El mexicano estaba a punto de salir de el hospital junto a Perú, cuando un enfermero dijo su nombre

- señor México... el doctor quiere hablar con usted - dijo el enfermero, el mexicano y el peruano se miraron, pero sin preguntar siguieron al enfermero hasta la habitación en donde se "recuperaba" el chileno.

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El doctor salía de la habitación cuando ellos llegaron

- ¿pasó algo? - preguntó México acercandose a el doctor
- lo siento mucho... pueden pasar a verlo si así lo desean - México sintió un escalofrío recorrer su espalda al comprender las palabras de el doctor, pasó rápidamente a la habitación, el peruano se quedó fuera

- ¿él ya... está... - preguntó el peruano con un nudo en la garganta
- aún no, pero no lo queda mucho tiempo de vida - dijo el doctor retirándose por el pasillo, Perú decidió seguir al doctor e interrogarlo, pues él les había dicho que Chile ya estaba recuperado y ahora les dijo que le quedaba poco tiempo de vida, lo cual para él, no tenía sentido.

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México se sentó a un lado de la camilla de el chileno, tomó su mano con delicadeza, esta estaba tibia, casi fría

- Chile... ¿como estás? - preguntó el mexicano para distraer la tristeza que sentía
- bien, porque volviste - dijo el chileno mirando con cariño a su amigo
- tengo que decirte algo, siempre quise decirte pero ahora debes saberlo... Chile tú me gustas mucho, no quiero perderte ahora, por favor... quédate - dijo el mexicano comenzando a llorar, Chile se esforzó por llevar su mano libre a la cara de el mexicano para secar sus lágrimas
- eres tan especial para mi ¿lo sabes no? Te quiero Mexi... y mucho - dijo el chileno, el mexicano sonrió al chileno mientras seguía llorando
- ¿puedo hacer algo? - preguntó México mirando a Chile, este asintió ya adivinando lo que México haría.

México dejó pasar unos segundos, Chile lo miraba con infinito cariño y esperaba aquello que ya sabía que pasaría; el mexicano se inclinó sobre el rostro de el chileno, ambos se unieron en un cariñoso beso que el peruano vio sin querer al intentar pasar a la habitación.

La vida de el chileno se fue mientras se besaban, México lo abrazó con fuerza mientras terminaba de derramar sus lagrimas en el pecho de el chileno, quién, ya estaba sin vida.

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Los días habían pasado, México y Perú se mantenían de pie a un lado de la lápida con el nombre de Chile, México ya no lloraba y mantenía una melancólica sonrisa mientras apoyaba su mano en la lápida, Perú estaba extrañado de que México sonriera y así se lo dijo

- ¿por qué no estás triste?
- ¿por qué?... pues porque aunque estaba enamorado de él, se que ahora está en otro lugar con el country que ama...

🥀Fin🥀

"Porque no todos los finales son felices"

Gracias por leer

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