Capítilulo 9
Narra Amy:
Entramos al edificio y parece no haber nadie, no está el portero ni tampoco hay ningún sonido que muestre señales de vida; seguro Vanilla se fue a recoger a Cream hace poco. Sigo el camino al ascensor y el prof. Shadow me sigue, una vez dentro preciono el botón número 8 y el ascensor cumple su trabajo. Estoy algo desesperada por llegar y el ascensor esta lento justo hoy, me pone nerviosa estar a solas con el profe y ahora tengo que vivir con él.
¿Qué demonios fue eso que hizo en su casa? Estaba tan sorprendida que me congelé como con el beso de camino al colegio...
¡¡¡El Beso!!! Mi primer beso. Inconscientemente, toco mis labios y no puedo evitar desanimarme un poco. Quería que mi primer beso fuera especial y romántico, en cambio, fue fugaz y sorpresivo; fue un beso robado.
Escucho la señal de que llegamos a mi piso, salimos del ascensor y nos encontramos frente a mi puerta.
-El código de la cerradura es 24279701. Le daré una copia de la tarjeta de ingreso una vez se la pida a Vanilla - le explico sin mirarlo.
-De acuerdo. - me responde, siento su mirada fija en mí.
Paso la tarjeta por la cerradura e ingreso el código, la puerta se abre automáticamente.
-Ya puede pasar - digo mientras escucho sus pasos detrás de mí.
Maldito sea, diga algo, lo que sea pero por lo que más quiera no se quede callado. Me siento como en una película de terror en la que la protagonista deja que el asesino entre a su casa pensando que es una buena persona... Pero NO... el asesino solo esperaba el momento justo para sacar su arma y...
-Rose.
-¡¡¡Ahhhhhhh!!! - grito y doy un brinco, me doy la vuelta y allí esta el profe, mirándome y pensando que estoy loca.
-¿Qué demonios, Rose estas bien? - se acerca a mí y posa su mano en mi frente - que bueno que no tienes fiebre.
-Tranquilo, es imposible que me de fiebre sin estar resfriada - digo alejándome de este ladrón de primeros besos.
-Tu hermano me dijo que eres delicada de salud. - me comenta.
-Vaya sorpresa, parece que a mi hermano le encanta que el mundo se entere de mi vida y lo que pasa en ella - notese el sarcasmo - ahora el profesor también tiene que enterarse de cada cosa que me pasa.
-¿Por qué estas tan molesta?
-No estoy molesta, estoy en total armonía con el universo.
-¿El universo esta molesto conmigo? - se burla de mí.
-Cállate maldito erizo aprovechador sin sentimientos - grito de furia.
-¿Cómo quieres que me calle si no me dices que es lo que te pasa? - grita el también.
-¡Mis sueños acaban de ser rotos! - grito camino a mi habitación, pero me jala del brazo y juntándome más a él, me carga y me lleva al sofá.
Me obliga a sentarme a su lado y yo solo miro al piso. Nos quedamos en silencio otra vez, mudos como en las pelis antigüas. A pesar de que no lo estoy viendo siento, perfectamente, su mirada sobre mí. Me levanto, pero él jala de mí para volver a sentarme, esta situación me enfurece, no puedo hacer nada cuando lo tengo cerca.
-Ya dime qué te molesta - me sujeta del mentón para mirarlo.
-Fue el primero - digo y desvio la mirada a cualquier parte - el de esta mañana, fue mi primer beso.
No tiene caso ocultarlo, después de todo es su culpa y quiero que este consciente de eso. Regreso mi mirada a la suya y se ve algo avergonzado.
-¿Lo arruiné? - pregunta sin quitarme los ojos de encima, ni desviarlos un poco.
-Si. Tenía que ser especial - no puede ser, hasta aquí llegamos - quería que mi primer beso fuera más gentil, dulce, largo y romántico. Pero fue todo lo contrario fue un beso robado, fugaz y sorpresivo sin nada que lo haga especial.
-Sólo olvídalo - me dice - piensa que nunca pasó y así el siguiente que tengas será el que cuente y será el primero.
-No. La solución no puede ser tan sencilla, no puedo olvidar el primero y cambiarlo por el siguiente así como así.
-¿Entonces quieres volver a intentarlo? - me dice seductoramente.
-No quiero, ya me robó el primero no quiero que se lleve también el segundo.
-Rose estoy tratando de enmendar mi error - me dice algo desesperado (?) - solo quiero que sientas ese beso que tanto haz soñado para borrar el que salió mal. Vamos Rose, es solo un beso que eliminará otro; no te estoy pidiendo que salgas conmigo ni nada parecido.
-No puedo besar a mi profesor - le digo trandando de separarme de él.
-No soy tu profesor ahora, no estamos en el colegio; por lo que ahora somos una eriza que quiere recuperar su primer beso y un erizo que quiere enmendarlo - se aferra más a mí sin dejarme ir.
-De acuerdo - digo escondiendo mi rostro entre mis púas.
Me suelta y se levanta del sofá alejandose de mí. Lo miro confundida y el profe... digo Shadow (mentalizando que no es profesor cuando esta fuera del colegio) se acerca al interruptor y apaga la luz. Regresa conmigo en el sofá y me mira fijamente.
-Si haremos esto, lo haremos bien Rose - dice y se acerca más - ahora que no hay luz el ambiente se hará más romántico.
-Si estar a oscuras para usted es romántico, esta enfermo, ya que para la sociedad en general estar a oscuras tiene un fin distinto. - le digo y pienso que se está burlando de mí.
-Eso es porque la sociedad en la que vives es la que de verdad esta enferma Rose, por eso no puedes evitar pensar en cosas pervertidas - se burla de mí, pero se calla de golpe y se acerca a mi oído - o tal vez... ¿eso era lo que esperabas realmente?
-Para nada - lo empujo de golpe, pero Shadow se agarra a mi brazo llevandome junto con él.
Al llegar al piso escucho que él se queja y yo salgo ilesa del golpe porque caigo sobre Shadow. Abro los ojos y lo tengo a centímetros de mí; me sonríe de lado.
-No sabía que eras un pilluela - me dice.
-N-no es así, usted es q-quien empezó - ni siquiera logro articular las palabras.
Pero Shadow tan solo empieza a reir, no puedo más esto es muy vergonzoso y él solo se rie. No puedo evitarlo y empiezo a llorar, mis lágrimas caen sobre él y calla su risa de golpe.
-Rose no te pongas así, solo estoy jugando - me dice tratando de animarme y me alza en brazos, es tan repentino que mi llanto se detiene - ahora te enseñaré lo que debes hacer cuando recibas un beso.
Se sienta en el sofá y a mi me pone sobre sus piernas como si fuera una niña pequeña.
-Primero - comienza a decir - verás a tu pareja directamente a los ojos; después, se acercarán letamente sin romper la mirada - mi pecho creo que explotará - y así mientras ya estan cerca rodearás el cuello de tu pareja con los brazos, en respuesta a tí se te rodeará la cintura; luego, viene el beso, procura acercarte despacio sin romper la mirada y cierra poco a poco los ojos, pero no por completo hasta el último momento.
Nuestros labios se fusionan y él tiene el control, me cuesta un poco seguirle el beso, pero después de un rato me acostumbro y armoniso los movimientos de nuestros labios. Sus labios tienen un sabor muy dulce, algo similar al chocolate, me gusta mucho. El beso sigue unos minutos más, pero me toma por sorpresa, acaba de meter su lengua a mi boca. Me acerca más a él jalando de mi cintura mientras explora toda mi cavidad bucal con su lengua. Mis mejillas arden de calor, seguro que estoy muy colorada.
Por alguna razón no puedo parar este beso, se siente exquisito. No soporto que él tenga el control y lo imito, meto mi lengua a su boca, pero choca con la de él. Así es como inicia una batalla con nuestras lenguas. Simplemente, no puedo parar este beso, es perfecto y mejor de lo que jamás pude haber soñado.
Sin embargo, el aire comienza a hacer falta y el beso se va terminando; finalmente, nos separamos lentamente, dejando un hilo de saliva entre nosotros. Sus ojos rojos cual rubíes estan concentrados en mí, sonrie de lado y me retira de sus piernas colocándome junto a él en el sofá.
-¿Igual a tu beso soñado? - me pregunta Shadow.
-Para nada - me mira confundido - fue mejor.
Su sonrisa se amplió y se levantó todavía mirandome.
-¿Dónde dormiré a partir de ahora? - cuestiona y yo de un brinco me levanto y lo guio a su habitación.
Deja su maleta sobre su cama y la abre, se gira al darse cuenta de que lo observo desde el marco de la puerta. Me dedica una sonrisa y se acerca, se me acerca hasta quedar frente a frenta a pocos centímetros.
-Me daré una ducha ¿quieres acompañarme? - me averguenzo tanto que solo puedo negar con la cabeza, Shadow se rie - solo estoy jugando Rose. Pero recuerda, ese beso será nuestro secreto, no estaría bien que alguien se entere ya que pensarán que estoy abusando de tí.
-No diré nada, tampoco es como si volviera a pasar - le digo.
-Tienes razón.
-Bueno siga con lo suyo, si me busca estaré en la sala de estar.
-Gracias - dice tranquilo y cierra la puerta.
Yo me voy a sentar al sofá y repito una y otra vez el primer beso que me han dado... mi primer beso fue con Shadow the Hedgehog, mi profesor de física. Una experiencia que guardaré muy en el fondo de mis memorias.
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