Décimo tercer capítulo
Hola mamá, ya llegué— comentó el rubio entrando a su casa.
Hola Yeosang— saludó Ana con una sonrisa nerviosa —¿Cómo te fue hoy? T-tu exámen
Ah pues, tenías razón. Aprobé, ¿oye hay algo de cenar?— preguntó dejando su mochila en el sofá y dirigiéndose a la cocina —Estoy agotado y muero de hambre.
Ah sí, hay algo de estofado que dejé del almuerzo— contestó abriendo la nevera —Puedo calentártelo y... Yeosang— llamó Ana algo inquieta.
Dime mamá— contestó el rubio.
Tú... ¿Jongho te contó algo o... te propuso algo?— preguntó alzando un poco los hombros de manera tímida.
Emm... No, ¿Por qué?— replicó confundido.
Ah no, por nada importante en realidad...— se apresuró a preparar la cena de su hijo —¿Esta bien si le pongo más arroz?— preguntó cambiando el tema exitosamente.
Claro que sí, ¡Mientras más, mejor!— Yeosang le dedicó una amplia sonrisa.
Ana soltó un suspiro aliviada, felizmente no metió la pata aunque, le parecía extraño que el señor Choi le haya ordenado a preparar todo si Jongho aún no le decía nada a Yeosang. ¿Qué podía hacer ella? ¿Decirle: "¡Oye Yeosang! ¡Vivirás con Jongho!", de la nada?
Además, Yeosang era su bebito. Lo extrañaría muchísimo si se iba y más si lo hacía ahora, no iba a alejarse de él solo porque su jefe loco estuviera desesperado.
Oye, Yeonnie— llamó nuevamente Ana con nostalgia.
¿Mm?— Yeosang alzó la mirada hacia su mamá, aún tenía comida en la boca.
Te amo mucho, hijo mío— confesó.
Yeosang solo asintió con una sonrisa ya que estaba ocupado comiendo. Además, su mamá siempre le recordaba lo mucho que lo ama y que se lo diga ahora solo se le hacía de lo más normal.
[°°°]
"Hoy, Jongho. Ni un día más, ni uno menos", tales palabras retumbaban en la cabeza del pelimarrón mientras esperaba a su novio.
Yeosang se alegró cuando Jongho lo llamó de improviso avisándole que iría por él, es que pasar tiempo con él le alegraba mucho y Jongho lo sabía. Pero igual le tenía miedo al rechazo. ¿Y si por alguna razón, Yeosang lo rechaza?
No podría hacerlo aceptar por la fuerza, aún si fuera necesario o si si padre se lo ordenaba. Amaba tanto a Yeosang que un "No" sería más que bienvenido.
—¡Por supuesto!— aceptó el rubio emocionado.
Jongho se llevó una sorpresa inesperada, no esperaba que Yeosang acepte o que aceptara tan rápido.
—Y-yo... Wow Yeosang— trataba de decir Jongho —Realmente no pensé que
¿Aceptaría?— completó la oración —¿Bromeas? Jongho esto sería simplemente un sueño. Amo estar al lado tuyo y me pongo muy triste cada vez que nos despedimos— exclamó abrazando a su novio —Además...— sonrió pícaramente —Ya no tendríamos que pagar por ese hotel jamás
En realidad, yo lo pago— contestó riendo.
Es que tú no me dejas gastar mi un centavo— se quejó dándole un golpesito en el hombro —Pero sí sabes a lo que me refiero, ¿verdad?
¿Quieres ir a ese hotel para celebrar?— propuso alzando sus cejas.
No— contestó Yeosang —Tenemos que decirles a nuestro padre sobre...—"Mi madre..." pensó triste Yeosang.
Dejaría a su mamá
"Ya no pasas tiempo con tu madre desde que entraste a la universidad y cuando tienes tiempo libre, te la pasas con Jongho"
Ella tendría razón, ya no estaría con ella ni siquiera para dormir. La dejaría sola, y definitivamente se molestaría con él. No podría creer que haya tomado una decisión tan egoísta como irse de la casa sin antes consultar a su mamá.
Así que tomó una decisión, es vez era correcta: si su mamá Ana no estaba de acuerdo con eso de irse a vivir con Jongho, entonces simplemente no se iría. Ya está, si por alguna razón, recibe un "No" entonces estaría más que bien con eso.
—¡Por supuesto!— exclamó Ana más que feliz. O al menos así se veía.
—¿Qué?— preguntó Yeosang confundido —¿Encerio estás feliz de que me vaya a vivir con Jongho?
—Pues sí, hijo— contestó naturalmente —Sé lo mucho que amas estar con Jongho, además ya estás grande para seguir viviendo con tu madre. Niñito de mami— se burló de su hijo.
—Espera— Yeosang frunció el ceño —¿Y dónde quedó todo eso de que ya no paso tiempo contigo y todo eso?
—Ay Yeonnie— respondió acercándose a su hijo —Todo te lo tomas muy personal, ahora lávate las manos que vamos a cenar. Después vemos qué es lo que vas a empacar— dijo dándole unas cuantas palmaditas en su mejilla.
Ok...— respondió algo extrañado, pero igual estaba contento.
[°°°]
Entonces... ¿Dónde viviremos?— preguntó entusiasmado Yeosang dándole una probada a su pieza de pollo frito.
¿Usted qué opina señora Ana?— preguntó Jongho dedicándole una sonrisa a la nostálgica rubia.
Supongo que... En donde sea contarle que Yeonnie no llegue tarde a sus clases y tú puedas trabajar— respondió levantándose de la mesa. Se dirigía a la cocina para tomar un poco de agua.
Algo le pasa a tu mamá— susurró el pelimarrón.
Lo sé— respondió susurrando de igual manera —Me dijo que estaría feliz porque soy un "niño de mami por vivir con ella"— usó sus manos para hacer las comillas —Pero ha estado muy triste
Es normal supongo— contestó Jongho tomando otra pieza de pollo —Su único hijo se va y pues, ella se quedará sola
Cállate— Yeosang hizo un puchero molesto —Me harás sentir mal de dejarla y ya no viviré contigo— dijo condicional.
No no no, disculpa— negó desesperado para que su novio no cambié de opinión.
¿Y si se mudan cerca? Así podré visitarte o tal vez tú puedas visitar a tu pobre madre— exclamó empezando un pequeño show dramático, así como acostumbraba hacer.
Claro que si, mamá— respondió Yeosang riendo un poco —Aún tenemos mucho tiempo para decidir, ¿verdad, Jongho?
Jongho cambió un juego de miradas con Ana, algo inquieto. Yeosang sintió incómodo el silencio y volvió a preguntar.
En realidad, tenía planeado mudarnos a más tardar esta semana— respondió algo preocupado por la respuesta de su novio.
¿Esta semana?— preguntó el rubio algo fastidiado —Jongho, es muy rápido. Tengo cosas que hacer, la universidad me tiene algo ocupado estos días y...
Yeosang— interrumpió Ana, calmandolo un poco —Está bien, pueden mudarse mañana si así lo quieren
Pero mamá— Yeosang quiso contradecirla pero Ana lo tomó de la mano.
¡Estaré bien, Yeonnie!— exclamó sonriendo —Te preocupas demasiado, hombre— dijo recogiendo los envases y dirigiéndose nuevamente a la cocina.
¿Ya ves, Yeosang?— susurró Jongho dándole palmaditas en su muslo —Mamá Ana estará bien, ¿de acuerdo?
Sí, creo que sí— respondió desanimado —Tal vez sea yo el que no la quiere dejar— confesó mirándola.
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Ayaya mamá Ana🥺
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