Narra Amy:

Salgo corriendo al estacionamiento a toda velocidad en cuanto el timbre de salida dio señal. Tal y como imaginé soy la primera en llegar, lo cual no me molesta ya que soy consciente de que mi amado tiene que presentar unos informes. Espero pacientemente, pero el sonido del auto me toma por sorpresa. Busco a mi alrededor y veo a mi azabache con las llaves en mano y, prácticamente, corriendo. Apenas subimos al auto él lo enciende y arranca. Durante el trayecto Shadow no hace más que acelerar e incluso ignorar varios semáforos. Parece ser que cuando se trata de hacerle el amor a su novia nada puede detener a este profesor al volante. Llegamos al estacionamiento del edificio y en cuanto apaga el auto Shadow me quita el cinturón de seguridad y me atrae hacie él. Me besa con lujuria y pasa sus manos por debajo de mi falda.

-S-shadow - logro suspirar entre jadeos - aquí no...

-Entiendo. - me susurra al oído - Pero no sé si pueda resistir hasta llegar al departamento.

Baja sus besos a mi cuello y reclina el asiento mientras jala de mí para ponerme sobre él. Sus manos continúan explorando mi piel bajo la falda. No logro retener un gemido de placer ante esas caricias que hacen que me derrita. Pero gracias a un breve momento de lucidez me pongo fuerte y me separo de Shadow.

-¡Shadow aquí en el auto no! - lo regaño - Alguien  podría pasar por aquí y vernos.

-Entonces dejemos que envidien lo que vean. - trata de acercarme a él.

-Que no... - me separo nuevamente - Si tanto quieres hacerlo entonces llévame al departamento.

Me cruzo de brazos y lo observo desafiante. Mientras el contra ataca con una mirada suplicante. Sin embargo, termino ganando y ambos salimos del auto rumbo al elevador. Caminamos presurosos para llegar al elevador que está a punto de cerrarse. Pero para suerte nuestra una conejita que conozco lo detiene. Apenas entramos al elevador nos encontramos con varios de los que viven en el edificio, lo que hace que el espacio sea algo ajustado.

-Amy ha pasado un tiempo que no te veía. - me dice amable la pequeña coneja.

-Tienes razón Cream. - respondo de manera amena - ¿Cómo has estado?

-Muy bien. En estos días he tenido algo de trabajo extra en las tareas, pero...

No obstante, dejo de prestar atención a lo que Cream me anda diciendo ya que gracias a la estrechez del elevador siento, justo detrás de mí, el miembro erecto de Shadow. Mis mejillas se tornan rojas como un tomate, mis latidos se aceleran a un millón por segundo y solo rezo porque ninguno de los presentes note el porqué de mi reacción.

-...Además mi mamá me comentó que estuviste en el concurso de talentos. - continúa narrando Cream - ¿Cómo te fue con eso Amy?

-B-bastante bien... jejeje - el tiempo en el elevador se me está haciendo algo eterno - Creo que hubo personas que lo filmaron. Te lo mostraré apenas consiga una copia.

-Sería genial... Ehmm, ¿Te encuentras bien Amy? - me dice preocupada.

-S-si, claro que me encuentro bien.

-Pero estas demasiado colorada y perece que tienes fiebre. - dice a la vez de pasar una mano por mi rostro - También estas sudando un poco. Creo que deberías descansar y apenas baje avisaré a mi madre de que vaya a verte.

-No te preocupes pequeña. - menciona Shadow jalando de mí - Las medicinas de Rose estan a la mano y ya me encargaré de cuidarla. - me doy cuenta de que llegamos a nuestro piso y salimos como podemos - Pero si te preocupa demasiado puedes pasarte a la noche para venir a verla.

-Esta bien profesor Shadow, muchas gracias. - dice la pequeña Cream en respuesta.

Las puertas del elevador se cierran, dejándonos solos y aliviados de haber salido de allí.

-Para la próxima nos quedamos en el auto. - dice mi azabache totalmente incómodo mientras abre la puerta - O en todo caso nos vamos por las escaleras.

-Si controlaras un poco más a tu amigo erecto no tendríamos que pasar por algo como eso. - reprocho todavía agitada por haberlo sentido tan cerca.

-No podía controlarlo contigo tan pegada a él. - se defiende mientras ingresamos al departamento - Ademas, es tu culpa por provocarlo.

-Yo no lo provoco. - pero me sonrojo de inmediato al notar lo absurda que suena esta discución.

Antes de poder decir algo más Shadow me carga estilo nupcial y cierra la puerta de una patada. Corre hasta su habitación y me lanza a la cama quitándose rápidamente la ropa y quedando solo en boxer. Me observa con deseo y se acerca lentamente a mí. Pero yo no me quedo atrás y de igual manera me voy quitando la ropa hasta terminar tan solo con las prendas íntimas. De repente mi erizo de vetas rojas jala de mis piernas para tenerme a su merced. Pasa sus manos por todo mi cuerpo y comienza a quitarme las últimas prendas. El deseo no hace más que aumentar. No obstante, el sonido de un celular interrumpe el momento. Shadow busca el lugar en donde se encuentra dicho aparato y contesta poniéndolo en alta voz.

-¿Qué? - contesta Shadow irritado mientras termina de quitarme las bragas.

-¿Shadow? Disculpa creo que llamo en mal momento, pero Amy no me contesta el celular. - nos quedamos helados al escuchar la voz de mi hermano desde la otra línea.

-Airon... eh n-no es mal momento, lo siento, solo he estado algo estresado con algunos informes. - se excusa rápido nervioso - Sobre el celular de Rose... creo que se lo dejó en el auto con el resto de sus cosas ya que dentro de poco pensábamos salir.

-Ya veo... ¿estás con ella ahora? - cuestiona mi hermano que no imagina que tan cerca estoy de Shadow ahora.

-Sí, ahora mismo te paso con ella. - yo niego con la cabeza, pero Shadow se limita a sonreirme de forma macabra con un extraño brillo en los ojos - Rose... es tu hermano.

Si dejarme otra opción contesto con el celular todavía en alta voz. Pero de repente Shadow pasa sus labios muy cerca de mi intimidad. Me doy cuenta de que sin importar nada el erizo de mirada rubí seguirá con lo que tenía planeado hacer.

-Hola... hermanito. - digo trantado de controlar mi respiración ya que Shadow se ha tomado la libertad de meter un dedo un mi intimidad.

-¡Amy Rose! - grita molesto y me da la impresión de que se ha dado cuenta de lo que estoy haciendo ahora - Exijo que me expliques ahora mismo... ¿Por qué no me comentaste que participarías en ese concurso de tu colegio?

-Y-yo... - por más que trato de controlarme me es imposible hablar sin terminar gimiendo. Mientras Shadow mete y saca su dedo provocándome un placer único.

-No es necesario que te expliques, el director ya me ha enviado un video de tu presentación. - eso me toma por sorpresa - Debo decir que me has dejado sin palabras... Lo has conseguido.

En ese momento obligo a Shadow a parar y escucho con mayor atención a mi hermano, que parece está a punto de llorar.

-Tu presentación ha sido espectacular. Creo que ya estas lista para regresar a casa después de todo. - trato de tomar el celular para desactivar el altavoz, pero Shadow me lo impide e inmoviliza mis manos a cada lado de mi cabeza - También arreglaré todo para que la banda se reintegre y los escándalos de las noticias sean aclarados, ¿qué opinas?

Shadow me suelta y se aleja de mí. Lo que hace que reaccione de inmediato y sujete su mano con fuerza para evitar que se separe. Lo veo directamente a los ojos.

-Hermano lo siento, pero no volveré aún. - un par de rubíes me observan con sorpresa - En realidad, tenía pensada una propuesta para tí.

-Te escucho Amy. - dice espactante desde la otra línea.

-Quisiera que dentro de un par de semanas vinieran aquí, a Mobius, para demostrar de lo que soy capaz. - digo sin quitar la mirada de mi amado - Además hay algo muy importante que debo decirte.

-Esta bien Amy... Casi lo olvido. - su voz cambia a una de emoción - Asumo que mañana estarás algo ocupada.

-¿A qué te refieres? - me toma por sorpresa.

-A que un par de chicas, muy molestas debo decir, vieron el video junto a mí. - ya entiendo a donde quiere llegar - Tomando la desición de acompañarte en lo que resta de tu estancia en Mobius.

-¿¡Ellas vendrán!? - un grito de emoción es lo que sale de mis labios.

-En efecto... Bueno hermana el trabajo me llama y parece que tú tenías un pendiente con Shadow. - dice despidiéndose - Por cierto, salúdalo de mi parte y dile que lo acepto como mi cuñado.

La llamada termina y yo me quedo en shock por lo último que dijo mi hermano. ¿¡Cómo diablos se enteró!?
De pronto un par de brazos me rodean y siento unas cuantas gotas de agua deslizarse por mi hombro.

-Amy dime que es cierto. - su voz le tiembla - Dime que te quedarás conmigo.

-¿Te parece posible que quiera separarme de tí? - susurro con una sonrisa y me separo para ver su rostro - Lo siento, pero te amo demasiado. No veo probabilidad alguna de que eso llegue a pasar.

-Amy... - susurra para luego besarme.

Shadow me besa y se aferra a mí como nunca antes. Las sábanas comienzan a desordenarse, nuestras manos quedan entrelazadas y en la habitación tan solo se escuchan los gemidos de pasión que nuestro amor deja florecer.