y heiji merecía reposo .

el crepúsculo de la vida es una cosa que si bien no tiene sentido , no hace mas que descender a lo más profundo de la esencia humana y más si deseas saber que es lo que cuenta esto , me encamino a cruzar el umbral de la puerta y tomar asiento donde observo a aquel que enfermo fue encontrado en el frío agua .

me cruzo de piernas como un queer y lo miro reposar en sus sabanas blancas , me daría pena despertarlo pero no quedará de otra que , cometer , aquella molestia , mas no creo que se enoje por lo que me temo que mi tiempo de estar sentado a una buena distancia ya no importa.

- hattori , oi , hattori  , oeeee - dio un suave movimiento al brazo del moreno durmiente , no tiene desespero pues el , alma eterna que siempre tiene la última palabra , sabe que , inevitablemente despertara . 

lo que yo dije se cumple cuál profecía , siempre que mi palabra se suelta y se desliza por mi lengua , esta , pues como bien se dice , es la pura verdad y yo , su susodicho encarnador.

el de osaka abrió sus ojos , el cansancio está tan crujiente en sus huesos que se queja en suaves gemidos de dolor antes de ver quien esta frente a el , incluso se ve sorprendido y desconcertado. frente a el , una figura conocida que le sonrio como siempre.

- hattori , me tenias preocupado ... viaje tan rápido como se me permitió , hombre haz bien el trabajo - se mostró amable , pero también lo hizo con suave preocupación y regaño cosa que funciono a la perfeccion pues el humano se encontró sentándose para poder hablar con el - Kudo ! no ha sido toda culpa mia , solo... hice una pequeña metida de pata -

- las pequeñas metidas de pata te rompen una pierna no te mandan al río - dijo con severidad , heiji quedó mudo , por alguna razón le dio la última palabra y dejó que tomara asiento a un lado de él en esta camilla donde , kudo tomó un lugar a un lado de el , y le tomó suavemente la mano - tienes la piel algo fría -

esta vez susurro y toda la piel del humano se erizo , dándole un escalofrío desde el comienzo de su columna hasta el final , mas no dijo nada solo el martirio de las noche escamosa y profundamente dormida. - debes dormir , hattori ... descansa , te sentirás mejor -

Heiji deseo poder decir algunas otra palabra, pero algo le mató las cuerdas vocales y suavemente su cuerpo se recosto de nuevo en la camilla, Kudo lo observo con una severidad pero al mismo tiempo ojos abiertos como los de un búho que en vez de darle miedo le hacían sentirse reconfortado. - ya debe descansar -

Si, es raro que Kudo sea tan amable , mas no se queja de sentir una mano en su cabello y ser mortalmente consumido por el sueño, una sombra suave que no le da frío si no compasión lo acurruca en su sueño.

Mas debe admitir que cuando vuelve abrir sus ojos no hay ni un solo rastro de que Kudo se dio una vuelta por aquí, da un gran suspiro que se filtra a través y sus cansados huesos que se hunden en la camilla , es extrañamente cálido ahora que mira más a detalle aquella habitación , alguien le trajo unas canastas con frutas y tenía dos mantas extras en su camilla . no recuerda que hayan tenido la descencia de esto.

- quizá... estaba tan cansado que no me di cuenta , todo lo de ayer es algo borroso - no quiere pensar mucho pues prefiere que , un buen descanso , le haría bien , busco su teléfono en la veladora y reviso si funcionaba aun . cuando noto que de hecho tenía mensajes de Kudo que a decir verdad eran un número exagerado de mensajes . 

se le hizo extraño así que fue a leer los mensajes los cuales eran más de 99 y incluía 4 llamadas perdidas , todo esto después de las 6:30 hora donde supuestamente ya debería estar en casa. 

se le calienta el corazón sabiendo que kudo realmente se preocupaba por él aunque fue realmente terrible y cansado leer tantos mensajes que iban desde calmos " oye , ya estas yendo a tu casa ? " hasta unos muy desesperados " NECESITAS QUE LLAME A ALGÚN SERVICIO DE EMERGENCIA ? HALOO ESTAS VIVO? HATTORIII HATORRIIIIII POR DIOS CONTESTA NO ES GRACIOSO , SI ES UNA BROMA TE VOY A IR A PATEAR " heiji blanqueo los ojos antes de sacarse una foto y mandarla al chat de kudo con un mensaje que decía " me dieron canastas con fruta ".

para su sorpresa , un mensaje de kudo se escribió más rápido de lo que pensó que lo haría e incluso le escribo bastante enojado.

" eres un grandisimo imbecil , te dicen que con cuidado.. Y TERMINAS EN UN PUTO RÍO HIJO DE LA RE CONCHA QUE TE PUTA PARIÓ HEIJI PENSAMOS QUE TE HABÍAN MATADO O ALGO "

" HEY HEY ,  estoy bien... un poco afiebrado pero no me morí , solo fue un accidente " responde con calma , más de la que creyó que tenía para la situación , " cierra la boca hattori, te hubieras muerto allí " el de osaka no responde pues sabe que de mala gana , su amigo tiene razón.

" lo siento , prometo ponerme mejor ... visitame pronto kudo" heiji se recosto mirando por la ventana , había bonito sol en este día. " te iré a visitar en unos días, esperame allí "

El de Osaka estuvo a punto de escribirle a Kudo de que ya lo había hecho pero decidió no decir nada, quizá no quería meter la pata más de lo que ya había hecho. Cuando saliera de aquí tendría que revisar si tenía las cosas para Kudo.

" cuando me den de alta trataré de revisar si no se hecharon a perder las evidencias "

Se alivio al ver la respuesta positiva de Kudo con un cariñoso " mejorate porfavor " .

Con un hondo respiro tomó una manzana y le dio una mordida, tenía un sabor particularmente bueno , debería preguntar quien le dio las canastas de fruta para agradecer.

Mas no se queja mientras sigue masticando la dulce pulpa carnosa y de toque ácido, es muy importante para el pensar en los eventos que pasaron ayer.

No sabe si debería relacionarlo a algo sobrenatural o darle otro nombre al caso del culto, aun que no se le ocurre ningún nombre, solo recuerda, esos llamativos símbolos.

Dos astas, un triángulo, una rama, un círculo de piedras y dentro del círculo un cuadrado.

Solo mastica la carne cerca del corazón de la fruta y recuerda como es que Kudo llegó anoche , le proporcionó un consuelo inusual pues el detective de Beika es de todo menos demostrador de su afecto.

Quizá, Heiji quiere sentirse especial pues es el único amigo de Kudo que se conseguido ese tipo de afecto, aun que se el más miserable .

Una palmada en su cabello hasta dormir y el mismo chico de Osaka pudo notar que admiraba demasiado a Kudo , de todos los fans del detective Heiji prefería omitir eso después de todo eran amigos y a la vez enemigos del rubro.

Pero, quien podría juzgar a heiji por creer que el detective de Beika era bueno en lo que hacía y nadie podría negarlo.

- esa manzana se ve muy jugosa... Podrias compartir me Hattori? - si mi voz aparece, Cordero levanta la mirada y si mi voz te apetece, bien Cordero y dame una probada.

Hattori alzó su mirada, preguntas crecen en su mente pero quien se sienta en aquel sillón solo estira la mano, no puede más que darle una manzana mucho más hermosa que la que el mismo se comió.

- viniste... - dijo en un suspiro - como podría no venir? - respondo antes de morder con calma esta manzana que fue escogida con pura precisión para mi.

- me alegra que te sientas mejor, ayer temblabas de frío -.

- ayer estaba algo preocupado por ti, deberías ser más cuidadoso - .

Todas mis palabras, las tomas, Cordero mío, tú Heiji Hattori que en cama reposa frente a mi acurrucado entre lujos que yo te ofrecí.

- Kudo... - estas tan perplejo, pues yo como entidad divina, mi propia presencia te engatusa y seduce a mirarme con esos ojos de pura devoción. - si Hattori, te escuchó... -

Se que la evidencia esta en tu mochila y se que quieres que la vea, aun que no la tomaré sin permiso pues no sería muy educado de mi parte.

Aun que me da gracia como obras para levantarte y ofrecerme tu mochila con las evidencias, me cruzó de piernas satisfecho cuando mi mano pasa por tu mentón y luego palmeo tu cabeza.

- ve a descansar Hattori - si mi palabra  es, como bien ya e dicho, pura verdad, me regocija la alegría que entrega el ver cómo el Cordero obediente va a su cama y se cubre con su corazón cálido.

Las debo decepcionarte mi dulce Cordero. Pues no soy quien quieres que realmente sea. Más gracias por dejarme con esto entre las manos.

Capítulo 1