Narra Shadow:

Una vez que todos los estudiantes se retiran del aula yo hago lo propio.
De solo pensar que esa niña esta suelta por los pasillos me preocupa; es demasiado sensible, solo basta algo que la moleste para que pierda el control y saque su ira. Me dirijo a la oficina del director lo más rápido que puedo (debo admitir que Rose tenía razón, el camino es algo extenso) y apenas logro llegar abro la puerta sin tocar.
Observo con detalle la oficina y solo me encuentro con el director tomando una taza de té.

-¿Profesor Shadow qué pasa? - me dice recuperándose del susto que le causé.

-Señor director, lamento interrumpirlo, lo que sucede es que Rose se saltó mi clase y...

-Tranquilo profesor - se rie un poco - lo que pasa es que cuando la señorita Amy vino para recoger su uniforme, la campana de ingreso ya había sonado. Como me sentía algo solitario la invité a tomar algo de té conmigo.

-P-pero señor... ella... usted sabe que la finalidad de que Rose permanezca aquí es para que conviva - le digo algo resignado.

-Por supuesto que sí - sonríe - acaba de convivir conmigo. Además profesor no debería preocuparse tanto, que la señorita Amy falte a una de sus clases no es la gran cosa, usted sabe muy bien que a ella no le hace falta.

-En eso tiene razón - acabo de notarlo - eh... señor director, acabo de darme cuenta de que la llamo por su nombre.

-Es verdad, mientras platicábamos me pidió que la llamara por su nombre - dice todo sonriente - vaya que usted ha tenido mucha suerte en hacerse responsable de ella, seguro que debe estar a gusto con una niña tan amable.

-En efecto señor, me es agradable su compañía (si supiera que la besé me mata) y creo que esa actitud le será de ayuda para acoplarse mejor con los demás.

-Concuerdo con usted profesor y confio en que la ayudará en todo - toma un sorbo de su té - ahora que recuerdo... creo que la estaba buscando.

-¡Oh! Es cierto - fuerzo una sonrisa - con la charla se me estaba olvidando. De casualidad ¿Rose le mencionó el lugar al que se dirigía?

-En efecto, ella se dirigía a los vestidores - otro sorbo de té - también mencionó que iría al comedor después.

-Se lo agradezco señor - me dirijo a la puerta - nuevamente, disculpe la intromisión.

Salgo de allí rumbo al comedor, de seguro llegaré antes que ella así que no tendrá oportunidad de escapar.
Un momento... ¿por qué tendría que escapar de mí? Ella no tiene porque hacerlo, simplemente, tengo que darle la noticia de que sus compañeros la aprobaron para darle una nueva oportunidad de integrarse.
Envuelto en mis cuestionantes me doy cuenta de que ya llegué al comedor, ingreso al lugar y todos los estudiantes estan concentrados en sus conversaciones y su alimento. Asumiendo que Rose se tardará un poco en llegar creo que también consumiré algo. Me acerco a una de las máquinas expendedoras y saco una lata de café cargado, que ya me hacía mucha falta, tomo asiento en una mesa vacía y espero con impaciencia.

De pronto las puertas del comedor se abren otra vez y presto atención para ver de quién se trata. ¡Por caos! Tengo que estar delirando, al menos tiene que ser culpa del café porque ahora mismo estoy viendo a la eriza más hermosa del mundo.

Rose se ve preciosa con el uniforme. Siento mis mejillas sonrojarse un poco y los latidos de mi corazón se acaban de desbocar; es una escena maravillosa la que estoy contemplando, pero algo me molesta. Presto atención a mi alrededor y me doy cuenta de que no soy el único que esta fascinado por como le queda el uniforme a Rose, un joven erizo azul tiene los ojos clavados en ella y sin perder tiempo se le acerca. Me molesta, aunque eso no debería ser ya que ella tiene que relacionarse con sus compañeros.
Sonic empieza la conversación a lo que Rose reacciona muy bien, demasiado bien en mi opinión. Siguen con la conversación y ella se ríe por algo que aquel erizo azul le dice. No es que realmente me importe, es más ni me interesa... ¡Alto! Se le esta acercando mucho. Hasta aquí, ahora voy a intervenir.

Narra Amy:

No comprendo la necesidad de los uniformes, ni tampoco la actitud de Shadow.
Anoche fue muy tierno al acompañarme cuando tenía miedo a tener una pesadilla; en la mañana, algo molesto pero aún así fue amable; ahora en el colegio fue serio, distante y más que molesto. Pero eso es lo que menos me importa ya que sigo pensando en aquel beso; un beso tan dulce, tierno y apasionado.

Por instinto toco mis labios y recuerdo cada detalle de ese momento, podría pensar en ello todo el día pero tengo que concentrarme. Llego a las puertas del comedor y las empujo, apenas ingreso diviso a Shadow al fondo con una lata de café. Dirijo mis pasos hacia él, pero un par de ojos esmeraldas se cruzan en mi camino.

-Hola Amy - me dedica una sonrisa.

-Hola Sonic - digo tímida ya que me apena un poco que tuviera que presenciar mi actitud - hey... lamento mucho si los asusté con lo que pasó es que yo - suspiro - no estoy logrando acoplarme con lo que se hace en un colegio.

-Tranquila todo esta bien.

-Te quivocas, eso no puede estar bien - le corto - es la primera vez que asisto a un lugar así y no creo poder encajar.

-En mi opinión, estoy seguro de que te integrarás muy bien y ese uniforme es un buen inicio, por cierto, te queda muy bien - me guiña un ojo.

No puedo evitar reir con lo que mencionó y también siento un leve sonrojo por el cumplido. Sin embargo la risa se corta de golpe cuando siento la mano de Sonic sobre mi frente.

-¿Qué pasa? - cuestiono.

-Disculpa - responde y se acerca a mí - tienes las mejillas un poco sonrojadas y pensé que tenías algo de fiebre, tal vez no estes muy acostumbrada a toda la rutina y te cause algún malestar.

-Gracias, estoy bien - siento que el sonrojo va en aumento.

-¡Rose! - escucho esa voz que hace que me ponga un poco nerviosa detrás mío.

Me giro para dirigirme a él, efectivamente, me encuentro con Shadow the Hedgehog, un erizo negro azabache con vetas rojas y hermosos ojos cual rubies de un rojo tan intenso como la sangre, que me derriten por dentro; ese erizo es mi profesor.

-Apresúrate y vamos - me agarra fuerte de la muñeca y jala de mí - todavía eres nueva y como estoy a tu cargo... no me queda de otra que explicarte las reglas y si es necesario aclarar alguna de tus muchas dudas.

Me despido de Sonic con la mano que tengo libre y él copia la misma acción. Shadow jala y va un poco más rápido, sacándonos del comedor velozmente.
¿Qué demonios le pasa ahora?