El chileno no lo había reconocido, pero al ver las marcas de su cuello supo enseguida quien era.

Alemania lo golpeó cuando Chile intentó escapar

- ¿a donde crees que vas? - preguntó el alemán, Chile no podía parar de temblar del miedo
- ¿que vas a hacer? - fue lo primero que se le ocurrió preguntar
- ya verás- respondió Alemania mientras reía como un loco

Alemania golpeaba a Chile mientras le metía diversos juguetes, Chile estaba llorando de el dolor, al parecer ninguno de estos tipos conocía el lubricante

- para... por favor - suplicaba el chileno mientras lloraba
- ¡cállate! Pagué una buena cantidad por tu cuerpo y haré contigo lo que quiera - gritó enfurecido el tricolor.

El tricolor de una estrella se estaba mareando nuevamente, quería desmayarse pero una cachetada de el alemán lo hizo reaccionar, Alemania comenzó a besarlo, Chile necesitaba respirar, el aliento a café de Alemania lo estaba ahogando; apenas pudo mordió su labio, le abrió una herida en su labio superior y sus dientes quedaron marcados en la piel del contrario, Alemania gritó de dolor y se levantó rápidamente de la cama

- ¡¿siempre harás lo mismo?! - le gritó a Chile, el chileno asintió, Alemania lo golpeó nuevamente antes de salir, un guardia sacó a Chile un rato después de que Alemania se fue.

En la habitación, Chile le contó a sus compañeros lo que había hecho, lo felicitaron por su valentía 

- es muy bueno que sepas defenderte, pero es peligroso - le dijo Ecuador, Chile lo miró enseguida
-¿por qué? - preguntó Guatemala antes de que Chile pudiera decir lo mismo
- si ese tipo les cuenta a los guardias lo que hizo Chile, pueden matarlo - les dijo el ecuatoriano.

Nuevamente una reunión con ONU, todos los presentes notaron las ojeras de la organización y se sintieron extrañados de que Alemania usara mascarilla y una bufanda, hacía mucho calor y el alemán estaba sudando como si no hubiera un mañana.

El tricolor se sintió aliviado cuando terminó la reunión, pues por fin podría sacarse la bufanda y la mascarilla, pero para su mala suerte, ONU lo vio y al ver su labio lo mandó enseguida con OMS

- no es necesario - dijo Alemania retrocediendo, pero la organización lo tomó de el brazo, lo subió a su auto y  lo llevó con la organización de la salud.

Cuando estuvieron allí, fue revisado de urgencia

- ¿como pasó esto? - preguntó OMS mientras desinfectaba las heridas de su labio, ya no había nada que hacer con las de su cuello
- ash... un inmaduro - respondió Alemania desviando la mirada, OMS sonrió y dijo
- tienes citas locas 
- si... citas...

Alemania no podía dormir, ya casi eran las tres de la mañana y simplemente no podía dormir

- ¡Maldito Chile! - gritó, su labio dolía mucho, buscó una posición cómoda en su cama e intentó dormir.

Al siguiente día, el alemán salió a caminar un rato, cuando llegó a un parque, se sentó y respiró tranquilamente, pronto vio a FBI con uno de sus perros policía, Alemania quería pasar desapercibido pero FBI lo vio y se acercó

- hola Alemania - saludó, Alemania tuvo que levantar la cabeza
- hola FBI - respondió el tricolor mientras intentaba alejar al perro que olía insistentemente su entrepierna, pero el perro no se iba
- ¿que te pasó ahora? - preguntó el policía al tricolor
- una cita un poco loca... - respondió Alemania mientras intentaba alejar al perro de su entrepierna, el perro policial comenzó a llorar, pero FBI no le prestó atención, de pronto el perro mordió fuertemente la entrepierna de Alemania, el tricolor gritó fuertemente y  comenzó a retorcerse de el dolor, el perro tenía los colmillos manchados de sangre y ladraba a Alemania

- ¡Dios mio! Alemania, deja que te ayude, te llevaré con OMS - le dijo FBI llevándolo a pasó lento hacia su auto que estaba estacionado cerca de allí, Alemania subió al auto mientras sentía como sus testículos estaban desgarrados como si fueran de tela

- ¿acaso tienes drogas? - preguntó el policía encendiendo el auto
- ¡Claro que no!¡¿tengo cara de drogadicto acaso?! -gritó enojado y adolorido el tricolor
- un poco... - respondió FBI mientras se dirigía al hospital.

En el hospital, Alemania estaba horrorizado por la noticia

- ¿entiendes? O te retiro un testículo o pierdes tu pene - le dijo OMS con tranquilidad
- prefiero que me quiten un testículo, perder mi pene sería... terrible - dijo Alemania, pues pensó en que si no tenía pene ya no podría abusar de Chile.

El alemán estuvo en recuperación unas semanas, pero apenas tuvo la seguridad de que podía tener relaciones sexuales, se dirigió a abusar de el chileno, esta vez él no tuvo compasión y destruyó como pudo el ano de Chile.

Chile ya no podía más con todo esto, cuando sus otros compañeros estaban fuera, él intentó ahorcarse con las sábanas de su cama, pero para su mala (o buena) suerte, cayó al suelo apenas estuvo colgado, pudo haber funcionado si hubiera hecho bien los nudos.