Mi respiración comenzó a acelerarse. ¿Qué trataba de decir con eso?

Perdí control y dejé caer el teléfono al suelo, logrando hacer que haga ruido y se rompa.

La puerta se abrió de golpe dejando ver a Vegeta, quién entró y examinó el lugar para terminar viendo mis manos y teléfono.

— ¡¿Qué carajos fue eso?! — gritó. Sonaba asustado, volvió a mirar el teléfono tirado y se agachó a recogerlo — ¿Lo tiraste? — me preguntó.

— Yo.. — no sabía que decirle, él no sabía nada sobre Goku — Sólo vi un video de terror y me asusté.

— Hubieras gritado — examinó el teléfono, la pantalla estaba completamente rota.

— ¿Te asusté? — pregunté.

Él me miró y alzó una ceja, él iba a decir algo pero al parecer prefirió no decir.

— Pensé que.. te habías caído o algo. — agachó la cabeza para seguir viendo el teléfono.

Me sentí un poco bien al saber que aunque sea un poco se preocupó por mi. Pero luego volví a la realidad.

— ¿Se puede arreglar? — me referí al teléfono.

— No estoy seguro, tendrías que llevarlo con alguien experto. Podemos ir la próxima sema.. — dejó de hablar, para luego maldecir — Mierda, no tengo auto. — fue cómo si algo lo volviese a golpear.

Si que quería ese auto.

— No te preocupes. Veré que hacer. — sin parecer ruda, volví a agarrar mi teléfono y lo dejé sobre la mesa de noche que tengo. — Gracias por preocuparte. — me volteé a verlo.

— No es.. yo no.. — se trababa entre sus palabras, parecía un poco sonso, pero eso lo hacía ver algo tierno — No hay problema. — lo noté algo nervioso, parecía que quería decir algo pero otro algo no lo dejaba. Parecía tener una guerra entre el mismo.

— ¿Todo bien? — me atreví a preguntar.

Él miró hacia arriba. Alcé una ceja confundida.

— Agh... — negó con la cabeza y se acercó un poco a mi, me alertó ese acto, pero no me moví o hice algún movimiento para detenerlo.

— Oye, no sé que.. — no dije más cuándo de sus labios salió la palabra que jamás pensé oírlas de él.

— Perdón.

Parpadeo un par de veces.

— ¿Perdón? — ¿A que se refería?

— Si, es... yo.. — parecía no coordinarse consigo mismo, caminó dando vueltas agarrando su cabello en forma de desesperación hasta quedar de espaldas, y luego volver a dar vueltas y volver a quedar en frente de mi pero esta vez un poco más cerca — Perdón por lo que pasó.

Y ahí fue, que sé que refería a la apuesta.

Vegeta

— Quería aprovechar esta oportunidad para pedir disculpas por lo que te hice. — dije.

Siendo sincero, no me sentía a línea sintiendo esta opresión en mi pecho, todos los días, todas las horas, y cada maldito minuto. No he podido dejar de pensar en lo idiota que fui.

Y quería que volviéramos a ser lo que éramos antes, a lo que me refería es, hablarnos, o aunque sea bromear.

Otra cosa que me he podido dar cuenta en este tiempo es que he comenzado a sentir cierto deseo en ella.
Sé que no es tiempo o momento para pensar con la cabeza de abajo. Pero tampoco he podido evitar pensar en ella o que aveces cuándo la miro mis ojos se desvían a otros lados de ella.

Recuerdo la noche en la fiesta - dónde pasó todo - Tenía sexo con Pares, luego de mucho tiempo aguantando sólo para seguir las tontas reglas de Raditz. No sé cómo, o por qué, había gemido el nombre de Bulma envés el de Pares. Ese fue el motivo por el que ella se molestó y se fue. Fue que desde entonces no he dejado de pensar del por qué lo hice, la verdad es que por un momento fue que pensé que era Bulma con quién tenía relaciones y no Pares, la imaginé debajo de mi desnuda.., gimiendo.

Ahg, no ahora.

La cosa es, que luego de eso he estado teniendo sueños con ella, y no eran tan puros que digamos.

— Está bien, ya pasó. — dijo sacándome de mis pensamientos.

— ¿En serio? — pregunté sin creerlo.

— Sí, bueno, tenemos que llevarnos bien, seguimos siendo familia de alguna forma. — sonrió levemente mirándome a los ojos.

Y es que, pude notar cierto brillo en ellos, un extraño cosquilleo pasó por mi espalda. Y es que no era normal.

— Gracias. — volví a ver su teléfono quebrado.

— No te preocupes por el teléfono. Conseguiré uno nuevo o trataré de arreglarlo mañana. — se lo entregué y ella lo dejó en su mesa de noche. — Ahora.. necesito dormir. Tuve un dia.. un tanto pesado.

Asentí y me fui de su habitación. Cerré la puerta y no pude fingir gritar sin hacer ruido. Ahora ya no tendría esos otros tipos de sueños otra vez.

Entré a la mía. Estaba con mi ropa de dormir ya, sólo quería dormir.

Últimamente mi "padre" y madre se iban de viaje mucho, no sé cómo nos mantienen, ni siquiera sé si están trabajando o sólo...
Olvidenlo.

No tengo en mente volverla a lastimar. Tengo que admitir que no me gustó para nada verla llorar o triste, y aún peor cuándo sé que son gracias a mi.

No estoy seguro pero.., si decía que no le importaba ¿Por qué tanta tristeza? Es decir, si no le importa no tendría porque ponerse en ese plan tan.. no puedo decir dramático pero tengo qué porque no encuentro otra palabra para describirlo. Pero sí, dramático.

Amenos que realmente se enamoró de mi.

No.., no, no, no, y no.
Ella no puede estar enamorada de mi.

Pero, ahora, pensándolo bien, recuerdo ese brillo inyectados en sus ojos cuándo cruzamos miradas.

¿Será que realmente..?

No. Vegeta. Estás empezando a enloquecer.

Sólo duérmete.

(•••)

Desperté gracias a que escuché un fuerte golpe. Rápidamente me levanté del susto y la primera cosa que pasó por mi mente fue que algo le ha pasado a Bulma. Por lo que me metí a su cuarto otra vez sin permiso, no encontré nada, entonces me metí al baño, tampoco estaba ahí.

— ¡Largo!

Un grito de ella hizo darme cuenta que había alguien más, y venía de abajo. Entonces bajé las escaleras y seguí escuchando gritos.

— ¡Suéltame! — gritó nuevamente.

Cuándo llegué a dónde provenían los gritos, era la entrada.

Fue que pude divisar a un tipo sujetando a Bulma de la cintura con tal de sacarla afuera.

— ¡Hey! — grité, llamando la atención de ambos.

— ¿Qué mierda? — dijo el tipo, rápidamente la soltó y ella se acercó a mi y se puso atrás de mi.

— Yo te conozco.. — dije, y es que juro haber visto a esta persona antes, pero no recuerdo dónde.

Dejó la mirada seria, sonrió ligeramente, se limpió las manos y las escondió en sus bolsillos.

— Nos vimos en el lugar de carreras ese. ¿Recuerdas?

Oh.

— Ya recuerdo. Era el tipejo que la estaba molestando. — con mi cabeza me referí a Bulma, quién seguía atrás de mi sujetando mi brazo.

— El mismo. — la miró ella, para luego mirarme — Soy Kakaroto. Pero prefiero Goku.

— Me agrada Kakaroto. — sonreí, eso lo hizo volver a mirarme serio. — ¿Qué haces en mi casa?

— ¿Qué? ¿Vives aquí? — preguntó algo sorprendido.

— ¿No es obvio? — y es que, no tenía camisa, usualmente dormía sin camisa porque por las noches hacía calor, y tenía unos shorts que llegaban hasta mis rodillas. Además caminaba descalzo.

Sus ojos se abrieron más.

— ¡¿Acaso te acuestas con él?! — gritó hablándole a Bulma mientras me señalaba.

— ¿Qué? — dijo ella — ¡No!

— ¿Y qué hace sin camisa?

— Porque hace calor. — respondí.

— Le pregunté a ella, cabrón. — volvió a mirarme.

— ¿Y si me acuesto con ella habría algún problema, imbécil? — contraataque.

— Oh sí. — avanzó un paso hacía a mi.

Veía sus intenciones.

— ¿Cuáles? — seguí el juego acercándome a él con las mismas malas intenciones.

— Ella no puede. — nuestros hombros chocaron.

— ¿Y qué eres?¿Su papá? — lo empujé levemente. Sentí cómo Bulma volvía a sujetar mi brazo y quería alejarme de él.

— No te gustaría conocerme. — y así fue, cómo él comenzó la guerra de puños entre nosotros.

— ¡No! — ella trató de separarnos, pero nosotros llegamos al suelo sin dejar de moler al otro a golpes.

Él consiguió darme un fuerte golpe en la barbilla, logrando sacarme un poco de sangre por los labios. Le devolví el golpe pero esta vez cerca de la nariz, logré sacarle sangre de la nariz, cosa que me hizo sonreír arrogante, pero actué muy pronto y gracias a eso recibí otro golpe de su parte.

Bulma de nueva cuenta intentó intervenir, pero los dos estábamos tan concentrados en ver quién deja en ridículo al otro, que no nos dimos cuenta cuándo ella se metió entre nosotros dos y recibió un puñete de parte de Kakaroto, el cuál iba directo hacia mi. El golpe cayó en toda su mejilla, ella cayó al instante al suelo inconsciente.

— ¡Eres un hijo de puta! — grité, con las fuerzas que acumulé debido a la furia fueron suficientes para hacerlo caer.

Cubrió su boca con su mano, la cuál comenzaba a mancharse de sangre. Le había sacado un diente.

— ¡Lárgate ya amenos que quieras perder otro! — volví a gritar, él salió corriendo sin antes sacarme el dedo del medio.

Bajé la mirada, me agaché de rodillas para poder examinarla. Acerqué mi rostro -lado de la oreja- para poder escuchar su corazón.

Por suerte seguía bien, pero de su labio salía un pequeño hilo de sangre que sin esperar limpié. La cargué y con la misma la llevé a su habitación.

La volví a cagar.

Holaaa!! ¿Cómo están?

¡¡Último capítulo!!

Del año xd

Fue un año muy extraño y difícil para muchos, me disculpo para todos los que tuvieron grandes pérdidas, deseo que todos estén bien y sanos en casa, esprro que este nuevo año sea uno bueno y mejor para todos.

Mi año no se fue al precipicio gracias a ustedes, por su apoyo y todo su cariño, mucho más a las historias en serio les agradezco por todo y por seguir aquí <3

Y antes de acabar el año, voy a hacer una confesión en mi tablero, tal vez dos XD, y si algunos de ustedes quieren acompañarme en confesarse antes de acabar el año también pueden💁‍♀️
Sé que no es misa pero bueno.. ¿Qué otra cosa más nos puede sorprender en este año?

Cuídense y pasen un buen comienzo de año❤ Los quiero mucho💕

¡Nos leemos el próximo año!💕