Hræddr (EDITADA)


El bullicio en las calles era tremendo, y es que después de siglos asolados, habían perecido. La humanidad, había vencido.

Una guerra milenaria entre seres que no eran mortales había alcanzado de lleno a la humanidad, siendo testigos de grandes masacres, inducidos por la codicia de los poderes más altos.

La legión festejaba en el comedor con grandes comilonas y bebiendo cerveza, riendo, recordando y haciendo planes de futuro, porque esta vez si había un mañana.

- Capitán, baje a comer algo.

Al escuchar la voz de Petra, Levi suspiró y no se movió.

- Escuche, ella...

- Ella no va a despertar.- sentenció Levi.

Algo temerosa, Petra quiso brindarle apoyo al Capitán, a sabiendas de lo poco que le gustaba el contacto físico.

Se sentía tan sumamente abatido, que se dejó consolar.

Sin embargo, tumbada en la cama, Astar escuchaba las voces lejanas de ellos, y debatía internamente. Tenía que cumplir su deber, y para acabar su tarea, tenía que abandonar el muro, de manera definitiva.

"Aprenderá a vivir sin mí, yo he acabado mi misión aquí, tengo que regresar porque me ha llegado el momento, Némesis"

" Lo sé, protegiste a los débiles y mantuviste a la humanidad. Es tu recompensa a todo el sufrimiento"

- Levi...- el hilo de voz que salió de la garganta de Astar puso en alerta al Ackerman que rápidamente se agachó a su alturaQuería abrazarla y no soltarla, pero la veía tan frágil que no se atrevía ni a tocarla. Le apartó un mechón de pelo de la cara y se lo colocó detrás de la oreja. Despacio, pasó su dedo por su cara, trazando la cicatriz de su ojo, hasta rozar sus labios. Ella tenía los ojos cerrados y sonreía disfrutando del tacto.

- Realmente creí que no volvería a sentirte.- Levi apoyó finalmente su cabeza en sus piernas abatido.

Astar tragó saliva, pues sentía que lo iba a traicionar. Lo conoció en la más remota soledad y lo volvería a dejar, sabiendo que se sumiría nuevamente en ella. Pero el destino estaba escrito y no podía luchar contra ello.

- ¡ASTAR!.- el grito de Petra rompió cualquier tipo de encanto romántico que había y se abalanzó sobre su amiga.

- Dios realmente estás hecha de diamante, ¡no te mueres ni queriendo!

Y qué agradable se sentía por una vez, en milenios, cenar, conversar sin tener el temor de y ahora qué.

Compartir las pocas noches que le quedaban con él, hacerle sudar, jadear, pedir, llegar. Quererle, besarle, acurrucarse en él y sentir su corazón latir.

FLASH BACK

- Podría estar así milenios.- dijo él con sorna hacia ella, mientras abrazada su cuerpo desnudo. Ella jugó con su mano y acabó por entrelazar sus dedos con los de él.

- Levi

- Mmm...

- Tu corazón va muy lento, ¿te estás muriendo?

- Pero mi corazón no es tu corazón? ¿No te estarás muriendo tú mocosa?

- Yo no me puedo morir si no te mueres tu primero. Me queda una oportunidad más, así que intenta no clavarte nada ahí.

Ella apuntó su pecho y se escondió en él. Levi besó su frente.

FIN FLASH BACK


Felicidad.

Ellos estaban felices.

Petra sonreía más que nunca, Auruo...todos, y él. Levi cenaba y charlaba muy amenamente con Hanji y Erwin, sonriendo más que nunca y eso le dolía a Astar, pues esa noche, era la última.

Levi vio como Astar daba un fuertísimo abrazo a sus amigos y se retiraba de la sala y eso le dio un poco de mala espina. Terminó la cena y se fue a su habitación. Encima de su almohada, junto con un emblema con las alas de la libertad, había una carta.

Al hombre más fuerte, arrogante, extravagante, con peinado anticuado, malhumorado, maniático de la humanidad.

A ti, Levi.

Con lo fácil que me resultaba encararte y ahora tiemblo para escribirte las cosas que no tengo valor de decirte en cara. Realmente este día, el día en el que mi ser se tendría que ir pasaría, pero no pensé que fuese ya.

Y es que te dejo esto escrito porque se que no me dejarías marchar, y yo tampoco soporto verte rogándome. Quizás ni te merezca, Levi Ackerman, de verdad, y no es por no quererte, es porque estoy en un plano tan dispar...uno no elige a quien querer, y personalmente a pesar de que soy maravillosa, perfecta y demás, te has equivocado conmigo.

Mi vida, así como tal, se acaba, he cumplido mi misión y la orden me reclama para subir a otro nivel, que ni yo se qué es. No sé qué me espera. En verdad tengo miedo, y me gustaría quedarme aquí, contigo, Petra, Hanji e incluso el cejotas...

Se han roto muchos muros Levi, y muchos tabúes y se han escapado cosas que los mortales no deben saber, y sabes qué significa eso. Me duele tener que usar mi poder con mis camaradas, mis compañeros y mis amigos, me duele que me vayan a olvidar y lo que más me duele es que tú no puedas hacerlo por linaje, Ackerman.

No quiero que sufras, realmente si has aprendido a levantarte demuéstramelo.

No te voy a pedir que te olvides de mí, porque yo no lo haré, pero si te voy a pedir que empieces una vida, quiérete, enamórate, llora, vive, Levi.

Tienes mi corazón, hasta el día que caigas.

Te quiero, Levi Ackerman

Astarté.

Encima del muro, Astar elevó la vista al cielo y elevó los brazos, para concentrar poder. Estaba totalmente lista para que, finalmente, aquellos mortales olvidasen las cosas del mundo astral que no deberían saber. Estaba lista para ser olvidada.

- Quieta.



hræddr - asustado 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top